MENSAJES DADOS POR LA VIRGEN MARÍA
DEL ROSARIO DE SAN NICOLÁS
1-9-86        956

Digo a mis hijos: Poned vuestros corazones cerca de mi Corazón y no os veréis 
apartados del Señor.
Bebed mis palabras los sedientos de Dios, que todo cuanto os digo os hará revivir 
y permanecer fieles a El.
Amén, amén,



4-9-86        957

Después de rezar la veo y me dice: Temed al Señor, amando al Señor, ya que en el 
amor, en la justicia y en la verdad os quiere el Señor.
Escuchadme, os lo suplico.

Leed: Eclesiástico C.1, V.11 - 12 - 13

        11      El temor del Señor es gloria y motivo de orgullo, es gozo y corona de alegría.
        12      El temor del Señor deleita el corazón, da gozo, alegría y larga vida.
        13      Todo terminará bien para el que teme al Señor, él será bendecido en el día de su 
muerte.




4-9-86        958

En la tarde. Digo a mis queridos hijos: Marchad rectamente, con el corazón 
puesto en el Señor.
Dedicaos debidamente al Señor, nada le neguéis, no impidáis que El obre en 
vosotros.
Gloria al Altísimo.


5-9-86        959

Que nadie ignore que el Sagrado Corazón de Jesús sufre por los incrédulos y por 
todos los que lo ofenden.
El que ama a Cristo Jesús, que lo ame  más aún y que ore fervorosamente por las 
almas que permanecen indiferentes a su dolor.
Alabado sea el Salvador.


6-9-86           960

Hija: Si los hombres se sumergieran en mi Corazón, emergerían de él, con un 
corazón nuevo y podrían así entregarse al Señor.
Los hijos, siempre serán amados y protegidos por la Madre.
Amén, amén.


7-9-86            961

Hija mía: Quiero que todos tus hermanos esperen en el Señor, es bueno esperar 
en El, esperar perseverantes en la fe.
Por la fe se cree en Cristo y  por la fe llegará el cristiano a obtener la salvación.
Gloria a Cristo Jesús.

Leed: I de Juan C.5, V. 4 - 5 y 10 - 11
        4       Porque el que ha nacido de Dios, vence al mundo. Y la victoria que triunfa sobre el 
mundo es nuestra fe.
        5       ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
        10      El que cree en el Hijo de Dios tiene en su corazón el testimonio de Dios. El que no cree 
a Dios lo hace pasar por mentiroso, porque no cree en el testimonio que  Dios ha dado 
acerca de su Hijo.
11              Y el testimonio de éste: Dios nos dio la Vida eterna, y esa Vida está en su Hijo.




9-9-86            962

Amados hijos: Nada pasa sin ser visto por los ojos del Señor.
Id entonces por la senda del bien, vivid en caridad y en humildad, sed 
perfectamente dóciles y derramará el Señor su bondad sobre vosotros.
Amén, amén.


10-9-86   (Intención de la Novena del 17 al 25)    963

Hijos míos: En este mes se cumple el tercer aniversario de mis apariciones, es 
por eso que os pido: En esta Novena, acompañadme, orad por este intento mío de 
lograr que la paz del Señor llegue a todo el mundo.
Estoy anunciando a Cristo, anuncio su Reino, anuncio su Amor.
Aleluia.


11-9-86           964

Hija: Hoy te diré algo de Jesús cuando tenía doce años de edad, edad en que fue 
presentado en el Templo. Tenía la inocencia de niño y ya se reflejaba el amor 
hacia todo lo creado por el Todopoderoso.
En sus sensatas y sabias palabras, se podía percibir la sabiduría.
Con José mi esposo, solíamos quedarnos horas escuchándolo hablar, lo que El 
con mucho amor nos decía.
Una de las tantas frases que nos dijo: "Jesús, vida nueva para el alma nueva, 
mucha sangre correrá para que esto se haga realidad".
Mi Hijo supo siempre el padecimiento que le esperaba. Que el cristiano sepa 
reflexionar cuanto te he dicho, son palabras de la Madre de Jesucristo.
Amén, amén.



