DIFERENCIAS DE SEXO EN EL USO DE LOS SERVICIOS DE ATENCION MÉDICA
Fuente: The New England Journal of Medicine 338:1678-1683, Ref.: 30, jun 1998
En general, el empleo de los
servicios médicos es similar entre hombres y mujeres, pero los primeros lo utilizan con
mayor frecuencia cuando son ancianos y las segundas, durante la etapa reproductiva
Introducción
Por lo general, señalan los autores, en los estudios descriptivos acerca del uso de los servicios de atención médica se informa que el empleo per capita es más alto en mujeres durante el período reproductivo adulto y mayor en hombres ancianos. Como explicación de este fenómeno se indican las diferencias entre los sexos en el estado de salud y en la búsqueda y obtención de la atención médica. Además, como gran parte de los servicios son utilizados en los últimos años de vida, la mayor tasa de mortalidad específica de la edad entre los hombres contribuye a tales diferencias. En este estudio, los especialistas analizan la contribución que hacen las diferencias entre los sexos en relación con el empleo de los servicios de atención médica.
Métodos
Los expertos estudiaron el empleo de los servicios médicos y los de guardia de los hospitales por 1 140 200 personas registradas en agencias de seguro médico en la provincia canadiense de Manitoba, entre abril de 1994 y marzo de 1995. Como los registros electrónicos de cada caso almacenan una identificación particular para cada individuo, explican los autores, es posible reconstruir la historia de cada paciente en el empleo de los servicios médicos y predecir la validez de los datos. A partir de los registros, los especialistas evaluaron los gastos de atención, el empleo de asistencia médica para condiciones específicas de cada sexo, la mortalidad y el uso de atención médica en el último año de vida. Resultados El total de gastos por servicios médicos, señalan los especialistas, ascendió a U$S 1 189 millones durante el período de estudio; de esta cifra, U$S 673 millones (57%) fue utilizada por mujeres (51% de la población estudiada). El gasto per capita por los servicios médicos fue de U$S 277 en las mujeres y de U$S 198 en los hombres. En cuanto al empleo de servicios hospitalarios, el gasto per capita fue de U$S 887 y U$S 720, respectivamente. A pesar del mayor consumo atribuido a las mujeres, los gastos de los hombres fueron mayores cuando se considera a los individuos de menos de 10 años o de más de 59 años. Aproximadamente, calculan los autores, el 22% del total de gastos médicos de las mujeres estuvo relacionado con la atención en situaciones específicas del sexo. Por el contrario, sólo el 3% de los gastos realizados por los hombres pertenecían a esta categoría. En el caso de los hombres, prosiguen, el 6% de los gastos de servicio médico y el 17% de los insumos hospitalarios fueron utilizados por personas que fallecieron durante el año de estudio, mientras que, entre las mujeres, estas proporciones fueron del 4% y del 12%, respectivamente. En conjunto, informan, el 32% de los gastos realizados por mujeres y el 17% de los realizados por hombres estuvieron vinculados con la atención por situaciones específicas del sexo o en el último año de vida. Cuando fueron excluidas estas 2 categorías, los gastos per capita sólo difirieron marginalmente entre los 2 sexos; U$S 796 para las mujeres y U$S 762 para los hombres. De acuerdo con los autores, 4 796 hombres y 4 413 mujeres fallecieron en el año de estudio. Tomando en cuenta estos subgrupos, los hombres gastaron U$S 73.8 millones durante el último año de vida, con un valor per capita de U$S 15 388; entre las mujeres, en tanto, el gasto total fue de U$S 65.6 millones y el gasto per capita, de U$S 14 873. Aunque el gasto varía notoriamente en función de la causa del fallecimiento, los autores no detectaron evidencias de que existan diferencias en función del sexo en este sentido.
Discusión
Los resultados de este estudio, afirman los autores, concuerdan con los hallazgos obtenidos en otras investigaciones previas, en las que se informó que las mujeres producen mayores gastos de atención médica. Sin embargo, en este caso, en el cual se analizó una población amplia con un seguro de salud universal, las diferencias fueron escasas luego de ajustar los datos en función de las características reproductivas y de la tasa de mortalidad específica de la edad para los hombres. Las principales diferencias, detallan, estuvieron relacionadas básicamente con el mayor empleo de los servicios de atención médica por las mujeres durante el período reproductivo y, en menor grado, por la mayor utilización del servicio por los hombres ancianos. Estas diferencias, sostienen, pueden estar en parte fundamentadas por la distinta prevalencia de las enfermedades, los diferentes comportamientos en cuanto a la búsqueda de atención médica y a las diferencias del papel social que cada sexo desempeña. Por ejemplo, indican, como las mujeres continúan manteniendo la mayor responsabilidad en el cuidado médico de los niños, esta actitud las lleva a estar en mayor contacto con profesionales que los hombres durante dicha etapa, permitiéndoles mayores oportunidades para el empleo de los servicios médicos. De acuerdo con los cálculos realizados por los especialistas, el gasto en el último año de vida representa el 21% del gasto total en los hombres y el 15% en las mujeres. En resumen, los expertos sostienen que, con el diseño experimental puesto en práctica en la presente investigación, no existen grandes diferencias en cuanto al empleo de los servicios de atención médica entre los hombres y las mujeres.