Iglesia Evangélica Bautista del Centro
¡ESTUDIEMOS
LA BIBLIA! - Hoja Semanal Nº 186 - Domingo 7 de Julio de 2002
Escuela
Dominical de la Iglesia Evangélica Bautista del Centro, Rodríguez 542, 2000
Rosario.
Teléfono
4380824 - Registro de Cultos Nº 672, Secretaría de Culto de la Presidencia de
la Nación Argentina.
Internet: www.oocities.org/iebcentro - E-mail:
iebcentro@oocities.com
¿Qué
significa liderar?
Dondequiera
que la obra de Dios ha ido al frente, siempre ha tenido a un líder en el timón.
Ha sido una persona singular llamada por Dios para dirigir a la gente a
alcanzar Sus objetivos. Dios llamó a un hombre a iniciar una nación (Abraham),
a preservar esa nación (José), a dirigir esa nación fuera de la esclavitud
(Moisés). El usó a hombres y mujeres para promover su agenda. El dirigió jueces
y reyes para gobernar y profetas para reprender a su gente. Y finalmente envió
a un hombre a morir por los pecados del mundo.
Quita a estos líderes de la historia y tendrás una historia radicalmente
diferente. En la economía de Dios una persona puede hacer la diferencia. No nos
extraña que Dios diga: “Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que
se pusiese en la brecha...” (Ezequiel 22:30). El misterio y el privilegio del
trabajo cristiano son que Dios usa personas como nosotros para realizar su
obra. Somos sus “compañeros de trabajo”, sus “embajadores”, sus
“representantes”, sus “siervos” y “ministros”. El salmista expresaba esto mejor
cuando escribió: “En el mar fue tu camino, y tus sendas en las muchas aguas; y
tus pisadas no fueron conocidas. Condujiste a tu pueblo como ovejas por mano de
Moisés y de Aarón.” Salmo 77:19,20.
¿Qué es el liderazgo espiritual?
El
liderazgo espiritual es una mezcla de cualidades naturales y espirituales
utilizadas para influenciar al pueblo de Dios para alcanzar los propósitos de
Dios. Aun las cualidades naturales no son autoproducidas
sino que son dadas por Dios y por eso alcanzan su máxima efectividad cuando son
empleadas en el servicio de Dios y para Su gloria.
La
obra del ministerio requiere que sea realizada por gente espiritual, utilizando
los métodos espirituales para alcanzar los objetivos de Dios. Si quitas cualquiera de éstos fuera de la
mezcla, cesas de tener un trabajo cristiano.
La crisis del liderazgo
espiritual.
Enfrentamos
una crisis de liderazgo espiritual... y hemos enfrentado una crisis de
liderazgo espiritual los pasados 2000 años. Jesús dijo: “La mies es mucha, mas
los obreros pocos.” Hay más trabajo para hacer que obreros y líderes dispuestos
a trabajar. Cuando miramos al liderazgo espiritual, podemos necesitar dejar de
lado algunos pensamientos tradicionales de lo que hace a un líder. Sí, los
líderes espirituales son agentes de cambio. Sí, ellos influencian a los
seguidores. Sí, ellos alcanzan los objetivos. Pero su motivación y métodos son
radicalmente diferentes. Marchamos al compás de un tambor diferente. Jesús
identificaba sus roles de liderazgo en nuevos términos. El vino a ser un siervo
(Marcos 10:45) y un pastor (Juan 10:10)
El líder como siervo.
En
Mateo 20:24-28 Jesús explica cómo los valores del reino afectan el estilo de
liderazgo: “Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas,
y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Mas entre vosotros no será
así, sino que el que quiera ser el
primero entre vosotros será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo;
como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar
su vida en rescate por muchos.” Jesús no criticaba el deseo por el liderazgo de
una persona, él simplemente definió el camino a ese liderazgo. Un siervo está
comprometido con el éxito de otro.
En
Juan 13:1-17 vemos a Jesús en acción. En la ausencia de un siervo tomó el rol
de un siervo y lavó los pies de los discípulos. Después de lavar los pies de
los discípulos concluyó con esta lección señalada sobre el liderazgo: “Pues si
yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis
lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como
yo os he hecho, vosotros también hagáis.” (Juan 13:14-15)
La
esencia del liderazgo espiritual es seguir a Jesús y servir a la gente. Las
tareas del liderazgo pueden variar. Puedes liderar programas, gente y proyectos.
