Eran tiempos de bosques y ríos . Había que despejar para que nacieran pueblos. Puerto Aisén fue una creación del azar. Hace muchos años un hacendado de Coyhaique arrojó con indiferencia la colilla de un cigarrillo encendido . Este gesto simple e intranscendente provocó un incendio de magnitud tal que duró más de tres meses , en una hoguera que retorcía los troncos crepitantes y aventaba por los aires la ceniza . Miles de hectáreas fueron devoradas por el fuego , y sobre esas tierras fecundadas por las cenizas , nació la ciudad cabecera de provincia y activo puerto del estuario de Aisén.
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