CIENCIA

JARDÍN BOTÁNICO DE LA UNAM, REFUGIO DE PLANTAS EN PELIGRO DE EXTINCIÓN

  • Extranjeros roban cactáceas en su ambiente silvestre, aunque están en peligro de extinción

  • Países de Europa, los principales traficantes

  • No existen leyes para proteger el tesoro botánico

 Por Joel González

 

México, 17/05704 (AUNAM).- Ante la problemática que representa la destrucción del hábitat y del saqueo de especies con fines comerciales, muchas instituciones, incluida la UNAM, realizan esfuerzos por preservar la riqueza vegetal del país. Estas acciones incluyen la vigilancia, información y reproducción de ejemplares; afirmó Martha Lilia Cruz Torres, del Área de Difusión y Educación del Jardín Botánico de la UNAM.

Esta entidad, que forma parte del Instituto de Biología, es depositaria de especimenes en peligro de extinción, decomisados tanto en México como en el extranjero. En algunos casos y cuando es posible, se regresan los ejemplares a sus lugares de origen. En otros, las plantas se colectan para mantenerlas y propagarlas. El objetivo: conservar la diversidad de flora que distingue a México de otros países. Además, reproduce especies en peligro de extinción a partir de semillas o mediante el cultivo de tejidos.

El peor enemigo de las cactáceas es su belleza

 Sobre el peligro de extinción de las cactáceas y la importancia de su preservación habló Léia Scheinvar, investigadora del Jardín Botánico de la UNAM. “La formación de nuevos asentamientos humanos, el avance de la civilización y el mercado ilegal son factores determinantes en la destrucción de estas plantas, cuya existencia contribuye a la conservación y fijación de los suelos”.

Scheinvar explicó que algunas plantas de este género, como el nopal, cumplen un papel ecológico importante, ya que en sus raíces tienen bacterias y hongos asociados donde fijan el nitrógeno del aire, enriqueciendo el suelo y evitando la desertificación. La especialista señaló que en México existen 894 especies con 283 variedades, de las cuales 66 son endémicas.

“Las cactáceas mexicanas son parte importante de la riqueza biológica de México; deben tomarse las medidas necesarias para evitar su extinción, porque este tipo de plantas son más frágiles de lo que suponemos a partir de su apariencia. Para que una cactácea tenga el tamaño de una biznaga grande en el campo, puede tardar más de 100 o 200 años. Urge un reglamento que controle el aprovechamiento de plantas silvestres” declaró la colaboradora del Laboratorio de Cactología en la UNAM.

En el año 2000, la PROFEPA repatrió más de 900 cactáceas que fueron extraídas ilegalmente del país. A finales de ese mismo año, se logró la repatriación de 72 especimenes y semillas de cactáceas pertenecientes a trece especies. Muchas de estas fueron confiscadas por la autoridad correspondiente, en el Aeropuerto Internacional de Praga, Republica Checa.

Durante el mes de marzo de este año, en el aeropuerto Schipol, en Holanda, dos personas de nacionalidad alemana, provenientes de México, fueron sorprendidas con 927 ejemplares de cactáceas de diferentes géneros, mismas que transportaban en su equipaje.

De estas, 758 tienen estatus de protección, de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-ECOL-059/1994, y se encuentran listadas en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).

El Jardín Botánico es una de las unidades académicas del Instituto con mayor imagen al exterior gracias a sus programas de Difusión y Educación, y de sus importantes colecciones de plantas vivas. Cumple con las funciones de Investigación, Difusión, Educación y Conservación de Recursos Vegetales. Actualmente están en desarrollo 54 proyectos de investigación en Sistemática, Etnobiología, Biología de la Conservación, Cultivo de Tejidos, Citología e Investigación Documental.

 

ww