Pero el método de liderar nunca cambia. No nos movemos del servicio hacia otra
cosa. El hilo de plata que corre a través de todo lo que hacemos es el del
líder-siervo. El liderazgo que no involucra el servir no es un liderazgo
espiritual. Cuando dejamos de servir dejamos de caminar en las huellas del
liderazgo de Cristo.
El líder como pastor.
En I Pedro 5:2-3 Pedro escribe a los líderes de la iglesia: “Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.“
La
primera responsabilidad de un pastor es liderar, alimentar y proveer para las
necesidades de las ovejas. Cuando dejamos de interesarnos en las personas
abandonamos el derecho de dirigir. Nuestro interés por las personas es la base
para ministrarlas. El adagio es verdad... A la gente no le importa cuanto
sabemos hasta que saben cuanto nos importan.
El
servicio concierne a la tarea. El pastoreo tiene que ver con las personas. El
estilo de un líder cristiano siempre será servir y cuidar--teniendo un alto
interés por la tarea y las personas involucradas. Sorprende poco que los
oficios de los líderes cristianos sean “pastor” y “diácono” (siervo). La capacitación del
liderazgo, es realmente aprender a pastorear y a servir.
Siendo el líder que las personas
quieren seguir.
El
liderazgo espiritual es una combinación de las características adquiridas que
cuando se mezclan forman la base del liderazgo. Cuanto más características de
éstas tenga un líder y cuanto más desarrollada tenga cada una, el líder maneja
más impacto potencial para el Señor. Cada uno de nosotros quiere ser guiado por
aquellos sobre nosotros que exhiban estas características. Nuestros
coordinadores y estudiantes quieren líderes con integridad que puedan respetar
y seguir. Las siguientes diez características forman la base de la cual
lideramos. Continuará el próximo domingo. (Art. de Red Estudiantil – Cruzada
Estudiantil y Profesional para Cristo).
Pág 2 - 7-7-2002 - Lección 186 - Iglesia Evangélica Bautista del Centro de Rosario - Rodríguez 542 - Rosario, Santa Fe.
LECCION Nº 186
TEMA: Una Iglesia con propósito – 1º Parte.
Pasaje Bíblico: 1 Corintios 3:10-14.
Pasaje de Memoria: “Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás”. Mateo 4:10.
Lecturas Bíblicas Cotidianas: HOY (1Corintios 3:10-14); LUNES (Hechos 6:1-7); MARTES (Gálatas 5:13-6:2); MIERCOLES (Romanos 12:1-8); JUEVES (Romanos 15:1-7); VIERNES (1 Corintios 12:12-31); SABADO (Efesios 3:14-21). Leamos con oración cada uno de los pasajes, y vinculemos estas lecturas con la lección de hoy.
Introducción: ¿Qué es lo que mueve a una iglesia? ¿Existe una fuerza que guía y controla, una convicción que dirige detrás de todo lo que sucede? Puede ser tácita, o desconocida para muchos, pero está allí, influyendo en cada aspecto de la vida de la iglesia. La clave es edificar sobre el fundamento correcto. La iglesia debe concentrarse en los cinco propósitos que establece el Nuevo Testamento: adorar, evangelizar, enseñar, comunión y ministrar o servir. Un propósito claro propicia un buen ánimo, reduce la frustración, permite la concentración, atrae la cooperación y ayuda a la evaluación.
Desarrollo: Jesucristo una vez manifestó “Yo edificaré mi iglesia”. Evidentemente él tenía un propósito en mente. No es tarea de los cristianos crear los propósitos de la iglesia sino descubrirlos. La iglesia no es nuestra, es de Cristo. Jesús la fundó, murió por ella, envió su espíritu sobre ella y algún día volverá a buscarla. Como dueño de la iglesia, El ya ha establecido los propósitos, y estos no son negociables. Nuestro deber es comprender los propósitos que Cristo tiene para la iglesia e implementarlos. Aunque los programas deben cambiar con cada generación, los propósitos nunca cambian. Podemos introducir innovaciones al estilo, pero jamás debemos alterar su sustancia.
