AGRADECIMIENTO

En las sombrías horas 
de nocturna calma.
acuérdate, cuando oras.
de entregar a Dios el corazón y el alma.

No permitas que el maligno. 
por brindarte mucho honor.
logre desviarte del recto camino 
y te aleje de tu Salvador.

Recuerda siempre que a Jesús. el Santo,
debes darle honra y gloría.
Y alegre entona este canto:
A Dios eterno debo La victoria'