Feliz Cumpleaños

Por Nikona

Capitulo 11

"Una Luz de esperanza"

Por un instante todo pareció calmarse en Céfiro. Pero había sierto ambiente de tensión e inseguridad. Guru Clef convocó a todos a una junta. Todos se reunieron en el Gran Salón.

- Como están los refugiados? – Preguntó Clef a Paris

- Ya los organizan brigadas de algunos miembros de la guardia. Ellos están cuidando de ellos.

-Muy bien, devemos aprovechar este instante que todo esta mejor para organizarnos...arghh. Guru Clef falseo un poco y a causa del dolor tubo que sentarse.

-Estas bien? – Pregunto Paris

-Si, no te preocupes. Lo importante es apurarnos. Anaís está dando lo mejor de si y no sabemos cuanto podrá resistir.

-Nosotros ya hicimos contacto con nuestra nave. – Dijo Aguila Tomando la palabra.- Cuando hiba de regreso fue atacada por una nave pirata. Estuvieron todo este tiempo en reparación. Guru Clef, solicito tu permiso para que aterricen en Céfiro. En sus condiciones no llegarían hasta Autosam

-Por supuesto Aguila. Que otro asunto tenemos pendiente.

-Como se encuentra Presea. –Preguntó Caldina con voz firme interrumpiendo al Mago.

Este le respondió con una mirada retadora. Llena de tristeza e ira. Pero inmediatamente la transformo en una expresión fría. Separó la mirada y se dirigió de nuevo al grupo.

-Ya no queda nadie fuera del castillo?

-falta el escuadrón de Rafaga, Ascot y Marina, también Lucy. – Respondió Paris.

Guru Clef hizo recuento de los recursos.

-Entonces por el momento contamos con Latiz, Paris y...Tata, Tatra: Podemos disponer de sus genios para la batalla?

-La ultima ves perdimos contacto, el enemigo era muy poderoso. Pero podemos volver a intentarlo.

-Tata... – Dijo Tatra muy preocupada.

Tata guardo silencio y su hermana la miró preocupada.

-No volverá a ocurrir. Guru Clef, puedes contar con nosotras- Dijo Tata seriamente

-En cuanto llegue mi nave podemos hacer un análisis completo del estado de Céfiro. Así sabremos mas sobre la constitución del enemigo y sus debilidades.

- no hará falta - interrumpió Latiz.

-Tu sabes quien es el enemigo? – Preguntó Guru Clef.

-Es solo una teoría – Aseguró Latiz

-Adelante...

- El ejercito fantasma, los genios que nos atacan, el aura maligna que me atacó...El poder psiquicó que te llevó a una batalla...la luz que se llevó a Lucy... incluso la extraña enfermedad de Tata y los mismos que atacaron la nave de Aguila. Todos son...

- ...parte del mismo fenómeno– Interrumpió una voz en el salón.

- Lucy!

- Rafaga!

Ambos fueron corriendo al encuentro con sus amados a los cuales creían perdidos. Latiz abrazó con todas sus fuerzas a Lucy. Esta se alegró al estar de nuevo con Latiz y también le respondió con un fuerte abrazo.

- Rafaga, querido, te encuentras bien? Estas herido. No te preocupes ... – Decía Caldina mientras llenaba de besos a su amado.

Ambas parejas hubieran querido quedarse ahí por siempre. Pero sabían que el tiempo apremiaba y era necesario salvar a Céfiro. Lucy les contó de su encuentro con Shiva y el fenómeno que ocurría en Céfiro.

- Entonces...nosotros hemos sido los causantes de todo esto. – Dijo Guru Clef Pensativo.

-Y es por eso, que el clima de Céfiro se asemeja al que había cuando Demoner atacó Céfiro. – Dijo Paris.- Son los ciudadanos que tienen miedo.

-Fueron nuestros temores y egoismos lo que destruyen Céfiro y a nuestros seres queridos. Y todas las riñas y trajedias...ninguna fue víctima de la casualidad. – acompletó Latiz.

Todos los presentes sintieron mucha vergüenza al pensar en que ellos habían sido los causantes de todo.

- Rafaga...Perdoname. – Dijo Caldina – Yo....temía tanto que no volvieras junto a mi...

Rafaga sonrió tiernamente y beso su frente.

- Pero fue tu fe la que me trajo de vuelta.

- Paris!- Dijo Guru Clef alarmado – Tenemos que tranquilizar a la gente de Céfiro cuanto antes!

-Entendido!- Paris se apresuró.

-Guru Clef – Dijo Tata – Nosotras podemos ser de gran ayuda entre los refugiados.

- Vallan pues. – Dijo guru Clef - ...Tata, Tatra...Muchisimas gracias por todo lo que han hecho por nosotros.

- Céfiro ha hecho mucho por Cizeta, es lo menos que podemos hacer para corresponder. – Dijo Tatra.

- Comandante Aguila. El Teniente Surf está en el comunicador.

