por Xime
TRUNKS!!!!!
Un fuerte grito se escuchó en la Corporación Cápsula haciendo que todo retumbara. El dueño del nombre, que entrenaba con su padre cayó de bruces al escuchar a su madre.
Mier…- guardó silencio inmediatamente al recordar que estaba con su padre. Ya había tenido problemas por su vocabulario. Se sobó la cara y ordenó un poco su cabello y su ropa desordenada.
Será mejor que vayas inmediatamente. Ese tono de voz no es usual en tu madre – dijo Vegeta apagando la gravedad.
Sí, en seguida vuelvo, papá.
Hmm…ahora que lo pienso voy a hacer una pausa en el entrenamiento.
Ambos salieron de la cámara de gravedad y mientras Vegeta se dirigía a la cocina por un poco de agua, Trunks buscó el ki de su madre para ir hacia donde ella se encontraba, pero antes de que pudiera concentrarse otro grito le indicó el camino.
Trunks!!! Ven acá inmediatamente ¡¡Maldita sea!! ¡¡ES UNA ORDEN!! – gritó Bulma desde la habitación de su hijo.
Desde la cocina Vegeta también la escuchó.
"Esto el grave" – pensó – "Bulma no usa esas palabras todos los días"
¿Qué pasa, mamá? – preguntó tímidamente asomando sólo la mitad de su cuerpo por el umbral de la puerta.
Ven acá – ordenó mirándolo fulminantemente. Trunks se acercó a ella y Bulma le extendió un papel - ¿Quieres decirme qué significa esto? – preguntó más tranquila pero igual de molesta.
Trunks tomó el papel que le extendía su madre y leyó "Informe anual de calificaciones, Trunks Briefs"
¿Cómo lo encontraste?, quiero decir, eeeee…..
Ocurre que vine a tu cuarto a buscar la ropa sucia y al recoger todo este tiradero este papel llegó a mis manos – dijo calmadamente – Y ahora, quieres explicarme ¿por qué rayos te aparecen 3 materias reprobadas?
No lo sé mamá.
¿No sabes? Pues hasta donde tengo conocimiento a ti te estaba yendo excelente en la escuela, por eso te di permiso para muchas cosas, entre ellas que pasaras más tiempo entrenando con tu padre – Trunks bajó la cabeza - No has estado estudiando ¿verdad? – preguntó molesta y golpeando rítmicamente el piso con uno de sus pies mientras sus manos permanecían en sus caderas.
No he tenido tiempo – contestó imitando la excusa que siempre usaba su padre.
¿Tiempo? Ja! No me digas – ahora cruzó sus brazos - ¿Y el tiempo que entrenas, juegas con Goten y estás en la computadora?
Pero…
Nada de peros jovencito. En el informe dice que hay un examen recuperativo opcional que vas a presentar y en el que vas a aprobar tus materias – Trunks abrió los ojos sorprendido – Sí, lo que oíste.
Pero mamá, el examen sólo vale el 30 % de la calificación final, es casi imposible que apruebe con las calificaciones que tengo.
¡¡¡¡Me importa un cuerno!!!! Los vas a aprobar aunque tengas que estudiar día y noche para eso – gritó. Luego agregó más tranquila – Escucha Trunks…eres como mi hijo.
Soy tu hijo – contestó sin entender.
¡Exacto! ¡Y soporté 8 horas de trabajo de parto para traerte a este mundo, así que lo mínimo que merezco como madre es que a mi hijo le vaya bien en la escuela! – volvió a gritar. En eso apareció Vegeta.
¿Qué pasa? ¿Por qué tanto escándalo?
Sucede que tu hijito reprobó 3 materias en la escuela – Vegeta guardó silencio un momento y luego agregó un tranquilo.
¿Y? – Bulma abrió los ojos.
¿Cómo ¿Y?? Prácticamente va a tener que repetir el año completo y tu dices ¿Y?
Que lo repita. Un año no es mucho.
Es muy fácil ¿verdad? Pues a tu hijo le estoy tratando de inculcar la palabra responsabilidad y al paso que va no lo va a entender nunca.
¿No estarás exagerando?
