Anarcosindicalistas contra el "Plan Colombia"
(Version resumida de la
Resolucion presentada por Amigos de AIT-Colombia y aprobada en el
XXI Congreso de
la Asociacion Internacional de Trabajadores en Granada, Espa~na,
los días 8, 9 y 10 de diciembre del 2000)
Colombia se ha convertido en pocos meses en uno de los ejes de la politica exterior norteamericana. Dos elementos lo hacen acreedor a tal protagonismo: el problema del narcotrafico y la consideracion de Colombia como amenaza de la seguridad hemisferica, por un desbordamiento del conflicto armado hacia los paises vecinos. La soberania titere de este pais ha quedado confirmada en el congreso norteamericano, donde se dictan ahora las leyes para Colombia.
El Plan se concreto ante el Capitolio de Washington a traves del proyecto de ley S-1758, presentado por los parlamentarios republicanos Coverdell, Dewine y Glaseley el pasado 20 de octubre, mediante el cual se solicita una ayuda suplementaria para Colombia de 1.574 millones de dolares en tres a~nos, donde mas del 80% estara destinado, supuestamente, a diferentes aspectos relacionados con la lucha antinarcoticos. Con eso, Colombia se convierte en el principal destinatario de ayuda yanki despues de Egipto e Israel, con lo cual se hace evidente el compromiso cada vez mayor del Estado colombiano con los intereses estrategicos imperiales en la region. El Congreso de USA aprobo 1.300 millones de dolares, los otros 274 restantes se pretenden conseguir de un fondo especial destinado al Pentagono para ayuda de tropas estadounidenses en el exterior.
La erradicacion forzosa de cultivos ilicitos a traves de la fumigacion no es nueva en Colombia. 25 a~nos de aplicacion demuestra su fracaso no solo en terminos de reduccion de la oferta. La hectarea de hoja de coca sembrada aumento entre 1992 a 1998 de 40.000 a mas de 100.000, aumentando tambien el conflicto armado y el da~no al medio ambiente que la fumigacion ha causado. La fumigacion mediante aspersion aerea tiene un efecto masivo y por tanto los cultivos licitos resultan igualmente afectados. La actual politica especificamente enunciada en el Plan Colombia, con el proposito de erradicar los cultivos ilicitos, tiene como principal victima a los cultivadores de la hoja de coca y amapola, dejando intactos a los grandes capitales que se lucran en el comercio de los precursores y el trafico de cocaina y heroina, la mayoria de ellos ubicados en USA, donde estan las grandes lavanderias de dolares del mundo.
El cinismo del Presidente Andres Pastrana quedo ratificado una vez mas cuando decide solicitar ayuda a la Comunidad Europea, intentado que sean estos paises quienes asuman las consecuencias del componente militar aportado por USA. El gran empujon del Plan en ese escenario se daria meses despues por parte del Presidente espa~nol J.M. Aznar, al comprometerse a convocar a los paises de la Union Europea, así como a Japon y Canada, a apoyar el Plan Colombia a través de una mesa de donantes que tuvo como sede España en el mes de junio del 2000.
Del presupuesto proyectado para el Plan Colombia, US $ 4.000 millones deben ser aportados por los colombianos, quienes hastiados de esta guerra, seran obligados a financiar una nueva escalada del conflicto. Saldran entonces o del nuevo endeudamiento, o de los procesos de privatizacion, o de los denominados bonos para la paz que suscribiran obligatoriamente las empresas. Pero el mayor aporte de este dinero viene de los impuestos que pagan los colombianos. De las finanzas corrientes del Estado, no saldra dinero en razon a que los altos niveles de corrupcion de la administracion publica han saqueado las arcas oficiales.
Los famosos dineros del "Plan para la Paz, la prosperidad y el fortalecimiento del Estado" seran invertidos en un 84,9% para gastos militares, con destino a: Batallon Antinarcóticos, Policía Nacional, compra de 30 helicopteros Black-Hawk y 15 helicopteros Huey, equipamiento de equipos infrarrojos para un avion Schweiser, instalacion de radares en Leticia y Tres Esquinas, mejoramiento de bases militares en las fronteras con Peru y Ecuador, y logistica para la interdiccion aerea terrestre y maritima. Apenas se apuntan 145 millones para la sustitucion de cultivos, 93 millones a derechos humanos y justicia, y otros 30 millones para los desplazados de la Amazonia.
