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CAPITULO 15

LA ESPIRITUALIDAD DEL MILITANTE DE LA ACCION CATOLICA

OBJETIVO: Ubicar la espiritualidad del laico, cristiano comprometido con la realidad temporal.


Identidad laical.

  • La Acción Católica es un movimiento de laicos. "Erais laicos, y laicos habéis seguido siendo (1)
  • Todas las exigencias y limites, toda responsabilidad y compromiso propios de los laicos, le son aplicables. El ámbito propio de la Acción Católica - aun en vinculación mas estrecha con la Jerarquía - sigue siendo el mundo de las cosas temporales. Allí tendrá que realizar su evangelización y santificación, según su estilo propio. (CH.L 91c).

    La Acción Católica es un movimiento esencialmente "secular". Le corresponde, por consiguiente, santificar al mundo, "desde dentro" y "buscar el Reino de Dios tratando y ordenando, según Dios, los asuntos temporales (2)

    Todo tipo de espiritualidad, formación o acción apostólica, que intente desconectar al miembro de Acción Católica de su mundo concreto y de su determinado momento histórico, desubica al laico y desfigura su presencia. La primera exigencia de un miembro de Acción Católica es sentirse verdaderamente laico y vivir a fondo su compromiso secular". Con todos los riesgos que supone, pero también con todas las gracias que reclama.

    Acción Católica: Fin espiritual.

    La AC pertenece a aquellas instituciones "que tienden inmediatamente a un fin espiritual (3). Su finalidad no es la construcción directa del orden temporal, sino la formación cristiana de la conciencia de los hombres para que ellos saturen con el espíritu del Evangelio las diversas comunidades y ambientes.

    A ello tiende, también, su tarea de evangelización y santificación (4). La AC puede caer en la tentación de una actividad puramente temporal. "La atracción del compromiso temporal es fuerte y seductora". (5).

    Sentido del compromiso temporal en la Acción Católica.

    La AC tiene el fin apostólico de la Iglesia, es decir, en orden a evangelizar y santificar a las hombres, y a formar cristianamente su conciencia". (8). No son tres tareas separables. Toda auténtica evangelización -anuncio de Cristo y mensaje por el testimonio de vida y la palabra - tiende a provocar el cambio radical (la conversión) en aquellos que la acogen y a ponerlos en condiciones de que puedan libremente realizar su vocación divina. La evangelización, si es verdadera, abarca necesariamente el ámbito de la promoción humana integral, de la liberación plena de Jesucristo. La santificación supone la formación del "hombre nuevo, creado en Cristo Jesús por el don de su Espíritu.

    Además, la evangelización propia de la AC - idéntica en cuanto al mensaje evangélico y a su finalidad de conversión - no es igual a la del clérigo o religioso en cuanto al modo y las circunstancias. Tiene su originalidad propia y su eficacia, según su estilo secular (7). UBICADO EN EL MUNDO COMO FERMENTO DE DIOS y comprometido con el orden de las realidades temporales, el miembro de AC proclama las invariables maravillas de Dios con lenguaje y gestos distintos.

    Intimidad con el Padre, configuración con Cristo y docilidad al Espíritu.

    En consecuencia, a los miembros de la AC se les pide hoy una vida espiritual intensa: una configuración más honda con el Cristo que vive en ellos y los envía, una docilidad más pronta al Espíritu que habita en ellos y los impulsa, una mayor intimidad con el Padre que los está continuamente llamando y espera su respuesta. (CH.L.17).

    Hace falta que el laico aprenda a realizar su santidad en el mundo, a orar en lo cotidiano, a vivir las virtudes teologales en el compromiso de las cosas temporales. (CH.L.36).

    Sentido de la espiritualidad a la luz del Vaticano II.

    El Decreto Apostolicam Actuositatem dedica el No.4 a hacer una descripción de la "espiritualidad", en el sentido de regla, método, sistema o forma de la vida interior del seglar en Cristo; en una palabra, el camino seglar de perfección cristiana y de santidad.

