El poema de las gentes

Información Editorial y créditos


Este libro en formato electrónico se editó en noviembre de 2002
EditArte DGtal, Campeche; México

Ilustración de tapa por Beatriz Garcés: “Casa Cural”
Técnica: Acuarela
Formato del original: 35 cm. x 28 cm.

Créditos:

Gracias a los lectores,
sin los cuales este libro no tendría razón de ser.

A Daniela, por clonarme.

Colaboración informática del “güero”
y como siempre Sabeli.

 

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INDICE

 


 

 

 

 

Introducción

 


Este libro contiene un puñado de poemas que mis manos depositaron en él. Algunos son recientes, otros tiene cinco años o más.
A menudo leo en los prólogos -entre sesudas “aproximaciones” o “abordajes” al “texto”-, que el libro es producto de un arduo trabajo, esto entre una sarta de obviedades intelectuosas y altisonantes.
Creo que el arduo trabajo responsable de la generación de estos poemas es vivir, y por ese don que los poetas tenemos, acá están, en sus manos. Como ven, esto intenta significar que estos poemas van de mis manos a las suyas.
El trabajo de vivir pudo haberme llevado a la pintura, a la bebida, o generado pasión por el boxeo.
Yo afirmo por ahí que la poesía no es lo más, simplemente lo que me tocó, gracias a ese don que en el poema de cierre denomino El don de los imbéciles.
Creo, y soy insistente y reiterativo sobre ello, que este arte no es la elaboración de un andamiaje estético: el desafío es poner todo de sí, para servir de expresión a los que no tienen “el don”, el andamiaje viene después y es secundario.
“La voz que te brota de la entraña insólita” (1), “rostros oscuros los escriben como tirar contra la muerte” (2), dicen dos hermanos poetas, y encontrarán en uno de mis poemas un verso casi idéntico. Estos hermanos se refieren a lo mismo, un hilo invisible une esos versos, versos que para ellos son “la cal de los poetas muertos”, o “mis cenizas”. Como dice el poeta que hay en mí en Libertad bajo palabra, pintamos sobre el mismo lienzo una y otra vez todos nosotros.
Volviendo a esa eterna discusión sobre la estética, creo que la única estética que perseguimos los poetas es revolucionaria, eso fue así siempre.
Después los profesores y catedráticos minimizarán esta actitud vital, asegurando que “se trató de un gesto de rebeldía juvenil”. Así le enmiendan la plana a José Juan Tablada, Nicolás Guillén, Oliverio Girondo, Vicente Hidobro... menudos tontitos rebeldones.
Por suerte, esos tontos pasaron a la historia junto a otros grandes, y los eruditos pronto son historia, como sus manuales amarillentos.
Pero todo esto no es lo importante, lo único que importa es la poesía, y allá vamos.

 

El autor

 

(1) Miguel Otero Silva, (2) Juan Gelman.

 



 

 

 

 

 

I. Arte poética

 

 

 


Arte poética


El poema es el autor y sus sueños
Contiene la ternura
encierra el progreso
el éxito económico
El poema es una antología
Reúne miles de versos
tiene tapa de pasta
se rodea de gruesos libros
A su derecha Gelman
Paz y Ruiz Huidobro
A su izquierda Ferlinghetti
Lynn Emanuel y Belli
El poema se construye
con la sustancia misma de los sueños
Mienten
los que crean un andamiaje estético
un fósil estructurado por la mente
El poema no es “un arma cargada de futuro”
porque su creador está más allá del tiempo
El poema es una puerta
que nos sincroniza con el todo
El lector ve cómo se derrumba
el espacio entre sí y el que escribe
Por eso sientes que te toco el alma
por eso te la toco
mientras escribes en el alma este poema.

 

 



 

 

Libertad bajo palabra


a Octavio Paz y cada poeta

 

Libertad bajo palabra
construída con letras en poesía
escrita con signos
en la cárcel
de la mente

todo poema se cumple
pese al poeta
alegría y dolor en cada pujo
que expulsa al mundo lo creado
compulsión de la obra que sola nace
palabra fácil
la poesía

cada poeta apéndice
de la Gran Obra
que se escribe apilando cráneos de "creadores"
como un extenso cordón que liga
placenta

octavio whitman
cada uno voz de nuestra multitud
nuestro arrebato
dibujando una vez más
el mismo mundo
pincelando con color variado
usando un mismo lienzo
capa sobre capa
muchacho sobre muchacha
joven inclinada
sobre su secreto
calles donde te sigo
me sigues
paisajes oscuros de soledades
de fuego y sexo
todo el universo en palotes
esbozos
incompletos
ansia y dolor en letras

como unirse a la mujer amada
y sentirse aún incompleto
esperando el milagro
recordar a la que enamora
aquella más amada que la que amas
la inasible
la lejana

la que amarás
si ella lo quiere un día de estos
y te fecunda el alma.