El Plan Colombia es tambien la forma mas aberrante de cumplir los compromisos con el FMI, de esta manera, el Estado colombiano por via de guerra pretende aniquilar cualquier posibilidad de protesta social, con la excusa de la lucha contra el narcotrafico. Las medidas económicas son, entre otras:
a. Recortes en el gasto publico, ampliacion de la base del IVA, impuesto sobre las operaciones financieras, reforma fiscal, nuevos tributos.
b. Congelacion de salarios publicos, recortes sin precedentes en la nomina estatal y en gastos diferentes a la inversion.
c. Reforma y privatizacion a las instituciones de seguridad social y los fondos de pensiones.
d. Privatizaciones: Empresas y banca estatal. Se pretende aumentar su productividad y financiar el deficit fiscal. Las Cifras del Plan Colombia (en millones de dolares)
*Donante *Cantidad * %
EE.UU. 1.574 20.83
Europa 1.250 16.54
Colombia 4.000 52.93
Créditos multilaterales 733 9.70
Total 7.557 100.00
Los gastos militares y la guerra en Colombia.
El Plan Colombia no es sino otra estrategia de la carrera armamentista del Estado colombiano para mantener su dictadura y para ello, mantener la guerra es el mejor escenario. Sin la guerra, como justificar los altos niveles de impunidad, de corrupción, de autoritarismo, de eliminacion sistematica de la oposicion politica, de nuevos impuestos, las masacres de su brazo paramilitar, de expropiacion de los territorios tradicionales de los pueblos indigenas y comunidades afrocolombianas, la entrega de los recursos naturales, etc. Sin la guerra, el Estado colombiano hace muchos a~nos que hubiese sido derrocado.
Asistimos en Colombia a una situacion ambigua por parte de los diferentes actores armados; de una parte su manifiesto deseo de "defender a la población civil": los grupos insurgentes nos quieren "defender" de las siniestras causas del capitalismo y su versión mas reciente, el neoliberalismo; los grupos paramilitares pretenden "defendernos" del comunismo, el secuestro, el "boleteo" y la extorsion; las fuerzas armadas afirman "defendernos" de la violencia irracional de los anteriores, sin embargo, las cifras de muertes ocasionadas a la población civil por parte de todos los actores armados, muestra una evidencia contundente: los diferentes grupos enfrentados en el conflicto armado han sacrificado de la manera mas siniestra aquello que afirman "defender": a la poblacion civil. De otra parte, su cacareado deseo de buscar salidas politicas al conflicto se contradice con su actividad, cada vez mas evidente, de consolidar un arsenal militar que les permita mantener y de ser posible ganar la guerra.
El Instituto Nacional de Estudios Estratgicos, dependencia del Pentagono, en un reciente informe sobre las finanzas de la guerrilla asevera que los grupos rebeldes en Colombia han ganado la mitad de sus ingresos, calculados en 150 millones de dolares anuales, a partir del negocio de la droga. De ese dinero, se asegura que cerca de 20 millones de dolares al año, son invertidos en compra de armas. Las finanzas de los paramilitares son todavia mas secretas, se ha afirmado que parte de su patrimonio ha sido aportado por gremios ganaderos, agroexportadores y algunos sectores militares. Sin embargo, en un informe del 22/02/00, la DEA sindica por primera vez a Carlos Casta~no (principal jefe paramilitar) de producir y exportar droga a los Estados Unidos, es decir, las finanzas de estos grupos tendrian por esta via una gigantesca inyección. Lo que invierte en compra de armas e infraestructura belica no esta calculado pero las modernas y sofisticadas armas y vehiculos utilizados en las ultimas masacres contra la poblacion civil no dejan lugar a dudas que es un porcentaje elevado. Las formas de financiacion de la guerra por parte de grupos guerrilleros y paramilitares son fruto de actividades ilicitas, algunas de una crueldad extrema como el secuestro, la desaparicion forzada, las masacres y los ataques indiscriminados sobre la población civil.