Es necesario dirigir a la congregación a través del Nuevo Testamento, para que defina sus propósitos. Esta es una aventura excitante. No podemos actuar aceleradamente, los creyentes se aferrarán con convicción a los que ellos descubran por sí mismos. Esto será el cimiento que logrará salud y crecimiento a largo plazo. Aun los apáticos se volverán entusiastas al redescubrir la forma en que Dios desea usarlos a ellos y a su iglesia. Veamos ahora, 4 pasos a tomar (copiados de Rick Warren) para guiar a una iglesia a definir o redefinir sus propósitos:
a) Estudie lo que dice la Biblia. Estos son algunos de los pasajes que puede incluir en su estudio: Mateo 5:13-16; 9:35; 11:28-30; 22:36-40; 24:14; 25:34-40; 28:18-20; Marcos 10:43-45; Lucas 4:18-19; 43-45; Juan 4:23; 10:14-18; 13:34-35; 20:21; Hechos 1:8; 2:41-47; 4:32-35; 5:42; 6:1-7; Romanos 12:1-8; 15:1-7; 1 Corintios 12:12-31; 2 Corintios 5:17-6:1; Gálatas 5:13-15; 6:1-2; Efesios 1:22-23; 2:19-22; 3:6,14-21; 4:11-16; 5:23-24; Colosenses 1:24-28; 3:15-16; 1 Tesalonicenses 1:3; 5:11; Hebreos 10:24-25; 13:7,17; 1 Pedro 2:9-10; 1 Juan 1:5-7; 4:7-21. Son muchos, analizar en grupos y sacar conclusiones.
· Considere el ministerio de Cristo sobre la tierra. ¿Qué hizo cuándo estuvo aquí, y qué haría si estuviera hoy aquí? Lo que él hizo, es lo que debemos continuar nosotros haciendo hoy, ya que somos su cuerpo espiritual.
· Considere las imágenes y nombres de la iglesia. ¿Cuáles son las analogías que se encuentran en el Nuevo Testamento? Ayudita: un cuerpo, una novia, una familia, un rebaño, una comunidad y un ejército. ¿Qué nos enseña esto?
· Considere los ejemplos de las iglesias del Nuevo Testamento. ¿Qué hicieron las primeras iglesias? ¿Todas hicieron cosas iguales? ¿Y las siete iglesias del Apocalipsis?
· Considere los mandamientos de Cristo. ¿Qué nos dijo Jesús que hiciéramos? ¿Qué le dijo a Pedro en Mateo 16:18?.
b) Busque las respuestas de estas cuatro preguntas. Concéntrese tanto en la naturaleza como en las tareas de la iglesia.
· ¿Por qué existe la iglesia?
· ¿Cómo debemos ser como iglesia? ¿Quiénes somos y qué somos?
· ¿Qué debemos hacer como iglesia? ¿Qué quiere Dios que se haga en el mundo?
· ¿Cómo debemos hacerlo?
c) Escriba lo que vaya descubriendo. No se preocupe por ser
breve, podemos utilizar el pizarrón para anotar todos nuestros descubrimientos.
Solo concéntrese en identificar claramente todos los propósitos, sin
apurarnos.
d) Resuma sus conclusiones en una oración. Condense lo que ha descubierto acerca de la iglesia, agrupando conceptos similares con títulos que abarquen: evangelismo, adoración, comunión, madurez espiritual y servicio o ministerio. Luego trate de que todo quede resumido en un solo párrafo. ¿Por qué? Porque si la gente no lo puede recordar, su valor será limitado. Cuando se trata de comunicar los propósitos de la iglesia, debemos ser lo más precisos que sea posible.
¿Qué
hace efectiva una definición de propósitos?
Es bíblica
Una declaración de propósitos efectiva expresa la doctrina de la iglesia del Nuevo Testamento. Los cristianos no decidimos los propósitos de la iglesia, simplemente los descubrimos. El los estableció hace mucho tiempo, cada generación debe reafirmarlos.
Es específica
Las definiciones de propósitos deben ser simples y claras, no es cuestión de amontonar conceptos. La tentación es añadir toda clase de frases buenas e innecesarias, y puede ocurrirnos lo que dice el refrán gaucho, “el peligro de aclarar mucho, es que terminás oscureciendo todo”. La declaración de propósitos del Ejército de Salvación era: “convertir a los rechazados en ciudadanos”, la de Disneylandia es: “hacer feliz a la gente”. ¿Y la nuestra cuál es? ¿Qué podemos hacer que solo la iglesia puede hacer? ¿Cuáles son exactamente cosas que lograrán producir mayor diferencia en nuestro mundo por amor a Jesús?
Es transferible
Si es transferible, debe ser lo suficientemente breve como para que todas las personas en la iglesia puedan recordarla y transmitirla. Cuanto más breve, mejor.
Pasaje
de memoria para el domingo próximo: Juan 20:21.