CURSILLO DICTADO EN VICUÑA
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Primer Congreso Nacional de Aficionados de Astronomía
Vicuña 11-14 de Noviembre 1998
ARQUEOASTRONOMIA:
UN ENCUENTRO CON LOS ANTIGUOS ASTRONOMOS
Boccas Maximea, Bustamante Patriciob,
Intijalsu Ltda., Castor Villarin 35, Santiago
mboccas@noao.edu, pbustama@cne.cl
http://www.ctio.noao.edu/~boccas/intijalsu.html
RESUMEN
Debido a condiciones climáticas muy favorables, la ciencia astronómica está en plena expansión en Chile. En 2002, Chile será la primera potencial mundial astronómica, en cuanto a la superficie total colectora de luz (la suma de todos los espejos de telescopios) que estará disponible en el territorio.
La astronomía (y astrofísica) moderna es una ciencia muy compleja. Sin embargo, los principios astronómicos son simples y son estos los fenómenos que observaban los antiguos pueblos indígenas. Al vivir afuera (es decir sin tantos techos), donde el cielo constituye la mitad de nuestro entorno visual, sin polución lumínica, la relación entre el Hombre de la prehistoria y el cielo (diario o nocturno) era naturalmente más fuerte que hoy en día. Además los objetos del cielo proveían la única manera de ubicarse en el tiempo. Entender cómo las antiguas culturas observaban el cielo es el propósito de una ciencia relativamente nueva: la arqueoastronomía. En este documento, entregamos información básica para estudiar esta tématica. Después de introducir algunos elementos históricos y principios fundamentales, relacionados tanto al cielo como al Hombre, presentamos ejemplos de descubrimientos o hipotesis arqueoastronómica en varios sitios del mundo, de América y de Chile. Terminamos con una pauta metodológica para iniciar investigación en forma ordenada y consistente, esperando motivar interés y respeto para lugares de la prehistoria y incentivar nuevos trabajos para mejorar nuestro entendimiento de los pueblos del pasado.
1. INTRODUCCION
1.1. Breve pauta histórica
25En 1894, el astrónomo inglés Norman Lockyer publicó su libro The dawn of astronomy (la alba de la astronomía), en el cual presenta una análisis de la relación de las pirámides de Egipto con las estrellas. Su trabajo abría la puerta a un estilo interdisciplinario de estudios, hoy en día llamado la arqueoastronomía. A pesar que cometió errores de interpretación, su trabajo presentaba ideas y metodologias originales y enriquecedoras. Esta investigación fue ridiculizada por los Egiptólogos. Sir Lockyer continuó sus búsquedas arqueoastronómicas en Stonehenge, el majestuoso sitio megalítico de Inglaterra. Estas revelaciones también fueron ignoradas por los prehistoriadores y arqueólogos dedicados a la cultura Celta. Setenta años pasaron antes que, en los años 60, volviera a nacer la controversia de Stonehenge (el debate de la "astro-arqueología") con los trabajos del astrónomo aficionado Peter Newham y del astrónomo Gerald Hawkins
24.En 1973, un grupo diverso de astrónomos, arqueólogos, antropólogos, arquitectos e historiadores se juntaron en Mexico para la primera conferencia internacional dedicada a este tema, llamada Archaeoastronomy in PreColumbian America (arqueoastronomía en la América precolombina). En 1974, la Royal Society and British Academy publicaban los resultados de otra conferencia muy exitosa : The place of astronomy in the ancient world
59 (el papel de la astronomía en el antiguo mundo). Con este espíritu de exploración y diálogo productivo que caracterizó estos dos eventos, se iniciaron dos decadas de intensa investigación en la mayoria de las regiones del globo y un crecimiento exponencial de las publicaciones.
1.2. Astronomía cultural : estudios interdisciplinarios
Sucede a menudo que los nuevos campos de investigación, al unir científicos con conocimientos diferentes, provoquen discusiones tanto académicas (¿es el descubrimiento real o no?) como filosóficas (¿para qué sirve este analisis?). La arqueoastronomía es una de estas disciplinas (todavía en su infancia) y trata de brindar una mirada nueva acerca de la astronomía de antiguas culturas. Los arqueoastrónomos serios son más que simples cazadores de alineamientos. Intentan reconstituir, a través de evidencias plasmadas en contrucciones, piedras, cerros, y otros objetos diversos, la cosmovisión de un pueblo, es decir su relación con el cielo y su contenido, a la vez físico (Sol, Luna, estrellas,…) y mítico (dioses, leyendas,…), así como las aplicaciones prácticas de esta relación celeste en la vida cotidiana : ubicación en el espacio (direcciones) y el tiempo (creación de calendarios civiles y religiosos).
Una primera etapa en la investigación arqueoastronómica
5 consiste en medir alineamientos y ver si corresponden a eventos astronómicos claves en el horizonte. La validez de estas conclusiones está generalemente determinada por pruebas con herramientas estadísticas. Al final, muchos esfuerzos se enfocaron en contestar la pregunta: ¿qué inteligente eran estos pueblos antiguos? Evaluar este conocimiento astronómico, por ejemplo la observación de los solsticios o la predicción de los eclipses, es una manera adicional para calificar la evolución de una cultura y, desde este punto de vista, enriqueze y abre las perspectivas del tradicional estudio antropológico.La segunda etapa, más elaborada y más difícil también, consiste en utilizar, además de los alineamientos, los registros y tradiciones de la gente para elaborar hipotesis. En muchas culturas, la observación del cielo estaba estrechamente ligada al entorno cultural y natural, de tal forma que las asociaciones entre elementos como cerros, rios, objetos celestes, ceremonias rituales y mitología eran frecuentes. La etnoastronomía
19,23,62,66 (en general reservada a los pueblos non occidentales) brinda sus fuerzas con técnicas etnográficas, es decir más bien relacionadas con el análisis de las tradiciones y conocimientos que perduran hoy. La astronomía histórica se refiere tanto al estudio de fuentes escritas que describen elementos de astronomía (por ejemplo los códices mayas), o a la reconstitución de la historia de estos conocimientos sin restricción absoluta de fechas (a pesar que generalemente, en este caso, se enfoca en las culturas occidentales).En forma global, los investigadores tomaron desde unos años el término "astronomía cultural" como definición de estas actividades connectadas que, de a poco, hacen converger científicos de distintas disciplinas. Las diferentes escuelas de pensamiento, a veces clasificada en forma extrema como los estructuralistas (los que hacen hipotesis en base a pocas evidencias) y los positivistas (los que requieren tener una evidencia fuerte para concluir), sugieren que, mientras la metodología es adecuada y permite hacer progresos intelectuales, cada investigador, aficionado o profesional, tiene espacio para desarrollar un papel en la ciencia.
