Palabras clave: DIABETES MELLITUS INSULINO-DEPENDIENTE/epidemiología; SALUD DE LA FAMILIA.
Otros estudios realizados sobre el sistema mayor de histocompatibilidad (HLA), localizado en el brazo corto del cromosoma 6, han aportado evidencias que revelan la heterogeneidad genética de la enfermedad e incluso diferencias entre los tipos I y II de la DM. Particularmente han sido implicados en la susceptibilidad de la DM tipo I los alelos DR3 y DR4, en tanto que los alelos DR2 y DR7 parecen conferir protección al individuo. En tal sentido, se han encontrado variaciones entre los diferentes grupos raciales. Estudios más recientes han involucrado a la región DQ (cadena Beta con ausencia de ácido aspártico en la posición 57) con un riesgo incrementado de padecer diabetes insulinodependiente.3,4
Actualmente se considera que los alelos HLA-DR no indican, por sí mismos, susceptibilidad a la DM tipo I sino que existen en desequilibrio de asociación con genes DQ, a los que la enfermedad aparece más fuertemente asociada. Por otra parte, no se han establecido aún relaciones entre haplotipos HLA y DM tipo II.3-5
Un elemento primario en los estudios de riesgo familiar de DM lo constituye la descripción de las frecuencias de historia familiar positiva a DM entre familiares de pacientes con la enfermedad.6
Nuestro grupo de trabajo ha reafirmado recientemente la mayor frecuencia de diabetes entre familiares de personas que padecen diabetes mellitus no insulinodependiente (DMNID). Dicho estudio demostró que los antecedentes maternos predominan sobre los paternos y que el riesgo a tener un hijo diabético es superior en las personas con antecedentes familiares de la enfermedad.7
En nuestro país no se han reportado estudios similares para la diabetes tipo I, por lo que nos planteamos determinar la frecuencia de historia de diabetes mellitus tipo I y tipo II en familiares de primer grado de niños que presentan la enfermedad antes de los 15 años de edad en Cuba y su relación con el sexo, la edad y la época del año en que esto ocurre; así como comparar dicha frecuencia con la existente en la población cubana.
Para ello empleamos datos del Registro Nacional de Niños Diabéticos del Instituto Nacional de Endocrinología, una fuente con varios años de existencia. Estos resultados iniciales servirían de base a estudios analíticos e incluso a estudios de intervención en la predicción y prevención de la enfermedad.8
Recogimos información codificada sobre el antecedente, en familiares de primer grado (madre, padre, hermanos), de diabetes mellitus no insulinodependiente y de diabetes mellitus insulinodependiente, según las definiciones vigentes del Comité de Expertos de la OMS.9
Agrupamos los pacientes registrados según sexo, grupos etarios, período del año en el que se inició la enfermedad, subdividido en trimestres, al igual que han hecho otros autores con anterioridad.8
Utilizamos las cifras de prevalencia de DM en población femenina y en población masculina entre 18 y 44 años de edad para compararlas con la frecuencia de DM tipo I y tipo II en madre y padre, respectivamente. Para comparar la frecuencia observada en hermanos, se emplearon los datos de prevalencia de DM (ambos tipos) en población entre 0 y 17 años. Obtuvimos los datos poblacionales a punto de partida del Registro Nacional de Dispensarización (variante médico de familia) correspondiente al año 1990.10
En la presentación de los datos, empleamos porcentajes y para evaluar diferencias entre los porcentajes así como para testar probables asociaciones entre variables, la prueba de Chi cuadrado y el test exacto de Fisher.11
Para evitar cualquier probable interrelación entre los tipos de diabetes, éstos fueron estudiados de forma independiente.
Empleamos el programa computadorizado EPIINFO versión 6,0 de 1994 y el paquete estadístico MICROSTA.
No hallamos diferencias en la distribución de los casos según sexo. Casi la mitad de los casos se iniciaron en edades peripuberales (10-14 años) mientras que sólo la sexta parte lo hizo antes de los 5 (p < 0,001). La época del año en que más casos se presentaron fue entre los meses de septiembre a febrero y resultó significativamente menor la cantidad de casos que lo hicieron entre junio y agosto (p < 0,001) (tabla 1).
TABLA 1. Características de los casos estudiados
Características |
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Sexo | |||
Femenino |
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Masculino |
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Grupo etario al inicio (años) |
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Epoca del año en que comienza | dic-ene-feb |
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mar-abr-may |
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jun-jul-ago |
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sep-oct-nov |
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HISTORIA FAMILIAR DE DIABETES MELLITUS INSULINODEPENDIENTE
La historia familiar de diabetes mellitus insulinodependiente fue positiva en 24 sujetos (3,0 %); de ellos 13 refirieron tener padre DMID (1,6 %) y 12 declararon tener madre DMID (1,5 %); sólo en uno de los casos coincidieron ambos padres (tabla 2).
TABLA 2. Prevalencia (%) de diabetes mellitus en familiares de primer grado y en población general
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Dicho antecedente fue significativamente más frecuente entre los hermanos (p < 0,001). Del total de sujetos que tenían hermanos al inicio de su enfermedad el 6,7 % (16/239) refirió tener al menos un hermano DMID.