Nota: incluye citas textuales de Paz en bastardilla, último verso auto cita.

 

 



 

 

 

El sentido de la vida


Algunas mujeres me dedicaron poemas
propios o ajenos
como una manera de compartir lo más lindo
de su vida
Yo escribí parvas de poemas
buenos
mediocres
vomitivos
a noviecitas de mi adolescencia
mujeres de peso en mi vida
amores imposibles
chavitas de prepa
chicas que caminaban por la calle
y eso es lo más lindo de mi vida
A lo mejor no logro tapar bien el sol
con la mano
Quizá jamás me pierda en el musgo húmedo
de esa hondonada que anhelo
Puede que jamás triunfe la revolución
porque está fuera de moda
Pero dibujar una nube en un poema
acariciar tu entrepierna en este verso
o escribir marcos no te rindas
me transforma en ganador
y esta telaraña que decía mi padre es la vida
al fin tiene un sentido.

 

 



 

 

Por qué escribo


Es sábado de gloria hoy
es sábado de gloria
recuerdan las viejitas piadosas
los comedores de todo lo usual en pascuas
los turistas de fin de semana largo
Es sábado de noria
en este cuerpo que me aprisiona
y del que sólo me libero al lanzarme al abismo de la palabra
Oscuras
tan oscuras mis palabras
como el fantasma de la muerte
como el fantasma de la locura
como el lento tobogán de la vida
¿Por qué escribo,
para quién escribo?.
Camino solitario
camino solitario y oscuro
camino solitario
oscuro
sin rumbo
No hay ninguna meta sino el paso desmedido de las letras que se hilvanan
No escribo para quien escuche o lea estas palabras
no escribo para los que esperan una estética donde sólo hay sangre y sexo
no escribo para mí
sólo escribo para ganarle una partida a la muerte.

 

 



 

 

A mi poesía, nuestra poesía


Paso a paso
apoyando el alma en cada verso
doy nacimiento a la poesía
Como con miedo de desnudarme frente a ella
prolongo los besos
las caricias
evito el acto apasionado
Con timidez esbozo carbonillas
me escapo de la espátula y el óleo
Prefiero los pasteles
los ocres y los sienas
ni el rojo del sexo
ni el naranja apasionado
Arráncame la máscara y la ropa
desnúdame el alma
mi poesía
mi poetisa
ámame
puro fuego
enciende mis versos más ardientes
que quiero abrasarme en la locura del encuentro
Se me va la vida detrás de miedos e imposturas
de ficciones masturbatorias
de amor y de poesía
No quiero escribir mi historia con supuestos y esperas
Quiero un poema de caricias
de manos que recorren
de entregas totales
no fingidas
Quiero el verso de tu cuerpo junto al mío
y la aliteración de los te quieros.

 

 



 

 

Crucificado en mi poesía


No comparto la poesía de puro humanitario
es mucha carga para un hombre solo
Esas letras
con forma de columpios o de tetas
de hombres y de cruces
hablan de amores
muertes y placeres
de toda esta cruz que llaman vida
Yo sé que algunos me maldicen
cuando les entrego un poema
samaritanos obligados
acompañando mi calvario
"Éste será el último"
digo siempre al regalarlos
hasta que llega otro
clavo en mis pies
mis manos
y me crucifica en la poesía.

 

 



 

 

Poeta en el balcón


Cuando salgo al balcón
cara a la ciudad
si es el poeta el que sale
¡atención!
Es una vista enferma
rotulatoria
la que flashea la calle
Cobra otra dimensión el comerciante
en su día de descanso
limpiando
lustrando
lavando
su carro
de vidrios polarizados
con adornos vulgares
quinta limpieza del día
La vecina que cuelga ropa
alzando los brazos despreocupada
insiste en mostrar las pantaletas
y no hay objeciones
al erotismo ocasional
Las teens que se pasean por la calle
tienen cara de cerveza anoche
y me dijo
le dije
me tocaba
a mí me gusta
El voyeur en el balcón
viendo pasar la vida
fumando un cigarro
con la lividez de la muerte
quizá sea como yo
un poeta
extrayendo unos versos
de entre un montón de basura.