Hoy en día, existen principalmente 3 instituciones que tienen publicaciones regulares: The center for archaeoastronomy (boletin trimestrial y suplementos), The Journal for History of Astronomy (supplemento annual) y The Journal of Astronomical History and Heritage. Muchas conferencias internacionales de arqueoastronomía ocurren en el mundo, de las cuales la más conocida es la Oxford Conference, cada 3 años (la próxima sucederá en Tenerife, Islas Canarias, junio 1999). Más de treinta cursos de arqueoastronomía existen en universidades extranjeras y la bibliografía ve en promedio 5 nuevas obras dedicadas por año (sin contar las publicaciones regulares o de conferencias). Sugerimos los libros de Edwin Krupp
30,31,32,33 como refencias básicas completas para empezar a estudiar.
2. Algunos fundamentos para la arqueoastronomia
2.1. El entorno celeste
La consideración inicial para justificar estudios arqueoastronómicos puede resumirse de la siguiente manera: desde que el Hombre tuvo actividades, de alguna manera, necesitó organizarlas, lo que requería marcar el paso del tiempo, con más o menos precisión. Sin reloj artificial (a quartz o tipo antiguo pendulo mecánico,…), la mejor forma de ubicarse en el tiempo es a través de la observación de elementos naturales y en primer lugar los objetos del cielo. El movimiento regular y sin fin (en la mayoría de los casos) de los astros, lo que hoy en día entendemos como la simple consecuencia de la rotación de la Tierra entorno a su propio eje, constituye una excelente pauta temporal: el astro sale detras del horizonte, recorre una trayectoria en el cielo y se pone detras del horizonte. Este tipo de observación se denomina astronomía de horizonte: es una astronomía básica, hecha a simple vista (¿nuestros ojos son excelentes instrumentos, verdad?), el horizonte local sirviendo de referencia fija.
En astronomía de horizonte, el sistema de coordenadas utilizado es de tipo altura-azimut mientras que los astronomos están acostumbrados al sistema ecuatorial (es decir en torno al eje terrestre) de declinación (similar a una latitud) y ascensión recta (similar a una longitud). La continuación del ecuador terrestre hacia el espacio forma un línea imaginaria llamada el ecuador celeste. Delimita los dos hemisferios del cielo boreal y austral. De la misma manera podemos definir los polos celestes, continuación del eje terrestre hacia el espacio. Estos puntos imaginarios son los centros de rotación de la boveda celeste durante la noche. Las constelaciones cuya declinación es superior a 90-L, donde L es la latitud del lugar, son circumpolares, es decir que se ven toda la noche y todo el año.
De todos los cuerpos celestes, el Sol tiene obviamente un lugar privilegiado por su funcción de proveernos luz, calor y todo el simbolismo asociado. La inclinación de 23º27' del eje terrestre relativo a la perpendicular a su desplazamiento alrededor del Sol (la traslación en 1 año) produce un cambio, día tras día, en el recorrido aparente del sol en el cielo. El día del equinoccio (21 de marzo y 21 de septiembre), en cualquier punto de la Tierra, el Sol sale y se pone respectivamente exactamente al Este y al Oeste. El día y la noche tienen la misma duración. Avanzando hacia el solsticio de verano, el Sol sale y se pone en azimut cada vez más al sur (lo opuesto ocurre en el hemisferio norte obviamente). El 21 de diciembre, llega a un azimut extremo en el cual se mantiene casi inmovil (significado de "solsticio") durante varios días antes de empezar lentamente a devolverse hacia el sur. Eso constituye una dirección y fecha claves. El día es más largo que la noche y el Sol culmina alto en el cielo al medio día. Seis meses después, ocurre el solsticio de invierno, que marca el extremo sur de la salida y puesta del Sol en el horizonte. Es el día más corto del año y, a latitud media, el sol nunca sube mucho en el cielo. La latitud del lugar es el parametro fundamental que permite calcular el rango de azimut en los cuales el Sol sale o se pone, y el rango de alturas donde culmina al pasar por el meridiano. Casos interesantes suceden en los polos terrestres, donde una noche de 6 meses sigue un día de 6 meses. A latitudes entre el Ecuador y los Trópicos, el Sol llega a pasar por el cenit (punto a la vertical encima de nuestra cabeza) dos veces al año. Este momento tiene su peso de simbología y fue observado por varias culturas antiguas, especialmente por los Mesoaméricanos. Construyendo cuevas con chimenas verticales, podían apreciar este día particular cuando la luz solar iluminaba el interior de la pieza subterránea.
