Manifiesto de la Dementia


Manifiesto Demente Obscena
Nuevo formato de traspaso de información obscena
de Nicanor Molinares

“no se explica todo con hechos, ideas y palabras. Hay además, todo aquello que no se sabe y que no se sabrá jamás”

Estamos entrando en el arcano camino que conduce a los secretos más íntimos... a las fobias, las manías, los traumas... a todo lo oculto, lo que no sabemos, lo que desconocemos, todo lo que realmente vale, fuera de lo que vemos, de lo que hasta hoy en día conocemos... También es un fundamento estético de lo que se pretende, en la plástica de las ideas, el concepto central, la médula espinal, un lenguaje simbólico, un formato tridimensional... virtual, terrestre, e inconsciente... ¡trinidad!... Una ensalada ¡lechuga, pasto, y elote! ¡mmm! El manifiesto es poderoso ¡bueno, rico, y sustancioso¡
Estamos satisfecho de poder transmitir - poco a poco- esta aberración obscena... este conjuro... el hechizo, la magia... Un nuevo formato de traspaso de información directo a la vena.

¡Ahora sí, estoy aquí¡ estoy de regreso... he vuelto de la travesía... “Viajar es útil, hace trabajar la imaginación. El resto no es más que decepción y fatiga. Nuestro viaje es enteramente imaginario. De ahí su fuerza. Va de la vida a la muerte. Hombres, animales, ciudades y cosas, todo es imaginación. Se trata de una novela, nada más que una historia ficticia. Kantor, que nunca se engaña, lo dice. Y además todos pueden hacer lo mismo. Basta con cerrar los ojos. Ocurre al otro lado de la vida ¡si señor! ¡así es! ¡Demencia se suma al reducido grupo de los que buscan también la vida en el otro lado obscuro de la realidad!... Por ahora, tan sólo unos segundos estoy con ustedes, después vuelvo para allá... ahora que estoy sobre escena, consciente y no distanciado... ¡he vuelto! ¡aterrice! vengo de la ficción, de un mundo re-inventado “Suspiria de Profundis” ¡si, un poco perturbado! pero he vuelto... ¡deliré por un viaje en la idea! ¡a decir verdad me mantuve como pude! Cuando uno anda en esos lares siempre hay ocultos peligros mentales... ¡emocionales!... conceptuales... morales... siempre hay grietas y trampas deliciosas y mortales que experimentar... ¡Si, tuve miedo, pero es parte!... Ahora tengo muy poco tiempo ¡fracciones!... luego, en cualquier momento, vuelvo, al delirio deslizante, al caos divertido, al no aburrimiento... En la idea, en la matriz, sobre el tiempo, dentro de la memoria... los que sufren de esta enfermedad ¡el fucking distanciamente! ¡alcanzando dimensiones! ¡uyuyuy!... funámbulos de las ideas ¡eureka! ¡de las formas! ¡el aniquilamiento de ellas y su genésis! ¡autonomía! ¡cada fragmento, cada escena, anárquica! ¡cada símbolo e imagen viva por sí misma! Finalmente todo el caos junto nunca se detiene... ¡se entiende gente! y no es una pregunta sino que una afirmación... No se esfuercen tanto por comprender ¡emocionaos! ablandat vuestros corazoncitos endurecidos, ¡ablandád la razón!... ¡que extraño! ¡y uno que enloquece de impaciencia si no lo consigue! ¡increible!... ¡asunto de percepción!... ¡por que ahí se encuentra la flor!... ¡la más hermosa!... ¡la demencia mi amor!
¡Ok¡ tranquilo, comencemos por no precipitarnos, sé que no quedó claro... tratemos de entender, el concepto, la gran idea, el epicentro, la traición, el caos, la demencia... -“el teatro para ser vivo tiene que salir de sí mismo, dejar de ser un teatro”- como lo dijo el maestro Tadeuz Kantor.
Y nosotros agregamos –“Poseo la libertad porque poseo la llave de la traición... y como enferma... y como duele... ¡es el precio que hay que pagar! ¡es lo que vale! ¡Lo pagaremos con creces!”-