No!!! Y si no vas a ayudar en esto mejor no te metas.
Mamá – intervino el pequeño.
Silencio, Trunks!! – gritó Bulma.
¿Quieres dejar de gritar? – dijo Vegeta.
NO!! Ya me harté de esto. Trunks, no vas a entrenar más hasta que pases los exámenes.
¿Qué? – exclamaron Vegeta y Trunks al unísono.
Lo que oyeron.
Oye Bulma, no estoy de acuerdo – dijo Vegeta cruzándose de brazos.
Oh! – fingió tristeza y luego cambió su expresión a enfado – pues no me importa.
Soy su padre y tengo derecho a opinar – ya empezaba a molestarse.
En este caso tu opinión no cuenta.
Claro que sí
NO!
Oigan – Trunks intentó intervenir nuevamente.
¡¡Silencio, Trunks!! – gritaron Bulma y Vegeta.
Bien! Ya está dicha la última palabra. Hasta que pases los exámenes no harás nada, sólo estudiar y estudiar. Y en el determinado caso que te quede algún tiempo libre, te pones a estudiar.
¡Momento! – gritó Vegeta – ahora vamos a hablar tú y yo – dijo jalándola de un brazo fuera de la habitación de Trunks y cerrando la puerta.
En el pasillo…
¿También quieres guerra, Vegeta?
No dejará de entrenar, todo menos eso.
De acuerdo. Él entrenará, pero el cerebro. Y tú le vas a ayudar.
¿Qué? – dijo abriendo los ojos.
Lo que oíste. Reprobó matemáticas y tú eres bueno con los números.
Pero eso no implica que…
Eres su padre y ya es hora de que le enseñes algo más que puñetazos y patadas. Sin nombrar las groserías.
No lo haré. Y no puedes obligarme.
¿No? Entonces puedes irte olvidando de tu helado de chocolate – Vegeta tardó un poco en reaccionar y luego se sorprendió.
Estás jugando sucio – dijo molesto – además yo no tengo nada que ver en esto.
Te advertí que no te metieras.
No lo harás.
Claro que sí – sonrió cínicamente – así que desde esta noche dormirás en la habitación de Trunks.
Espera un segundo. ¿Cuánto tiempo durará esto?
Hasta que apruebe los exámenes.
¿Y si no los aprueba?
Entonces durará hasta que los apruebe el próximo año – agregó entrando nuevamente a la habitación de su hijo.
¿Qué? ¿Un año? ¿No estarás exagerando? Un año es mucho tiempo – dijo siguiéndola.
Sí, mucho tiempo. Pero a ti no te importaba que repitiera el año. Eso les enseñará a valorar algunas cosas. Y si quieren ser felices nuevamente más les vale que aprovechen el tiempo que les queda antes de los exámenes – salió de la habitación.
A Vegeta le tomó unos cuantos momentos asimilar la situación en la que se encontraba y luego de tranquilizarse le preguntó a Trunks…
¿Cuánto queda para los exámenes? – Trunks le mostró 3 dedos de su mano derecha - ¿Tres meses?
No, papá. Tres días.
Queeeee!!!!! ¿Tengo que meterte en la cabezota todo lo que viste en el año en tres días?, Noooo!!! – Segundo grito del día que hacía retumbar la corporación cápsula.
***
Goten!!!!!!
El pequeño Son veía caricaturas con su padre y su hermano cuando el grito de su madre lo hizo saltar.
Problemas – dijo Gokú con una gotita en la cabeza.
Goten, ¿no hiciste tu cama hoy? – preguntó Gohan.
Claro que sí – alcanzó a responder el pequeño cuando Milk apareció en la sala.
Ahí estás. Espera que te atrape – dijo caminando hacia su hijo menor con no muy buenas intenciones. Goten se escondió tras su hermano y Gokú alcanzó a sujetarla – Suéltame, Gokú!!! – forcejeaba con él sin obtener resultados.
¿Cuál es el problema, Milk? – dijo sin alterarse.
¿Problema? ¡Éste es el problema! – dijo entregándole a Gokú un papel. Mientras con una mano sujetaba a su esposa de la cintura, mantenía en alto el papel.