 

 



 

 

Poetree


Una sola manzana quita la razón
¡un kilo quiero!
Enloquecer bajo tus ramas que me abrasan
que me abrazan
sentir que es sexo cada verso
henchido de placer y padecer
parecer sólo un poeta.
¡Un poeta, mierdas!
¡Raza de empleados vientres gruesos!
¿Es que es ese el sentido de la vida?
Como perros mimados por su dueño
meneando la cola por comida
aunque el cuello -de collares dolorido-
me muestre esclavitudes y miserias
Mi seria razón es la poesía
vida de vidas
presumida altanería
contagioso sida del que no es inmune al sentimiento
Miento cuando siento que me enfrío
la vida me calienta las entrañas
y calienta las tuyas si te acercas
En el árbol me enciendo y la manzana
-siempre en manos femeninas-
despierta la poesía
abre los ojos desde el alma
Una ella me late en cada verso
pues poesía es el acto consumado
plagado de virtudes y pecado
Arbol
manzana
deseo trasmutado

 

 



 

 

Trabajo de locos


Me preguntaron si estaba enamorado.
Les dije que, sin duda,
del amor.
Arguyeron que hablaba de ojos claros,
intentaron saber si algo pasaba.
Me acosté en el diván
de su mente
y comenzó el interrogatorio.

Que si debo, que si puedo, que no creen.
Me acusaron
de cierta adolescencia.
Les expliqué el acto poético,
el trabajo actoral,
el recrear un sentimiento.
Les demostré lo que creían,
dentro del poeta conviven

subversivos locos maricones.

 

 



 

 

No alcanza

Siempre estará allí cuando él la busque
para llenar la copa si el amor no alcanza
asegura.
Dice que él merece pasión a deshoras
un abrazo a media tarde
caminar con alguien de la mano
sustentando el universo asido
entre los dedos.
Le pide que su afecto alcance para ella
que cierra puertas y eleva muros para defenderse del dolor,
pero que por favor no los derribe.
Ruega que pese a ser distinta a él
no le niegue su afecto
aunque no pueda tomar el riesgo de hacer sus maletas
y perseguir un sueño de amor
Ella no aceptaría que él las empaque y se las cargue
Le pide un abrazo eterno
y que se quede al lado de sus silencios
lloriqueándole su dolor
aunque no le seque su llanto
con los labios
Ella le ofrece su afecto
todo el afecto que sabe sentir.
A él no le alcanza
Se quiere beber su sangre
comer su carne
la antropofagia del amor y la pasión en un instante
Después quién sabe
Un camino en el bosque
pisando las hojas doradas y marrones
una capa de terciopelo rojo tendida en el pasto
cobijando sus cuerpos desnudos
El sabor salobre del mar
o de sus sexos
la textura de su piel
como un papel
en que volcar tanta poesía

 

 



 

 

Una semana más


Pasó otra semana
y yo sin resolver
los misterios de la vida
(la múltiple legión de jabones
y toallas en los baños de la gente,
el cruzarme la mirada justo con esos ojos
en algún semáforo perdido,
la fuga de aquella que más quise,
la ausencia de quien comienza a enamorarme).
Pasó otra semana
y mi hija ocupada en su locuela,
menos ángel y más diablo, como yo.
Pasó otra semana
y el diario del domingo,
la muerte que no me llega,
tu poema que espero,
nuestro encuentro postergado.
Pasó otra semana,
por suerte la poesía me calienta
el pecho y las entrañas
para seguir viviendo.

 

 



 

 

Tres Amores


Ella dejó en la mesa
un pesado bolso.
Ella un puñado de palabras.
Ella a Freud, Lacan y Jung.
Las tres se sentaron enfrentadas.
Él las miraba inexpresivo.
-No sé cómo decirlo-,
alcanzó a decir al techo
-pero me han enamorado-.
Se miraron, remiraron,
no había duda,
estaba dicho.
-El tema es que nunca había pasado,
tres sonrisas, tres amores y tres mundos,
y no sé de que manera repartirme,
quise que resuelvan por ustedes-.
Desplegaron extraños sortilegios,
arrojaron cartas y monedas,
hablaron, se tiraron de las mechas,
lo desnudaron, lo gozaron, lo mordieron.
Esa noche fue su hombre, esa noche,
pero por la mañana se marcharon,
Ella con su pesado bolso.
Ella con su puñado de palabras.
Ella con Freud, Lacan y Jung.