13-9-86           965

Veo a la Santísima Virgen sola. Me dice: Si, es este mi día hija, los trece de cada 
mes fueron elegidos por Mí, para dejar mis mensajes en Fátima y la causa 
principal, la conversión de los pobres pecadores.
La tierra contaminada a causa del maligno, tendrá que ser desde hoy, limpia por 
la gracia de Dios.
Esto requiere actitudes honestas, pureza de corazón y entrega al Señor y a la 
Madre.
Es mi Corazón el que pide, es mi Corazón el que habla y es en mi Corazón donde 
Jesús quiere ver a los hombres.
Purificados, verán la Vida.
Gloria al Señor del universo.



13-9-86           966

A la noche. Veo a la Santísima Virgen sola. Me dice: Tengo espinas en mi 
Corazón, que me están hiriendo continuamente.
Dos tercios del mundo se está perdiendo y la otra parte debe orar, debe hacer 
reparación para que el Señor se apiade.
Tú me ayudarás, con tu entrega, tu oración y con la prédica de mis mensajes.
Amén, amén.



14-9-86   (Exaltación de la Santa Cruz)          967

Hijos míos: Poneos en oración y confiad en el Señor, que en la oración os 
encontraréis con El.
Avanzad en la misión que el Señor os encomienda, no os detengáis, que el 
Espíritu Santo os protege.
Las glorias sean a El.

Leed: Salmo 145, V. 17 al 21
        17      El Señor es justo en todos sus caminos y bondadoso en todas sus acciones;
        18      está cerca de aquellos que lo invocan, de aquellos que lo invocan de verdad.
        19      El Señor cumple los deseos de sus fieles, escucha su clamor y les da la salvación;
        20      el Señor protege a todos sus amigos y destruye a los malvados.
        21      Mi boca proclamará la alabanza del Señor: Que todos los vivientes bendigan su santo 
Nombre, desde ahora y para siempre.



15-9-86           968

Hija mía: Llena tu boca de oración, no vaciles nunca ante un dolor, procede 
como hasta hoy, confiada y feliz junto a tu Madre.
Mi corazón está puesto siempre en la Cruz de mi Hijo, mas también padece por 
mis otros hijos, los que heredé en esa misma Cruz.
Digo esto porque mi dolor es grande y quiero que ellos hereden a su vez, la 
Divina Luz, la eterna salvación.
Alabado sea el Señor.


16-9-86          969

Veo a mis hijos pedir favores al Señor, Yo les digo: Pedid, pongo delante vuestro 
la manera de sobrellevar el dolor o de aliviarlo, Dios omnipotente salvará, tanto 
al que reconoce Quién es el Señor, como al descreído.
Bendito sea su poder. Amén, amén.
Bendice al Señor, que decir, "Bendito sea el Señor", es dar gracias al Señor. 
Repítelo hija, tres veces todos los días.


17-9-86          970

Escuchad mis queridos hijos: Es en el verdadero arrepentimiento donde veréis 
que sois contemplados por el Señor y es en el ofrecimiento que comprobaréis 
como os aproximáis al Señor.
Al principio lo vislumbraréis y luego lo podréis testificar.
Cuando se enciende el fuego se siente el calor, así se siente a Cristo.
Gloria al Señor.

Leed: San Juan C.5, V. 28 - 29 - 30

28  No se asombren: Se acerca la hora en que todos los que están en las tumbas oirán Su 
voz
29  y saldrán de ellas: los que hayan hecho el bien, resucitarán para la Vida; los que hayan 
hecho el mal, resucitarán para el juicio.

30  Nada puedo hacer por Mí mismo. Yo juzgo de acuerdo con lo que oigo, y Mi Juicio es 
justo, porque lo que Yo busco no es hacer Mi voluntad, sino la de Aquel que me envió.



18-9-86           971

Digo a tus hermanos: Quien demuestre su amor al Señor, será perdonado por El.
Demostradlo entonces y no improviséis, cuidaos de hacerlo.
Amén, amen.


