Los
primeros mamíferos
Esto
sucedió hace unos 180 millones de años, a finales
del triásico, momento en el cual declinaron, dejando
una línea de descendientes que no resurgiría hasta
después de 100 millones de años, durante los cuales
los grandes reptiles predominaron en la Tierra. Los primeros
fósiles correspondientes de forma definitiva a un mamífero
fueron encontrados en rocas del jurásico.
Durante
este periodo existían ya cinco órdenes distintos
de mamíferos. Uno estaba compuesto por mamíferos
pequeños similares a roedores, que tenían características
dentales típicas de estos animales, pero se extinguieron
durante el eoceno.
Un
segundo orden consistía en mamíferos pequeños
y carnívoros, con molares de tres cúspides y que
también se extinguieron antes de finalizar el eoceno.
El
tercer grupo estaba formado por mamíferos del tamaño
de una rata o un topo; tenían un régimen alimentario
insectívoro y casi con toda seguridad los podemos identificar
como los antecesores de los mamíferos actuales.
Tras la desaparición de los grandes reptiles al final
de la era secundaria, esta línea evolutiva se desarrolló
con éxito durante la era terciaria, que se conoce por
este motivo como era de los mamíferos.