 

 



 

 

Las cosas perdidas


Quiero descubrir un exorcismo seguro
que me permita recuperar las cosas perdidas en mi vida,
aquellas mágicas,
aquellas trascendentes,
o las destacadamente pueriles.
Quiero recuperar la fe perdida,
las esponjitas del walkman,
las empanadas de Mirtha,
la grabación del ensayo de mi banda adolescente,
la risa desencajada del porro.
Necesito rescatar las piruetas de mi hija mayor cuando era beba,
el dolor de casi perder a la pequeña,
(eso querría decir que aún está conmigo,
mejor sufrir por una pérdida futura
que haberla perdido ciertamente).
Deseo recuperar las tetas y los dientes de Lorena,
mi audiencia y mi micrófono,
mi dignidad, que se robaron los corruptos.
Me es imprescindible encontrar
un futuro y un trabajo,
el amor, la piel, el alma de tus ojos,
-y aquí recuerdo a mi poetisa,
que no quiero perder recién hallada-.
A veces tengo miedo de no encontrar jamás la fórmula
para vencer al demonio de la ausencia,
entonces recurro al antiguo sortilegio,
derrotarlo negando su misma realidad.

 

 



 

 

de los hombres soñadores


En la noche
se escuchan las voces
de los hombres soñadores
Son voces sonoras
como porcelana fina
al ser golpeada
traslúcidas
con la belleza
de lo que contiene alimento
El amanecer
recoge las voces mansas
y las esconde en la luna
adonde van
-cuando mueren-
las almas de los ositos de peluche
los grillos
las luciérnagas
Allí quedan
danzando de cráter en cráter
sin perderse
hasta que un hombre común
abre los ojos
mira hacia luna
y comienza en su voz
la gran metamorfosis
que lo transforma en soñador
y abre su alma
hacia el encanto.

 



 

 

 

II. Apología de lo breve

 

 

 

dedosenelcorazón


Después que me miraste me brotaron dedos en el corazón que mueren por acariciarte pero saben que mi amor es un amor imposible como esos que necesita cualquier adolescente y jamás se animarían a correr por tus mejillas: si cerraras tus ojos sería tan doloroso como atraparse los dedos con la puerta o más porque me dolería el corazón.

 

 



 

 

Hoy me devoré


Hoy me devoré los viejos recuerdos buitres eternos pensando en tí para ser libre de ser tuyo y atesorarte a tí nada más que a tí capitalista de tu amor como monopolio en mi corazón y leí leí leí el único poema que ofrenda mi amor mi verdadero único sentimiento como paloma en tus manos buscando renacer quizá príncipe quizá morir allí anhelando nacer a otra vida que lleve tus ojos tu sonrisa
tus besos

 

 



 

 

just like ' woman


Entre tanta chavita con ganas de ser mujer justo vengo a dar contigo tan mujer que estás convencida de ser una chavita a lo mejor con miedo de que la vida te trague como el lobo a Caperucita a lo mejor con ganas de que te mastiquen los huesitos hasta sacarte el caracú y saber qué se siente al pasar a ser parte del otro devorada consumida rebalsando licor entre las carnes después del gran banquete en que parte del lobo quedó dentro de tu vientre.

 

 



 

 

Mis besos en tu cuerpo


La línea que une tu pubis con tu ombligo, no es más que la huella de mis besos grabada en tu cuerpo.

 

 



 

 

Mujeres de la vida


Hay mujeres que llevan la vida adherida/ y se les nota/ una comparsa de estrellas les desfila por la cara

 

 



 

 

patrimonio


En el amor se acostumbra mirar hacia adelante quizá por eso no te interesó saber si pasé por algún matrimonio y te preocupó tanto si tenía patrimonio (después de todo da más seguridad un techo que un globito).

 

 



 

 

Soy trigo


Sé que soy trigo en el molino de la vida al que las muelas transformarán lentamente en harina para amasar el pan que impiadosa devorará la muerte

 

 



 

 

Te pienso


Hoy te estuve pensando
pero quiero ser paciente

quizá tu amor me cure

 

 



 

 

Pendejo


El hombre quería gritar fuerte fuerte
la mujer le decía espera no seas pendejo
pendejo
que están mirándote

me cansé de mirar hacia adentro
y ese pendejo no grita mis te amo.

 

 



 

 

Incesto

Fuiste como una hija
o quizá como una hermana
porque tu madre era mi madre
Vos
la mujer de un semidiós
el amor más allá de las normas mortales
más acá
el incesto.