    El concilio lo ha hecho también en el capítulo IV de la Constitución Lumen Gentium, donde expone la espiritualidad del seglar.

    Finalmente, en el Decreto, (A.A.No. 29) se lee: "Puesto que los seglares participan, según su modo, de la misión de la Iglesia, su formación apostólica recibe una nota especial por la misma índole secular y propia del laicado y por la regla de su vida espiritual.

    En uno de los párrafos del No. 4 del mismo Decreto, afirma que, además de la espiritualidad propia de todos los seglares, "aquellos que siguiendo su vocación se han inscrito en algunas de las asociaciones o institutos aprobados por la Iglesia han de esforzó, a la par, por revestirse finalmente de la nota peculiar de espiritualidad propia de aquellas".

    La vida espiritual según la Christifideles Laici.

    Esta exhortación apostólica de Juan Pablo II - fruto del Sínodo de los Obispos de 1987- contiene muchas referencias a la espiritualidad, del fiel laico.

    Apuntamos a continuación algunas citas:- Llamados a la santidad:

  • dirige a todos ellos en Jesucristo por medio del Espíritu: la vocación a la santidad, o sea a la perfección de la caridad.
  • la imitación de Jesucristo:
  • En la recepción de sus bienaventuranzas.

    En el escuchar y meditar la palabra de Dios.

    En la participación consciente y activa en la vida litúrgica y sacramental de la Iglesia.

    En la oración individual, familiar y comunitaria.

    En el hambre y sed de justicia.

    En el llevar a la practica el mandamiento del amor.

  • En todas las circunstancias de la vida y en el servicio a los

    hermanos, especialmente si se trata de los más pequeños, de los

    pobres y de los que sufren. (CH.L 16)

  • Espiritualidad:

    Una buena manera de vivir en Cristo.

    Cuando un seglar se adhiere a la AC va a hacer en ella la EXPERlENCIA RELIGIOSA DE SU SEGLARIDAD, con todo lo que significa vivir profundamente, su condición y sus responsabilidades de miembro del Pueblo de Dios.

    La AC es UN GRUPO SOClAL ABIERTO del laicado, una gran comunidad orgánica de apostolado cuya espiritualidad es sencillamente "una buena manera de vivir en Cristo (9) en las condiciones seglares absolutamente comunes de la vida.

    La vocación de AC es sencillamente SER PUEBLO, es decir, la vocación apostólica de cualquier persona del Pueblo de Dios. (CH.L. 16)

    Esquema para una espiritualidad del fiel laico.

    En este sentido y como una síntesis final de todo lo hasta aquí reflexionado, proponemos en forma esquemática la dimensión y los medios de una espiritualidad del fiel laico, en orden a hacer viva y operante su presencia en el mundo de hoy:

    Dimensión:

  • encuentre al Señor.
  • Medios:

    BIBLIOGRAFIA:

  • Méx.).- CELAM.
  • Pablo ll.- Ed. Paulinas, SA de C.V.
  • ClTAS:

  • 1.- Pablo Vl, a la Acción Católica Italiana, 8-XII-68.

    2.- LG. 31

    3.- A.A 24

    4.- AA 20

    5.- Pablo Vl, 10-X-69

    6.- AA 20a.

    7.- L.G. 35

    8.- Cf. Rm. 6,22; Ga 5,22.

    9.- I. Pe 3, f6.
     
     

  • IMPORTANTE RECORDAR:

  • La vida según el Espíritu, cuyo Fruto es la santificación, suscita y exige de todos y de cada uno de los bautizados el seguimiento y la imitación de Jesucristo.
  • PREGUNTAS:

  • 1.- Menciona algunas de las exigencias que tenemos que vivir para imitar a Jesucristo.

    2.- ¿Cuáles son los medios para vivir la espiritualidad del laico?

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