LA LLEGADA A CASA

Los gatitos suelen ir a sus nuevos hogares a partir de las 8 semanas. Deberás recordar que para tu pequeño animal, el traslado representará un auténtico choque. La separación de la madre y hermanos de camada le molestará. Al principio trata de evitar demasiado ruido y demasiado manoseo, especialmente por parte de los niños. Ten en cuenta que tu nuevo gatito necesita tiempo para explorar el entorno y sentirse seguro de que en su nuevo ambiente estará a salvo y se sentirá bien.

EL SUEÑO

Todos los animales jóvenes en crecimiento necesitan dormir durante largos períodos. Proporciónale una cesta o una caja de cartón con una pequeña manta en su interior. Las cajas de cartón tinen la ventaja de que cuando estén sucias, pueden desecharse. También puede ser que prefieres adquirir una casita. Si hace frío, tu gatito agradecerá y encontrará muy confortable una botella de agua templada bajo la manta.

ALIMENTACIÓN

Es posible que quieras alimentar a tu gatito con la misma comida que tu comes, o de la misma manera que a un cachorro de perro. El gato, sin embargo, tiene unas necesidades nutricionales muy particulares y diferentes de las de los hombres o los perros. Por ello es recomendable el uso de comidas preparadas para gatos ya sean secos o húmedos.

Ah, por cierto si quieres hacer feliz a tu gatito dale jamón de york, le encantará.

Proporciona a tu gato su propio cuenco de comida y asegúrate de que siempre dispone de agua fresca y renovada. La mayoría de los gatos beberán la leche sin problemas, aunque no es necesaria si se le suministra una dieta completa. De hecho, la leche puede causar diarrea a los gatitos; si esto suecede deja de dársela.

Si tienes alguna duda o problema referente a sus cuidados, escríbeme.