 

 



 

 

La mujer de mis sueños


dijo no importarle
mi miseria
ni que tuviera veleidades de poeta
no se fijó en mi calva
ni me vio como un escracho

creí mi deber hacerle el amor toda la noche

después desperté

 

 



 

 

Si esto es amor

El amor no es esto
es otra cosa
No es estar atado de pies y manos
No encerrado en una cárcel
para estar a salvo de pecado
No es un par de ojos vendados
en la fe que se profesa
por un carcelero ciego

 

 



 

 

III. De amores y humores

 

 

 

El jardín del diablo (Bienvenidos al Turbio)


Tronco sobre tronco
en la ladera húmeda y musgosa,
donde el sol es ocasional marinero.
Cae, cae, cae, el agua cae, cae,
en el claro cae,
en el pozón cae, cae, brilla,
humedece refresca el rostro.
Sol irisado en gotas
sobre le verde agua del musgo,
la cascada en cadencia de cadera
encadenada a mi mirada.
Perfume de troncos húmedos en el agua,
donde las anguilas escapan
de la prensil aventura de los niños.
El Rey Carmesí lleva en la boca el sabor amargo
del avellano silvestre
que escondido en el bosque burla la helada.
Lejos a lo lejos, el bramido del toro salvaje,
el retumbar de sus pezuñas en la tierra,
evoca el terror de una era de dragones.
Cuando el caminante haya pasado
el bosque tragará su recuerdo
y no quedarán huellas de su paso
en la naturaleza virgen, siempre virgen.

 

 



 

 

El poema de las gentes

 

Así quiero que canten/ mis poemas/ que lleven/
tierra y agua,/ fertilidad y canto/ a todo el mundo.


Pablo Neruda


El poema de las gentes
el que les pertenece
no otro
quiero dibujar entre mis letras
El del oscuro pueblo
las mujeres gruesas y velludas
los rostros aborígenes
Quiero poemas a montones
ser prolífico
como vientre de mestiza
como mazorca de maíz
nutrirles el hambre elemental
Mi poema
que sea el pecho de las gentes
la leche tibia
la harina torteada sobre el comal
Que se escuche bajo la palapa
retumbante su voz
como piso de tierra
que su voz tenga el vaivén de las hamacas
al llegar la siesta
el sudor de los cuerpos
amándose en vaivén
Que sea un puñado de granos de elote
besos en la madrugada
simiente abriéndose paso en marejada
Sólo así tiene sentido
este lento
doloroso
desangrar de mis palabras.

 

 



 

 

Eres tú


Eres la magia de mi vida
y la sangre que corre por mis venas
la fuente que apaga mi sed
y el jardín que perfuma mis sentidos
Eres la sombra
que cobija mi sueño
y el sol del ocaso
Sin tí vagar por los infiernos
sin tí oquedades y abismos
sin tí el destierro del alma
la pérdida del habla
la muerte del amor
Porque eres del mar
el furor de la rompiente
y yo la arena
latiendo en tí entremezclada
así como corre tu sangre
por éste
mi corazón enamorado.

 

 



 

 

No te molestes


No hace falta
Seguro vas a decir que me querés
que el agua moja
y todas esas cosas de mujer enamorada
Yo no te voy a mentir
el amor existe
amé otras veces
y una vez casi muero por hacerlo
-es que hacerlo con ella era prohibido
por ese tema de las leyes y el estupro-
Pero de verdad
no te molestes
en decir que me querés
no usés palabras
que tienen un peso revocable
-el agua
si bien moja
a veces es ácida y corroe-
Yo diría que me beses
Que hagamos el amor
o como pinte
Que me escribas un poema
La palabra leve y medida no pesa
El poema es la levedad de una pluma
ascendiendo
en el aire caliente del verano.
Que dure lo que dure
una eternidad o un beso
de sobra sé que el amor es fugaz
como la vida.

