Capítulo 5: Reto

 

-¿es ella?- preguntó Melu con recelo- ¿la chica no. 51?

-Sí...- dijo Sakuragi con amargura

-mmmh...- Melu estudió con la mirada a Haruko, de pies a cabeza- ¿la querías mucho, no?

-Demasiado...-dijo Sakuragi tratando de contener las lágrimas de sufrimiento- creo que aún lo hago...

-No te preocupes, Hana-kun-dijo Melu abrazándolo aún más fuerte- pronto encontrarás a alguien que sí te corresponda

-Tienes razón, Melu- contestó Sakuragi con una sonrisa y acariciando la cabellera de su amiga- Ahora te tengo a ti para ayudarme a superarlo...¿nos vamos?

-Sí- contestó la pelirroja sin soltar a Sakuragi, dirigiéndole una fría mirada a Haruko- ¡chúpate esta, niña tonta!- pensó Melu mientras la veía de reojo

-Sa.. Sakuragi- murmuró Haruko confundida al ver salir a la “pareja” y después a Rukawa- Rukawa...

 

Melu tomaba a Sakuragi del brazo, sabía que el pelirrojo tenía ganas de llorar, así que lo apretó aún más fuerte, cómo diciéndole que fuera fuerte, que en la casa se desahogaría, llegaron hasta el parque que estaba cerca de la casa y entonces Rukawa los alcanzó en su bicicleta.

 

-¡Oigan!- gritó el kitsune

-Ah, eres tú Rukawa- dijo Melu sin emoción

-¿Qué quieres, kitsune?- le contestó Sakuragi más enojado que nunca, puesto que Haruko lo rechazó por él

-Quiero hablar con ella...

-¿Qué tienes que ver con ella?

-no te importa...

-¡¡¡¡¡Dímelo!!!!!- el pelirrojo estaba a punto de darle un cabezazo mortal al kitsune

-¡Calma, Hana-kun!- le dijo Melu, en ese momento el pelirrojo se tranquilizó

-Está bien, habla con él, pero que sea rápido

-Sí, si- dijo Melu un poco desesperada y se alejó un poco con Rukawa

 

Una vez lejos del pelirrojo, Rukawa se atrevió a hablar

-Este... yo escuché que dijiste que ibas a entrenar al do’aho y yo...

-¿quieres que te entrene?

-Si quieres...

-mmmh...-voltea a ver al pelirrojo, que se encuentra pateando latas- déjame pensarlo...

-Está bien...- entonces volvieron hasta dónde estaba el pelirrojo

-¿ya terminaste de hablar con este zorro apestoso?

-sip...

-ahora ya vete, zorro estúpido ¿qué esperas?

-mmmh... eres un torpe...-dijo y se subió a su bicicleta

-¡¡¡¡¡¡¡¡¡y tú eres un idiota, maldito zorro estúpido!!!!!!!

-eres un perdedor...-murmuró Rukawa

-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿Qué dijiste?????!!!!!!!!!!

 

Rukawa puso en marcha su bicicleta, pero el pelirrojo se interpuso y ¡¡¡CRASH!!! El kitsune arrolló al pelirrojo, dejándolo inconsciente

-¡¡Hanamichi!!- gritó Melu mientras corría a ver si el pelirrojo estaba bien

-es un idiota- murmuró Rukawa.

-Maldición- dijo Melu- está inconsciente y – trata de cargarlo- pe... pesa mucho...

-Te ayudaré...

-Gracias...

 

Melu y Rukawa colocaron a Sakuragi en la bicicleta, con la cabeza en el volante, Rukawa iba empujando

-¿por dónde vive?

-Más adelante- dijo Melu señalando una casa

-Que bien, llevar a este torpe cansa mucho.

-¡¡No le digas así!!

-solo bromeaba- contestó Rukawa

-mmh... aquí es- dijo Melu -¿Me ayudarás a cargarlo?

-Sí

 

Entonces, con muuucho esfuerzo, subieron a Sakuragi hasta su habitación, una vez ahí, dejaron azotar al pelirrojo en su cama

-Vaya, sí que pesa- dijo Melu mientras se recostaba en la cama

-y qué lo digas- dijo el kitsune imitándola- al parecer va a dormir mucho ¿qué te parece si vamos al parque a jugar un partido?

-mmmh- Melu pensó unos segundos y finalmente dijo- ¿Por qué no? Solo deja y me cambio

 

Rukawa se sorprendió bastante, no sabía que Melu y Sakuragi vivieran juntos. Vió a Melu entrar al baño y salir con un short deportivo (de Sakuragi), tenis y una playera de algodón blanca.

 

-Bien, vámonos

-¿y el balón?- preguntó Rukawa

-Hanamichi tiene uno en su closet- sonrió la chica, abrió el closet y sacó una pelota de básquet -¿nos vamos, kitsune?

-Sí... pero no me digas kitsune...

-Está bien... ¿Rukawa?

-mmmmh... ¿por qué no me llamas por mi nombre?

-¿eh? No puedo hacerlo, aún no te conozco del todo bien...