Nuestros supuestos "defensores" no han tenido ningun reparo en convertirnos en objeto de sus ataques, por esta razon la poblacion civil colombiana nos declaramos en mayoria de edad, esto significa que no necesitamos el tutelaje de ningun grupo armado para que asuma la defensa de nuestros legitimos intereses; en consecuencia, rechazamos cualquier medio que se utilice para financiar esta guerra que no compartimos, no queremos, nunca pedimos, nos manifestamos en su contra porque atenta de manera directa contra nuestra conciencia; por estas razones, decidimos no apoyar moral, espiritual, fisica ni económicamente a ninguno de los participantes armados que de manera ciega continuan empe~nados en esta guerra.
Aparte de lo que oficiosamente se indica como gasto militar y de seguridad en los presupuestos del Estado colombiano, un porcentaje adicional importante esta difuminado en otros rubros como educacion, salud y trabajo y seguridad social, mas complicados de precisar. Ademas falta por analizar el verdadero monto del apoyo militar, tecnico, humano y en infraestructura de comunicaciones proporcionado por los Estados Unidos y paises europeos como Francia, Alemania y Espa~na, quienes incumplen los siete criterios aprobados por el Consejo de Europa en 1991, bajo el nombre de Codigo Europeo sobre el Comercio de Armamento, tras reconocer que este continente habia sido un importante proveedor de armas a Iraq durante la epoca anterior al conflicto del Golfo. Estas normas subrayan que cualquier decision de exportar armamento debera tener en cuenta la situacion interna y regional del pais comprador, su situacion de derechos humanos, y el efecto de la compra sobre la economia nacional. Una primera conclusion es, que si sumamos el presupuesto ordinario del gobierno destinado a la guerra mas los dineros del Plan Colombia que comenzaran a llegar a finales de abril del 2001, tendremos que el gobierno colombiano gastara en la guerra $ 2 de cada $ 5 que recibe. Por ello proponemos a los colombianos que realicen actos de objecion fiscal, es decir, que se nieguen a pagar los impuestos o el porcentaje de los impuestos que van destinados a la guerra.
Por que rechazamos al Plan Colombia?Porque este significativo incremento de la "asistencia" militar norteamericana, indiscutiblemente, sera el comienzo de una intervencion cada vez mayor y sin esperanza de conclusion. Seremos un simple teatro de operaciones.
Porque, sin duda, lo que nos espera es un escalamiento de la guerra. No sólo enfrentamientos entre los diferentes actores o fuerzas militares. También: bombardeos de saturacion, arrasamiento de caserios, destruccion de infraestructura, hostigamiento de la poblacion, violacion de todos los derechos humanos, desplazamientos masivos.
Porque esta guerra, centrada inicialmente en las zonas de los cultivos ilicitos, tiende a devastar la Amazonia, eje del equilibrio planetario, y progresivamente, las selvas y paramos, cuna de nuestra biodiversidad.
Porque, aun aceptando que debe eliminarse el narcotrafico, no podemos convenir en que, en esta guerra, el enemigo sean los campesinos y jornaleros, dejando de lado los grupos del capital, nacionales y extranjeros, que mueven el negocio. Los cultivos reapareceran en este u otros paises. El narcotrafico continuara mientras sea una empresa tan rentable.
Porque sabemos que toda guerra de hoy es total. Que no se reducira a los campos sino que abarcara las ciudades. Que polarizara la sociedad entre los "buenos", aliados del Imperio, y los "narcosubversivos". Que se convertira en el mejor expediente para aniquilar la protesta social, producto de la crisis que estamos viviendo, y para continuar asesinando dirigentes sociales y defensores de los derechos humanos. Sintomaticamente, la atroz empresa paramilitar parece, en silencio, hacer parte de los calculos belicos y no propiamente como objetivo a eliminar.
Porque, finalmente, el señuelo de una cooperacion financiera internacional destinada a lo social, no solo es, en estas condiciones, una tragica compensacion, sino que ha terminado, desde ya, sustituyendo el replanteamiento que estamos exigiendo de la funesta estrategia economica neoliberal por una oferta asistencialista.
Porque lo que queremos es la eliminacion de todas las causas de la exclusion, de la pobreza, del racismo, de la guerra, del autoritarismo, de la muerte, en fin, queremos una sociedad libre y autonoma.
Mensaje
enviado por Nelson Mendez a la lista de discusión anarlat.
(a publicarse en EL LIBERTARIO, Venezuela, #
21, 2001) febrero