La Luna, por su tamaño aparente (similar al Sol), y su brillo variable fue también objeto de obervación intensa y veneración. Incluso, por la facilidad de ver cambiar las fases de la Luna en un ciclo más bien corto (unos 28 días), la Luna fue a la origen de muchos calendarios
42,61,68. En comparación, el ciclo básico del calendrio solar son 6 meses y requiere una observación más exigente, desde el mismo punto, al momento de salida o puesta. La Luna tiene varios componentes en su movimiento: eso explica su comportamiento curioso (¿se fijaron que nos enfrenta siempre la misma cara?) con varias irregularidades. Vale la pena destacar que, de la misma forma que el Sol llega a posiciones extremas en su recorrido sobre el horizonte, la Luna sale y se pone en azimut distintos cada día, cada mes y pasa por puntos extremos que se producen cada 18.6 años. A pesar que se trata de una consecuencia básica, en el mundo moderno, nadie observa -ni siquiera conoce- este fenómeno sutil (¡excepto los arqueoastrónomos tratando de comprobar alineamientos lunares!), pués es un hecho remarquable que antiguas culturas lo hayan hecho. Este ejemplo es una clara demostración que el cielo tenía mucho más valor para los habitantes de la Antiguedad.Los planetas son otros objetos de atención por su brillo. Sin embargo, a pesar que sus trayectorias se efectuan a lo largo de la línea de la eclíptica (el plano del sistema solar) sus movimientos relativos con el cielo estrellado y el Sol presentan ciclos diferentes, más dificil de predecir, o a veces complicados (caso de Marte). Venus es la excepción: por ser un gran planeta interior (entre el Sol y la Tierra), no solamente llega a ser muy brilante pero se desplaza ciclicamente (como un pendulo) de cada lado del Sol. Se observa justo después del atardecer o justo antes del amanecer. Hasta el día de hoy, es conocida como "lucero" o la estrella de los pastores.
Para terminar esta lista, que no pretende ser exhaustiva, debemos considerar las estrellas y la Vía Láctea. A la escala de una vida humana, podemos considerar las estrellas como fijas relativo al Sol. La consecuencia de la traslación terrestre es que observamos un cambio aproximado de 1º por día de la posición de las estrellas en el cielo. Este "deslizamiento" de las estrellas nos permite apreciar distintas constelaciones a lo largo del año. También significa que cada estrella tiene fechas claves cuando aparecen (o desaparecen) en el horizonte por primera vez después de la puesta (antes de la salida) del sol, cuando el cielo empieza a oscurecer. Estos eventos se llaman salida y puesta heliacales y también tienen un valor significativo para las antiguas culturales cuando se trata de estrellas, o grupos de estrellas (por ejemplo las Pleiades) brillantes. Las constelaciones son formas imaginarias dibujadas entre las estrellas para ayudar a ubicarlas. En la prehistoria, este juego servía también para venerar animales u objetos sagrados. La Vía Láctea es la banda blanca (¿nunca la han visto? ¡entonces, es tiempo de salir de su ciudad!) que cruza todo el cielo, muy visible en el invierno austral. Esta zona se ve blanca simplemente porque contiene más estrellas: estamos viendo nuestra propia galaxia (que tiene forma de un gran disco) por el costado. En esta banda blanca, se aprecian manchas negras que son regiones de la galaxias o sea pobres en estrellas o sea que contienen "polvos" que oscurecen la luz de las estrellas
26. Los antiguos pueblos de Sud América reconocían constelaciones brillantes (formadas por estrellas) y también oscuras (formadas por estas zonas negras).
2.2. Regular las actividades humanas
A medida que los seres humanos formaban grupos más grandes y organizados, numerosas eran las actividades que justicaban medir el tiempo: celebraciones civiles y religiosas, viajes, inicio de guerras, predicciones de eventos,.... De hecho, medir el tiempo debe haber sido una de las claves para empezar el desarrollo de actividades básicas: cuando tener hijos para asegurar que sobrevivan, cuando plantar semillas para mejorar las colectas y nutrir a más gente, cuando empezar una migración,… Estos ciclos básicos se relacionaban directamente con el Sol, el calor que entrega y el clima que ocasiona (estaciones frias, secas,….). En el fondo, ¡astronomía y meteorología eran intimamente ligadas! Las otras actividades más "intelectuales" podían utilizar otros cuerpos celestes, más sutiles, como reloj: en este caso, hay que recordar que la astronomía y la astrología eran intimamente ligadas.
2.3. Mitos, ritos, objetos y espacios sagrados
Este tema es tan importante para las culturas antiguas que llega a ser una verdadera disciplina de caracter antropólogico. En pocas líneas, queremos recordar algunos elementos ligados a las ceremonias rituales y a conceptos sagrados.
2.4. Breve prehistoria de América2,13,29,38,39,44,45,47,48,51,52,54,56
A menudo, se considera que la historia de Chile (y de otros paises de Sud América) empezó con la llegada de los Españoles y la escritura. Todo lo que sucedió antes puede ser calificado de prehistoria (es decir la parte de la historia que usa objetos como cerámicas, piedras y símbolos para descifrar el pasado en vez de documentos escritos). Tenemos pocas evidencias de estos tiempos antiguos y mucha investigación en terreno es necesaria para, de a poco, juntar elementos que permiten elaborar teorias. A pesar que existen (o existieron) distintas clasificaciones, la prehistoria Amerícana se descompone comunmente hoy en 4 fases succesivas: Paleoindio, Arcaico, Formativo y Clásico. Existen también diferencias entre las zonas geográficas. El sur de Chile ha conocido una evolución bastante independiente que culminó con el desarrollo del pueblo Araucano. En general, para el Centro y Norte de Chile, se habla de:
2.4.1. Período Paleoindio: desde Asia, por el estrecho de Beringia, llegaron a América grupos de cazadores de animales grandes, durante la última glaciación hace más de 20000 años (el nivel de los oceanos era probablemente del orden de 100 metros inferior al de hoy, lo que hizo emerger muchas tierras). Estas oleadas migrantes recorrieron el continente de norte a sur. Esta etapa terminó al final de la Edad de los Hielos, alrededor de 8000 años antes de Cristo (AC). Hay evidencias de asentamientos humanos en Chile con fechas de 9000 AC (cueva de Fell en Patagonia), 11000 AC (Monte Verde) y 12000 AC (Quereo).
