Una segunda oportunidad

por Kira

Capítulo 10: "La maldad acecha"

Trunks llegaría en el vuelo de las 4 de la tarde, Bulma fue a recogerlo al aeropuerto, por supuesto sola, se las ingenió para deshacerse de Hotaru, necesitaba hablar con Trunks sobre la fusión de ambas compañías y además estaba realmente preocupada por como podría reaccionar su hijo al conocer a Argos [¿Le causara la misma impresión que me causó a mí?... ] pensaba Bulma mientras conducía su auto, los Sakura los habían invitado a cenar para conocer a Trunks, pero ella se había negado bajo la excusa de que su hijo vendría cansado... a menos que Trunks cambiase de opinión; lo peor es que aún no olvidaba lo frío e indiferente que se había portado Argos con ella después que regreso de almorzar, le había pagado con la misma moneda; ella había deseado no regresar pero debía recoger su coche y hablar de ciertos detalles con Ukio; por otro lado se sentía mal por engañar a Hotaru [¿Porque tienes que ser tan bueno conmigo? Y "¿Porque estas cosas sólo me pasan a mí?", siempre me encuentro entre dos amores, ¡NO!, "dos amores no", lo que siente Hotaru por mí es amor pero Argos... entre él y yo sólo puede existir atracción, es sólo "deseo", él quizás cree que puede jugar conmigo y ser otra de sus conquistas pero no estoy dispuesta a cometer el mismo error dos veces, creí que podría vivir con un hombre que no me amaba y sólo me hice daño a mí misma, tengo derecho a rehacer mí vida y esta vez será diferente] pensaba mientras estacionaba el coche en el parqueo del aeropuerto. El vuelo llegó puntual, Trunks venía algo cansado(ya saben porque) pero se moría de curiosidad por conocer a los Sakura, así que acepto la invitación a cenar (pobre Bulma), Bulma le llamó a Ukio desde el carro para avisar que aceptaban la invitación a cenar, pasaron a la casa sólo para que Trunks se duchara y se cambiara de ropa (mas de alguna hubiera querido ayudarle ¿no?). Rumbo a casa de los Sakura, Trunks empezó a pedirle muchos detalles a su madre, sin embargo le noto algo distinta.

- Mamá - dijo suavemente el chico.

- Sí, hijo... ¿Qué pasa? - Dijo Bulma al sentir cambiar la actitud de Trunks.

- ¿Qué te pasa? Estás extraña, estos días que hablamos por teléfono también te sentí extraña, algo te perturba y no has querido decírmelo ¿Estas segura que todo esta bien? - preguntó Trunks.

- Bueno - Dijo Bulma, tratando de escoger las palabras adecuadas - Es que conocí a alguien y... se parece mucho a tu padre - terminó de decir casi en un murmullo.

- ¡Mamá! ¡Otra vez! - dijo el muchacho entre sorprendido y molesto, se paso la mano por los cabellos y añadió en tono de frustración - Hace mucho tiempo que no te pasaba algo así, ¡creí que ya lo habías superado!.

- Lo siento - murmuró Bulma. - No pude evitarlo, es más frustrante para mí, ¡se parecen mucho!, tendrías que verlo para saber como me siento, al fin y al cabo tu viste a tu padre hace sólo 3 años y yo tengo muchos años que no lo veo.

- Esta bien, lo acepto - dijo Trunks más calmado - quizás se parece a mi padre, estas muy perturbada, nunca te había visto así...... ¿En qué se parecen? ¿El cuerpo?, ¿La espalda? ¿El color de su piel?.

- ¡EN TODO!- gritó Bulma desesperada, trato de recobrar la compostura para no perder el control del coche y añadió - El color de su piel, su cuerpo, su estatura, el color de sus cabellos, su voz, ¡Por los dioses! ¡HASTA SUS OJOS SON LOS MISMOS!

- ¡¿Tanto se parecen?! - dijo Trunks incrédulo, Bulma sólo respondió afirmativamente con la cabeza y luego el chico dijo - Mamá ¿No estarás pensando que papá esta vivo? Sabes que es imposible, además yo podría sentir su Ki, me he fortalecido tanto que podría sentirlo en cualquier parte de este planeta.