 

 



 

 

Como al mar te amo


Llegas hasta mí como el mar cuando en él me adentro
Me vas tomando poco a poco
bañandome de caricias que me estallan en el alma.
Hasta siento deseos de zambullirme
de perderme en tu inmensidad
para que tu amor inunde mis pulmones
Sin embargo
te bebo a sorbos
sin poder saciar mi sed de tí
mi deseo de tí
Por eso arrojo este poema
como mensaje en una botella
por eso hago morisquetas en tus aguas como un gracioso delfín
para que mansamente me eleves en tus cálidas olas
que sustentan mi vida
Por eso bogo
intentando sortear con mi velero
las tormentas eléctricas que el amor produce
y arrasan todo a su paso
Me mantengo en aguas calmas
No sé cómo lo logro
pero me mantengo en aguas calmas
Me impregno de tu sabor salobre
me tiendo al calor de tu sol
entregándome a la luz que me enceguece con su fuerza
Es que hay corrientes subterráneas,
ríos infinitos
que imagino al navegarte
y quisiera como un buzo poseer todos tus secretos
ser el buque fantasma que navegue en tí
hasta el fin de los tiempos
Ayer estuve en la playa
Nada supo decirme la caracola que acerqué a mí oído para saber de tí
Es que el mismo mar que me abrazaba te tuvo entre sus brazos
el te acarició
subió lentamente por tu cuerpo
hasta hacerte casi suya
(sé que no pudo lograrlo totalmente porque tu alma me pertenece
es casi como un trozo de la mía y ya casi no puedo vivir
con el alma partida)
Ahora miro el mar y te veo
Sé que en algún lugar
algún día
estarás tú perdiendo tus ojos en sus olas
buscando algo sin saber qué,
quizá sin saber
buscándome.

 

 



 

 

Esa mujer

a Iván Tubau y a Danielita


Esa mujer me puede
me seduce
Su mirada ausente
lejana
no evoca otros hombres
no me mide
no pretende ni espera nada
Esa mujer
de piernas como escarbadientes
perdida entre mis brazos
es pacífica y luminosa
Dibuja sonrisas
Está ajena al ántrax
a los top ten prefabricados
Ella habla con dios todavía
pero no se arroga ministerios
ni juega a la ouija
Está silente
como un eco al repetir el aliento sagrado
Afuera
la vida es un mundo de pañales
y gente que llega guiada por su estrella
para admirar su paz
porque aún es casi alma
y tomarla entre las manos
permite sentir
casi tocar
el paraíso.

 

 



 

 

Poema para una antología de Neruda


Para los necios
el libro es un gasto
una pérdida de tiempo
la ocasión de pecar
un sin sentido
Se aproximan a él
con las carnes secas
y la mente estéril
pensando que es sólo
un montón de letras
agrupadas por el capricho humano
No ven a dios
jugando con símbolos
uniendo letras como si fueran almas
Jamás podrían aproximarse a él
desde su olor
su peso
el color de su papel
la agresiva o dulce
presencia que anima su portada
En su mundo todo es transacción
y "de qué sirve"
Ellos no podrían entregarse a un libro
Permanecen incólumes
en su pedestal de fantasía
atesorando cosas
relaciones
sometiendo todo a su única voluntad
a su soberbia
en el reino de la oscuridad inquisitorial
donde un libro
no tiene cabida.

 

 




En domingo


Definitivamente
no es día para poemas de amor
tampoco para frases de dudosa procedencia
-inaccesibilidad del alma
voluntad divina
elevado parnaso de la mente-
En días feriados
domingo exactamente
en país extranjero
y extrañado de la turbiedad del amor
uno prefiere mencionar la naturaleza
la tormenta que gruñe inútilmente
la amenaza fútil del viento
la puerta golpeándose insistente
Hoy es un día para que la poesía
haga brotar vello en los pezones
y verrugas en los rostros
En días domingo
salen con la humilde ropa planchadita
las huestes evangélicas
de esta barriada humilde
dispuestas a matar por la palabra
si es preciso
El amor cristiano se tiñe de sangre
y no mística
La paz de dios
es el grito demente
el golpe de puño en el púlpito
la hoguera
la condena a muerte
En domingos
días grises si los hay
me refugio en la certeza del amor
porque alguna vez amé
y me amaron.

 

 



 

 

El único impune es el amor


No lograrán aquellos que matan sueños
los de sonrisa falsa
promesantes recorriendo listas
desanudar los cuerpos de la noche
los caballos desatados
Los que yacemos sabemos de peligros
a saber
el frío de la noche
el sueño y el cansancio
la sábana anudada
el paso de los años
Nada pueden contra nosotros
los anteojos oscuros
las voces metálicas escondidas
el chirrido del peligro que acorrala
Tomame la mano
envuelve mi cintura
que la muerte aún acecha
en esta tierra de traidores como dedos
Nos encontrarán la noche y la muerte entrelazados
Que la bala nos una para siempre
cantando a la libertad
la sangre que del pueblo han derramado
ahogará tarde o temprano a los traidores
como cae el agua evaporada hacia la tierra.