2.4.2. Período Arcaico: las condiciones climáticas más favorables ayudaron al desarrollo de comunidades a través de invenciones tecnológicas como armas para cazar y técnicas para incorporar vegetales en su alimentación y luego reproducirlos, es decir cultivarlos. Aprendiendo gracias a un proceso de experimentación a satisfacer sus nuevas necesidades, el hombre cazador-recolector se convertió en un agricultor-productor de alimentos (se descubrió existencia de maiz hacia 6000 AC en la región de Tarapaca). La sociedad nómada llegó a ser sedentaria y los grupos humanos crecieron, creando tiempo para inventar nuevas tecnologias como fabricación de cerámicas y textiles (hacia los años 3000 AC).
2.4.3. Período Formativo: se inicia una diferenciación cultural entre las distintas zonas geográficas. Algunas partes (Mesoamérica, Andes Centrales) conocen el desarrollo sólido de un progreso social mientras que otras áreas (sur Andina, amazónica, Caribe, Norte América,…) presentan niveles culturales de menor desarrollo. Los Olmecas y Chavín son las dos culturas que lideraron este progreso, elaborando adelantos sociales que resultaron en una estratificación social, la aparición de una clase dirigente y sistemas de control político, religioso y económico. En Mesoamérica, nació un sistema de escritura con ideogramas y un calendario para medir el tiempo al observar los ciclos naturales. Las fuerzas de trabajo organizadas por los gobernantes levantaron obras arquitectónicas cada vez más majestuosas: centros ceremoniales y aldeas poblacionales alrededor.
2.4.4. Período Clásico: en Mesoamérica, el perfectionamiento de la escritura en códices, de ciencias astronómica y matemática, de principios filosóficos y religiosos, propagados en toda el área, contribuyen a lo llamado desarrollo cultural clásico. Teotihuacan (Mexico) fue tal vez la ciudad de mayor influencia. Factores diversos conducen estos núcleos de civilización a enfrentar crisis, dejando acceso a grupos guerreros que reestructuran el paisaje étnico (tales como los Toltecas y luego los Aztecas). El Yucatan fue sed de la cultura Maya que, desde los años 800 después de Cristo (DC), logró un período de apogeo. Gigantes centros civiles y ceremoniales fueron construidos, incluyendo trabajos ornamentales muy elaborados. Hacia los años 1200 DC, la cultura Maya empezó a perder su prosperidad, aparentemente desintegrada por rebeldías militares.
Chile (al menos el norte del pais) fue parte de la zona de desarrollo identificada como los Andes centrales. La cultura Chavín
50 (norte de Perú) logró unificar muchos pueblos y formar un imperio. Al declinar, Chavin dejó lugar a nuevas culturas regionales (como los Mochicas o Nazca en la costa). En el altiplano, Tiwanaku50 (lago Titicaca en Bolivia) surge para formar la segunda etapa cultural de importancia de los Andes centrales, con un buen dominio agroganadero y dirigentes eficaces que toman control de muchas tierras. La desintegración de Tiwanaku hacia los años 1100 DC abre las puertas a nuevas culturas regionales. Entre ellas, son los Incas que, fundando capital en Cuzco (1200 DC), consolidan el mayor control político de la región andina. Gracias a obras de redes camineras y una organización política, económica y religiosa muy solida, el Inca Pachacutec Yupanqui (1438-1471) fue responsable del proceso guerrero de expansión territorial, formando un imperio enorme (desde el sur de Colombia al centro de Chile). La entrada de los Incas al territorio actual de Chile se realizó en 1470. En 1536, llegaba Diego de Almagro, y la irrupción e imposición de una cultura diferente inició la época llamada histórica.
2.4.5. Sur de Chile: los pueblos Araucanos de desarrollaron desde el sur del Rio Maule hasta a Tierra del fuego. Los Mapuches, pueblo formado por antiguas poblaciones de cazadores y agroalfareros en la región de los lagos, fueron conquistados oficialmente por los Españoles sólo en los años 1840. Otros grupos como los Pehuenches y los Tehuelches ocuparon zonas más al sur (Patagonia), practicando bastante pesca con embarcaciones y harpones sofisticados.
2.4.6. La isla de Pascua: parte del territorio nacional, la Isla de Pascua tiene obviamente una historia propia por su ubicación. No se sabe todavía con certeza desde donde llegaron los primeros nativos de la isla (¿desde tierras amerícanas o asiáticas?). El desarrollo del pueblo Rapa Nui se resume de la siguiente manera: período inicial desde AC 300, período de desarrollo Ahu moai hasta AC 1000, período de decadencia hasta AC 1500, periodo Histórico hasta 1722.
En el extremo de la isla, llamado Orongo, se encuentran numerosos petroglifos representandos símbolos y personajes míticos (hombre con alas), signos del cielo (estrellas, cometas), piedras de tacitas orientadas en fechas claves. La mayoria de los ahu y moais se ubican cerca de las costas y enfrentan el mar. Sin embargo, algunas construcciones al interior de la isla presentan características de tipo astronómico y podrían haber servido de calendarios
35,36,37. Vale la pena señalar que, entre el año 662 y 762, ocurrieron 5 eclipses de Sol (total o anular) en la isla o su proximidad inmediata, hecho rarísimo34 que, por el probable temor generado, podrían haber incentivado los Rapa Nui observar el cielo con más cuidado.
3. EJEMPLOS DE REPRESENTACIONES ARQUEOASTRONOMICAS
El objetivo de este capítulo es más bien dar una lista de sitios
60 en los cuales se han encontrado ejemplos arqueoastronómicos, especialmente en América. La bibliografía bastante larga permitirá a los interesados profundizar el analisis de estos lugares.
