MORALEJA
Si por tus hazañas y santo andar
aún no has podido la paz alcanzar;
si por tus obras quisieras ganar
el cielo bendito y tu mancha limpiar;
Y si ya te cansas de tanto velar,
de tanta proeza tu alma anhelar,
de tanto alivio tu ser buscar,
de tanta vigilia, de tanto esperar...
¡Oh, ve al Caballero que es Peñafiel!
Jesús, tu remedio, tu fe, tu bondad,
quien sana y da vida con su dulce miel.
Monedas te ofrece de fidelidad,
pues él las compró ya, gustando la hiel.
¡Tesoro insondable!¡Plena libertad!