Libertad a Castells

Libertad a los presos políticos de Kirchner-Macri

Desprocesamiento de todos los luchadores

La repudiable campaña “antipiquetera” que desde el Estado, las patronales y los sectores más recalcitrantes de la política y sus medios masivos de des-información, vienen llevando adelante, ha pegado un salto de extrema gravedad con el encarcelamiento del dirigente Raúl Castells.

Este hecho viene a producirse cuando los 15 presos de la protesta contra el Código Contravencional en la Capital, llevan ya 40 días de cárcel.

A  Castells se lo ha detenido con la acusación de “extorsión”, por el reclamo en el Casino chaqueño. Los presos de la Legislatura están procesados bajo la carátula de “coacción agravada”.

 Es decir, estamos ante hechos que intentan sentar precedentes de que la pobreza es considerada delito, la protesta se criminaliza y a quienes son presos políticos se los equipara a delincuentes comunes.

Entre tanto, la Argentina capitalista explotadora:

 

–que exporta alimentos para 300 millones de personas pero no evita que entre 20 y 50 niños (según quién dé la estadística) menores de 5 años, mueran por día por desnutrición o enfermedades curables;

–que tiene al 50% de su población bajo el nivel de pobreza;

–que mantiene impunes los crímenes de la policía contra jóvenes pobres, desde Walter Bulacio hasta Diego Lucena;

–que sólo ha condenado apenas a tres años de prisión a María Julia Alsogaray pese a que es la responsable de los mayores fraudes orquestados con las privatizaciones; mientras todos los demás empresarios que vaciaron el país gozan de completa libertad;

–que provocó la muerte de 14 mineros en Río Turbio por la rapiña privatizadora que se embolsó subsidios de US$ 22 millones por año, no invirtió un solo peso en la mina y produjo más de 3.000 despidos;

–que comprobó fehacientemente la intencionalidad de la explosión de Río Tercero para tapar un contrabando de armas, pero deja libre a Menem y a toda la cúpula militar que intervino en el hecho;

–que se llenó de sangre el 20 de diciembre del 2001, cuando más de 30 jóvenes fueron asesinados en todo el país por responsabilidad de De la Rúa, que también está libre;

–que el 26 de junio del 2002 asesinó a Kosteki y Santillán, otra causa que sigue impune;

–que a diez años de la masacre de la Amia, sigue tras una fantasmal “conexión internacional” para negar la verdadera responsabilidad, la de la conexión local, la del Estado, y se apresta a dejar en libertad a los únicos 4 imputados en la causa;

 

…esa Argentina capitalista explotadora, sus fuerzas represivas, sus representantes políticos, su Gobierno, su Justicia, quieren vaciar las calles de pobres. Quieren una sociedad disciplinada, donde prevalezcan “las mayorías silenciosas” o, lo que es lo mismo, “la paz de los cementerios”. Para eso, no vacilan a la hora de matar, de procesar y de encarcelar.

Pese a todo, no les resulta tan fácil: una férrea resistencia lucha por puestos de trabajo desde Caleta Olivia hasta Aceros Zapla.

Y sigue persistentemente en las calles para que la sociedad no olvide que la mitad de su población pretende ser condenada a una muerte silenciosa.

Es imprescindible que esta realidad despierte en la conciencia de toda la población trabajadora: nadie está a salvo de esta ofensiva represiva de hoy, si no salimos a ponerle freno con firmeza y masividad.

A esa Argentina capitalista explotadora, hay que enfrentarla con la lucha en las calles, hasta arrancar de las cárceles a todos los que se niegan a aceptar mansamente que a quienes padecemos la pobreza, o pensamos diferente, nos borren del mapa.

26 de agosto de 2004