3.1. Ciudades
64Partiendo de una escala grande, podemos presentar ciudades completas cuyo trazo urbano tiene una marca sagrada. Teotihuacan en Mexico, la ciudad donde el tiempo comenzó de acuerdo a los Aztecas, tiene sus ejes orientados con el Sol, las Pleiades (cuya salida zodiacal coincide con el paso cenital del Sol) y cerros circundantes. La forma de puma del contorno original de la ciudad de Cuzco, descrito por los Españoles, y reproducida a una escala menor en un púcara incaico chileno, la forma de ciudad maiz del valle de Ollantaytambo
17,11 (Peru), la forma de llama de la ciudadela de esta misma localidad17,11, la forma de puma del sitio preincaico de Paramonga (Peru), indican todas una dimensión mágica-religiosa en la arquitectura antigua. Estos sitios presentan alineamientos astronómicos hechos a próposito.A una escala aún más grande, en la planicie Peruana de Nazca, las grandes figuras enigmáticas tomaron un sentido en 1995 cuando se identificaron con grupos de estrellas saliendo en el eje del geóglifo.
3.2. Construcciones/Edificios/Observatorios
Los antiguos edificios
9 vinculados con un tipo de observación astronómica son numerosos en todo el mundo. Las construcciones megalíticas comunes en las islas británicas y parte de Europa, por su forma muy particular (no es de tipo habitacional pero obviamente ceremonial) fueron el punto de partida de la investigación moderna en arqueoastronomía. Stonehenge, Carnac et Newgrange (una tumba de 4000 AC alineada con el solsticio) son famosos lugares turísticos. Es interesante ver como en Stonehenge6, cuya construcción se realizó entre 3000 AC y 1000 AC años por períodos succesivos, la geometría del lugar evolucionó hacia tener una gran cantidad de piedras levantadas que podrían haber servido de marcadores de fenómenos más complejos como la predicción de los eclipses.En América del Norte, uno de los diseños favoritos de las comunidades indígenas, fue el geóglifo (en este caso, técnica de piedras blancas amontonadas en suelo oscuro) en forma de rueda : un círculo con líneas radiales al interior. Llamadas ruedas medicinales, porque probablemente construidas por el hombre-medicina (chaman) del pueblo, parecen ser lugares para atraer espiritus del cielo hacia la Tierra. El caso particular de la rueda de Big Horn (Wyoming) tiene mayor interés porque, durante los únicos 2 meses del años que no están cubiertos por nieve, varios rayos del diseño apuntan hacia la salida heliacal de estrellas (Aldebaran, Rigel y Sirius) importantes en la cosmología actual de estos pueblos indios.
En el Yucatan
4,20, una gran mayoría de las ciudades mayas tienen al menos un edificio con alineamineto celeste. Chichen Itza (pirámide de Kukulcan y El Castillo), Uxmal (palacio del Gobernador), Xochicalco (cueva para marcar el paso cenital), Uaxactun (Guatemala) y Copan (la estela 12), son lugares muy conocidos. En otras partes del mundo vale la pena descatar la antigua ciudad de Petra (Jordania), monumentos ya estudiados en las Islas Canarias, India y China.En los Andes, Tiwanaku
27,28 (alineamiento con los solsticios, además de su famoso Puerta del Sol cuya interpretación podría ser calendárica), Sillustani (calendarios lunar y solar), Cuzco8,15 (pilares marcando fechas solares y Coricancha alineada con las Pleiades), el sistema de ceques alrededor de Cuzco, Machu Picchu14,16,49 (Torreón alineado con solsticio y las Pleiades), la Isla del Sol7 (antiguo centro de peregrinación con sus pilares solares recien descubiertos), la horka del Inka53,…, son sitios donde las evidencias arqueoastronómicas son acceptadas por la casi totalidad de los científicos. Carlos Milla, arquitecto peruano, propone muchas teorias de conocimiento científico en los Andes41,46: todavía faltan evidencias fuertes pero estas ideas originales abren la puerta a muchos estudios para confirmar. Ya sabemos que una piedra con una forma natural particular (un animal por ejemplo) puede haber sido un lugar ceremonial y "pretexto" para hacer observación y vincularse con el cosmos.En Chile, lugares como el púcara de Chena
10,12,57,63 (diseñado según las trayectorias del sol), el púcara de Lasana22 (pieza ceremonial con ventanas indicando fechas claves) y el valle de Illapel (escala de tipo megalítico orientada hacia el solsticio) son algunos testimonios dejados por antiguos observadores del cielo. De la misma manera que se realizan excavaciones para buscar evidencias antropológicas, existe la necesidad de llevar a cabo mediciones de alineamientos para buscar evidencias de cultura astronómica y ceremonial en muchos otros sitios.
3.3. Grafismo
En esta categoría, entran piezas fabricadas, esculpidas o dibujadas por el Hombre prehistórico. Algunos investigadores
21,67 encontraron cerámicas con diseños calendáricos, estatuas (monólito Ponce en Tiwanaku con hieroglifos -todavía no se descifran- posiblemente explicando fenómenos astronómicos como los eclipses), instrumentos de observación (teodólitos primitivos y los "espejos" de agua de Tiwanaku). El otro gran enfoque en la investigación es el arte rupestre. Los petroglifos63 han despertado mucho interés3. La acción de dibujar se inicia con la necesidad de representar algo visto o imaginado para recordarlo o mostrarlo, incluso ofrecerlo, a otras personas (o espíritus). Lo visto puede obviamente ser algo real en base a una observación directa o indirecta, o algo irreal, fruta de la imaginación o de una halucinación provocada. El arte chámanico y el uso de plantas "medicinales" son técnicas todavía en uso y, además de ser eficientes medicalmente hablando, permiten a los científicos atrevidos meterse en una situación similar a las vividas por algunos autores del arte petroglífico. Es una área de investigación muy potente y muy desconocida.Esta comprobado que en muchos sitios de petroglifos, loas piedras grabadas están orientadas de preferencia hacia el Sol, pero con una hora del día privilegiada para observarlos por efecto de sombra en lo grabado. Pueden ser razones prácticas. Más seguramente, explican una relación con el Sol. Esta observación del Sol, para saber donde dibujar, implica muy seguramente el conocimiento de los cambios diarios de su trayectoria lo que nos lleva a entender porque conocían las fechas claves.