Todo arte tiene que tener el valor de traicionarse... ¡que se entienda por favor! no estamos hablando de la traición piñufla, cotidiana y social, asegurada y sin verguenza, de cambiarse de bando por conveniencias... hablamos de desligarse... de amputarse de sus cadenas... de negarse... negarse de seguir participando de la farsa... ¡la oficial! ¡payasos de la corte!... es una operación quirúrgica gente... una separación de lo posible... ¡la fascinación del arte es la realización de lo imposible!
¡Ahora sí que sí¡ ¡ahora viene lo bueno!

Los hechos y conflictos que contamos no están ordenados cronológicamente, ni mucho menos coherentes, menos racional... Demencia se aferra a su demencia, a la convicción insana y urgente de entender que la mente a alcanzado un grado tan alto de velocidad, que se vuelve una empresa patética y decadente pretender transmitir la información al espectador de la añeja forma tradicional de ir relatando la historia –cualquiera sea- al método burgués ¡presentación de los personajes, desarrollo de sus conflictos, y el desenlace de siempre¡ y en algunos casos aún más patético aún vomita la hibris su ácida moraleja para el gusto de los canallas que gozan con jactarse moralmente sanos... y se olvidan que la psiquis de todo humano desde que entra en el máquina social de la vida ya es insano ¡y no hay ninguna concesión, nadie se salva¡... Moral infame que frena la expansión de la idea, de la gran idea ¡la demencia¡ y lo gritamos --“Por loco se entiende perder la razón, sin embargo hay muchos dementes que han gritado verdades mientras los otros permanecen en silencio”--

¿Es tan difícil de digerir que el humano, como un ser energético tendrá en un momento que abrirse al concepto que mas que carne somos idea?... ¡somo un significado¡ lo importante es ser un significado. Llegará el día, que ya vendrá, que ya no haremos uso de nuestro disfraz y viajaremos en el tiempo como el significado que somos...
¡Por la puta, me fui a la chucha¡ el meollo es que el concepto enfoca que ya no hay necesidad de focalizar las energías en la cronología aburrida del relato, menos en sus viciosos dardos morales... ¡Ya sabemos que todo lo demás es un farsa¡ y basta de la asquerosa moraleja, de esa enseñanza focalizada, ponzoñoza, y dirigida, impuesta, disfrazada. El arte no nace para pedagogo... la creación artística está tan sólo para sugerir y detonar, sus estados, símbolos, e imágenes en nuestras ideas, y expandirlas, con la certeza que se puede alcanzar lo imposible. El arte es concreción de lo imposible. Nos da la confianza en creer en nuestras demencias. Si de ahí nace la enseñanza ¡bienvenida sea!
La mente digiere actualmente con una ferocidad la información... las imágenes, símbolos, estados... Que de que sirve tomarse ni siquiera la molestia de decorar la información –tan poderosa por sí misma- con menajes de cuarta, decoraciones de pacotilla que no sirven mas que para ocultar el verdadero significado, y lo transfigura en la lacra de los significados !hiede a pornografía¡ tan expícito y fácil... la pornografía canallas no significa nada, no bendice a nadie, no hay comunión... Y no hablo de la pornografía sexual, hablo de ocultar la información.

Todo guión preserva en sí mismo ocultos significados. Que si son bien amputados del contexto literario y liberados, pueden concatenar nuevas escenas tan sólo cargadas de energía significativa. Energía significativa que rompe violentamente la barrera del pensamiento ordinario y penetra como un chute de heroína directamente a los sentidos, y los paraliza... y es en esa fracción donde realmente comprendemos el centro, y miramos estupefactos la demencia... el caos... y sabemos por fin que podemos morir y volver a comenzar.

