EL BORRACHITO PERDIDO

  Dicen que había siempre un borrachito que los camioneros traileros lo llevaban siempre a descansar a diferentes sitios donde iba destinada la carga. A veces dicen que se malograba el camión en plena playa y lo mandaban al borrachito a que comprara repuestos par el camión. De tanto ir y venir, el borrachito siempre acostumbraba llevar sus botellitas, se trastornaba y se perdía confundiéndose de camino.

Cierto día como siempre se fue en un camión y como se malogró el carro con carga en plena playa de Puémape, lo mandaron al borrachín a traer repuestos y se perdió. Dicen que él se fue y se metió en un cueva de un cerro creyendo que era una casa, entonces la cueva se cerró y desapareció para siempre, quedando grabado su nombre “Lolo” en un montón de arena frente a la cueva. Todas las noches los chóferes que se quedan por algún motivo lo ven y oyen cantar y cuando se le acercan se mete a la cueva y desaparece. Todos los días en el alba, mediodía y  atardecer , la cueva para abierta, pero en la noche se cierra y se abre saliendo el borrachito y entrando. Sin regresar a su hogar y su pueblo donde vivía.

Versión Oral: Leoncio Lozada Cazavalente

 

 

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