3.4. ¿Representaciones por descubrir?
Existen unos fenomenos celestes de gran importancia visual porque son brillantes, espectaculares y escasos. Todo tipo de cultura debe haberlos observado y, probalemente, plasmado en su arte. Estamos hablando de los eclipses solares y lunares, los cometas y las supernovaes.
El eclipse solar representa generalmente el fin del mundo. En el altiplano de los Andes, los pueblos temen este momento y crean ruido para cazar a los espíritus malos que atacan al Sol. Varias fuentes, como el Canon de Opolzer, calculan el paso de todos los eclipses desde miles de años atras. En los sitios arqueológicos ubicados en las franjas de totalidad, podrían haber ilustraciones de este fenómeno, de acuerdo al simbolismo asociado.
Los grandes cometas son objetos muy llamativos por el tamaño que puede alcanzar la cola (varias decenas de grados). Quedan generalmente visibles varias semanas o meses. El período de los cometas era a veces conocido (los Chinos observaban el cometa Halley desde más de mil años). En un registro similar, señalamos las supernovas, estas estrellas que llegan a ser muy brillantes después de explotar al fin de su vida. La famosa supernova de la constelación del Tauro (nebulosa de la jaiba) de 1054 fue observada y registrada por varias culturas (los Chinos y los Indios del Sur de Estados Unidos aparentemente). Al aparecer de repente en el cielo en forma muy brillante y luego desaparecer, tal estrella puede ser interpretada como un mensajero.
Finalmente, queremos mencionar algunos ejemplos de constelaciones amerícanas. Los Incas veían en la Vía Láctea un rio celeste, complementando el ciclo de las aguas en la Tierra. Las partes oscuras tienen formas que ellos atribuian a la llama (cuyo ojos son las estrellas muy brillantes Alpha y Beta Centauro) y su llamita, a un zorro, a una serpiente,… En la Patagonia, los Aonikenk veían en la Vía Láctea el paso del ñandú (avestruz), la cruz del sur indicaba una dirección y las Nubes de Magallanes eran los nidos de los animales. El Museo de Concepción tiene muestras de mantas con símbolos de cruz cuadrada, llamada "huanglen" (estrellas) por los Mapuches. ¿Serán imagenes del cielo? En el valle del Encanto
10bis y en la isla de Pascua, existen ejemplos de piedras de tacitas que tienen una semejancia muy fuerte con grupos estelares10bis. Hay que seguir estudiando esta posibilidad a una escala mayor pero la forma misma de las tacitas se asocia facilmente a estrellas. Además cuando la disposición geométrica de las tacitas, la proporción relativa de sus diámetros corresponde a lo visto en el cielo (separación angular entre estrellas y brillo), la interpretación toma mucho peso.
4. METODOLOGIAS DE INVESTIGACION
4.1. ¿Qué buscar?
Por todo lo descrito anteriormente, la gran atracción parece ser la búsqueda de construcciones antiguas: arquitecturas sagradas, alineamientos de edificios o rocas, que son las formas más grandes y llamativas de conocimiento astronómico. Con experiencia, uno puede identificar los lugares que pueden ser potenciales centros de observación (incluso a veces observatorios dedicados): son los espacios que presentan características naturales (juegos de sol y sombra, geología,…) o de ubicación (cumbre de un cerro, torre más alta de un sitio,…) que facilitan el establecimiento de una harmonía entre el Hombre y el cielo. A una escala mayor, a veces más difícil de reconocer porque puede parecer "demasiado" grande para nuestra forma de pensar moderna, están los alineaminentos con hitos naturales importantes como los cerros más altos en el horizonte y los rios. En varias oportunidades, los indigenas seleccionaron -o buscaron a próposito- lugares porque presentaban una forma natural conocida (piedra o perfil de cerro en forma de animal) o presentaban la coincidencia de estar alineado con varios elementos naturales claves, llegando a ser un campo de poder
17, un lugar donde las fuerzas supremas han juntado energía. Finalmente, uno puede también reconocer espacios asociados con ceremonias rituales, donde existen signos simbólicos en forma de altar, arte rupestre, piedras de tacitas, geóglifos,…Otros materiales y formas artísticas pueden haber servido para plasmar el cielo: los mismos petroglifos y piedras de tacitas muestran a veces alineamientos o simbología representando el cielo (mapa estelar por ejemplo), los tejidos y el arte alfarero (piezas de cerámica o metal) ocasionalmente representan objetos del cielo o sistemas calendáricos complejos y dificil de descifrar.
4.2. Fuentes bibliográficas
Como es de costumbre, un trabajo de caracter científico se inicia con un estudio bibliográfico, es decir todos los estudios previos hechos acerca de este tema. Libros y sobre todo publicaciones especializadas permiten tener una visión amplia del trabajo considerado, lo existente y lo que posiblemente se puede relacionar para establecer comparaciones. Bibliotecas de universidades y museos regionales son generalmente fuentes preciosas de información. El internet es otra base de datos importante, cada día más completa.