Los ocultos significados que percibimos en una u otra parte del texto dramatúrgico, narrativo, plástico, fílmico, en cualquier arte que sea –siendo por supuesto el dramatúrgico el mejor diseñado, diseñado con este fin de escena, porque condenza conflictos y energías- sin embargo no podemos omitir los significados, estados y símbolos que encontramos en otros medios de expresión escénicas. No debemos contar con el texto dramatúrgico como el único medio y mas encima relatarlo linealmente sobre la escena. Hay que aferrarse a la idea primogénita que nos movió para realizar dicha producción. Debemos rescatar de los textos, plástica, narrativa, cine, etc. tan sólo lo que nos convenga para optimizar el significado que queremos transmitir. Tal vez sólo nos baste un pequeño símbolo que amputamos de un texto dramatúrgico para construir toda una puesta en escena y tal vez hasta poder transmitir el centro del conflicto real que quiso proponer el dramaturgo contando una historia fácil para la atención de la gente. No es de ninguna manera fácil llegar a los símbolos, estados, o significados ulteriores que condensa una obra. Pero en eso radica el laburo del creador: adaptar a su idea general todo el material que pueda recuperar y formar así una nueva realidad. Una nueva psiquis que mostrar.

El texto literario no es más que eso, literatura, un millar de palabras que condensan significados, significados que están a la espera de ser estirpados quirúrgicamente y ser incrustados en la escena... momento donde el texto deja de existir y nace un nuevo lenguaje: el lenguaje escénico. El texto no es fundamento de lenguaje escénico, ni como los es tan poco la plástica, el cine, la narrativa... el lenguaje escénico es la búsqueda del formato más acertado y directo para transmitir el significado... nuestra visión... ¡nuestra idea!... ¡la gran idea!... ¡y tiene que llegar!... esa es la demencia... la gracia...
La disposición de las escenas no se realiza por la exigencia de la historia, sino por el ordenamiento del ritmo y de los contrastes... Solo de esa manera la creación no se paraliza ni finaliza, es continua y viva, sale de sí misma... todo aquella creación que se encuentra ob-scena, fuera de la escena, de la ordinaria, de la tradicional, toda aquella creación que no puede representarse en el escenario oficial tiene buenas posibilidades de ser viva, y por ende autónoma.. anárquica... independiente

En algún momento todas los fragmentos, todas las ideas, los pedacitos, todas las demencias, las que aún no tienen un hilo conductor !que aún están destruidas¡ no terminadas ¡continuará, to be continued, unendlich¡ encontrarán su cause, se fusionarán, y en ese momento se entenderá que las formas desintegradas y sin conexión aparente, pueden crecer como un sino vivo lleno de conflicto vital.
¡Demencia vomita y recoge el vómito... lo echan en un puesta en escena y el resultado es explosivo!

La creación es multidimensional, lo que la hace merecedora de lo imposible ¿hay necesidad de decir que la fascinación del arte es la realización de lo imposible?
Hay que entender que el funcionamiento de la mente se desprende de los hechos de la vida real y crea un sistema autónomo donde conviven varias situaciones, muchas imágenes, en diferentes planos, dimensiones, con uno o más conflictos... profundidad de campo !y claro¡ cada cosa con su peso y donde merece estar !en ése lugar¡... !aquí lo fascinante¡ todo dentro de un solo escenario... un supuesto caos... pero si no nos equivocamos todo tiene un significado. Finalmente desembocamos justamente en esto, en la concepción cada vez mas acabada que hay una dimensión o una escena donde coexisten todas las ideas, y donde no hay más que eso ¡pura y simple idea¡ donde cada uno de nosotros tiene un lugar primordial... donde realmente estalla nuestro significado y nos revelamos como un símbolo preñado.

Al igual que el funcionamiento de nuestra mente que reacciona por estímulos exteriores o de la activación de la información archivada en nuestra memoria... sin embargo este funcionamiento de nuestro pensar no se realiza de la forma tan ordenada como pretenden demostrar. La ordenación de nuestros pensamientos, ya sean estimulados del exterior, o del mismo interior, tiende a un ordenamiento demencial, y en muchos casos caótico. Y sin duda alguna el todo demencial y caótico es aún más lógico que todo lo demás.
¿No sería entonces más lógico alimentarse directamente con el mismo suculento brebaje de la demencia?

