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Gerencia de Salud Ambiental y Control de
Endemias
Biografías
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ARNOLDO GABALDÓN
Nace en Trujillo en 1909. Obtiene
su doctorado en Medicina en la Universidad Central de Venezuela, realizando
simultáneamente estudios y trabajando como bacteriólogo con los Drs. Enrique
Tejera y Rafael Rísquez. Al culminar su carrera viaja casi de inmediato a
Hamburgo (1931), donde cursa una especialización en Patología Tropical, atraído
desde ya al estudio de la malaria, sello indiscutible de sus contactos
familiares y su juventud ligada a los llanos de Monay, estado Trujillo. Luego
realiza estudios en Italia. A su regreso de Europa había sido destituido de su
cargo en el Laboratorio de Bacteriología y Parasitología de la Dirección General
de Sanidad y cubre una vacante como médico en San Fernando de Apure. El
contacto con los habitantes y el
sufrimiento de la zona por los embates de la malaria
lo impactó nuevamente.
Su
pasión por aprender y por la búsqueda de soluciones recibe el apoyo de la Fundación Rockefeller,
de quien obtiene en 1933 una beca para estudiar en John Hopkins, Baltimore,
EE.UU., donde dos años más tarde adquiere el título de Doctor en Ciencias, con
Mención Especial en Higiene, un doctorado que auspiciaba un mejor futuro para
Venezuela. Regresa al país y es nombrado Jefe de la recién creada División de
Malariología en el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social.
Establecida
la sede de la
División Nacional en Maracay, el Dr. Gabaldón selecciona
cuidadosamente a sus colaboradores y en equipo se enfrenta al grave problema de
la malaria en el país, mediante la adopción de una estrategia que rompió con
los esquemas tradicionales de la época, y que todavía está plenamente vigente,
preparando al personal de manera acuciosa y con metodologías definidas y de
acuerdo a las necesidades, acompañando el proceso de investigación
epidemiológica y básica y control de la enfermedad con medidas antibacteriales
y antiparasitarias. Así realiza su estrategia y organiza la lucha antimalárica,
basada en experiencias prácticas, con conocimiento profundo de la geopolítica
nacional y en contacto con la gente, convirtiéndose en un Proyecto Nacional,
que comienza a dar de inmediato resultados positivos, de tal manera que las
altas tasas de morbilidad y mortalidad palúdicas que diezmaban al país en la
época de los '30s, ya para 1944 habían disminuido considerablemente y se
vislumbraba su control.
A
este programa inicial sigue una fase de erradicación del paludismo, que se
logra en unas 2/3 partes del país, éxitos que fueron reconocidos nacional e
internacionalmente y que ciertamente elevaron no solamente el prestigio de la
salud nacional sino el del propio Instituto de Malariología, crisol de gerentes
de salud pública venezolana.
Además,
el Dr. Gabaldón descubrió nuevas especies de parásitos maláricos, y se dedicó a
estudiar el mosquito Anopheles nuneztovari, acción que catalizó el
reconocimiento de las necesidades educativas y de preparar los cuadros
gerenciales del Ministerio de Sanidad, mediante la creación de la Escuela que hoy lleva su
nombre en Maracay, contribución profunda y adicional.
Precisamente,
a sus aportes científicos en el área epidemiológica, entomológica y de educación
sanitaria, se unen otros no menos importantes en el campo de las políticas de
salud del país, experiencia única con amplio e insistente sentido
práctico, enfrentándose a las realidades directamente, cubierta al frente del
Despacho de Sanidad del país durante 5 años (1959-1964), que plasma claramente
en su obra "Una Política Sanitaria". Profundizó en el campo de la Biología, de la Parasitología, de la Gerencia y de la Educación, porque su
obra maestra fue la de ser un instructor y formador de Gerentes de la Salud Pública, de la Ingeniería Sanitaria
y, más tarde, de la
Educación Superior, pensamientos y experiencias de acciones,
así como angustias que traduce en su libro "La Enfermedad de la Educación Superior
en Venezuela", y más tarde (1990), en sus "Instrucciones sobre el
Funcionamiento de la
Dirección General de la Malariología y
Saneamiento Ambiental", especie de testamento y legado a sus compañeros de
ideales y trabajo. En 1998 se publica su libro póstumo "Malaria Aviaria en
un País de la
Región Neotropical, Venezuela".
Por
otra parte, sus orientaciones e ideas se nutren, hibridizan y comparten con
variados sectores de la
Sociedad Civil y Fundacional del país. Sus
comentarios y consejos en el seno de la Junta de Consejeros de la Fundación Eugenio
Mendoza, alternaban con sus ideas sobre el desarrollo de la vivienda en
Venezuela, en concordancia con los planteamientos de la Fundación de la Vivienda Popular
recordando y sugiriendo mejorías, lecciones aprendidas y derivadas de los
programas de vivienda rural del Ministerio de Sanidad.
En
el campo de la Salud
Privada, de carácter independiente y fundacional sus consejos
fueron muy útiles y certeros en la labor realizada por las Fundaciones
Venezolanas contra la
Parálisis Infantil y el Hospital Ortopédico Infantil. Así
mismo, fue factor importante en el desarrollo de las ideas y acciones que
conducen a establecer el Centro Médico Docente La Trinidad, al participar
activamente y con ahínco epidemiológico en su primera Junta Directiva como
Director Principal y luego como Consejero de la institución, planteando la
importancia del desarrollo de instituciones independientes, que contribuyesen
en la búsqueda de soluciones en el campo de la Salud, la Educación y la Investigación Biomédica.
En
los últimos años, el Dr. Gabaldón siguió estudiando con dedicación y pasión el
problema malárico. Siguió de cerca, trabajó con él y estimuló las pesquisas de
un distinguido investigador colombiano, el Dr. Manuel Eikin Patarroyo, en el
desarrollo y perfeccionamiento de una vacuna antimalárica, ya en proceso de
aplicación evaluativa en diversas latitudes de nuestro hemisferio. Esta pasión
hizo posible que se levantara en lucha con su enfermedad final y fuera a
visitar una de las campañas en desarrollo en el estado Bolívar.
En
síntesis, el Dr. Arnoldo Gabaldón hizo de sus investigaciones y acciones en
Patología Tropical y Malaria, así como en Educación y Política Sanitaria, no
solamente una pasión sino un templo, e hizo del Ministerio y de la Sanidad Nacional
su Patria.
Extraído
de su libro póstumo: Gabaldón, A. 1998. Malaria Aviaria en un
País de la Región
Neotropical, Venezuela. Fondo Editorial Interfundaciones. Caracas. 343 pp.

Desarrollo, Diseño y Actualización: Melfran Herrera | e-mail: melfranh@hotmail.com
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