Iglesia Evangélica Bautista del Centro
¡ESTUDIEMOS LA BIBLIA! - Hoja Semanal Nº 153 - Domingo 18 de Noviembre de 2001.
Escuela Dominical de la Iglesia Evangélica Bautista del Centro , Rodríguez 542, 2000 Rosario.
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Discipulado: consejos prácticos
1) No discipulés a nadie, si primero no te estás discipulando vos.
2) El discipulado no tiene nada que ver con el seguimiento básico. Llamamos "seguimiento" a las primeras 6 citas de edificación que le damos a una persona que recién ha recibido a Cristo.
3) Si querés empezar un grupo de discipulado, consultá con las personas responsables, en el caso de las mujeres: Mariana de Marcos, Mirta de Ferreghini e Iris de Amarillo, y así no duplicamos tareas, tratando de evitar los enredos. En el caso de los hombres, hablar con el pastor Carlos Amarillo, Diego Marcos, o con Edgardo Finos.
4) No usés cualquier material, aunque creas que sea muy bueno. Ya estableció el pastor una lista de materiales (es muy abundante y variado) y que está disponible para consultar.
5) Es mejor el discipulado en grupo (2, 3 o 4 personas) que el individual (1 sola persona).
6) No discipulés adolescentes, ni preadolescentes.
7) No discipulés a personas de otras iglesias, no es ético.
8) El discipulado no reemplaza la Escuela Dominical, ni el grupo familiar o núcleo.
9) La frecuencia del discipulado, se sugiere cada 15 días, para permitir la participación en otras actividades de la iglesia y para tener tiempo para el evangelismo, la adopción y el grupo de discipulado personal. O sea, durante una semana te reunís con tu discipulador, en la otra con tus discípulos.
10) Cuando adoptés una persona para hacerle el seguimiento básico (las 6 citas iniciales), no necesariamente tenés que discipularla, esto lo puede hacer otro a quien se lo delegues.
11) Recordá que los mandamientos generales, deben ser obedecidos con prioridad a los mandamientos particulares. Los mandamientos generales son: orar, evangelizar, discipular, congregarse, estudiar la Palabra y otros. Los mandamientos particulares son los que tienen que ver con los dones (pastor, evangelista, y otros). Primero hay que realizar lo que nos corresponde por el hecho de ser cristianos, y luego vienen las responsabilidades que se derivan por los dones que el Espíritu Santo nos ha dado.
12) Si tenés un grupo de discipulado, si o si debe haber reproducción del líder y de su discípulo (en un tiempo prudencial). Si esto no ocurre, no es discipulado, solo puede ser terapia, charla entre amigos o amistad, estudio bíblico, etc. A Abraham Lincoln, el antiguo presidente de EEUU, le preguntaron, si a la cola del caballo se le llamara pata, ¿cuántas patas tiene el caballo? El respondió: "no importa como llames la cola del caballo, el caballo tiene cuatro patas". Si tu llamas discipulado a algo que no lo es, no importa como lo llames no será discipulado. Ver 2 Timoteo 2:2 y sus 4 generaciones de discípulos.
13) El ingrediente indispensable del discipulado es la fidelidad. No se puede discipular a una persona que no es fiel, porque eso no será discipulado, y no porque lo diga el pastor, sino por que lo dice la Biblia, por ejemplo en 2 Timoteo 2:2.
14) El discipulado es transferencia de vida, y no transferencia de conocimiento. No es de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón. Es la comunicación viviente de datos. Si vos no crecés como cristiano, tus discípulos tomarán "agua estancada", y es preferible que beban de un río que corre (Juan 7:37-39). En la mayoría de las ocasiones se aprende mas del ejemplo que de la enseñanza (Tito 1:5-9). No podemos dar lo que no tenemos. Nunca te condiciones contra el aprendizaje.
15) La persona que ministra debe estar siempre llena (gobernada) del Espíritu (Efesios 5:18). Que sea evidente la obra de Dios en su carácter, en su trabajo, en su vida familiar, en el control santo de la lengua, en el resultado de su obra, etc. El Señor dijo: "...por sus frutos los conoceréis".
16) Toda persona involucrada en el proceso del discipulado, debe evitar el "liderazgo paternalista", que es aquel que derrama un cariño desbordante por otros, pero no practica con eficacia lo que dice Efesios 4:15: "sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo" y Efesios 4:25: "...hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros". El amor y la verdad deben marchar juntos. No podemos dejar de hablar la verdad a quien amamos, para que así mejore como persona, como cristiano, como hijo, como padre, como novio/a, etc.
Trata de poner todo esto en funcionamiento y serás bendecido grandemente.
Pág 2 - 18-11-2001 - Lección 153 - Iglesia Evangélica Bautista del Centro de Rosario - Rodríguez 542 - Rosario, Santa Fe.
LECCION Nº 153 TEMA: "Conflictos en el Cuerpo de Cristo"(3º Parte) .
Pasaje Bíblico: Santiago 3:13-4:10.
Pasaje de Memoria: "El hombre perverso levanta contienda, y el chismoso aparta a los mejores amigos". Proverbios 16:28.
Lecturas Bíblicas Cotidianas: HOY (Santiago 3:13-4:10); LUNES (Proverbios 12:1-28); MARTES (Proverbios 13:1-25); MIERCOLES (Proverbios 14:1-35); JUEVES (Proverbios 15:1-33); VIERNES (Proverbios 16:1-33); SABADO (Proverbios 17:1-28). Leamos con oración cada uno de los pasajes, y vinculemos estas lecturas con la lección de hoy.