!Demencia es una compañía que estudia todas las demencias! Somos re estudiosos ¡nos quemamos el coco! ¡nos hacemos cagar la neuronas! ¡nos comemos el cerebro! ¡no paramos! ¡a la mierda con el cerebelo! ¡estamos del mate! Demencia estudia todas las demencias: ¡literatura! ¡plástica! ¡escénica! ¡fílmica! ¡sonora! ¡locución!... Las artes son por esencia entes separados que se colaboran. Cada uno es parásito del otro. Se permiten la promiscuidad, el incesto, y la obscenidad.
¡¡Estamos en guerra!!... guerra sin balas...guerilla urbana... expansionismo cultural... pedagogía absoluta... !enseñar a aprender¡... anarquistas de corazón... maniáticamente decididos... La demencia nos manda al pavimento... ¡a la calle¡ levantamos la barricada en pleno centro... bloqueamos el tránsito... asaltamos a los curiosos... !basta de ignorancia¡... deseamos generosidad... urge la sabiduría... luchamos contra la infamia de todo aquel que oculta la información, los significados, y los instrumentos.... !Alfabetización¡ !Clínicas¡ ¡pedagogía!

Llego el escándalo... muy temprano... camión, guerrilla, fierros, metros de cuerdas, palancas, tecles, y roldanas, armamos nuestra trinchera... y el combo ensarta la estaca y penetra la tierra... Los rostros espantados se asoman por las ventanas... se esconden tras los árboles... los viejos conversan en el boliche... arman el cahuín que quedará flotando... en sus estómagos... en el recuerdo... sobre la memoria... ¡No lo pueden creer¡ ¿qué será lo que están planificando estos delincuentes? No, no entenderán nunca las cosas. Después, más adelante, con el devenir del tiempo,
caerán en cuenta que fue novedoso, fue entretenido, nunca antes visto...
El teatro de la Demencia confirma y denuncia... la flojera, el conformismo, y la indolencia... la boludez que a embriagado no tan sólo al teatro, sino que la actitud cobarde en general... la escena nacional ha quedado –sin dejar de contar un ejemplo por aquí y otro por allá- aniquilada... sin fuerza, ni convicción... Los creadores acomodados se encierran en grupos y celebran sus fiestas y orgías... en la noche drogada de vanidad se aplauden su cobardía... saben el poco o casi ningún nulo esfuerzo... ¡la poca decisión¡... la cero necesidad de riesgo... de inversión... ¡pero a perdida¡ ¡luego, en el futuro, la ganancia!... Y no siempre tan, pero tan asegurados !dios mío¡ como tanto... !demasiado¡
Sin embargo, y hay que reconocerlo, que cuando andan solos, lejos del escudo protector que los inflama, fuera de la elite, sin aliados, son capaces de escupirles a los que los contratan... no son más que unos avergonzados, saben que saben... Sí, yo sé que no estoy haciendo que valga la pena, me droga el dinero, babeo por el éxito, soy un instrumento de un productor buscador de fortuna ¡ellos saben, se le nota en la sonrisa, y en la convicción forzada en que todo vale¡

Pero tenemos que ganarnos la vida Nicanor ¿De que viviríamos entonces! ¡ok! ¡cachai! De acuerdo, lo entiendo, teatristas oficiales, del centro, de salas convencionanles ¡sabemos lo que significa ganarse los porotos! ¡las chauchas! mas bien... ¡si! ¡ok! nosotros entendemos que hay que entretener ¡entretención carajo! ¡mil veces entretención! Si, realmente lo tenemos presente, lo practicamos lo mas seriamente posible, sin eso no vivimos, es nuestra base, Al Qaeda, la acción central, que no se duerman, que ni se te ocurra un bostezo, terrible, fuera de nuestro entendimiento, hasta la saturación puede ser entretenida, hemos logrado estar en el filo del ritmo y con ello dominamos la entretención primaria y podemos centrar nuestro trabajo más en la idea... Al contrario cretinos... nuestra idea, boca abierta, que babeen como deficientes... sacudirles el mate y revolcarles las neuronas ¡emocionaos! que salgan perturbados... terapia de shock... un combo a la piedra... ¿lo imposible?