"Informe anual de calificaciones, Son Goten", ¿Qué hay de malo con esto?
Lee más abajo – dijo al fin liberándose de él. Hubo un breve silencio en la sala.
No me digas que reprobaste alguna materia – le susurró Gohan a su hermanito.
Pues…
"Oh no! Por qué se me ocurre que me van a poner de profesor" – pensó Gohan no muy feliz.
Goten, ¿Reprobaste lenguaje, matemáticas y biología? – dijo Gokú terminando de leer y mirando a su hijo.
Lo siento mucho, papá – dijo Goten bajando la mirada.
¿No has estudiado?
Y cómo quieres que estudie si se la pasa jugando, entrenando o viendo televisión.
<Riiiiing>
Yo contesto – dijo Gohan acercándose al teléfono mientras Milk empezó a darle una de las reprimendas más grandes de su vida a Goten, y Gokú trataba de defenderlo– Hola? Videl!, habla más fuerte, no te escucho, ¿ruido?, ja ja ja, son mis papás. Tienen una diferencia de opinión. ¿Adelantaron la función? De acuerdo, voy para allá.
Gohan colgó el teléfono y sigilosamente salió de la casa mientras el resto de la familia seguía intercambiando opiniones.
Deberías haber aprobado al menos biología – lo regañaba Milk.
Es que es muy aburrido – se defendía el pequeño.
¿Verdad? – dijo Gokú dándole la razón a su hijo.
Basta!!!! Goten, vas a dar los exámenes recuperativos y los vas a aprobar.
Pero mamá…
No hay peros. Ambos dejarán de entrenar y se pondrán a estudiar.
¿Qué? – exclamó Gokú con cara de terror.
Lo que oíste, Gokú. Vas a ayudarle a estudiar.
Pero es muy aburrido.
No me importa. Puedes hacer lo que quieras pero si Goten no aprueba los exámenes puedes irte olvidando de tu entrenamiento nocturno – dijo saliendo de la sala.
Milk!, Espera! ¿No podrías reconsiderar eso?
No hasta que Goten apruebe – dijo cerrando la puerta de su habitación de una manera no muy suave.
Oye papá – dijo jalándolo del pantalón – No sabía que entrenabas de noche.
¿Eh? Ja ja ja – rió nerviosamente.
Día de estudio n° 1 "MATEMATICAS"
Vegeta y Trunks se habían levantado temprano como todos los días, sólo que su actividad había cambiado un poco.
Muy bien, Trunks. Empecemos con matemáticas – dijo "irradiando felicidad".
De acuerdo – el pequeño abrió su cuaderno y leyó el primer título que había anotado en él – "Operaciones básicas" – continuó leyendo la teoría de cómo se sumaba, restaba, multiplicaba y dividía.
Supongo que entendiste eso – dijo Vegeta que permanecía de brazos cruzados sentado en una silla frente a Trunks.
Claro.
Entonces resuelve los ejercicios del libro.
No estás participando mucho, papá.
Tú vas a presentar el examen, no yo. Si no entiendes algo me preguntas.
Está bien – dijo algo deprimido. Tardó unos cuantos minutos en resolver los ejercicios - ¡Listo!
Déjame ver – dijo tomando el cuaderno de Trunks y revisando cada ejercicio con la mirada. Todo iba bien hasta que llegó a las divisiones – Un momento…¿cómo que 30 dividido en 5 es 2?
¿Eh? – dijo Trunks acercándose un poco para ver el ejercicio.
Se supone que tienes que ver cuantas veces cabe el 5 en el 30.
¿Y?
¿Cómo ¿y?? Esto está mal resuelto.
Pero…5 sí cabe 2 veces en 30
Sí, pero…
¿Entonces?
"Maldita sea, paciencia" – se repetía mentalmente – Tienes que responder cuantas veces cabe exactamente el 5 en el 30, no tirar números al azar.
Aaaaa, entonces… - pensó con el lápiz en la boca – cabe 6 veces.
Así es. Así que basándome en lo que hiciste aquí todas las divisiones están malas. Revísalas.
Sí.
