LA GEODA GIGANTE DE LA MINA PULPI.
El PAÍS. Sábado 10 de Junio del 2000.Alicia Rivera.
<Volver al indice de Geología>
Contenido:
1-LA GEODA GIGANTE DE LA MINA PULPI:
- Una geoda gigantesca descubierta en una mina de
Almería asombra a los científicos .
-
Transparencia y tamaño.
-
Explotación turística.
- Receta de la naturaleza para formar cristales.
-
Condiciones excepcionales.
2-MÁS
FOTOGRAFIAS.
3-REFERENCIAS.
1-LA
GEODA GIGANTE DE LA MINA PULPI:
- Una geoda gigantesca descubierta en una mina de
Almería asombra a los científicos:
En los mercadillos de minerales y en las
tiendas especializadas se pueden ver y adquirir geodas: piedras
huecas tapizadas por atractivos cristales, normalmente de cuarzo.
Su tamaño suele ser de unos centímetros. Por eso, el geólogo
Javier García-Guinea no pudo contener un grito de asombro cuando
el pasado día 27 metió la cabeza por una abertura practicada en
una antigua mina de plata de Almería y se encontró en una geoda
gigantesca, tapizada de grandes cristales de yeso de excepcional
transparencia. La cámara mide ocho metros de longitud, 1,8 de
anchura y 1,7 de altura, y en ella cabrían diez pesonas.
"He buscado en las bases de datos
internacionales, con miles de referencias, y no encuentro nada
similar a esta geoda en el mundo", afirma García-Guinea,
del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Él
describe la cámara: "Los prismas cristalinos de medio
metro, como media, cubren toda la cavidad (suelo, techo y
paredes), que tiene forma de balón de rugby y un tamaño muy
superior al de las mayores geodas que pueden conseguirse en
algunas regiones de la Tierra, como el sur de Brasil, donde las
geodas de cuarzo amatista pueden rondar el metro de diámetro y
alcanzan altos precios".
Ahora, el primer objetivo tras el
hallazgo es proteger la geoda; el segundo, estudiarla, y el
tercero, pensar cómo mostrarla al público sin que se estropee.
El CSIC se ha puesto inmediatamente en contacto con la Junta de
Andalucía para estudiar la cámara -que puede tener unos cinco o
seis millones de años- y su zona. Sistemas de sensores de
temperatura, de humedad y de vibraciones que acumulen datos
registrados en la geoda y en su entorno son las primeras medidas
que quieren tomar los científicos. Mientras tanto, Pulpi, el
municipio de Almería que aloja la extraña formación
geológica, a través de su alcaldesa María Dolores Muñoz, ha
tomado las primeras y urgentes medidas de protección. La entrada
a la cueva ha sido clausurada y está vigilada.
García-Guinea, acompañado, según
comentó a este periódico, de José María Calaforra (profesor
de la Universidad de Almería y experto en yesos), Martín
Fernández (naturalista y prospector), Ángel Romero
(mineralogista de Almería) y Paula López Arce (becaria del
CSIC), entró en la cueva el 27 de mayo para hacer un
1reconocimiento de la geoda.
El geólogo del CSIC Javier García-Guinea fotografiado
el pasado 27 de mayo
en el interior de la gran geoda descubierta en Almería.
-
Transparencia y tamaño:
Los cristales de yeso que cubren
enteramente su interior tienen una gran transparencia, hasta el
punto que se puede leer la letra pequeña de un libro a través
de piezas gruesas, pero no es una característica única de esos
prismas; su gran tamaño -algunos alcanzan los dos metros-
tampoco es excepcional en piezas aisladas. Lo realmente asombroso
para los expertos es el conjunto de estas características en un
volumen tan insólitamente grande.
La defensa y el propio descubrimiento de
la geoda van unidos. "La mina de plata se cerró en los
años sesenta o setenta, yo he visto allí cajas de explosivos de
esas fechas", relata García- Guinea. "Inmediatamente
después del cierre comenzó la actividad de neominería: grupos
de coleccionistas y de comerciantes que van a picar, corriendo
grandes riesgos porque se trata de una mina abandonada, para
extraer trozos de minerales que tienen mercado". En
diciembre del año pasado, uno de esos neomineros iba siguiendo
una veta interesante en la mina abandonada, dio unos martillazos
en una pared y abrió un boquete. Cuando metió la cabeza e
iluminó el interior descubrió la gran cámara de cristales.
Desde entonces, los rumores acerca de la
existencia de la joya subterránea empezaron a circular entre los
neomineros, mientras Romero y su colega Manuel Guerrero hacían
todo lo posible por mantener el secreto y proteger la geoda.