 

 



 

 

Vacío


La charla eyaculada en vanos intentos de llenar el vacío
las sonrisas preludiando la reiteración del error
la complicidad de la bebida para callar la alarma
Festejar alguna estupidez
exteriorizar la alegría
(usar los mismos trucos una y otra vez para arrastrar
o ser arrastrados hasta ESO que llaman amor)
Ni mentirosos ni engañados
la justa medida de lo que se sabe y acepta
El cigarrillo
epitafio
de dos que yacen consumada la estafa

Bajo la luna llena
en sendos bancos de plaza
un hombre
y una mujer
esperan la llegada del amor
inventándole nombres de guirnalda
sumergidos en su vuelo

Bajo la luz roja
un hombre
y una mujer
salen del hotel
vacíos y sin rostro
sin saber que en una plaza
los estaban esperando

 

 



 

 

Pero qué bueno, dios

No sabés cómo me alegro
dios
de no merecer la salvación
de ser un incircunciso de corazón
y no hacer caso a las palabras
demenciales
de esos pastores
a los que algunos siguen
como animales
arrastrando el yugo de la palabra
iluminada
única
Es bueno
eso de estar mano a mano con vos
dios
lejos de fanatismos latinos
hablándote al oído
compartiendo un mate
y hasta viéndote en los músculos perfectos
de unas pantorrillas de mujer
-porque hay mujeres
que son dignas de mirarse
guey-
Es bueno que no te tenga miedo
dios
como no se teme al amigo
verdadero
al amor verdadero
a lo que amás por sobre todo
Tuve temor
cuando vivía en tiendas
hechas con pieles de animales
cuando pasaba bajo los daemones
esculpidos en las catedrales
Pero ahora te me hacés tan carne
tan cercano
que al pensar en vos soy una novia
un novio
qué sé yo
algo tan profundo
como la oscuridad total
como el silencio
ese lugar donde ya no soy
donde no existís
y nada existe.

 



 

 

 

IV. Poemas recogidos

 

 

 

Chela

Ella dice que aprendió bien las lecciones
del Maestro
y se hace cargo de su doble rol de trabajadora
ama de casa
Sale del trabajo
toma un taxi
llama a la nena por el celular
para que tome los globulitos
con Cyna todo estará bien
Está contenta de comprar una edición en rústica de Alice Bailey
y su maestro tibetano
cree que todo irá bien así
hace falta trabajo interior
y todo estará en orden
Sólo duda
cuando invaden su casa las huestes de costumbre
suegro
madre
amigos de los hijos
o cuando ve que el paso de los años
transformó a su madre en una cáscara
una caricatura de lo que la ancianidad hace con nosotros
Valor
mujer
esto es la vida
un tránsito hacia la decrepitud

 

 



 

 

Another brick on the wall

to Camilla Henrikke

Camila no está en la casa
la webcam muestra su cara esbozando una mueca
que es casi una sonrisa
Ella es una punkie dot com
una dertigerl
que se aburre en su fría noruega
Camila sueña con paredes de flores
y derribar muros
es una nena light
pero no se anima a pensar en ello
Por eso se pone bikini ante la cámara
fotografía sus piernas delgadas
como escarbadientes
Se fotografía muy loca
y colocada
Camila está aburrida
intenta armar paredes con flores
pero ella es un ladrillo más en la pared.

 

 



 

 

El peluche de Joshua Bauman

No es para nada extraño
decía Joshua Bauman
llevar un peluche en mi attaché
Y salía por las mañanas
volvía por las noches
se acostaba
con un diminuto castorcito
de dientes blancos
con el hocico brillante
por los besos de Joshua
No es para nada extraño
pensaba Joshua
besar a mi peluche
si sólo el recibe toda mi ternura
noche y día
Y las gentes se extrañaban
de que un señor centrado
ya maduro
hiciera algo tan inesperado
como ir de aquí para allá
con un castorcito de peluche
Actitud adolescente
aventuraron algunos
No se le conoce mujer
dijeron otros
Es fetichismo sexual
comentaban preocupadas
empezando a sentir ligera excitación
las señoras del edificio
recordando cuando algún amante adolescente
se quedaba con una prenda íntima
un mechón de cabello
y aún líquido rosado de la primera entrega
en su propia anatomía
Una noche se oyó un grito
en el departamento de Joshua
Golpearon a su puerta
llamaron a los bomberos
la policía
violaron la cerradura
Nombre del occiso Joshua Bauman
escribió el oficial Newell
Causa del deceso
mutilación sexual
puso mientras se rascaba la cabeza


Era extraño el caso
La puerta con llave echada por dentro
las ventanas trancadas
Nadie pudo salir
pensaba
Lo ridículo del caso era ese muñeco
en medio del charco de sangre
Si ese peluche hablara
se dijo
Lo tomó con los guantes
lo metió en una bolsa para el laboratorio
y le pareció tan bonito...