20-9-86           972

En la tierra todo es temporal, no así lo que viene de Dios, es por eso que se 
deben tener en cuenta las cosas que valora el Señor.
Vale más callar que pregonar, perdonar que condenar, sufrir que gozar, amar 
que odiar.
Mucho vale esto, si se sabe que luego de cada acción aguarda el Señor.
Alabado sea.

Leed: Isaías C.45, V. 6 - 7 y 18 - 19

        6       Para que se conozca, desde el Oriente al Occidente, que no hay nada fuera  de Mí. 
Yo soy el Señor, y no hay otro.
        7       Yo formo la luz y creo las tinieblas, hago la felicidad y creo la desgracia: Yo, el Señor, 
Soy el que hago todo esto.
        18      Porque así habla el Señor, el que creó el cielo y es Dios, el que modeló la tierra, la hizo 
y la afianzó, y no la creó vacía, sino que la formó para que fuera habitada:     Yo 
Soy el Señor, y no hay otro.
        19      Yo no hablé en lo secreto, en algún lugar de un país tenebroso. Yo no dije a los 
descendientes de Jacob: "Búsquenme en el vacío ". Yo, el Señor, digo lo que es justo, 
anuncio lo que es recto.


21-9-86           973

Que vuestra adoración al Señor y la veneración a la Madre no sea obstaculizada 
por nada y no disminuya jamás.
Que la consagración, sea el vínculo que una vuestro corazón con el Mío.
Hijos míos, sedme fieles.
Cada hijo necesita una particular atención de la Madre.
Gloria al Altísimo por los siglos de los siglos.



23-9-86          974

Hoy veo a Jesús, me dice: ¡Oiga la humanidad la voz de María Corredentora!
¡Pobre y triste humanidad desorientada!
En la incredulidad no entra Dios, sino donde hay confianza, esperanza y fe.
Reconcíliese el hombre con Dios y no se condenará.


23-9-86                  975

En la noche veo a la Santísima Virgen, me dice: Muchos son los hijos ausentes de 
Dios, mas no por eso están abandonados por El.
Es necesario que sientan Su presencia, que aprendan a amarlo y que ese amor 
sea auténtico.
Amén, amén.


25-9-86     (Día de Peregrinación)   976

Hija mía predilecta, llevo ya tres años de continuo velar, de un estrecho y real 
acercamiento hacia todos mis hijos.
Recibe del Señor en este día, Su Bendición.
Con esta piedra fundamental, la Madre de Cristo queda desde hoy y para siempre 
anclada aquí, junto a sus queridos hijos, en esta bendita tierra.
Gloria por siempre a Dios.


26-9-86          977

Hija mía: Mi Corazón, será desde este momento para tus hermanos, el timón al 
cual deberán aferrarse, para poder así navegar en buenas aguas. Con la oración 
y el corazón dispuesto alcanzarán la meta.
Amén, amén.



28-9-86             978

¡Oh hija mía, cuántos hijos hallo hoy sometidos al maligno!
La maldad cunde, mas Yo terminaré con ella; el Señor me concede el poder para 
lograrlo.
La justicia de Dios partirá en dos, la débil voz del abismo.
Amén. amén.
Leed: Apocalipsis C. 1, V. 18 y C. 2, V. 5
        18      Estuve muerto, pero ahora Vivo para siempre y tengo las llaves de la Muerte y del 
Abismo.
C. 2, V. 5
        5       Fíjate bien desde dónde has caído, conviértete y observa tu conducta anterior. Si no 
te arrepientes, vendré hacia ti y sacaré tu candelabro de su lugar preeminente.


29-9-86    (San Miguel, San Gabriel y San Rafael Arcángeles)       979

Hijos míos retornad a Dios y encomendaos a Dios, que El es amor de los 
desamparados y calor de los que sufren.
Mirad como se brinda el Señor, brindaos vosotros y no se aumentaran  vuestras 
penas.
Gloria al Altísimo.

 

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