García-Guinea, que alaba el esfuerzo de Romero y Guerrero, vió
el peligro inminente en forma de unos minerales envueltos en
papel de periódicos alemanes abandonados en la mina y en los dos
cristales de la geoda que ya han sido arrancados, dos prismas que
pueden estar ya en algún mercadillo de minerales, en España o
fuera.
-
Explotación turística:
Ahora, tras la primera exploración de
científicos del CSIC y sus colegas andaluces, se planean dos
líneas de actuación: la investigación científica y el estudio
de viabilidad de la explotación turística, dado el atractivo de
la geoda.
El primer grupo de exploración de la
cámara midió en su interior una temperatura de 20 grados y una
humedad inicial del 65% que aumentó hasta 90% cuando los cinco
miembros del equipo estaban dentro, frente a un 55% de humedad
exterior. La visita duró una hora y apreciaron ya condensación
del vaho de su respiración en los cristales de yeso. Además,
las puntiagudas piezas del suelo cedían y se doblaban al
pisarlas, por más cuidadado que pusieran.
El yeso es delicado. García-Guinea
explica que en los experimentos que estaba realizando en su
laboratorio del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) justo
antes del hallazgo de la geoda, observó que basta una luz
intensa para producir deshidratación y, por tanto, opacidad en
cristales de yeso.
- Receta de la naturaleza para formar cristales:
Un plato con agua y sal es, en principio,
todo lo que uno necesita para experimentar en casa la receta
básica de la naturaleza para construir el revestimiento de
cristales de una geoda, aunque los cristales del plato serían de
cloruro sódico y los de la cámara de Almería son de sulfato cálcico
(yeso). A los ingredientes hay que añadir paciencia para esperar
a que el agua se evapore y queden en el plato los cristales
salinos. El proceso exige unas ciertas condiciones de estabilidad
y de concentraciones apropiadas de sal.
La naturaleza lo sabe hacer, y con
diferentes compuestos recubre cavidades geológicas, incluso
grandes paredes y recovecos en cuevas. Con el conocimiento
básico de esta receta los científicos ahora intentan explicar
cómo se formó la colosal geoda de Almería. Dada la rareza del
hallazgo, dice García-Guinea, las condiciones de formación
debieron ser excepcionales y, seguramente, tuvo mucho que ver la
llamada crisis salina Messiniense, hace unos cinco o seis
millones de años, cuando se produjo una exagerada evaporación
del Mediterráneo, quizás porque se cerró el aporte de agua
atlántica y se formaron grandes acumulaciones salinas en las
costas de este mar.
"Para que se forme una geoda primero
tiene que haber un hueco, que se puede formar por una fractura de
la roca o por disolución, y luego se va filtrando en su interior
agua con una disolución diferente, con otra composición
química, y empiezan a crecer cristalitos que van tapizando las
paredes de la cavidad", explica García-Guinea. "Esta
geoda estaría llena de líquido (agua con un poquito de sulfato
de estroncio, de calcio...) y luego se drenaría".
-
Condiciones excepcionales:
A este experto, aun antes de iniciar un
estudio riguroso de la formación, no le cabe duda de que para
crear algo tan grande, debieron darse condiciones muy
excepcionales: un punto justo de saturación de sales, aporte de
compuestos y estabilidad del sistema. "Esas condiciones
ideales, muy exquisitas, han creado algo único", dice.
Además de la crisis salina Messiniense,
el experto del CSIC señala otros mecanismos geológicos en la
región que debieron ayudar a cuajar la geoda, como la actividad
volcánica que supone aporte de metales y sulfatos. Lo cierto es
que la región es un muestrario geológico, con aguas termales,
fumarolas, terremotos, minas de plata, concentraciones de yeso,
etcétera, destacan los expertos.
La protección y promoción de ese
rincón de la península es una idea grata para los geólogos y
ahora García-Guinea sueña con un museo que podría montarse en
la mina de Pulpi donde está la geoda gigante y aprovechar ésta
como atractivo principal para el público, garantizando, claro
está, su conservación. "Se protegen monumentos y edificios
de gran valor pero que, en última instancia, sabemos cómo
rehacerlos si resultan destruidos", apunta García-Guinea.
"Sin embargo, no se presta suficiente interés para proteger
obras de la naturaleza, como esta geoda maravillosa, que no
sabemos cómo producir si la destruimos".
Imágenes publicadas en
el País :
3-REFERENCIAS:
Rivera, A. 2000 . Gigantesco
hallazgo en una mina de Almería. El País. Sbdo. 10-6-2000.
Pag 33.
Rivera, A. 2000 . Gigantesco hallazgo en
una mina de Almería. El País Digital.. Sbdo.
10-6-2000.
<VOLVER AL ÍNDICE
DE GEOLOGÍA>
Geo_Info. J.B.R.