No es para nada extraño
decía el oficial Newell
llevar un peluche de mascota
acariciado su recién comprado castorcito
en el bolsillo de su chaqueta.

 

 



 

 

Imbécil


Estaban ambos recostados en mi cama
La mujer decía que había visto un papel
en algún lugar de mi casa
escrito con la letra de la ex de él
Quería saber si había estado
En fin
controlar todo
Yo ví con el rabillo del ojo una notita
sobre el mueble en que me apoyaba
En la nota me contaba algo
no sé
naderías
de esas que comparten dos personas que se quieren.
Pero sentí algo así como un dolor
al pensar en todo el tiempo desperdiciado
por ella con semejante mequetrefe
capaz de salir con una imbécil
que todo lo controla

 

 



 

 

La Aldea Global


Claro que me preocupa la estética
No escribo para mí mismo
y creo tener el don de la poesía
O sea
wey/chabón
escribo para el mundo
El mismo de Internet
la MTV
las películas de millones de dólares
la televisión por cable
compito con los blow jobs de la diosa pop
del momento
los gif´s animados
y ese par de pechos por la calle
que son un puema
O sea
que no esperes rimas ridículas
poemas a la madre sin mentarla
o edulcoradas frases a la amada
la poesía es una realidad tan virtual
grotesca
y dolorosa
como la aldea global

 

 



 

 

de viejos (vinos añejos)


Las articulaciones duelen algunos días
-bastantes-
y la elasticidad empieza a ser un recuerdo
como Janis
Jimmy
y tantos otros que desaparecieron
o murieron por sobredosis
Nada era cierto
el tiempo se encargó de demostrarlo
“la enajenación al poder”
debimos de haber gritado
para sentirnos ganadores
Luce muy sexy el Che
en las playeras de las nenas
con pezones duros y sabrosos
Nuestras hijas se asquean
de que aún pensemos en exo
como si tuvieran exclusividad
ahora que les toca probar la manzana
El tiempo es despiadado
se quedó con lo mejor
un puñado de sueños
el sonido de una Gibson Les Paul
los calcetines blancos
y las tetitas de nuestras novias de prepa
algún cigarrito armado con la hoja de una Biblia
(para sentirnos cerca de Dios, of course).
Pero estamos a full de todo
odres viejos pero aún bebibles
sin la ligereza artificial de un joven frutado
Nuestra vida fue un chianti
una artística botella
enmarcada por mimbres multicolores

Ven
acércate
prueba este poso conmigo
su dejo amargo
su espesor sensual
ayudame a apurar la copa
que aún hay licor para el disfrute.

 

 



 

 

Basta de cháchara, era una diosa


Todos parecen estar de acuerdo en que es una necedad
enredarse con una nena
Mi actual pareja repite que en realidad siempre fui un reprimido
hasta que solté el chongo
-creo que lo dice por envidia-.
Los psicólogos dicen que estuve en el medio
de una disputa entre mujeres
y ella me buscó
para chingar a su madre.
Hasta Bukowski dice que las prefiere viejas
con arrugas en el cuello
y de tacones altos.
Okey
No fue incesto pero casi
y esas relaciones sólo son para los dioses
Ella podría ahora creerse
Tonantzín
Isis
o vaya a saber qué Madre.
Pero verdaderamente era una diosa
y la quise tanto

 

 



 

 

El don de los imbéciles


que te crees poeta
descubres un día lo aburrido
de releer por enésima vez
el “arte poética” de Gelman
y te acuerdas de Tolkien
buscando su humus
Ya no hay sustancia que sorber
de esos viejos huesos
No encuentras alimento
para que crezcan
sanos y fuertes tus poemas
El mundo debiera ser tu humus
pero es el de Bosnia
del once de septiembre
Miras entonces hacia adentro
En tu mundo sólo dolor
vacío
La poesía es un don
te dices
y una voz en la mente te responde

es el don de los imbéciles.

 






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