Momentos después
Terminé.
De acuerdo, déjame ver…sí, están bien "Que ejercicios tan simples, ¿Cómo reprobó matemáticas con esta clase de tonterías?" – pensaba.
Ahora nos toca geometría. Calcule el área de un cuadrado…
Todo iba relativamente bien.
Si me piden el diámetro de una circunferencia sólo tengo que dividir el radio en 2, ¡Que fácil! – dijo Trunks.
¿Qué vas a hacer? – preguntó Vegeta.
…dividir el radio en 2.
No, no, no.
¿Por qué?
Porque el radio es la mitad del diámetro – dijo empezando a desesperarse y golpeando la mesa.
Está bien, papá. No tienes que enfadarte – Vegeta respiró profundamente intentando calmarse.
Mira – dijo tomando una hoja y un lápiz y dibujando un círculo – el diámetro es la línea que va por la mitad de la circunferencia de un lado al otro. Y el radio es la mitad de esa línea – dijo dividiendo la línea que había dibujado primero - ¿Entiendes?
Sí, papá.
Bien – miró el reloj y notó que habían pasado 4 horas y media en ese cuarto – resuelve los ejercicios, vuelvo en seguida.
Ajá.
Necesitaba aire fresco y comer algo. Ya le había empezado a doler la cabeza.
"Glucosa, necesito glucosa" – repetía mentalmente mientras se dirigía a la cocina. Ahí encontró a Bulma que bebía un poco de té y comía galletas. Justo cuando iba a morder una, se la arrebató y se la comió.
Oye! – dijo Bulma.
¿Qué? – fingió inocencia.
¿Por qué hiciste eso?
Ahí hay muchas – dijo señalándole el plato.
Podrías haber sacado de ahí.
Lo hice para fastidiarte.
Que extraño en ti – dijo comiéndose otra galleta.
¿Hay alguna otra cosa dulce que pueda comer? – preguntó abriendo uno de los estantes de la cocina.
¿Dulce? A ti no te gustan los dulces.
Los necesito.
Mmm, hay pastel, galletas, chocolate y helado.
Y…¿helado de chocolate? – dijo mirándola de reojo.
No sé si que… - no terminó de responder cuando descubrió el verdadero significado de la pregunta – No, no hay y no habrá hasta que Trunks pase los exámenes – dijo levantándose y abriendo el refrigerador – así que por ahora confórmate con el de frutilla y el de vainilla – dijo entregándole los envases.
¡Qué carácter! – dijo Vegeta abriendo uno de los envases y tomando una cuchara empezó a comer helado.
¿Y cómo va el estudio? – preguntó mientras revisaba las últimas ventas de la compañía.
Mmm, podría ser peor.
¿Tan mal está?
Imagínate que según él 30 dividido en 5 era 2.
¿Qué? – dijo mirándolo sorprendida.
Supongo que la torpeza para las matemáticas la heredó de ti.
No es cierto! – se defendió.
Pues de mi no la heredó. Mmm, esto está muy bueno – dijo mientras cambiaba de envase.
¿Por qué la repentina necesidad de dulce?
Se gasta más glucosa explicando que aprendiendo.
Llévale algo a Trunks, también debe estar cansado.
Luego. No quiero que se distraiga – Bulma sonrió y se acercó a él que estaba de pie apoyado en el lavaplatos comiendo helado.
Me encanta que te preocupes por él – le dijo muy cerca del rostro y le apartó los brazos. Vegeta inmediatamente soltó la cuchara y el helado y la sujetó de las caderas. Bulma le rodeó la cintura con los brazos y cuando estaban a punto de besarse.
¡Hola muchachos! – ambos saltaron del susto y Bulma se apartó de Vegeta - ¿Interrumpo?
¿Tú qué crees, Kakarotto? – dijo fastidiado.
¿Eh?
¿Pasa algo, Gokú? – preguntó Bulma.
No, nada. Sólo quería hacerle algunas preguntas a Vegeta.
¿Preguntas? – dijo Bulma extrañada.
Sí, de álgebra – ambos lo miraron fijamente.
¿De qué? – preguntó Vegeta.
