Este es un lugar de encuentro, donde muchos enfermos serán recibidos con alegría y en especial con amor. El hogar brinda alimento no solo corporal sino también espiritual, pues los que padecen esta enfermedad necesitan más que nunca una mano amiga y una voz que les pueda hablar del gran amor que tiene Jesucristo por todas las personas en general.
Pero no llega hasta aquí la labor, este hogar buscar prevenir la pandemia de la cual estamos expuestos todos; para esto se han preparado diferentes textos educativos y panfletos, para los diferentes grupos sociales niños, jóvenes, adultos mujeres y varones. Además se capacita a los que ya padecen la enfermedad pues el ser contagiado por el virus es el principio de una forma de vida diferente a la antes conocían.
El centro cuenta con consultorios médicos y psicológicos que asumen el desafío de dar una atención integral, dicho servicio produce una mejor calidad de vida a los pacientes. También cuenta con la ayuda de todas aquellas personas que tengan en su corazón el espíritu altruista y quieran ser voluntarios en la ayuda de esta noble causa.