Ocean Born:

The Origin


Episodio III

"Nunca tiembles por lo que esta delante, lo tremendo siempre esta detrás"

 

A través de la oscuridad de los corredores, el misterioso joven camina impacientemente con su mirada baja. Camina hasta llegar a una gran puerta doble, a un lado de ésta hay 2 Ninfas de pie vigilando. Las criaturas se inclinan ante él y este extiende su mano y abre las puertas sin siquiera tocarla. Desde la entrada puede observarse que es un gran cuarto, muy lujoso. En la gran cama, de la cual cuelgan cortinas, hay una joven descansando.
El joven se acerca a ella y toma asiento a un lado de la cama. La joven despierta exaltada y algo desorientada.

Joven: Era hora que despertaras Umi.
Umi: ¿Que sucedió? Irae... ¿Qué...
Irae(Joven): No te preocupes. Alsathia se encargo de esas molestias.
Umi: Pero yo podía haberlo hecho sola.
Irae: Sabes el peligro al que te expones, no quiero que lo vuelvas a hacer. Aun no sé que resultados tendrías. Solo sé que perderías mucho.
Umi: Pero...
Irae: Nada de peros. Ahora debo deshacerme de esos sujetos.
Umi: ¿De quienes?
Irae: Esos que están en el salón principal.
Umi: ¡No te atrevas!
Irae: ¿Pero por que?... Alsathia me dijo que tú los trajiste ¿Acaso esos son tus amigos de los que me hablaste?.
Umi: Si, ellos son mis amigos... Y estuvieron a punto de morir por culpa de...
Irae: Debí suponerlo... Aun así... no permitiré que estén en un templo sagrado.
Umi: Irae... recuerda que este templo es mío... Tu lo dispusiste así, además, también es de Ceres.
Irae: Esta bien Umi... No les haré daño, pero que no se metan en donde no los llaman.
Umi: Estas pidiendo demasiado... ellos son mis amigos y creyeron que estaba muerta... Yo quiero que se queden, sé que aquí estarán a salvo... En caso de que algo sucediera...

El joven acaricia el rostro de Umi y le brinda una cálida sonrisa a la que ella corresponde con otra pero leve sonrisa.

Irae: Desearía que las cosas fueran diferentes para ambos...
Umi: Irae... te agradezco todo lo que haces por mí...
Irae: Debo irme, no puedo abandonar Atlántida por mucho tiempo. Tú debes cuidar este templo, los secuaces de Nisa y Aguar podrían atacar de nuevo. Si eso sucede, soporta lo mas que puedas, pero no trates de conjurar ese hechizo. ¿Esta bien?
Umi: Sí. Irae... ¿Por qué te preocupas tanto por mí, aun causandote problemas?
Irae: No me lo preguntes. Tú lo sabes mejor que nadie. En cuanto a tus amigos, que no interfieran y no les cuentes nada, no quisiera tener que lastimarte con ellos.
Umi: Tratare.
Irae: Mañana temprano vendré a verte.
Umi: Esta bien. Ten mucho cuidado.

Mientras tanto, el grupo estaba bastante molesto, preocupado y atemorizado. Ninguno se había movido de sus lugares. Irae aparece frente a ellos con una fingida sonrisa.

Irae: Esta vez corrieron con suerte.

Este cruzo la puerta dorada sin esperar alguna respuesta de parte de los demás.
Las criaturas que estaban a los costados del lugar se acercaron y cada criatura tomo a cada uno de la mano y los condujeron hasta un gran salón en donde había una gran mesa con mucha comida.
Todos se sentaron alrededor de la gran mesa, pero no tenían mucho apetito, solo se sentaron.

