BIBLIOTECA UNIVERSITARIA CON LA WEB 2.0
La Biblioteca Universitaria entendida como eje del acceso y gestión de información en la comunidad educativa superior puede y debería incorporar el modelo de Centro de Recursos para el Aprendizaje, el cual desde hace varios años ha venido implementándose con éxito a nivel escolar.
Para que esto ocurra la Biblioteca Universitaria debería de comprender y adoptar las nuevas tendencias que se vienen dando gracias la incorporación de las Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación en los que podríamos llamar los tres factores de sociedad del conocimiento actual. Estos factores son: El entorno educativo, el manejo de la información y la versión Web 2.0: La red social.
En este nuevo entorno, la educación ya no está centrada en el maestro, sino en el alumno, ya no solo se enseña conocimientos, ahora la formación busca desarrollar competencias. Una competencia es la unión de tres componentes: conocimientos, habilidades y actitudes.
Estos nuevos métodos de enseñanza buscan dar prioridad al desarrollo de competencias, dando especial atención al desarrollo de habilidades que permitan aprender a aprender e interpretar, a organizar y utilizar información.
En cuanto a la incorporación de las Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación en el campo educativo Nicholas Burbules, doctor en Filosofía de la Educación de la Universidad de Stanford, afirma que atravesamos un momento histórico único debido a que:
“…hoy los jóvenes saben más que los docentes sobre las tecnologías de la comunicación”. Y va más allá: “Si los profesores midieran la cantidad de horas que los jóvenes pasan trabajando en sus Blogs, deberían preguntarse si ellos pueden reunir tanta energía y volcarla en una actividad de aprendizaje…”
El desafío de los educadores de hoy sería tomar esa fuerza creativa y usarla para desarrollar las competencias que requiere el ciudadano del Siglo XXI: creatividad, innovación, comunicación, colaboración, investigación, manejo de información, pensamiento crítico, solución de problemas, toma de decisiones, etc. mientras tanto los estudiantes adolescentes y jóvenes de las universidades e institutos de educación superior, sobre todo las nuevas generaciones de ingresantes, están pasando a ser los
La Nación. 2007 llamados “Nativos digitales” que conviven, se comunican y aprenden en un nuevo y diferente entorno tecno-social. Ellos suponen o esperan que la incorporación de las nuevas tecnologías de información y comunicación en el proceso enseñanza aprendizaje superior les sea dado como una proyección natural de lo que ya vienen trabajando en muchas instituciones de nivel escolar y en el entorno en el que viven.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) considera que en los próximos 30 años será necesario educar a más personas que en toda la historia anterior, esto implica que en momentos en que la economía mundial se basa más que nunca en la capacidad intelectual y la innovación para generar la riqueza, una moderna educación superior que busque el desarrollo de competencias del ciudadano del siglo XXI y que incorpore las tecnologías de la información y comunicación determinará quién tendrá éxito.
Ante los profundos cambios que se vienen dando en el entorno educativo es necesario revisar si las Bibliotecas Universitarias de nuestro país vienen evolucionando en la misma medida en cuanto al tratamiento de la información. Lamentablemente a simple vista esto está sucediendo solamente en contados casos a pesar de los profundos cambios que se vienen dando en los contextos educativos, de manejo de información y de uso de las tecnologías de información y comunicación.
Las Bibliotecas Universitarias al igual que la educación en general en nuestro país deberían estar atravesando por un periodo de cambios profundos en todos los ámbitos de su estructura. Pese a ello se ve que lamentablemente en algunos casos se cuestiona la utilidad de las tradicionales Bibliotecas en el proceso educativo moderno debido a que muchas de ellas proyectan una imagen de estancamiento en el tiempo dentro de la hoy moderna y dinámica vida Universitaria.
Buena parte de Bibliotecas Universitarias aun mantienen una estructura organizativa basada en principios del siglo pasado. Así podríamos decir que en muchos casos las universidades peruanas actualmente poseen bibliotecas con estructuras y servicios tradicionales e invariables desde el siglo XIX, que prestan sus servicios a profesores del siglo XX, que a su vez necesitan reducir la brecha digital frente a los estudiantes nativos digitales del siglo XXI los cuales buscan alcanzar una plena formación profesional en plena era de la información y del conocimiento.
Si por un lado los profesores buscan desarrollar capacidades en sus alumnos, los profesionales de la información que vienen renovando los servicios y la estructura de la Biblioteca Universitaria en donde laboran, requieren que las tecnologías y servicios que vienen incorporando para el manejo y tratamiento de la información permitan a los usuarios (alumnos, docentes, investigadores, etc.) desarrollar habilidades de información.
El reto de los nuevos profesionales de la información será el encontrar el valor agregado a todas las nuevas herramientas que surgen como la Web 2.0 y 3.0 las cuales se espera serán utilizadas en forma masiva en un mundo cada vez más globalizado altamente tecnificado y con cada vez mas posibilidades de acceso a la información del ciudadano virtual.