Demencia la tiene clarita que sin acción no puede haber teatro. La acción es el componente primogénito, el mojón, el primer ladrillo, la piedra angular, el cimiento... Sin una mínima acción no puede nacer la entretención ¡la entretención da la cara cuando se activa la acción! Ni si quiera se necesitan aún los servicios ¡ojo, todavía! de la contradicción. Para que la acción conlleve a una entretención verdadera, viva y dinámica ¡no pajera! Se necesita de vez en cuando una contradicción ¡para girar el rumbo y despertarnos! ¡ritmo y contraste! ¡tiempo y plástica! Eso es en sí mismo ¡ritmos y contrastes! ¡esto es absoluto! ¡está todo! ¡la génesis! ¡la mater! ¡teatro absoluto!

A parte de contradicciones esporádicas que nos hacen dominar el Ritmo del tiempo con que trabajaremos los contrastes de la plástica, de nuestra escénica, se sugiere un conflicto central, poderoso, en la idea, tal vez un concepto, pero no tan sólo un conflicto moral... ¡Un conflicto en la forma!
Un conflicto de la forma donde podemos coser, pegar, soldar, remendar, amarrar ¡bricolage! unir todas las materias -físicas o conceptual- que nos interesen... Un espacio metafísico donde todo alcance, y donde nada se rechace.
Este conflicto central que realmente sería un espacio metafísico nos debería activar la gran imaginería y nos impulse para crear nuevas formas de entregar las acciones, los conflictos, un nuevo formato de traspaso de información al espectador.
Si partimos de esta base tan simple y a la vez difícil de dilucidar y llevarla pragmáticamente a la escena, podemos tener la certeza que se comienza por el inicio, y no como muchos que empiezan por el final: asegurar la ambición... ¡locro, lucro, lacra!
¡ok gente! demencia entiende la llamada entretención, lo que no acabamos de entender, habiendo todo un universo oculto de formas ¿por que mierda siempre se escoge la misma? ¿por qué mierda abusan de la entretención y desaprovechan las ya endémicas ideas que pasan a ser un simple decorado de la acción ofrecida ¡a cambio de unos morlacos! y la entretención termina más vacía todavía? ¿ni valor? ¿ni riesgo? ¿ni imposible? ¿Para que entonces?

–“Hay que comer Nicanor”- mas bien, pero entonces hagámoslo bien desde el principio, y nada de obras pseudo intelectuales con mensajes sociales rebuscados ¡denuncian la misma droga que consumen! ¡unos latigazos! ¡una confesión al pedo! ¡lágrimas de cocodrilos!... ¡basura cretino! ¡vámonos directo al cabaret! ¡de cabeza a lo chungalí! ¡Dale hermano! ¡Tetas hermano! ¡Paquetes! ¡Plumas y lentejuelas! ¡Carne, músculos, y lubricante! ¡Al quilombo cara dura! ¡Juerga y calentura! ¡El babeo descarado! ¡Dame filete y no se hable mas! ¡Así de clarito! ¡Nada de andarse por las ramas! ¡directo al meollo! ¡nada de andar mezclando! ¡Teatro o cabaret!

Habíamos admitido muchas situaciones ¡teníamos que atenernos a las consecuencias!... ¿te qué consecuencias hablas Nicanor? ¿De cúal? de toda la basofia que trae consigo la investigación, los riesgos del laboratorio, crear nuevos espacios, formar nuevos conceptos ¡teatro aéreo! ¡teatro obsceno! no gozando de privilegios, no mamando, no necesitados de estar en el centro de lo oficial, palmeando el hombro, del que te dije, del feudal, el patriarca, la inquisición del arte, el que reparte las monedas de oro y las migajas a los otros... Pero queda sobre entendido ¡entre más o menos palmaditas celebrando sus miserias, así más posibilidad, de una tajadita o tajadota de la gran torta! ¡Nuestro error es no haber nacido aduladores, chupa... ¡ ¡Ah, váyanse a la chucha!

