Newton, Isaac (1642-1727),
matemático y físico británico, considerado uno de los más grandes científicos de la
historia, que hizo importantes aportaciones en muchos campos de la ciencia. Sus
descubrimientos y teorías sirvieron de base a la mayor parte de los avances científicos
desarrollados desde su época. Newton fue junto al matemático alemán Gottfried Wilhelm
Leibniz uno de los inventores de la rama de las matemáticas denominada cálculo. También
resolvió cuestiones relativas a la luz y la óptica, formuló las leyes del movimiento y
dedujo a partir de ellas la ley de la gravitación universal.
Newton nació el 25 de diciembre de 1642 (según el calendario juliano vigente entonces;
el 4 de enero de 1643, según el calendario gregoriano vigente en la actualidad), en
Woolsthorpe, Lincolnshire. Cuando tenía tres años, su madre viuda se volvió a casar y
lo dejó al cuidado de su abuela. Con el tiempo, su madre, que se quedó viuda por segunda
vez, decidió enviarle a una escuela primaria en Grantham. Más tarde, en el verano de
1661, ingresó en el Trinity College de la Universidad de Cambridge.
Newton recibió su título de bachiller en 1665. Después de una interrupción de casi dos
años provocada por una epidemia de peste, volvió al Trinity College, donde le nombraron
becario en 1667. Recibió el título de profesor en 1668. Durante esta época se dedicó
al estudio e investigación de los últimos avances en matemáticas y a la filosofía
natural que consideraba la naturaleza como un organismo cuyo mecanismo era bastante
complejo. Casi inmediatamente realizó descubrimientos fundamentales que le fueron de gran
utilidad en su carrera científica.
El método de las fluxiones
Newton obtuvo en el campo de la matemáticas sus mayores logros. Generalizó los
métodos que se habían utilizado para trazar líneas tangentes a curvas y para calcular
el área encerrada bajo una curva, y descubrió que los dos procedimientos eran
operaciones inversas. Uniéndolos en lo que él llamó el método de las fluxiones, Newton
desarrolló en el otoño de 1666 lo que se conoce hoy como cálculo, un método nuevo y
poderoso que situó a las matemáticas modernas por encima del nivel de la geometría
griega.
Aunque Newton fue su inventor, no introdujo el cálculo en las matemáticas europeas. En
1675 Leibniz llegó de forma independiente al mismo método, al que llamó cálculo
diferencial; su publicación hizo que Leibniz recibiera en exclusividad los elogios por el
desarrollo de ese método, hasta 1704, año en que Newton publicó una exposición
detallada del método de fluxiones, superando sus reticencias a divulgar sus
investigaciones y descubrimientos por temor a ser criticado. Sin embargo, sus
conocimientos trascendieron de manera que en 1669 obtuvo la cátedra Lucasiana de
matemáticas en la Universidad de Cambridge.
Óptica
La óptica fue otro área por la que Newton demostró interés
muy pronto. Al tratar de explicar la forma en que surgen los colores
llegó a la idea de que la luz del Sol es una mezcla heterogénea de rayos diferentes
representando cada uno de ellos un color distinto y que las reflexiones y
refracciones hacen que los colores aparezcan al separar la mezcla en sus componentes.
Newton demostró su teoría de los colores haciendo pasar un rayo de luz solar a través
de un prisma, el cual dividió el rayo de luz en colores independientes.
En 1672 Newton envió una breve exposición de su teoría de los colores a la Sociedad
Real de Londres. Su publicación provocó tantas críticas que confirmaron su recelo a las
publicaciones por lo que se retiró a la soledad de su estudio en Cambridge. En 1704, sin
embargo, publicó su obra Óptica, en donde explicaba detalladamente su teoría.
Principios elementales
En agosto de 1684 la soledad de Newton se vio interrumpida por la visita de Edmund
Halley, un astrónomo y matemático con el que discutió el problema del movimiento
orbital. Newton había estudiado la ciencia de la mecánica como estudiante universitario
y en esa época ya tenía ciertas nociones básicas sobre la gravitación universal. Como
resultado de la visita de Halley, volvió a interesarse por estos temas.
Durante los dos años y medio siguientes, Newton estableció la ciencia moderna de la
dinámica formulando las tres leyes del movimiento. Aplicó estas leyes a las leyes de
Kepler sobre movimiento orbital formuladas por el astrónomo alemán Johannes
Kepler y dedujo la ley de la gravitación universal. Probablemente, Newton es
conocido sobre todo por su descubrimiento de la gravitación universal, que muestra como a
todos los cuerpos en el espacio y en la Tierra les afecta la fuerza llamada gravedad.
Publicó su teoría en Principios matemáticos de la filosofía natural (1687),
obra que marcó un punto de inflexión en la historia de la ciencia, y además consiguió
que su autor perdiera su temor a la publicación de sus teorías.
La aparición de Principios también implicó a Newton en un desagradable episodio
con el filósofo y físico Robert Hooke. En 1687 Hooke afirmó que Newton le había robado
la idea central del libro: que los cuerpos se atraen recíprocamente con una fuerza que
varía inversamente al cuadrado de su distancia. Sin embargo, la mayor parte de los
historiadores no aceptan los cargos de plagio de Hooke.
En el mismo año de 1687, Newton apoyó la resistencia de Cambridge contra los esfuerzos
del rey Jacobo II de Inglaterra para convertir la universidad en una institución
católica. Después de la Gloriosa Revolución de 1688, que expulsó a Jacobo de
Inglaterra, la universidad eligió a Newton como uno de sus representantes en una
convocatoria especial del Parlamento británico. Los cuatro años siguientes fueron de
gran actividad para Newton, que animado por el éxito de Principios, trató de
compendiar todos sus primeros logros en una obra escrita. En el verano de 1693 Newton
mostró síntomas de una severa enfermedad emocional. Aunque recuperó la salud, su
periodo creativo había llegado a su fin.
Las conexiones de Newton con los dirigentes del nuevo régimen de Inglaterra le llevaron a
su nombramiento como inspector y más tarde director de la Casa de la Moneda en Londres,
donde vivió hasta 1696. En 1703 fue elegido presidente de la Sociedad Real, un cargo que
ocupó hasta el final de su vida. Como presidente, ordenó la inmediata publicación de
las observaciones astronómicas del primer astrónomo real de Inglaterra John Flamsteed.
Newton necesitaba estas observaciones para perfeccionar su teoría lunar; este tema le
proporcionó ciertos conflictos con Flamsteed.
Newton también se implicó en una violenta discusión con Leibniz acerca de la prioridad
de la invención del cálculo. Utilizó su cargo de presidente en la Sociedad Real para
que se formara una comisión que investigara el tema y él, en secreto, escribió el
informe de la comisión que hacía a Leibniz responsable del plagio. Newton incluso
recopiló la relación de acusaciones que la sociedad había publicado. Los efectos de la
disputa se alargaron casi hasta su muerte.
Además de su interés por la ciencia, Newton también se sintió atraído por el estudio
de la alquimia, el misticismo y la teología. Muchas páginas de sus notas y escritos
especialmente en los últimos años de su carrera están dedicadas a estos
temas. Sin embargo, los historiadores han encontrado poca relación entre estas
inquietudes y sus trabajos científicos.