-ah... ¿entonces por qué no hacemos una apuesta?

-¿eh?

-gana el primero que anote 50 puntos, si yo gano, me llamarás por mi nombre...

-¿y si yo gano?

 

Rukawa meditó unos momentos, cómo aquello le parecía imposible, sonrió y dijo:

-Haremos de cuenta de que es año nuevo...*

-¡OK, es un trato!- dice Melu extendiéndole la mano, el kitsune vacila –

-eh... sí, es un trato- dice Rukawa estrechándole la mano

Rukawa y Melu se dirigen al parque para jugar el partido, Rukawa tiene el balón y se acerca vacilante, no cree que Melu pueda ganarle. Melu por su parte luce una sonrisa y se prepara para entrar en acción. Rukawa comienza a rebotar el balón y se dirige hacia la otra canasta, Melu lo marca, pero el zorro logra desmarcarse y cuando se da cuenta, ya no tenía el balón en las manos.

-¿buscabas esto, nene?- le dijo Melu mientras botaba el balón

-¡Maldición!- pensó Rukawa- ¡es demasiado buena!

-Cielos, me decepcionas, kitsune...- dice con una pícara sonrisa

-Cállate...-dice Rukawa mientras se acerca para tratar de quitarle el balón.

-¡Ja, ja!- dice con una sonrisa- ¡no podrás quitármelo!

-eso es lo que tú crees- dijo el kitsune mientras le quitaba el balón y encestaba

-¡Vaya, creo que esto es en serio!- dijo Melu mientras recogía el balón y miraba al zorro con mirada desafiante.

 

Mientras tanto, en la casa de Sakuragi, el pelirrojo sueña algo, veamos que es:

 

*** El sueño de Sakuragi ***

 

-Haruko, por favor, díme que sí...

-Lo siento Sakuragi, yo amo a Rukawa...

 

El piso se abre y pelirrojo cae a un gran vacío dónde predomina la oscuridad

-¿Eh? ¿dónde estoy?

-Estás aquí, es un sitio que conoces muy bien...- le dijo una voz que le resultó conocida

-¿quién es?

-Soy yo, Sakuragi...- dijo Haruko, que tenía en el rostro unas pequeñas marcas de heridas

-¿Qué te pasó, Haruko?- preguntó consternado el pelirrojo

-Mi cuerpo refleja las heridas de mi corazón.... son pocas comparadas con las tuyas- Haruko señala a Sakuragi

-¿Eh?¿Qué?- Sakuragi voltea;  todo su cuerpo tiene heridas, en el pecho hay una aún más grande, que está sangrando bastante

-Esa herida te la hice yo... perdóname, Sakuragi...-dijo Haruko sollozando mientras bajaba la cabeza

-No llores por mí, Haruko... este talentoso hombre va a estar bien- dijo mientras la abrazaba- en serio, estoy bien...

-No... es mi culpa- decía Haruko mientras sollozaba más fuerte

-Haruko... tú... tú tienes a... al... ki.. kits.... Rukawa...- murmuró con lágrimas en los ojos- sé que serás fe... felíz co.. con él...

-Tontito...- dijo la chica- sí sigues así, nunca sanará tu herida...

-¿Eh?- En eso la chica se libera y se da cuenta de que no es Haruko, sino Melu

-Tienes que ser fuerte....- le dice Melu secándole las lágrimas con sus manos- un chico tan talentoso no debe llorar....

-Pe... pero...

-¡¡Shhh!!- Melu pone su dedo índice en los labios del pelirrojo- no digas nada... Hanamichi...

-Melu...- murmuró el chico mientras acercaba su rostro al de Melu

-¡Hanamichi!- gritó la chica- ¡No te atrevas!

-¿pero por qué?

-No quiero causarte otra herida... se supone que debo curarlas, no infectarlas- en eso, algo pasa en el pecho de la pelirroja, está sangrando

-¿qué te pasa?

-Creo que es una herida de amor....- murmuró la chica

-¿Quién te la hizo?- pone sus manos sobre los hombros de Melu

-Pueeees....- dice la chica sonrojada

-Déjala, torpe- dijo Rukawa con cara de zorro

-¿Eh?- preguntó Sakuragi al ver a su rival

-No mereces que ella esté contigo...-

-¡¡¡¡¡No te metas, kitsune!!!!!

-Eres un perdedor, admítelo...- dice Rukawa mientras abraza a Melu- Ella merece algo mejor ¿no lo crees?

-Sí...- dice con lágrimas en los ojos- soy un idiota....

-¡Hanamichi, no llores!- dice Melu mientras intenta ir a su lado, pero hay una barrera que se lo impide, deteniéndola en el aire

-¿Melu?

 

La video-girl flota en el aire mientras su cuerpo comienza a desvanecerse.

-Hanamichi...- murmura la chica antes de desaparecer-

-Me... Melu...- en ese momento la oscuridad se cierne sobre él

 

**** Volvamos a la cancha ****

 

Melu y Rukawa están en la cancha, están empatados por 49, ambos lucen un poco cansados, pero no se marcharán hasta no saber quién es el ganador.