De álgebra.
¿Tú quieres aprender…álgebra? – preguntó Vegeta con una sonrisa irónica.
Sí, bueno, no. No es que quiera. Tengo que enseñarle a Goten para que pase un examen porque reprobó matemáticas y Gohan no puede enseñarle porque tiene cosas que hacer.
Ah! Ya me extrañaba – dijo Bulma.
Ja ja ja, a mí no me interesa el álgebra. No soy tan aburrido como Vegeta.
¿Qué dices? – dijo molesto - ¿y de dónde sacaste que yo sé álgebra?
¿Recuerdas la primera vez que peleamos? Cuando te pusiste a hablar de no sé qué cosas, de las ondas quién sabe qué y eso. Cuando hiciste la luna de mentiritas – Bulma volteó la cara para que Vegeta no la viera reírse, pero él igual lo notó – Escuché a Gohan hablar de esas mismas cosas y recién ahí vine a saber que era álgebra – Vegeta estaba a punto de estallar.
Eres un… - fue interrumpido por Bulma.
¿Y por qué no traes a Goten y estudian los 4? Vegeta también le está ayudando a Trunks con matemáticas – sugirió Bulma.
Bulma, espera un momento… - Vegeta trató de intervenir.
Genial, voy por Goten – y se teletransportó.
Esta vez te pasaste del límite. Me pones a estudiar con Trunks, no puedo entrenar, me dejas sin "mi" helado de chocolate y encima de todo me completas el plato con Kakarotto y su hijo.
Vamos, Vegeta. No es tan malo.
¡¡Que no es malo!!
Todo esfuerzo tiene su recompensa.
Ninguna recompensa vale todo el esfuerzo que voy a hacer.
¿No? – nuevamente se acercó a él y sujetándole el rostro con ambas manos lo besó. El beso no duró mucho tiempo pero fue intenso - ¿Y?
Bueno…tal vez.
Si necesitas cualquier cosa, estoy en el laboratorio.
Sí, escápate ahora, porque cuando Trunks apruebe te las verás conmigo.
Eso espero – dijo desde la puerta de la cocina y arrojándole un beso.
Vegeta se despabiló y luego de mojarse la cara en el lavaplatos se dirigió a la habitación de su hijo para continuar con el estudio. Cuando iba por el pasillo Gokú lo alcanzó.
Ya estamos aquí, Vegeta.
Muy bien, Kakarottto. Vamos a dejar algunas cosas claras desde el principio. Los mocosos van a estudiar, nada más. No habrá distracciones de ningún tipo – dijo sin dejar de caminar mientras Gokú iba junto a él y un poco más atrás iba Goten.
Si, de acuerdo. ¿Oíste, Goten? Tendrás que concentrarte mucho – dijo volteándose hacia su hijo.
Si, papá.
Ese es el problema de tu hijo, Kakarotto. La disciplina. Por suerte Trunks obedece todo lo que le ordeno. De hecho en este preciso momento debe estar resolviendo unos ejercicios que le dejé – dijo Vegeta y abrió la puerta de la habitación de Trunks que no estaba resolviendo los ejercicios precisamente, sino jugando un videojuego. La firme voz de Vegeta se escuchó por sobre la musiquita del juego – Apaga eso – A Trunks le aparecieron múltiples gotitas y obedeció la orden - ¡¡Que rayos estabas haciendo mocoso del demonio!! – gritó al borde de un ataque de histeria - ¡¡Se supone que te dejé resolviendo unos ejercicios, no jugando!!
Vegeta se lo toma muy en serio – murmuró Gokú pensando en voz alta.
Ya te oí, Kakarotto – volteó hacia él - ¡Ahora los quiero sentados y estudiando! – los niños obedecieron.
Si tu papá sigue así va a tener úlcera – le susurró Goten a su amigo.
Yo creo que ya la tiene. Últimamente anda más enojón que de costumbre – le respondió Trunks.
¡¡Silencio!! – Glup!
Bueno – dijo Gokú sentándose junto a su hijo - ¿qué les parece si empezamos con fracciones y decimales? – dijo leyendo y poniendo cara de "no entiendo".