¡Nosotros solo queremos el reconocimiento por nuestro laburo y nada más, que nos permitan trabajar! Todo lo demás es pura diplomacia... la que no sabemos dominar ¡no es nuestro oficio! Somos creadores y nuestro problema es que estamos rompiendo códigos ¡sus códigos! ¡impuestos por ellos! facilistas, sin valor... entonces venimos y proponemos nuevos códigos, más vivos, más humanos... más juguetones ¡pero no les gustan! la vara demasiado alta, no les conviene, los vas hacer trabajar ¡alguien los comparará!... Entonces todo el mundo te señala, ¡revolucionarios! ¡terroristas! te maldicen... Pero no lo dicen, se quedan callados... Entonces sabíamos que nos adentrábamos a zonas peligrosas... peligros de guerra... lupanares minados... aventuras inimaginables... territorios desconocidos... teníamos que escalar las montañas de la locura... caídas infinitas... riscos difíciles de cruzar... presión sicológica... corremos riesgos, a sabiendas que habrá puertas que no se abrirán... jugamos a perdedor... esfuerzos inauditos... luchamos contra la intolerancia de un mundo indiferente... nos proyectábamos como pioneros... ¡pero uno puede ser maniáticamente decidido!... dejaremos abierta una ruta por donde escalar...
A decir verdad, viendo los tiempos que soplan, la intolerancia, la indiferencia, Demencia está fuera de lugar... Demencia se arriesga demasiado con el sondeo tan profundo e inconsciente a la montaña de la mente, tan solo para traeros de aquellos campos santos, la viva imagen de los hechos, conflictos y situaciones, de como lo vivimos ¡de cómo lo sufrimos! que no es lo mismo. Nos referimos a la tensión de los nervios... la ebullición y presión de la sangre... al dilatamiento de la conciencia... Hablamos, o queremos dar a entender, que no vale tan solo vivirlo, o mejor dicho presenciarlo, imaginarlo, sino que tiene que haber un grado de sufrimiento en nervio propio... creemos que “La belleza será convulsiva o no será”

Es con esta misma tensión y presión, que Demencia pretende vivir sobre escena –para entretenimiento del público ávidamente expuesto a la inovación- ¡un pequeño sopor! ¡un pizca de sufrimiento! ¡un frenético diminuto sacudimiento a la razón! Desde ya nada será lo mismo, algo se desprendió... algún pedazo se soltó...
Admitamos que los secretos profundos que guardan los conflictos son altamente explosivos. Dinamita pura como para destrozar un castillo. Demencia no está jugando... nos situamos en el filo... gozamos en el equilibrio... detonamos la carga explosiva ¡destruimos! pero después estamos listos para escenificar lo imposible... ¡lo más brutal! ¡lo más naif!... ¡sagrado y maldito! ¡sacré! ¡ Sagrado y maldito!... ¡sacré y sacré! ¡homófonos! ¡Precocious Madness!

Amamos ardientemente nuestra traición y estamos dispuesto a dejarnos desgarrar defendiéndola.
– “actuamos en los márgenes, fuera de escena, no entramos en concesiones, nos mantenemos malditos y sagrados, somos adoradores del líbido y repudiamos el mórtido... tenemos miedo de contagiarnos de la indecencia sentimental. Hay cierta especie de arte universal pegajoso que rehusamos a experimentar”-
!!Somos maestros en fantasmagorías¡¡
¡Manifiesto obsceno
¡Manifiesto de la Demencia!
¡Manifiesto de Demencia!
¡Manifiesto Demente!
¡Manifiesto Demente Obscena!
¡Ayayay!
¡efervescencia cultural!

La idea central es “Como a través de la locura volver a ser ser humano”

!To be continued... continuará... undendlich¡ paciencia, paciencita...


Nicanor Molinares