Gioconda Belli

 

Ahuyentemos el tiempo, amor

Ahuyentemos el tiempo, amor,
que ya no exista;
esos minutos largos que desfilan pesados
cuando no estás conmigo
y estás en todas partes
sin estar pero estando.
Me dolés en el cuerpo,
me acariciás el pelo
y no estás
y estás cerca
te siento levantarte
desde el aire llenarme
pero estoy sola, amor,
y este estarte viendo
sin que estés
me hace sentirme a veces
como una leona herida
me retuerzo
doy vueltas
te busco
y no estás
y estás
allí
tan cerca.

 

Quedará de nosotros...

Al menos flores, al menos cantos...

Quedará de nosotros
algo más que el gesto o la palabra:
Este deseo candente de libertad,
esta intoxicación,
¡se contagia!.

 

Vencer las trampas

Volvés a sentir el calorcito en la yema de los dedos,
la cosquilla de escribir en el estómago y sos de nuevo
poeta, mujer, pájara. Estas otra vez fértil y tierrosa
llenas de fuego líquido las venas que creías apagadas
como ríos mansos