No, papá, eso al último – le pidió Goten.
No, lo veremos ahora – respondió Gokú.
Todo transcurrió de manera casi normal hasta la hora del almuerzo.
Muchachos, el almuerzo está listo – dijo Bulma abriendo la puerta de la habitación.
¡¡Comida!! – gritaron Trunks y Goten y salieron corriendo. Bulma los siguió. Vegeta y Gokú suspiraron cada uno en su silla y también fueron hacia la cocina. Esa situación realmente los estaba agotando.
Cuando terminaron de almorzar se dirigían de nuevo a la habitación de Trunks, pero Vegeta no se veía muy contento. El almuerzo le había caído en el hígado.
Vamos, Vegeta. Cambia la cara o tendrás una mala digestión – le decía Gokú mientras avanzaban por el pasillo.
No tengo razón para estar feliz. Toda esta situación apesta.
Mmm…no me molesta tener que ayudarle a Goten, pero Milk se desquita conmigo como si yo fuera el culpable – se quejaba tristemente.
Y Bulma se desquita conmigo – murmuró Vegeta.
Ojalá que aprueben porque ya me quedé sin mi entrenamiento nocturno – dijo Gokú dando un gran suspiro.
Y yo sin mi helado de chocolate – suspiró Vegeta.
Analizaron mutuamente lo que había dicho el otro y comprendieron.
Lo siento – se dijeron.
Nuevamente se dispusieron a estudiar.
Bueno, el siguiente tema es…¡¡Álgebra!! – dijo Gokú muy entusiasmado y feliz. A los niños les apareció una gotita.
¿Qué le pasa a tu papá? – preguntó Trunks.
No lo sé. No sé qué le ve al álgebra.
La verdad es que mientras ustedes resolvían los ejercicios anteriores estuve adelantando un poco y me interesó bastante. Me gustan los misterios. No hay nada mejor que encontrar el valor de X – otra gotita.
¡Éjem! Empecemos – dijo Vegeta mirándolo de reojo y rogando para que lo que fuese que tuviera Gokú no fuera contagioso.
Los niños parecían entenderlo todo y los ejercicios les resultaban, pero…
Esperen un momento. En el ejercicio 7 a mí X me vale 275 – dijo Gokú mirando su hoja y rascándose la cabeza con el lápiz.
No, papá. Da 49 – le dijo Goten.
Déjenme ver – dijo Vegeta y tomando el libro resolvió el ejercicio – Háganlo de nuevo – les ordenó y todos obedecieron - ¿Y bien? A mí me dio 22 – dijo.
22 – dijo Goten.
22 – respondió Trunks.
¿178? – preguntó Gokú
¿Qué rayos hiciste, Kakarotto?
Mira – dijo acercándose a Vegeta y mostrándole lo que había hecho – A este lado hay 100X y a este lado hay 78X. Sólo las sumé.
Idiota, no cambiaste el signo de esto al pasarlo para acá – le explicaba.
¿Debe cambiar siempre?
Por supuesto que…un momento ¿Por qué te estoy explicando a ti? – dijo reaccionando - ¿qué resultado les dio? ¿Goten?
22
¿Trunks?
22
Bien, eso es todo – dijo Vegeta cerrando el libro.
Vamos, Vegeta. No seas egoísta. Comparte tus conocimientos conmigo – le dijo Gokú.
No quiero – respondió cruzándose de brazos.
Está bien. Pero recuerda que la casa no se barre una sola vez – dijo algo sentido.
Hum!
Día de estudio n° 2 "LENGUAJE"
Hoy veremos ortografía – les dijo Gokú – les voy a dictar varias palabras que deben escribir correctamente, ¿de acuerdo?
Ajá – dijeron los niños al unísono.
Entrevista, educación, taller, publicidad, conexión, vacaciones, barco, globo, clavo, natación.
Veamos – dijo Gokú y cada padre revisó las palabras de su hijo.
Bien, Goten – dijo Gokú – sólo que vacaciones es con "C", no con "S".
Si, papá. No se me olvidará.
Un momento, Kakarotto. Vacaciones es con "S"
No, con "C".