Además, en el caso de una cultura que desarolló escritura, o cuya historia fue escrita (ejemplo de los cronistas españoles escribiendo acerca de la vida de los Incas), es interesante revisar textos antiguos (fuentes históricas) en búsqueda de indices o explicaciones. Finalmente, las fuentes y las herramientas de la etnografía permiten brindar otro tipo de información, por ejemplo a través de entrevistas de "los sabios o los ancianos" de las comunidades rurales (el paq'o, el curandero, el chamán), que todavía conocen realidades del pasado, por tradición oral. Sin embargo, estas técnicas pueden ser excesivamente dificiles porque estos conocimientos con valores religiosos tienen su confidencialidad y el transcurso de los años puede haber deformado la realidad del pasado.
4.3. Fuentes arqueológicas
Una vez determinado la zona geográfica o cultura de investigación, el paso lógico corresponde a buscar información compilada por los arqueológos. Partiendo con el interés para una zona geográfica específica, vale la pena investigar la(s) cultura(s) habitante(s) del lugar, la expansión territorial que tuvieron y las grandes caraterísticas conocidas de su desarrollo. En forma similar, al decidir de estudiar la arqueoastronomía de tal cultura, vale la pena hacer un trabajo de preparación para conocer todos los sitios donde se encontraron vestigios. En el futuro, este material será fuente casi indispensable para comparar sitios, buscar elementos que se reproducen, es decir aprovechar los métodos estadísticos.
Las fuentes arqueológicas tienen varios formatos: los que más nos interesan son las descripciones de sitios y los eventuales mapas de levantamiento topográfico. Sin embargo, el investigador arqueoastronómico debe ser prudente en su análisis, sobre todo cuando busca alineamientos: interpretar líneas en un papel puede conducir a conclusiones falsas y, vice-versa, hay detalles de orientación que no se registran (o se registran con precisión insuficiente) en los mapas. A primera vista, examinar un plano indica la complejidad del lugar y el potencial que puede tener. Repetimos que 2 puntos forman una línea (!) así que las combinaciones son multiples: es tanto una ventaja (hay material para trabajar) como un inconveniente (es demorroso y a veces dificil de diferenciar un alineamiento intencional de una coincidencia).
4.4. Investigación en terreno
Ya mencionamos que la visita en terreno del sitio estudiado es la parte fundamental. No solamente una visita, pero gran cantidad de tiempo dedicado a recorrer el lugar, a distintas horas del día y de la noche, a distintas fechas del año (especialmente las fechas a priori claves como los solticios), observarlo desde todos sus ángulos, hacer mediciones, volver después de algun tiempo para tener una vista nueva. En terreno, se busca lo que podría tener una connección con el cielo, se miden los parámetros, se documenta fotograficamente y por escrito las características del lugar. En muchos casos, los lugares de investigación están retirados o quedan a cierta distancia de viaje, así que los registros fotográficos y topográficos tomados en terreno permiten seguir investigando en casa. ¡Hasta sacar diapositivas y proyectarlas nos permitió descubrir cosas que no habiamos visto en terreno!
El método que empleamos generalmente es el siguiente: durante la primera visita, damos espacio a la entretención, es decir que debe ser un paseo agradable para impregnarse del lugar, de su magía o encanto (¿se trata de un lugar ritual y sagrado, verdad?). Parece ser un detalle inutil pero nos dimos cuenta de su importancia. La primera impresión siempre prevale y muy a menudo, una investigación seria va a requerir decenas de visitas succesivas.
Ocupamos brújulas para medir en forma "grosera" (+/- 2°) los posibles alineamientos. Cuando una dirección llama la atención porque coincide con una orientación clave, preparamos otra visita con más material, especialmente un teodólito. Este instrumento nos permite varias técnicas:
El GPS (Global Positionning System), sistema de ubicación muy preciso por intermedio de una red de satelites, nos sirve ocasionalmente para conocer la ubicación geográfica exacta del lugar (latitud y longitud). No hemos intentado hacer triangulación con GPS. En algunos casos, se podría justificar (¿alineamientos alejados en 3 dimensiones?).
4.5. Clasificación de arte rupestre
18Presentamos una pauta para el diseño de una guía de clasificación de arte rupestre en terreno. La siguiente lista repertoria los datos básicos necesarios en aplicación a la astronomía:
4.6. Reducción de datos
El paso siguiente es introducir los datos del lugar en un programa computacional de planetario virtual, elegir la fecha que corresponde al desarrollo cultural estimado del lugar y comprobar algún alineamiento. Estos programas permiten hacer muchas simulaciones en forma simplísima, variando la hora, el día o la región del cielo observada. Si uno puede (¡y debe!) preparar cartas solares (figura 1) del lugar de investigación antes de llegar a terreno, es más complicado llevar datos para otros cuerpos celestes como la Luna , los planetas o las estrellas, pués se hacen por computador en casa.
Son varios los fenómenos
55 que uno debe tomar en consideración (en el programa) para evaluar el azimut de salida o de puesta de un astro en la realidad :
4.6.1. Precesión: la precesión del eje de la Tierra causa un movimiento de los polos celestes y de ecuador celeste en el fondo estrellado. El ecuador celeste también se mueve relativamente a la eclíptica, lo que causa un movimiento del punto de equinoccio vernal desde una constelación del zodíaco a la siguiente, haciendo una vuelta completa en 26000 años. Si las estrellas se mueven relativamente a los polos y al punto del equinoccio, entonces sus coordenadas ecuatoriales cambian en el tiempo. Un cambio en la declinación produce un cambio el el azimut de salida y puesta del astro. Este cambio se nota al observar, por ejemplo, la salida heliacal de una estrella y el orden de magnitud de este cambio es de 1 día por año calendario y por vida humana (tipicamente 70 años).
