¡¡¡Bienvenido a la Lección de Escuela Sabática en Español!!! Iglesia Adventista Medina, San Pedro Sula, Honduras...

Para el   6 de Noviembre de 1998

Bienvenido al equipo de Lecciones de escuela Sabática en Español a nuestro hermano:Edwin Cuxevá....

Sábado 31 de Octubre

Estudio de esta semana:  .
Salmos 103:2-4; Oseas 11:8; Mateo 22:36-40; Juan 3:16; Romanos 5:7-8; 1 Juan 4:16.

VERSICULO DE MEMORIA:
 

""Amados amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor"(1 Juan 4:7-8).  .

PENSAMIENTO CLAVE: El amor de Dios por la humanidad, revelado en la naturaleza y en las Escrituras, y demostrado perfectamente en la vida de su Hijo, no conoce límites de estaciones, geografía o cultura. Nos alcanza a todos.

INTRODUCCION

EL AMOR ES UNA LLAMA QUE CALIENTA, una luz que brilla, un imán que atrae, una fragancia que refresca, una taza que alegra, una montaña que permanece, una sonrisa que revela.
Cuando ves el amor, lo conoces. Cuando lo experimentas, lo reconoces. Cuanto te falta, lo necesitas y lo deseas.
Cuando experimentas el nuevo nacimiento de la conversión, experimentas un nuevo nacimiento de amor: hacia Dios y hacia todo el mundo que te rodea.
"Dios es la fuentt de vida, luz y gozo para el universo. Como los rayos de la luz del sol, como las corrientes de agua que brotan de un manantial vivo, las bendiciones descienden de él a todas sus criaturas...
"Cuando el amor de Cristo es atesorado en el corazón, como dulce fragancia no puede ocultarse. Su santa influencia será percibida por todos aquellos con quienes nos relacioncmos..." (CC 76, 77).

Si hubiera sólo una palabra para describir a Dios, ¿cuál sería esa palabra? 1 Juan 4:16.

El amor es la verdadera naturaleza de Dios. Todo lo que hace es motivado por el amor. Podemos ver su amor en todas sus obras. Su maravilloso amor se revela en las cosas del mundo que nos rodea, y en la infinita expansión de los cielos. Si hemos de ver el amor, debemos ver a Dios. ¡Y nadie puede ver el amor sin ver a Dios! Los que sienten el toque de Dios sienten el toque del amor.
Por cuanto la visión humana es limitada, no siempre vemos amor en los caminos de Dios. Los hijos no siempre perciben el amor de sus padres ya sea en actos de gran sabiduría o en la más tierna preocupación por ellos. Cuanto más plenamente se abran nuestros ojos, y más abarcante llegue a ser nuestra comprensión, tanto más claramente podremos ver que Dios realmente es amor.
Si no fuera por un Dios de amor, no habría mundo ni nadie que lo habitara. Si Dios no fuera un ser de amor, él no sería la encarnación de la sabiduría y del poder infinitos. El poder de Dios se ejerce siempre y únicamente por medio del amor. La sabiduría de Dios se muestra en constantes derramamientos de amor para hacemos verdaderamente felices.
El amor es personal. Tiene que tener alguien a quien amar, alguien con quien compartir. A menos que se exprese en actos de honesta preocupación por el bienestar de otros, no es feliz ni es amor. El amor ansía amor y crea amor. Cuanto más se manifiesta, más amplio será el círculo de felicidad y amor.

¿Qué dos palabras describen la relación del cristiano con el amor de Dios? Efe. 3:17. ¿Qué efecto tendrá esta relación en nuestras vidas?

Todos nuestros atributos más elevados son debidos al amor, y por lo tanto, debidos a Dios. La misericordia, la simpatía, la justicia, la bondad, la veracidad, la abnegación, todos proceden del amor y no pueden existir sin él. Estos atributos encuentran su expresión más completa en Dios. Él es "misericofdioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad" (Exo. 34:6).

