MANOS DE CRISTO

Manos de Cristo. 
Manos de carpintero... 
Yo no imagino aquellas manos 
forjando lanzas, forjando espadas, 
ni diseñando nuevo modelo de bombardero; 
aquellas manos, manos de Cristo, 
fueron las manos de un carpintero.

Manos de Cristo, encallecidas 
labrando cunas, 
haciendo arados, labrando vida... 
Yo no imagino aquellas manos 
entretenidas entre cañones, 
entre explosivos y entre granadas; 
aquellas manos encallecidas, 
se encallecieron labrando vida.

Manos de Cristo, 
manos divinas de carpintero...
Yo no imagino aquellas manos 
brutalizando tareas humanas 
sino forjando labor creadora; 
aquellas manos, manos de obrero, 
edificaron hora tras hora.

Entre las manos febricitantes 
que hacen cruceros 
y bombarderos, 
¡no están las Suyas! 
Las Suyas llevan marcas de clavos, 
marcas heroicas de sacrificio:
aquellas manos, manos sangrantes, 
fuertes, nervudas, manos de acero, 
son manos recias de Carpintero 
que quietamente labra la vida...

-Francisco E. Estrello.