4.6.2. Refracción atmósférica: la figura 2 ilustra el efecto de la refracción. Observar un astro al horizonte significa ver luz que acaba de atravesar mucho más espesor de atmósfera que cuando el astro está en el cenit. Además de absorbar luz, este espesor de atmósfera produce una desviación de los rayos luminosos y el astro se ve más arriba que su posición real. La refracción (esta desviación hacia arriba) es del orden de: 7' para un astro a 15° del horizonte, 12' a 10°, 17' a 5° y 35' a 0°. Recordamos que el diámetro aparente del Sol (y de al Luna) es de 30' (0.5°). Entonces, cuando vemos la parte inferior del disco solar tocar el horizonte, en realidad el sol acaba de ponerse, es decir que está fisicamente ubicado justo debajo del horizonte. Todavía lo vemos porque sus rayos de luz están desviados.
Cual es la consecuencia en cuanto al azimut de puesta (salida) del astro? La trayectoria C-B-A representa el recorrido real del sol. Nosotros observamos la trayectoria C1-B1-A1-P que es curva ya que la refracción aumenta a medida que el astro se acerca del horizonte. En el hemisferio sur, el cambio de azimut se produce hacia el sur para astros que salen o se ponen. Este cambio de azimut (P-A) aumenta con la latidud: a una latidud de 20° es de 12', a 50° da latidud es de casi 1º! En los horizontes norte y sur, los astros salen y se ponen con una trayectoria más tangente al horizonte y esta modelización ya no es válida.
4.6.3. Extincción atmosférica: el espesor de aire atmosférico atravesado por la luz cerca del horizonte es mayor que cuando está cerca del cenit. Eso causa absorción (extincción) de la radiación luminosa. Como regla general, el último punto en que se puede observar un astro se ubica a X grados del horizonte (plano = 0º) donde X es la magnitud del astro. Por ejempo, Sirius (mag -1.4) se ve hasta la línea de horizonte, mientras que la estrella principal de las Pleiades (mag 2.9) desvanece cuando llega a 3° del horizonte (en caso que está poniéndose). La extincción causa un cambio apreciable de azimut de puesta/salida cuando la magnitud del astro es superior a 2. En el caso de las Pleiades observadas a una latitud media, este cambio es de 3°.
4.6.4. Correcciones debidas a la altura del horizonte local: la figura 3 representa las correcciones a efectuar. Un horizonte elevado (más que 0° = nivel del mar) causa un cambio de azimut hacia el norte (en el hemisferio sur) para un astro que sale o se pone. Un horizonte más bajo que 0º produce un cambio contrario (hacia el sur). El efecto aumenta a latitud elevada y para astros (saliendo o poniéndose) en horizontes cercanos a las direcciones sur y norte. El cambio causado por la altura del horizonte es contrario al de la refracción, pues a veces estos 2 efectos se cancelan.
4.6.5. Referencias para puesta/salida heliacal: un astro en el horizonte de la puesta del sol, llega a ser visible (depende de su magnitud) cuando el sol está a una altura de: mag 1 à -10°, mag 2 à -14°, mag 3 à -17°. Los crepúsculos civiles, naúticos y astronómicos corresponden a una altura del Sol de –6°, -12° y –18° respectivamente.
4.7. Interpretaciones
Partiendo con un alineamiento o una cerámica, idealmente uno sueña lograr reconstituir la cosmovisión del pueblo estudiado. El camino es largo y deja lugar a numerosos investigadores por varias decenas. Los analisis estadísticas en un mismo sitio, y comparando sitios de una misma región o de una misma cultura, pueden permitir llegar a conclusiones, incluso a veces descubrir características importante de un pueblo. Ultimamente, uno puede llegar a comparar varias culturas (las rutas de migración pueden haber transportado conocimientos también, a pesar que quedan a miles de kilometros o miles de años de diferencia) y varios continentes. Muchos símbolos (el Sol es el más comun) se encuentran en forma similar en todo el mundo. Las formas de arte descriptivas de una observación parecen ser universales: el Sol es un círculo con rayos para un niño de hoy en Chile o para un indígena de Siberia hace 2000 años.
Insistimos una última vez en que la mejor manera de comprobar un alineamiento es estar el día exacto, a la hora exacta, y observar con sus propios ojos (además de fotografiar o filmar para tener evidencias). En muchos casos, un trabajo nocturno se justifica para confirmar alineamientos con estrellas, debido a las fuentes naturales de "error" previamente descritas. Frente a la realidad, uno realiza mejor el valor de una obra astronómica, mezcla de ciencia, cultura y religión.
5. CONCLUSION
Intijalsu es el primer grupo oficial en Chile, y probablemente en Sud América, que se dedica a la investigación y la difusión de la arqueoastronomía. Esta iniciativa, que concretamos en forma de empresa con estatuto legal para permitirnos desarrollar proyectos con mayor amplitud, nace de la voluntad de entender los vestigios del pasado, protegerlos, rescatarlos y valorarlos. Mas allá que vestigios de piedras, se trata de reconocer los valores culturales e intelectuales que las culturas indígenas habían desarrollado y proteger los que todavía existen en el mundo. El patrimonio húmano, cultural y natural pertenece a todos. Debemos cuidarlo.
En nuestra opinión, un científico cumple su misión profesional sólo cuando logra traspasar su conocimiento a otros, y en muchos casos puede ser al público directamente. La mejor difusión es cuando la información llega al medio educacional. Eso vale para todas las disciplinas. La arqueoastronomía es un tema muy enriquecedor. Mesoamérica es una zona ya bastante estudiada pero quedan muchísimos lugares por investigar a lo largo de Sud América y su mítica cordillera de los Andes. La mejor forma de progresar será a través de colaboraciones entre varios grupos, no necesariamente de un mismo país. Aprovechamos esta oportunidad para anunciar que estamos preparando una propuesta para traer a La Serena en 2002 la Conferencia Internacional de astronomía cultural Oxford VII. Sería una buena recompensa para los que se lanzarán en la investigación arqueoastronómica después de asistir a este taller.
Referencias
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Notas:
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