Al testar las probables asociaciones entre el hecho de tener familiar de primer grado diabético insulinodependiente y el sexo, el período del año y la edad de inicio de los casos sólo encontramos asociación estadísticamente significativa entre el hecho de pertenecer al sexo femenino y tener madre DMID (p=0,01) (tabla 3).
TABLA 3. Historia familiar de diabetes mellitus insulinodependiente, según sexo, edad y mes de inicio de los casos
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Masc (n = 423) |
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Fem (n = 387) |
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0-4 (n = 132) |
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5-9 (n = 294) |
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10-14 (n = 384) |
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D-E-F (n = 235) |
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M-A-N (n = 186) |
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J-J-A (n = 159) |
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S-O-N (n = 230) |
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En este tipo de diabetes no hubo asociación estadísticamente significativa entre poseer padre diabético y pertenecer al sexo masculino (p=0,02) (tabla 4).
TABLA 4. Historia familiar de diabetes mellitus no insulinodependiente
según sexo, edad y mes de inicio de los casos
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Masculino | ||||
(n = 423) |
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Femenino | ||||
(n = 387) |
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0-4 | ||||
(n = 132) |
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5-9 | ||||
(n = 294) |
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10-14 | ||||
(n = 384) |
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D-E-F | ||||
(n = 235) |
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M-A-M | ||||
(n = 186) |
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J-J-A | ||||
(n = 159) |
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S-O-N | ||||
(n = 230) |
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DIABETES EN FAMILIARES VS. DIABETES EN LA POBLACION
La historia familiar de DM, independientemente de su tipo, estuvo presente en el 9,3 % de los individuos estudiados (76/810). Cuando comparamos la proporción de diabéticos entre los familiares con dicha proporción en la población cubana de iguales edades, sexo y tipo de DM se demostraron diferencias altamente significativas (p < 0,001) a favor de los familiares (madre, padre, hermano) tanto para la diabetes tipo I como para la II (tabla 2).
La distribución de los sujetos estudiados según sexo, edad y mes de inicio de la enfermedad es semejante a la informada para este tipo de diabetes, por otros autores en Cuba y en otros países.8,12
La proporción de individuos con padre y/o madre diabéticos tipo I resultó inferior que la señalada en Finlandia donde alcanza el 8,5 %, ello pudiera estar relacionado con un mayor riesgo poblacional de la enfermedad en dicho país.6
De igual forma, el comportamiento de la razón padre vs. madre resultó diferente a la encontrada por otros autores en el extranjero, pues en nuestros pacientes dicha razón fue 1:1 mientras que ellos reportan una razón de 3:1.6
Nuestros resultados no coinciden con las evidencias de heredar susceptibilidad a la DMID de padre a hijo7,13 pues encontramos asociación significativa sólo para madre-hijo en el caso de la DMID. Sin embargo, sí hallamos asociación padre-hijo para la DMNID (p < 0,001). La alta proporción de padres DMNID de hijos con DMID quizás se deba a que la DMID y la DMNID compartan varios genes de susceptibilidad genética.14 Se ha encontrado un incremento en el riesgo a desarrollar DMID cuando existen padres con DM tipo II.14,15
En relación con el antecedente de hermano diabético, nuestra frecuencia resultó ser superior a la encontrada en el mencionado estudio finlandés (6,7 % vs. 4 %) aunque sí consideramos que en dicho estudio no tuvieron en cuenta la condición previa de tener hermano, lo cual sí consideramos nosotros, probablemente también en sus casos esa proporción sea mayor que la nuestra.6
La historia de diabetes mellitus no insulinodependiente entre padre y/o madre apareció con mayor frecuencia que la informada en otros países.6
En un estudio prospectivo sobre el desarrollo de diabetes insulinodependiente en familiares de pacientes con DM tipo I durante 7 años, se encontró que los hermanos de diabéticos tipo I presentaban un mayor riesgo a desarrollar DMID que los padres e hijos.16 En dicho estudio se encuentra que el desarrollo de DMID es mucho mayor en familiares de primer grado, menores de 20 años de edad, así como en aquéllos con más de un familiar diabético.
Riley et al.17 han demostrado también que el riesgo a desarrollar DMID es mayor en hermanos con anticuerpos antiislotes pancreáticos en comparación con el resto de los familiares ICA+. Resultados similares fueron encontrados en el estudio Bart-Windsor de predicción de DMID durante 8 años de seguimiento.18
Todo ello explica, hasta cierto punto, nuestros resultados sobre la alta frecuencia de DMID en hermanos de diabéticos tipo I en comparación a padres y madres.
Los resultados obtenidos al comparar las proporciones de diabéticos entre los familiares de primer grado y la población general parecen indicar la existencia de un riesgo incrementado entre los primeros. Un estudio de casos y controles pudiera aportar elementos más concluyentes al respecto.
Estos hallazgos son comparables con los señalados previamente por nuestro grupo para la DMNID, en cuanto a que el riesgo a desarrollar tanto DMID como DMNID en Cuba es mucho mayor en familiares de primer grado que en la población sin antecedentes de DM.7
Con esta información creemos que es factible un estudio de predicción de DMID en familiares de primer grado de diabéticos tipo I en Cuba por la mayor probabilidad de detectar tanto DM tipo I como tipo II en relación con la población en general.
Key words: DIABETES MELLITUS, INSULIN-DEPENDENT/epidemiology; FAMILY HEALTH.