- Gracias Zaz. Surf me escucha?

...

-Tiene permiso para aterrizar en Céfiro

...

-Surf escuche muy bien. Quiero absoluto orden entre la gente de la nave. Es muy importante que mantenga a toda su gente tranquila. Atienda la mas minima anomalía y ponga a cargo de los controles a los de mayor desempeño.

...

- Cambio y Fuera...La nave llegará en 20 minutos aproximadamente.

- Nosotros nos haremos cargo de su llegada – Dijeron Zaz y Geo.

Guru Clef tomó la palabra

- Si alguien de ustedes tiene un problema personal, quiero que lo solucionen antes que nada. Solucionaremos esto poco a poco, pero el orden regresará a Céfiro.

Todos asintieron la cabeza ansiosos y con nuevas energías.

- Los demás vamos con la gente de Céfiro. Es importante que los ayudemos a tranquilizarse. – Dijo Ráfaga.

Caldina se acercó a guru Clef

-Caldina

-Espera un segundo Rafaga no tardo.

-Guru Clef...

-Dime Caldina – Dijo Guru Clef arqueando las cejas con autoridad.

-Tu también tienes algo muy importante que hacer. Así que deja esto, nosotros nos encargaremos.

Por un momento Guru clef tomó un aire de desentendido. Pero la mirada de Caldina también era suplicante. Así que asintió con la cabeza.

- Se que todo saldrá bien- dijo la hechizera sonriendole con esperanza. – Dejate llevar por lo que sientes.

Caldina dio la media vuelta. Mientras Guru Clef se puso de pie y se dirigió con Presea.

Por mientras las princesas se dirigían al albergue. Tatra se detuvo en el camino.

-que sucede?

-Cuando éramos pequeñas, y tu enfermaste, yo estaba muy asustada. Los doctores dijeron que no sobrevivirías. Y a pesar de que nadie me explicaba que estaba sucediendo, yo lo entendía todo a la perfección.

-Por eso siempre cuidas tanto de mi, verdad? – Preguntó Tata con ternura

-Fue mi culpa...que tu enfermaras fue mi culpa...

Tata negó con la cabeza fuertemente y abrazó a su hermana.

- Te quiero mucho!

Tatra se extrañó, por que palabras como esas, nunca salían de la boca de su hermana.

- tu siempre cuidas de mi en silencio. Y te preocupas por que yo este bien. Yo nunca podré darte eso. Yo nunca puedo cuidarte...

Tatra se separó

-Tata! Tu siempre estas ahí...tu me haces fuerte. – Dijo mientras acomodaba un fleco que caía descuidado sobre el rostro de su hermana menor. – Y cada día que pasa, agradezco que estés conmigo. No lo creerías, pero aveces también me duele pensar que cuando me case no vamos a estar juntas todo el tiempo.

- Si lo se, vas a extrañar horriblemente mis gritos verdad?

Las dos rieron – Tatra, te prometo que estaré bien. Quizá tarde en acostumbrarme, pero...

- ...Prometes ya no decir tantas groserías?

- uta ma! TATRA!!! Ok lo intentaré...

Paris y los demás ya se encontraban en el albergue.

-Paris

-dime Lucy

-Nosotros cuidaremos de la gente. Ve con Anaís. Se que ella necesitará de tu apoyo.

-Lucy...yo....tu no lo sabes, pero yo dije cosas espantosas y mi comportamiento fue terrible.

-Ella sabrá perdonarte. Necesita de tu apoyo.

-Como puedo hacer eso! Por lo menos aquí tengo a una ocupación y una utilidad. Ayá...solamente puedo verla morir sin hacer nada.

-No digas eso! – Dijo Lucy molesta

Paris se sorprendió por la repentina rudesa en Lucy.

-Ella te necesita. No es esa una razón suficiente?

Paris miró a Lucy apenado.

-Seguros que no necesitan que esté aquí abajo?

- Por supuesto

***

-Ya llegué – Dijo Guru Clef mientras se sentaba en la cama y tomaba la mano de Presea. – Me da miedo pensar que tu no quieres que esté aquí. Ni siquiera se si me estas escuchando. Estaba pensando...que era lo que tanto querías, que te podía ofrecer. Pensé que quizá querías que te conocieran por tu nombre real. Ha pasado tiempo, y yo creo que aunque sería una sorpresa, lo sabrían asimilar. Después de todo, es lo justo no? También pensé que podrías ir a una embajada de Céfiro. Bueno, solo si ya no quieres estar aquí. Hay muchos planetas y...bueno, tu podrías perfectamente cumplir con ese trabajo. Sin olvidar que conocerías muchos lugares hermosos, otras gentes, y podrías construir de nuevo una vida. Tal ves me equivoco. Creo que amas demasiado a Céfiro como para dejarlo...Tanto que diste tu vida a cambio, por la causa... Yo...Yo tengo un libro sabes? Ah&