Orientación: Hoy continuamos con el tema acerca de los conflictos en el Cuerpo de Cristo. Lo primero que tenemos que repetir es los siguiente: las iglesias que saben resolver sus problemas, a la larga tendrán menos dificultades, porque no deberán cargar con los problemas no resueltos del pasado. Al conflicto no se lo ve como parte de la vida cristiana, y si Ud. es como el pastor, no le agradarán los conflictos. El hecho de que no nos agraden, no implican de que no los tengamos. Seguramente hemos tenido conflictos, los tenemos en este momento y los tendremos en nuestro futuro cercano o lejano. Alguien puede pensar que si no aprende a manejar los conflictos, tal vez no tenga que hacerles frente. Grueso error, los conflictos son inevitables. Pablo le dice a Timoteo: "todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución" (2 Timoteo 3:12).
Desarrollo: hoy continuaremos usando algunas ideas de Juan Edminston. Muchos cristianos creen que estar en conflicto es estar en pecado, porque le es difícil imaginar que la vida cristiana los incluya. Pero están ahí, y Jesucristo nos enseñó bastante detalladamente cómo tratar con el conflicto, y el libro de Proverbios contiene secciones enteras sobre el tema.
Seguiremos detallando consejos prácticos sobre como manejar el conflicto de una manera cristiana. Habíamos visto ya tres, a saber: 1) Ve ante la presencia de Dios hasta tener la perspectiva divina sobre el conflicto. 2) Recuerda que Dios es más grande que el problema. 3) Actúe en el "espíritu opuesto". 4) Lee el libro de Proverbios hasta que lo sepas al derecho y al revés. 5) Sepa como decir las cosas. 6) No use lenguaje emocional o compulsivo, ni palabras jurídicas, ya que te harán parecer pomposo y dictatorial. 7) No sea demasiado severo, ni absoluto. Hoy veremos:
8. Actuá con rapidez y no agrandés las cosas
"El que inicia la discordia es como quien suelta las aguas, ¡abandona, pues, la contienda, antes que se complique!" Proverbios 17:14. Para que esto suceda, tal vez usted tenga que atravesar por un cambio cultural en el cual deje de acumular enojo interiormente antes de estallar. A menos que la gente sea confrontada en cuanto a su comportamiento erróneo, lo más probable es que no cambie. Y es más factible que aprendamos de un recordatorio amable que de un gran escándalo que haga necesario el uso de todas nuestras capacidades defensivas. Si usted está en una iglesia o una organización cristiana, instituya la corrección amable como parte de la "cultura corporativa", de modo que se convierta en una parte natural de la vida. No involucre a otros a menos que sea necesario. Esta es la actitud sabia básica que está por detrás del proceso de tres etapas de Mateo 18 y de la exhortación de Jesús en varias ocasiones: "ve a tu hermano". Una vez que se involucra a otros, es más difícil cambiar de opinión sin que haya desprestigio. Además existe la tendencia de alterar un poco los hechos a fin de obtener apoyo.
9. Evitá a las personas enojadas o que se molestan fácilmente
Si es posible, manténgalas al margen del proceso. "El hombre iracundo provoca contiendas, el furioso, a menudo peca". Proverbios 29:22; "....el que tarda en airarse apacigua la rencilla" Proverbios 15:18b.
10. Prestá atención a la moral de las personas involucradas
Busque ayuda en el proceso de pacificación, confiando sólo en gente humilde que sea íntegra y fiel. "El de ánimo altanero provoca contiendas, pero el que confía en Jehová prosperará". Proverbios 28:25. Muchos de los que desean tener parte en el asunto son inapropiados por ser chismosos o no ser confiables por alguna otra razón. "El hombre perverso promueve contiendas, y el chismoso separa a los mejores amigos" Proverbios 16:28. "El que carece de entendimiento menosprecia a su prójimo, pero el hombre prudente calla. El que anda con chismes revela el secreto; el de espíritu fiel lo guarda íntegro" Proverbios 11:12-13.
11. No olvidés que en círculos cristianos el "acusador de los hermanos" es la causa primaria de muchos conflictos
En dichos casos, "no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo...." (Efesios 6:10). El escarnecedor que debe ser expulsado tal vez sea el mismo Satanás. De modo que nuestra mira debe ir más allá de las personalidades y llegar hasta las fuerzas espirituales que se están aprovechando de las debilidades e ideas preconcebidas de los hermanos, así como en Cesarea de Filipos, Satanás tomó ventaja del concepto que Pedro tenía del Mesías (Mateo 16:21-23). Cuando esto sucede, las personas buenas pueden ser utilizadas para malos propósitos.
Debemos estar espiritualmente alertas y deseosos de mantener "el vínculo de la paz". Una enseñanza correcta, la oración en el Espíritu en todas las ocasiones y una vida santa han de darnos una armadura impenetrable contra dichos ardides (Efesios 6:10-21).
12. Se fuerte y valiente basándote en la Palabra de Dios
Antes que Josué iniciara la conquista militar de Palestina se le dijo: "Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley...." Ver Josué 1:8-9. La valentía que proviene de Dios resuelve muchos problemas gigantescos.
Pasaje de memoria para el domingo próximo: Eclesiastés 10:18.