María Granillo

 

 Nació en Torreón, Coahuila en 1962. Realizó la licenciatura en Composición en la Escuela Nacional de Música de la UNAM, como becaria del Taller de Composición de Federico Ibarra, y en 1976 fue miembro del Taller Nacional de Composición, dirigido por Daniel Catán, Julio Estrada, Federico Ibarra y Mario Lavista. De 1990 a 1993 fue becaria de la UNAM para realizar un posgrado en composición en el Guiidhali School of Music and Drama en Londres, bajo la dirección de Robert Saxton, y posteriormente el grado de Master of Arts en la Universidad de York, Inglaterra, con especialidad en música electroacústica. Sus obras, que abarcan todos los géneros -incluso música original para teatro, cine y danza- se han interpretado en México, Estados Unidos, Canadá, Londres, Dinamarca y España, también han sido objeto de numerosas distinciones como la Medalla Mozart 1996, la nominación al trofeo Ariel que otorga la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas, la Beca Jóvenes Creadores en 1993 y 1996, entre otras. Actualmente realiza actividades docentes en el área de Composición de la Escuela Nacional de Música de la UNAM, y desde 1999 forma parte del Sistema Nacional de Creadores.

 

 Trance: "Es un momento crítico o decisivo de algún suceso o acción. También es el último estado o tiempo de la vida, próximo a la muerte y en ocasiones es sinónimo de éxtasis. El significado de esta palabra constituye la poética de la obra, cuya estructura y lenguaje, así como los procesos de construcción, se derivan de la intención expresiva. "La obra está escrita en un solo movimiento, cuyo material básico en estado de transición continua, juega con distintos niveles de tensión para crear una línea dramática en la que he intentado relatar musicalmente, el proceso de liberación por el que atraviesa el alma al morir: da inicio de manera dolorosa y difícil, pero paulatinamente al avanzar se libera de los seres, las cosas y las emociones que le atan a este mundo, danza impetuosamente, lucha, se despide e inicia la partida y cada vez más ligeramente, entre juegos, se desvanece..."