Clef: Scandia...
Lantis: ¿Madoushi Clef, que es lo que sabes?
Clef: Scandia... es mi ancestro... Él vivió hace miles de años... Y perteneció a los 4 grandes Madoushis de Cefiro...
Ferio: Pero se oyó raro cuando Alsathia te dijo que te le parecías pero tenia el cabello mas largo y que era mas alto. ¿Crees que lo haya conocido?
Clef: No lo se Ferio. Scandia habito Cefiro hace muchos años.
Presea: Debería ser una...
Clef: Diosa. Ella misma lo dijo... pero...
Hikaru: Un momento. Estamos hablando de la Tierra, el mundo Místico. ¿Que relación tiene Cefiro con la Tierra?
Clef: Eso es lo que yo quisiera saber... "El pilar convocara a las legendarias Guerreras Mágicas, ellas despertaran a los genios para salvar a Cefiro de la destrucción"... La leyenda jamas cuenta por que las niñas elegidas debían de ser del Mundo Místico...
Presea: Que tal si... las legendarias Guerreras Mágicas tuviesen relación con lo que llamaron Atlántida.
Fuu: Puede que tengas razón Presea, la Atlántida es el más grande misterio de nuestro mundo, nadie sabe en que parte del Atlántico se encuentra, ni la verdadera causa de su hundimiento, ni su cultura ni si hubo supervivientes a esa catástrofe. Una de las tantas teorías cuenta que eran seres de grandes cualidades tanto místicas como arquitectónicas y tecnológicas y que en caso de que algunos de sus habitantes hubiera sobrevivido, en estos momentos, sus descendientes estarían en las islas Azores o tal vez en Oceanía... Pero tambien se cuenta que los egipcios, griegos y sumerios decendian de los atlántes. Incluso los celtas.
Umi: Sigues siendo la misma Fuu.
Fuu: Umi...

La joven ingresaba al enorme salón seguida por sus criaturas. Ella tomo asiento en una de las sillas que estaba a un lado de la mesa.

Hikaru: ¡¿Estas bien?!
Umi: Si Hikaru, no te preocupes.
Fuu: Umi, ¿Ahora podremos hablar sin que nadie nos interrumpa?
Umi: Supongo. Hikaru, Fuu cuéntenme... ¿Cómo van las cosas en Tokio?
Hikaru: En Tokio, bueno, al principio no muy bien... desde que tu... bueno, ya sabes... "moriste"... no nos ha sido fácil...
Fuu: Esas extrañas personas parecen ser muy fuertes. Estoy segura que te hubieran podido llevar de regreso a la Tierra... porque... ese sujeto dijo venir de la Atlántida.
Umi: Lo sé. Pero no podía hacerlo.
Hikaru: ¿No podía o no quería?... En Cefiro la voluntad es la que decide todo...
Umi: No podía.
Hikaru: Los pasajeros del crucero fueros rescatados tiempo después, antes de que se hundiera... Tus padres... ellos sobrevivieron pero ¡Fuiste muy desconsiderada!
Umi: ¿Acaso estas enojada conmigo?
Clef: Están preocupadas, no enojadas.
Fuu: ¿Tienes idea de lo que son 6 años?
Umi: Claro que la tengo. Pero no tienen derecho a reclamarme nada... al fin y al cabo... la muerte me hubiese dado lo mismo y por mas que quisiera no hubiese podido regresar.
Presea: ¡¿Cómo puedes decir eso?!
Clef: Umi ¿Podrías explicarnos por que cuando Hikaru toco tu brazo se convirtió en agua y su manos sufrió una quemadura? No creo que estés bajo un "Hechizo", yo mismo puedo decir que no es un hechizo y no puedes discutirlo... Esa joven se sorprendió al oír la palabra "Hechizo", además, ella no tuvo inconveniente al golpearte.
Umi: No puedo decirles más. Ya saben demasiado. Se están arriesgando.
Hikaru: ¡Maldita sea! ¿Acaso ya no confías en nosotros?
Umi: Perdónenme, pero esta vez las cosas son diferentes... y... ya no se... donde termina la fantasía y donde empieza la realidad... Es una pesadilla... Y no quiero incluirlos en ella.
Lantis: Pero al menos podrías decirnos quien era ese joven.
Umi: Él es Irae.
Ferio: Ese hombre no parece ser del tipo que rescata gente. Mas bien diría que es todo lo contrario.
Umi: ¡Ferio! Te agradeceré que lo trates con respeto.
Ferio: Esta bien, no quería molestarte.
Clef: ¿...Y... Quíen es Irae...?
Umi: Su nombre es suficiente.
Hikaru: Umi, ¿Crees que ahora podrás regresar a Tokio o al castillo con nosotras?
Umi: Hikaru...

Un par de lagrimas resbalaron por su rostro muriendo en su boca.

Hikaru: ¿Que sucede? ¿Dije algo malo?
Umi: En la tierra estoy muerta hace años...
Presea: Pero podrías regresar al castillo.
Fuu: ¿Acaso no quieres?
Umi: Claro que no, solo... que me están pidiendo algo...
Clef: ¿Imposible?

Umi bajo la mirada.