Describe qué sería la vida sin amor.

¿Qué resumen hizo Jesús de los Diez Mandamientos y de la enseñanza de las Escrituras? Mat. 22:36-40.

"La ley de Dios no es algo nuevo. No es la santidad creada, sino la santidad dada a conocer. Es un código de principios que expresan misericordia, bondad y amor. Presenta el carácter de Dios ante la humanidad caída y declara llanamente todo el deber del hombre".-"Comentarios de Elena G. de White" (1CBA 1118, 1119).
No puede haber ley mayor que el amor. El amor abarca todo deber que tenemos hacia Dios, y hacia el mundo que nos rodea. Si tenemos amor supremo a Dios, haremos todo lo que Dios ordena. Si amamos a otros, no haremos nada que vaya contra los mejores intereses de ellos.
En el cielo, la ley de los ángeles es la ley de amor. Ellos no necesitan otra ley, porque cada pensamiento y acto es siempre, y solamente, movido por el amor. En nuestro caso, sin embargo, ese no es lo normal. En nuestras relaciones con Dios y con los demás los detalles del bien y del mal necesitan ser puestos delante de nosotros con más detalles. Por eso Dios dio los Diez Mandamientos, donde los cuatro primeros señalan nuestro amor y deberes hacia Dios, y los últimos seis, nuestro amor y deberes hacia otros.
"La tendencia natural del hombre es la de ponerse a sí mismo en primer lugar, no importa cuáles sean sus obligaciones para con Dios y sus prójimos. Para ser totalmente abnegado en el trato con los prójimos, se debe amar en primer lugar a Dios en forma suprema. Este es el fundamento de toda conducta correcta" (SCBA 472).
Los actos salvíficos de Dios en nuestras vidas constituyen la base de nuestra relación con Dios (Deut. 6:5; Éxo. 20:2). Dios sacó a Israel de Egipto con brazo poderoso, y por ello los israelitas habían de reconocerle como el verdadero y único Dios. Debían recordar sus actos de Creación (Éxo. 20:11) y liberación (Deut. 5:15). Como resultado, debían ser motivados a responder a Dios con un amor agradecido.
Tú y yo hemos experimentado el amor de Dios en nuestras vidas. Por ello, somos impulsados a agradecerle y amarlo. Cuando Dios instruyó a Moisés para que les dijera: "Santos seréis, porque santo soy yo Jehová vuestro Dios" (Lev. 19:2), una de las especificaciones era: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo" (v. 18). El amor era tan importante en los días de Moisés como lo fue en los días de Cristo. Siempre fue la base de la ley de Dios, ya que es el fundamento del trono eterno de Dios.

¿Cómo mostramos que amamos a Dios? Juan 14:15; 1 Juan 5:2, 3. ¿Cómo pueden los cristianos tener al mismo tiempo amor y odio en sus corazones? Ver Sal. 97:10; Amós 5:15.

¿Cómo sabemos que Dios toma con seriedad su amor por nosotros? Rom. 5:7, 8.

Dios ha mostrado su amor en incontables formas: en sus obras de creación y conservación, en traer a la existencia seres santos que han de ser eternamente felices, en mantener un universo infinito con sabiduría y amor sin límites. Pero la mayor demostración del amor de Dios fue el amor que mostró hacia los pecadores que estaban en rebeldía contra él.
Los pecadores necesitaban amor, pero no lo merecían. Lo que les correspondía era la muerte. Pero Dios tenía el propósito de salvarlos de esa muerte. Sólo el amor podría haber impulsado ese propósito. La justicia exigía que los pecadores murieran, pero el amor de Dios proveyó un sustituto.
Dios ama, no sólo a las personas buenas, sino también a las malas; no sólo a una persona, sino a todas. Dios ama a las personas que no lo aman. Él ama a la gente que rechaza su amor y desprecia su misericordia, que ama el pecado en vez de amar la justicia, y que escogen caminos de muerte en vez del camino de la vida. Dios ama a las personas que desprecian y rechazan a su Hijo, quien vino a salvarlos. Él los ama aun cuando ellos mataron a su Hijo en una cruz cruel, exigiendo la muerte de! Príncipe de la vida y al mismo tiempo pidiendo misericordia para un siervo del príncipe del mal.