- Lo sé - dijo Bulma y añadió - Me lo he estado repitiendo día a día, pero sí lo conocieras estarías igual que yo... de todos modos hoy vas a conocerlo... - Trunks se le quedó viendo y casi presintiendo la respuesta pregunto.

- Mamá... ¿Quién es?

- Es....... es Argos Sakura - contestó ella y volteó a ver a su hijo, Trunks se quedó boquiabierto, no podía creerlo, pero antes que pudiera preguntar otra cosa, hubo algo que distrajo su atención, Bulma observo a su hijo y detuvo el carro, el rostro del chico se había ensombrecido, esa mirada la conocía muy bien, algo malo estaba pasando...

Residencia de los Sakura, en ese mismo instante...

Argos estaba en su habitación observando por la ventana, tenía un remolino de ideas en la cabeza, la había visto con otro hombre y él sí la había besado, eso no se lo hubiera imaginado, aún no podía creerlo y se sentía como un completo estúpido después de lo ocurrido esa mañana, tuvo que preguntarle a su hermana los detalles de la relación de Bulma y Hotaru, para su mala suerte ella le había confirmado que lo único que sabía es que tenían una relación desde hace dos años, que Hotaru siempre había estado enamorado de Bulma y que sospechaba que podían estar hasta comprometidos para ese momento, ya que por lo visto Bulma mantenía bajo mucha discreción ciertos detalles sobre su vida privada. Era algo que no tendría que importarle pero sí le importaba, nunca antes le había importado tanto una mujer y para colmo de males estaban esos malditos sueños que no podía decifrar, eran muy confusos [¿Dónde demonios se mete Kira cuando la necesito?] pensó para sí mismo, tenía días de no verla y Vegar no le hablaba desde el accidente [Necesito hablar con Kira, ella siempre me ayuda a ordenar mis pensamientos y la indiferencia de Vegar ya me esta colmando la paciencia, me lleva...], pero sus pensamientos se interrumpieron, sintió un extraño presentimiento, una fuerza desconocida y divisó una extraña luz en el horizonte, era como sí cayera una estrella fugaz, era muy cerca de la casa, así que bajo al jardín por las ramas del árbol y corrió hacia el lugar donde vio caer la luz, cuando cruzo la pequeña colina y los árboles que le dificultaban la vista, pudo percibir que se trataba de una nave espacial.

La verdad se acerco sin precaución, más bien con curiosidad, era una nave muy extraña, no podía definir su forma, le parecía un enorme escorpión con la cola enroscada y sus colores variaban constantemente del negro al rojo, nunca había visto una nave espacial con esas características, la puerta se abrió y el humo le impidió ver por un momento, cuando el humo empezó a disiparse alcanzo a distinguir dos figuras sombrías en la puerta.

El humo termino de disiparse y Argos confirmó que eran dos individuos de aspecto tan extraño y temible como su nave, un hombre y una mujer, la mujer era delgada, de piel sumamente pálida, sus labios y sus párpados eran de color verde obscuro, sus ojos parecían los de un gato y eran del mismo color verde, pero sus cabellos eran color rojo, su traje era ajustado, de color negro, de cuello alto, de un material, en apariencia, muy parecido al cuero; por su parte el hombre era algo robusto y más alto que ella, pero el color de su piel, sus ojos y sus cabellos eran iguales que los de ella, su traje era del mismo material pero no tenía mangas, usaban guantes de color rojo que dejaba al descubierto sus dedos y sus uñas parecían garras de color negro, ambos individuos se parecían mucho entre sí.

Argos observó las dos figuras atónito, la mujer volteó a verlo y le sonrió, pero su sonrisa y su mirada eran malignas, sintió escalofríos, la mujer bajo de la nave y se paro frente a él.

- ¿Quién demonios son ustedes dos? - prreguntó Argos - la mujer caminó a su alrededor, la sonrisa se había borrado de sus labios, de repente sintió sus manos frías en la espalda, dejo de tocarlo y se puso frente a él, Argos estaba totalmente confundido, era como sí lo estuviera estudiando.

- DORKA!! - gritó el hombre desde la nave - ¿Encontraste algo interesante?