 

-Muy bien, kitsune, quién enceste la próxima vez, ganará...

-Sí... pero no me digas kitsune

-Oye, tengo que disfrutar el momento, tal vez ganes...- dijo Melu botando el balón mientras Rukawa imponía una defensa, que pudo romper fácilmente- o tal vez no...

-Ni creas que te dejaré ganar...- murmura Rukawa tratando de reponer su defensa

-Je, no sueñes, kitsune- comenta Melu mientras se acerca a la canasta y  hace una clavada Airwalk, que deja a Rukawa con los ojos muy abiertos- ¡Esto se acaba aquí!

 

El ruido del balón pasando a través del aro y rebotando fuertemente en el piso se escucha en toda la cancha, Kaede Rukawa está en shock, una chica le había ganado, a él, el super Loki, no era posible.

 

-Ja, pensé que serías un oponente más fuerte, kitsune...- comenta la video-girl burlonamente mientras hace girar el balón sobre su dedo- fue muy fácil.

-...... Ten...- Rukawa lanza un pincel y tinta china a Melu

-¿qué?

-Yo siempre cumplo las promesas... píntame.

-Pe... pero...

-Anda, hazlo de una vez.

 

Melu comenzó a pintar el rostro de Kaede Rukawa, complementándole bigotes y nariz de zorro, al principio lo hizo con timidez, pero rápido se desenvolvió en el medio artístico.

 

-Bien, ya estas.

-mmh... espero que hayas pintado bien.

-¡Claro que sí! ¡Ah, ya es tarde, tengo que regresar a casa!¡Adiós!- Dice Melu mientras se aleja.

-Espera- Rukawa la detiene de la muñeca- te acompañaré.

-Gracias, Kaede-kun...

-¿uh?- Rukawa se sonroja- ¿po.. porqué me llamas por mi nombre si perdí?

-Porque demostraste que mereces toda mi confianza- sonrió Melu

-Yo.. yooo... gracias...

-Bueno, regresemos a casa antes de que Hanamichi despierte

-mmh... está bien.

 

*** Volvamos al sueño de Sakuragi ***

-¡¿Qué demonios pasa aquí?!- pregunta el pelirrojo envuelto en la oscuridad- ¡¡¡Melu!!!

-Cállate, torpe- le ordena una voz que le parece muy familiar.

-¿Kitsune?- Sakuragi voltea y efectivamente, es el zorro.- ¿qué quieres?

-Eres un perdedor... nunca podrás llegar a mi nivel...

-¡¡¡¡¡Cállate!!!!!

-Mírate, ni siquiera puedes jugar bien... eres patético

-¡¡¡¡Cállate, cállate!!!!- Sakuragi se tapa los oídos y cierra fuertemente los ojos

-¿Hanamichi?

-¿Eh?¿quién me llama?- pregunta Sakuragi al escuchar a esa voz tan dulce

-Hanamichi...

-¿Haruko?¿eres tú?- pregunta el pelirrojo mientras sigue a la voz

-Ven, Hanamichi...

 

Sakuragi abre una puerta y logra ver una hermosa colina, con un pasto muy verde, hermosas flores y muchas mariposas. Justo en el centro de la colina se encuentra un árbol, dónde se puede ver una figura femenina, pero no puede ver su rostro.

 

-Hanamichi...- la figura lo llama

-Sí, ya voy...

 

De pronto, el suelo estalla, Hanamichi cae a un precipicio dónde las heridas vuelven a abrirse, dejando que la sangre fluya a través de ellas.

 

-¡¡¡¡AAAAH!!!!

 

*** fin del sueño***

 

-¡¡¡¡AAAAH!!!!- Sakuragi saltó de la cama

-¿Qué te ocurre, Hana-kun?- pregunta Melu, que se encuentra a su lado

-¡Melu!¿Te encuentras bien?¿No estás herida?

-Calma, de seguro fue una pesadilla.

-¿Pesadilla?

-sí, ¿no recuerdas la bicicleta y...?

-¡Ah, sí!¡¡¡Ese maldito zorro me las pagará!!!

-Torpe...- dijo Rukawa desde el sillón

-¡¡¿Que hace este idiota aquí?!!!......¡¡¡¡¡JAJAJAJAJAJAJA!!!!!- Sakuragi comenzó a carcajearse cuando notó que Rukawa estaba pintarrajeado

-Ah, él me ayudó a traerte hasta aquí... fue muy amable

-¡¡¡¡¡Jajajajajajaja!!!!!Claro, algo tenía que hacer después de arrollarme.

-No te enojes, Hana-kun.

-grrr... está bien

-Bueno, yo ya me voy- Dice Rukawa mientras se levanta del sillón

-¡¡¡Ándale, ya vete!!!¡¡¡¿Qué esperas?!!!- ladró el pelirrojo.

-mmmh... torpe... Adiós, Melu…- se despidió el zorro

-¡Espera!- exclamó Melu- te acompaño hasta la puerta, Kaede-kun

-¿Uh?- Exclamó un megaconfundido Hanamichi.

 

CONTINUARÁ

 

<---ATRÁS