Veamos – dijo Gokú buscando la palabra en el diccionario – mira, es con "C".
Pues el diccionario está mal – respondió Vegeta.
¿Quieres decirme que millones de ejemplares de este diccionario están equivocados y tú tienes la razón?
Bueno…si.
Necesitas ayuda, Vegeta.
No fastidies – dijo cruzándose de brazos.
Trunks, déjame ver tu dictado – le dijo Gokú.
Sí, señor – dijo Trunks entregándole su cuaderno.
Educación no es con "H" – le dijo Gokú.
Claro que lleva "H" – saltó Vegeta.
No lleva.
Sí.
Vegeta…¿cómo escribes la palabra amor?
Así… - dijo escribiendo sobre un papel – "HAMOR" – Gokú al leerlo hizo un gesto de disgusto.
¡No! Es sin "H"
No me digas.
Sí te digo.
¿Cuál es el problema? – dijo Bulma entrando en la habitación al escuchar más ruido del habitual.
Que Vegeta escribe mmm… - Vegeta le tapó la boca.
Nada, no pasa nada – dijo forcejeando con Gokú que no pudo hablar pero le mostró el papel a Bulma que lo leyó.
¿Qué es esto? – dijo abriendo los ojos – Trunks, ¿tú escribiste esto?
No, mamá. Fue mi papá.
¿Qué? Vegeta, amor no se escribe con "H".
¿En serio? – dijo soltando a Gokú.
Y también escribe vacaciones con "S" – agregó Goten.
Vegeta, ¿no te enseñaron ortografía? – le preguntó Bulma.
Por supuesto que sí, pero nunca tuve que escribir nada. Además nuestra escritura no era como la terrícola. Era totalmente diferente.
Excusas, excusas – murmuró Gokú.
Cállate, Kakarotto.
Día de estudio n° 3 "BIOLOGÍA"
"Sistema respiratorio" – leyó Gokú que estaba muy a gusto con el papel de profesor, muy al contrario de Vegeta – Goten, dime las estructuras – dijo mirando el dibujo del libro atentamente.
Si, eee, nariz, laringe, bronquios, tráquea…
Tráquea y bronquios – lo corrigió Vegeta que también miraba el dibujo del libro.
Es cierto – respondió Goten – nariz, laringe, tráquea, bronquios y pulmones.
Trunks – preguntó Vegeta - ¿de qué están compuestos los pulmones?
Alveolos - respondió su hijo.
Bien.
Reinos de la naturaleza – preguntó Gokú.
Mineral, Vegetal, Animal - respondieron ambos pequeños.
Perfecto… - suspiró Vegeta – eso fue lo último. Terminamos – volteó a ver la hora (9:30 PM)
Todos dieron un gran suspiro. Cada uno empezó a recoger sus cosas y los Son partieron a su casa.
Vegeta y Trunks se quedaron solos en la habitación.
Trunks, mañana vas a aprobar los exámenes ¿verdad? – dijo amenazante.
Claro, papá – respondió algo asustado – nunca había estudiado tanto.
Más te vale. Recuerda que ahora no sólo tú estás en juego.
Casa de los Son
Goten, estudiaste mucho y me consta. Mañana sólo concéntrate y te irá bien, pero por lo que más quieras aprueba los exámenes – dijo lo último juntando sus manos y en tono de súplica.
Si, papá. Haré todo lo posible
Escuela de Goten y Trunks.
8:00 AM
Trunks, ve por esos exámenes y apruébalos – le ordenó Vegeta.
Goten, tú puedes – animó Gokú a su hijo.
Los pequeños entraron al salón y se cerró la puerta. Si los pequeños tenían un nudo en el estómago, sus padres no se quedaban atrás.
1 hora después los niños salieron del salón con 3 hojas cada uno y se las entregaron a sus padres con una gran sonrisa.
Aprobado, aprobado, aprobado – leyó Gokú pasando consecutivamente las hojas - ¡Muy bien, Goten! – dijo tomándolo en brazos.
Aprobado, aprobado, aprobado – leyó Vegeta – Bien hecho, Trunks – dijo revolviéndole el cabello – Bueno, creo que la pesadilla terminó. Es hora de ir a casa.