- Más de lo que crees Dorken - contestó la mujer y añadió - Creo que es parte de lo que hemos estado buscando, solo me falta una prueba más - después de eso acaricio con un dedo el rostro de Argos o al menos parecía una caricia, el no se movió pero le extraño la acción de la mujer, más aún cuando ella después de tocarlo se paso los dedos por los labios, entonces sintió una gota de algo correr por su mejilla, cuando se toco el rostro se dio cuenta que era sangre, ni siquiera había sentido en el momento en que le rasguño la cara, esas uñas debían ser muy filosas. - Sí, es lo que buscamos - dijo ella al fin.

- Entonces me encargare de él - dijo el extraño.

- ¡NO! - grito ella - Soy mayor que tú y además el último fue para ti, ahora es mi turno, esto no será tan sencillo por lo que veo, algo le pasa, de lo contrario lo hubiera reconocido de inmediato y para este momento ya no estaríamos simplemente hablando. Argos estaba aún más confundido.

- Demuestra de qué estas echo - le dijo ella en tono sombrío, él sintió como sí una inmensa energía emanara de ella y su fuerza era tal que lo arrojo por los aires y le hizo destrozar gran cantidad de árboles hasta que se detuvo en un risco cercano y después caer al suelo, pero a pesar del golpe no perdió el sentido, estaba sorprendido, ella ni siquiera lo había tocado. La mujer camino hacia él, lo levantó de la camisa y lo arrojó hacia arriba a una gran velocidad, después se elevo en el aire y le dio un fuerte golpe con un puño que lo hizo estrellarse nuevamente en el suelo, ella bajó y se paro frente a él, Argos trato de incorporarse y un hilo de sangre salió de su boca.

- Levántate - exigió Dorka y añadió - Apenas estoy empezando, más vale que cooperes o será más larga tu agonía, deja de fingir conmigo. Trunks se había bajado del carro en ese momento después de sentir el Ki maligno que debía estar emitiendo la mujer.

- Trunks ¿Qué te pasa? - Preguntó Bulma angustiada.

- Mamá, quédate aquí, puedo sentir presencias malignas muy cerca de aquí

- ¡¿QUÉ?! -Gritó ella más angustiada que antes y añadió- Pero ¿Cómo es posible? ¿Quiénes son?

- No lo sé, su Ki es muy extraño, al principio no pude definir sí era bueno o malo, parecía el Ki de diversos individuos en uno solo al mismo tiempo, algo parecido era el Ki de Cell, pero ahora uno de ellos lo ha incrementado y evidentemente es maligno, necesito ir a ver que sucede, por favor, quédate aquí - dijo el muchacho elevándose en el aire y salió disparado rumbo al lugar, pero como siempre Bulma estaba muy preocupada como para quedarse quieta y siguió como pudo a su hijo en el auto.

Argos estaba recibiendo la golpiza de su vida, él nunca había practicado artes marciales, no que recordara, pero después de cierto tiempo y sin darse cuenta empezaba a comprender la forma de pelear de la mujer, de repente empezó a esquivar sus golpes y la velocidad en que se movía empezaba a incrementarse también, no sabía que tenía esas habilidades, aunque su velocidad y su resistencia también le habían sorprendido días antes, al rescatar a Bulma del derrumbe ¿Qué demonios le estaba pasando? ¿Y porque a pesar de que los golpes que sentía eran tan fuertes, su cuerpo no tenía tanto daño?.

- Bien - dijo Dorka - Empiezas a reaccionar, ahora solo te falta pelear conmigo - ella también empezó a moverse más rápido y le tiro otro golpe que lo hizo volar por los aires nuevamente.
Sobre el risco, dos personas observaban la pelea.

- Demonios, lo va a matar, debo ayudarlo - dijo Vegar.

- No - contestó Kira y añadió - No lo matará mientras él no pelee con ella, esta dando resultado, esta reaccionando, no dejes que tus sentimientos intervengan en este momento, yo también siento su dolor, pero debemos esperar, además Trunks ya viene para acá.

Trunks casi llegaba al lugar, además de las dos presencias, podía sentir otro Ki que poco a poco se incrementaba y después volvía a bajar, era diferente al de los otros dos pero aún no lo identificaba....

NOTA DE ESCRITORA: Desde ahora los capítulos serán más largos porque sino me saldrían demasiados, espero no se desanimen de leer la historia.