Por causa del gran amor de Dios, ¿qué confianza podemos tener? Rom. 8:38, 39. ¿Qué hubo en la vida de Pablo que lo capacitó para escribir estos versícuios?

Pablo hace una lista de numerosos elementos que podrían ser poderosos y podrían considerarse capaces de impedir que Dios nos alcance con su amor. Pero él pone en ridículo a esos elementos. Ni uno de ellos es más poderoso que Dios. Ninguno de ellos puede ser considerado un obstáculo para la gracia salvadora de Dios.
Y se necesitó ese amor para salvarnos; nada menos que eso habría sido útil. A menos que Dios hubiese estado dispuesto a entregar a su Hijo por los pecadores, ellos no podrían haber sido salvados. A menos que Jesús renunciara a su trono y a su vida por los pecadores, ellos hubieran perecido en su iniquidad. "Todos nosotros... éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó... nos dio vida juntamente con Cristo" (Efe. 2:3-5).

¿Qué hay en tu vida que te capacita para creer lo mismo que Pablo creía?

Lee Salmo 103:2-4. La expresión "te corona de favores" ha sido traducida de diversas maneras: misericordia, bondad, longanimidad, amor duradero. Dos ideas relacionadas con ella son "pacto" y "fidelidad".(Compara con el 3CBA 727, 728.)
El pensamiento del salmista parece ser que Dios ha hecho un pacto con su pueblo y ha sido fiel a él, y que esta relación puede considerarse tan honorable y gloriosa como lucir una corona.
Los caminos de Dios son de una bondad incomparable y sus dones son los del amor más tierno. Ningún padre mostró alguna vez un amor mayor por su hijo que el que Dios demuestra por los suyos. Donde está Dios, su longanimidad se revela y su bondad y misericordia se despliegan plenamente.
Dondequiera que encontremos amor y armonía, grandiosidad y virtud, es por causa de la bondad y el amor de Dios. Si sólo se abrieran los ojos de nuestra visión espiritual, veríamos por doquiera evidencias del tierno amor de Dios, que permea todo y que nunca falla. Veríamos ese amor tanto en la lluvia como en la luz del sol, en las nubes arriba o en el pasto abajo.

¿Cuál es la base de la verdadera felicidad? Sal. 144:15.

"El amor de Dios se revela en todo su trato con su pueblo; y en medio de la adversidad, los desengaños, la enfermedad y las pruebas, con visión nítida y despejada debemos contemplar la luz de su gloria en el rostro de Cristo, y confiar en su mano guiadora" (MeM 12).
"Dios no es caprichoso ni mezquino, remoto ni represivo; pero sí un Dios de santidad y amor, de sabiduría y poder. El Dios de la Biblia es mayor que cualquier experiencia humana que podamos tener, mucho mayor de lo que podemos los humanos expresar; pero aunque es tan elevado en majestad y poder, él cuida de nosotros, nos trata en forma individual y otorga plenitud de vida a quienes confían en él. Él es el Dios de la luz y de la verdad, de la fortaleza, de la belleza y de la paz. No sólo él creó, sino que está siempre activo, trabajando con infinita paciencia y con recursos inagotables. Felices son las personas que reconocen a este Dios, que esperan en él, que viven con él, que le obedecen en pensamiento, palabra y hechos. La paz de él está en sus corazones, su libertad y su gozo en la mente de ellos, su omnipotencia a su disposición".-The Interpreter's Bible [La Biblia del intérprete], t. 4, p. 739; el énfasis está en el original.

¿Qué bendiciones especiales llegan a quienes tienen una correcta relación con Dios? Sal. 103:1, 3, 5. ¿Cuál es la mayor bendición que has recibido de Dios, y por qué?
 

