(Diario La Provincia (07/06/2003))

Pregunta: Esta temporada ha devuelto la sonrisa a su rostro.

Magüi: La verdad es que sí, porque las cosas me están saliendo muy bien en todos los aspectos. Creo que para mi ha sido muy importante haber regresado a mi tierra, porque la compañía de mi familia me da mucha tranquilidad. También ha influido mucho poder contar con un técnico como Fernando García Lleó y un profesor de preparación física de la categoría de Joaquín Sanchís, que ya los conoces y son de lo mejor.

P: ¿Cómo resume los primeros cinco meses de la actual temporada ?

 M: Totalmente positivos. Creo que el próximo lunes saldré en el ranking WTA en el puesto 28 o 29, cuando aún queda toda la temporada por delante. Yo me encuentro muy bien, soltando el brazo otra vez y divirtiéndome en la pista.

 P: ¿Jugó su mejor tenis en Estoril y Budapest?

 M: No, ya dije que en ninguno de los dos torneos jugué al nivel más alto. En la Copa Federación, Berlín, Roma y París sí he jugado muy bien. Se siente impotencia cuando no se puede mostrar el tenis que llevas dentro y como consiguientemente, no aparecen los resultados, empiezas a sufrir en la pista, lo pasas fatal y todo parece como una cuesta arriba. Tienes que luchar para poder salir de esa situación. Por suerte yo pude salir y ahora me lo vuelvo a pasar muy bien en la pista.

 P: ¿Este año ha mejorado más su juego o su cabeza?

 M: La cabeza, sobre todo. El juego también, pero yo pienso que cuando llegas a un nivel puedes seguir mejorando algunas cosas aunque no creo que luego sean determinantes. De la importancia del componente psicológico en  deportes de alta competición te puedo hablar en primera persona, porque el cambio que ha experimentado mi juego estos meses ha sido como consecuencia de la tranquilidad mental con la que afronto ahora los partidos. Te digo más, ahora soy capaz de aceptar mis errores, cosa que antes me afectaba mucho.

 P: ¿Ha creado una presión añadida en su carrera el hecho de haber destacado precozmente en el tenis?

 M: Un poco sí, porque también siempre he sido el punto de referencia en el relevo de Arantxa y Conchita. Sin embargo, la madurez me ha ayudado a tomarme aquella presión como un honor para mí, al sentirme halagada por el hecho de que me comparen con jugadoras tan importantes en el tenis mundial.

 P: Hace unos días se tropezó en París con Mauresmo, de igual manera que ocurriera en la final júnior de Wimbledon 97. Cuando juega con la francesa, ¿le da la impresión de que  está disputando un partido del circuito masculino?

 M: A ver. En el partido que jugué el otro día con ella en RG no pude hacer nada porque salí muy tensa. Me había planteado el partido para disfrutar porque yo no tenía ninguna presión, toda la tenía ella ante su público, pero cuando empezó el partido la pelota dio la vuelta y yo salí con mucha tensión y no pude hacer nada en la pista. Pero  sí es verdad que cuando juegas  con ella se nota una diferencia, porque  hombre, no es como las demás chicas.

 P: Hacía alusión al circuito masculino por la fortaleza y musculación de la francesa.

 M: Sí, claro, a eso también me refiero yo cuando digo que es diferente a otras jugadoras.

 P: ¿En qué aspecto ha cambiado el tenis femenino desde que llegó al circuito?

 M: Ha cambiado mucho en cuanto a competitividad se refiere y en eso se está acercando cada vez más al tenis masculino. Antes era casi imposible que una top ten perdiera con la 50 o 60 del mundo y, sin embargo, hoy puede perder con la número 100 del ranking. Hoy en día todos los partidos hay que jugarlos a tope porque todo el mundo esta jugando muy bien. Yo veo un nivel mucho más alto que cuando empecé.

 P: ¿Se notará la ausencia de Arantxa en la imagen del tenis español?

 M: Siempre se notará, de igual manera que cuando Conchita se retire, pero para eso las demás estamos trabajando duramente para que no se note tanto.

 P: ¿Cree que en la retirada de Arantxa influyó el comentario -si estás lesionada deja  que jueguen las canarias-, que le hizo un espectador en Maspalomas cuando ustedes jugaban la fase final de la CF?

 M: Yo hablé con ella cuando pasó y no creo que fuera el motivo, aunque quizá pudo acelerar una decisión que venía pensando todo el año.

 P: De cualquier manera aquel comentario reflejaba el pensamiento de muchos de los espectadores.

 M: Sólo te puedo decir que ni la situación ni el momento eran los más adecuados.

 P: ¿Tiene alguna sensación especial para el torneo de Wimbledon?

 M: Tú sabes que Wimbledon es mi gran pasión, mi sueño...Si algún día logro ganarlo me sentiré totalmente realizada como tenista. Ésta será mi quinta participación consecutiva en el cuadro grande, después de que en 1997 jugara la final júnior y un año después me sentí en cuartos en la fase final. Intentaré ir paso a paso y si se me presenta la gran oportunidad ten por seguro que la aprovecharé. Sin embargo, no hay que olvidar que es un torneo en una superficie muy especial y que ganar un solo encuentro ya  supone un gran triunfo.