Así es – dijo Gokú.
Goten, mañana vienes a mi casa para que juguemos – dijo Trunks. Vegeta se aclaró la garganta para hacerse notar y Trunks comprendió perfectamente - …quiero decir…para que entrenemos.
¡Claro! - respondió Goten alegremente.
Adiós, Vegeta – se despidió Gokú. Vegeta hizo una seña de despedida
Casa de los Son
Milk! – la llamó Gokú desde la puerta.
¿Cómo les fue? – preguntó entrando a la sala.
Aprobó las tres materias – dijo Gokú mostrándole los exámenes.
Felicitaciones, Goten. ¿Ves que si te lo propones puedes hacerlo? – dijo abrazándolo – Puedes ver televisión.
Yupi!! – dijo encendiendo el televisor.
Milk se dirigió a la cocina y Gokú la siguió.
¿Sabes? Goten estudió mucho – dijo Gokú.
Lo sé – dijo volteándose y acercándose a él – Muchas gracias, Gokú – dijo en voz baja y lo besó brevemente.
No tienes que darme las gracias – dijo sonriendo.
CC
Mamá!, Mamá! – corrió hacia el laboratorio. Bulma estaba sentada frente a la computadora cuando Trunks entró con puerta y todo - ¡Aprobé los exámenes! – dijo entregándole las hojas. Bulma las vio y lo abrazó.
Felicitaciones, hijo. ¿Y a Goten cómo le fue?
También los aprobó.
Vaya, el estudio rindió frutos. ¿Qué te parece si este fin de semana los llevo al parque de diversiones como premio?
¿En serio? Genial! Muchas gracias, mamá.
De nada, Trunks. Ve a jugar.
Sii!! – salió corriendo del laboratorio igual como entró. En eso llegó Vegeta.
¿No hay nada para mí? – preguntó sonriendo sensualmente desde la puerta y apoyándose en el marco.
Bulma sonrió, se acercó a él y lo besó. Sin dejar de besarse entraron al laboratorio y aseguraron la puerta. Vegeta sujetando a Bulma de la cintura la sentó en uno de los mesones del laboratorio y se acomodó entre sus piernas. Bulma metió sus manos bajo su camiseta acariciándole el abdomen a lo que Vegeta respondió con un pequeño gemido y cuando él estaba a punto de meter sus manos debajo de la falda de Bulma…
<Toc, toc, toc>
Mamá!
Dejaron de besarse y Vegeta permaneció con los ojos cerrados.
Dime que no es verdad – le dijo a Bulma.
Sí, lo es – respondió ella.
¡Rayos!
Bulma se bajó del mesón y abrió la puerta.
¿Qué pasa, Trunks?
¿Puedo ir a la casa de Goten? Él y Gohan van a ir de pesca.
Claro, ve. Pero no vuelvas tarde.
No – dijo mientras corría por el pasillo.
Bueno, voy al centro comercial. Tengo que hacer las compras de la semana – le dijo a Vegeta mientras ambos salían del laboratorio.
Si, ve. Yo iré a entrenar para descargar un poco de toda la energía que tengo acumulada. Y luego voy a tomar una larga ducha fría – dijo irónicamente – Bulma rió – Y trae helado de chocolate porque a este paso, no vamos a poder hacerlo hasta el próximo año – dijo fastidiado.
Y hablando de eso, Vegeta. ¿Vamos a hacer el amor con "H" o sin "H"?
¿Qué importa? De todos modos lo vamos a hacer, no lo vamos a escribir.
Dime.
Mmm, sin "H".
Muy bien, cariño – lo besó brevemente y se dirigió a la puerta de la casa.
Princesa, no te olvides del helado.
No, príncipe. Te lo traeré. Aunque no será necesario – dijo guiñándole un ojo.
Esa era una de las cosas que le encantaba a Bulma. Estar sola con Vegeta. Él se comportaba de una forma tan espontánea que nadie lo reconocería. Bueno, de hecho nunca nadie creyó que Vegeta ayudó a Trunks a estudiar (A excepción de los testigos)