En el versículo que sigue, marca con un círculo las dos palabras que dicen que el amor de Dios es universal.

"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna" Juan 3:16).
El amor de Dios es como un manantial. No es necesario hacer perforaciones con la esperanza de encontrar agua. No necesitamos un balde o una bomba para subir el agua, sino que ésta fluye libremente; no se la puede detener. El simbolismo del agua en la Biblia describe a Dios como generoso, refrescante, dador de vida, siempre corriente, y que nunca falla. (Ver Sal. 1:3; Isa. 12:3; Juan 4:14; Apoc. 22:17.)

El perfecto amor de Cristo lo capacitó para amar aun a sus enemigos. ¿Por qué hemos de hacer lo mismo? Mat. 5:43-48.,p> Generalmente discriminamos al dar nuestro amor. Pero esto no es así con Dios, y no debe ser cierto con los que pretenden ser cristianos. La norma cristiana de relaciones con otras personas es la de Dios, quien distribuye sus dones abundantemente sin tomar en cuenta los méritos o las respuestas de los hombres. El principal criterio que usa Dios es el de la necesidad. Los buenos y los malos necesitan por igual la lluvia y la luz del sol. Y Dios los otorga imparcialmente. ¿Necesita mi enemigo el testimonio que yo pueda dar? Si es así, entonces, como cristiano es mi responsabilidad extender una mano ayudadora y hacer lo que Dios haría si él estuviera en mi lugar.
Todo, lo animado y lo inanimado, experimenta constantemente el cuidado de Dios (ver Mat. 10:29-31; 6:26-31). "Bueno es Jehová para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras" (Sal. 145:9). "Los ojos de todos esperan en ti,y tú les das su comida a su tiempo. Abres tu mano, y colmas de bendición a todo ser viviente" (vs. 15, 16). "Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras" (v. 18).
Dios envió a Israel a vivir en Canaán con la seguridad: "Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará" (Deut. 31:6).

¿De qué manera exhibe Dios su amor universal a ti, aun en momentos difíciles? Piensa ahora en formas en que puedes compartir el amor universal de Dios con alguien a quien consideras que es tu enemigo. ¿Cómo es posible hacerlo?
 

Viernes 6 de Noviembre
Para estudiar y meditar:  ¿Cuál es la actitud de Dios hacia las personas que son indignas de su amor? Oseas 11:8. Adma y Zeboim eran dos ciudades de la llanura que fueron destruidas junto con Sodoma y Gomorra. (Ver Gén. 14:2; 19:25, 29.) Fuego y azufre llovió del cielo (Gén. 19:24) y el "humo subía de la tierra como el humo de un horno" (v. 28). Llega el momento en que Dios tiene que castigar el mal. Pero no es una tarea agradable para un Dios de amor. Para aprender más acerca de la actitud de Dios hacia el pecador, lee Ezequiel 18:31, 32; 33:11. También lee "El divino Pastor", en DTG 442-448.
"Todo el amor paterno que se haya transmitido de generación a generación por medio de los corazones humanos, todos los manantiales de ternura que se hayan abierto en las almas de los hombres, son tan sólo como una gota del ilimitado océano, cuando se comparan con el amor infinito e inagotable de Dios... Podéis estudiar ese amor durante siglos, sin comprender nunca plenamente la longitud y la anchura, la profundidad y la altura del amor de Dios al dar a su Hijo para que muriese por el mundo. La eternidad misma no lo revelará nunca plenamente" (21T 337).
Preguntas para dialogar:

Considerando la lección de esta semana...

1. ¿Qué significado tiene esta lección para ti?
2. Comparte una experiencia de tu vida en la que esta lección te ayudo.
3. ¿Como aplicarás esta lección para mejorar tu vida durante la semana que viene?
4. ¿Cómo puedes usar esta lección en tu trabajo misionero? la semana próxima,
    comparte en tu clase lo que hoy hayas hecho.
 

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