En el que celebramos los poderes creadores de la humanidad
En 1905 Cipriano Castro era electo Presidente hasta 1911. Una empresa de cigarrillos patrocinaba el primer concurso de belleza en nuestro país: “Señorita Venezuela”. En Cuba se grababan los primeros danzones, que sonaban desde el gramófono en los hogares de la clase media. En Europa, Sigmund Freud publicaba “Tres Ensayos sobre la Sexualidad”.
Un licenciado de 26 años, humilde empleado en una oficina de patentes en Suiza, publicaba un grupo de artículos que revolucionaron la Física. ¿Qué desarrollaba el joven Einstein en estos textos?
La relatividad. La naturaleza última de la luz siempre ha fascinado la imaginación de hombres y mujeres. ¿Es la luz materia? ¿O es una substancia distinta, muchas veces asociada con lo divino? En 1873 el físico escocés James Clerk Maxwell había demostrado que era posible concebir la luz como el resultado de la propagación de ondas electromagnéticas. Pero la teoría de Maxwell tenía un problema: sus ecuaciones cambiaban de forma cuando se les estudiaba desde los puntos de vista de objetos con diferentes velocidades. Einstein hizo una propuesta simple, pero audaz: que la velocidad de la luz es la misma para todos los objetos, independientemente de su movimiento. Esta simple propuesta trajo como consecuencia que el tiempo y el espacio ya no podían contemplarse como entes distintos, sino como aspectos de una sola cosa, indivisible: el espacio-tiempo.
El efecto fotoeléctrico (otra vez la luz). En 1900, Max Planck propuso que la luz se comportaba como si fuese hecha de corpúsculos de energía, que llamó cuanta. En el momento ya se sabía que si un objeto conductor de electricidad es iluminado por un haz de luz, se produce una corriente eléctrica. (Este es el llamado efecto fotoeléctrico, sobre el que se basa el funcionamiento de las celdas solares y las cámaras digitales.) Einstein predijo correctamente la relación entre la energía de la luz y la corriente. De esta forma sustentó la validez de la propuesta de Planck e impulsó el desarrollo de la Mecánica Cuántica.
El movimiento browniano. Diez mil átomos colocados en fila india caben dentro de una bacteria. Si los átomos son tan pequeños ¿cómo verlos? Einstein razonó que si los átomos estaban en continua agitación, entonces, al chocar sobre un objeto del tamaño de una bacteria, producirían en el mismo un desplazamiento caótico. Utilizó un argumento estadístico para describir la naturaleza de la trayectoria de tal objeto. Y explicó así el movimiento microscópico que había observado, en 1827, el botánico inglés Robert Brown. Pero lo que es más importante: demostró que este movimiento microscópico es evidencia incontrovertible de la existencia de los átomos.
La Física es, en cierta forma, como las obras de construcción de una Catedral medieval, en las que el esfuerzo colectivo de generaciones de trabajadores celebraba el espíritu. La inteligencia y creatividad de Einstein, así como su profundo respeto por la tradición de la ciencia, le hicieron capaz de coordinar el esfuerzo de muchos físicos de su generación. Cien años después conmemoramos su hazaña en el Año Internacional de la Física.
Gustavo J. Mata
El Nacional, 19 de abril de 2005