De la filosofía de Saint-Simon partió el fundador del positivismo, Augusto Comte. Naciddo en Montpellier el 19 de enero de 1798, comte estudió en la Escuela Politécnica de París y fue, primero profesor privado de matemáticas. Amigo y colaborador de Saint-Simon, en 1882 adoptó una posición indpendiente en la obra Plan de los trabajos científicos necesarios para organizar la sociedad. Algunos años después interrumpía la amistado con Saint-Simon y procedía a una elaboración independiente de su filosofía. Esta elaboración fue interrumpida entre 1826 y 1827 por una violenta crisis cerebral, que le llevó al manicomio y de la cual triunfó gracias a la “potencia intrínseca de su organismo”. En 1830 apareció el primer volumen de su Curso de filosofía positiva, y sucesivamente, hasta 1842, salieron los otros cinco.
La carrera académica de Comte fue desgraciada.
Aspiró inútilmente a una cátedra de matemáticas
en la escuela Politécnica de París. En 1833 obtuvo un puesto
de profesor auxiliar de matemáticas y en el tribunal de exámenes
de los aspirantes al ingreso de dicha escuela, cargo precario que perdió
al publicar su último volumen del curso por la hostilidad que habían
sucitado sus ideas en los ambientes académicos. Vivió desde
entonces con ayudas y subsidios de amigos y discípulos.