Clef: ¿Por que es imposible?
Fuu: Contesta por favor...
Umi: Solo porque es imposible... solo por eso.
Hikaru: Estas escondiéndonos muchas cosas... Ya no nos consideres tus amigas.
Umi: No digas eso Hikaru... Siempre serán mis amigas.
Hikaru: No lo parece. Primero nos mientes acerca de las ninfas, segundo nos niegas el derecho de saber que ocurre en Cefiro y en la tierra, tercero, te niegas a decirnos siquiera quienes son esos dos sujetos. ¿Que más no sabemos de ti y de esta extraña situación?

Umi se enfado y abofeteo a Hikaru sin medir las consecuencias. Ella había causado una fuerte herida, una quemadura muy grave en su rostro. Hikaru no soportaba el dolor y comenzó a llorar. Todos los demás se inquietaron y Lantis se acerco a Hikaru levantándola del suelo. Umi quedo petrificada, había herido a su amiga, algo imperdonable, algo... horrible para ella misma... Rápidamente 4 de sus Ninfas corrieron hacia Hikaru y posaron sus manos sobre el rostro de la joven curándolo. Umi cayo de rodillas apoyándose en el suelo con sus manos ante Hikaru y comenzó a llorar.

Umi: Perdóname... Perdóname Hikaru... Yo no quise lastimarte... lo juro...
Hikaru: ...Umi...

Umi se puso de pie y cerro sus manos tan fuerte que sus uñas se clavaron en las palmas haciéndolas sangrar mucho. Luego corrió hasta su cuarto. El ambiente había quedado impregnado de un temor desconocido, una tristeza horrible.

Hikaru: ¿Por que... Por que Umi?
Lantis: ¿Estas bien?
Hikaru: No lo sé... estas criaturas curaron la herida pero... Presiento algo malo... muy malo...
Fuu: Yo no lo presiento porque... es totalmente visible.
Clef: Creo que seria conveniente... revisar este lugar...

De esta manera, se dispusieron a recorrer el lugar, claro que comenzaron por el salón principal. Clef estaba muy interesado en la puerta por la que Irae se había marchado. Estudiaba cada detalle de la misma y en un momento dado acerco sus manos a pocos centímetros de ella.

Clef: Increíble... esta puerta... posee una gran energía... una magia especial...
Lantis: Pero en este lugar no podemos sentir la magia ni la energía... creo que es extraño.
Clef: Si pero, esto es distinto. Esta energía esta totalmente pura y sobre todo... magnetizada...

Una joven aparece sin que nadie sepa de donde.

Presea: ¿Umi? ¿Estas bien?

La joven los observa fijamente pero cuando ve a Clef sus ojos se embelesan un poco y le sonríe tiernamente. La joven que viste de blanco se acerca a él.

Joven: Soy Beryl... Umi es mi madre...
Clef: ¿?
Beryl (Joven): Somos idénticas, es largo de explicar, pero no quiere decir que seamos la misma persona.
Presea: Tu fuiste creada de su sangre.
Beryl: Si... pero soy diferente al resto de las ninfas... Por favor, les pido que vayan a sus aposentos... No es conveniente que ronden por aquí si mi madre Umi no esta.
Lantis: Solo estabamos observando el lugar.
Beryl: Por ella, háganme caso. Váyanse a sus aposentos.
Ferio: ¿Que esta sucediendo? ¿Por que hay tanto misterio?
Beryl: Joven, el océano tiene muchos misterios ¿Conoces a alguien que los sepa todos?
Ferio: ...
Fuu: ¿En donde esta Umi?
Beryl: Descansa en su aposento...
Hikaru: Por favor... si sabes algo... dínoslo...
Beryl: No puedo.
Hikaru: Ten en cuenta que podríamos ayudar a "Tu madre"...
Beryl: ¿Ayudarla?...
Fuu: Si, nosotros somos sus amigos.
Beryl: Lo siento.

La joven desaprecio.

Clef: Nos retiraremos a nuestros cuartos... tal vez no haya que apresurar las cosas.
Ferio: Es verdad.

Mientras tanto, la joven Beryl aparece frente a Umi que esta sentada en su cama.

Umi: ¿Y?
Beryl: Les dije que fueran a sus cuartos... la joven de cabello dorado dijo que son tus amigos... y que quieren ayudarte.
Umi: ¿Que les dijiste?
Beryl: Nada.
Umi: Bien. No sé que haré con ellos...
Beryl: El mundo exterior esta mas seguro. No debiste traerlos.
Umi: No lo creo Beryl... Este templo esta protegido con magia de dioses...
Beryl: ¿Les dirá la verdad?
Umi: Ya he lastimado a Hikaru... se los diré, mas no a todos.
Beryl: Madre... hoy estuve vigilando el océano y hay nuevas criaturas enemigas... Estuvieron a punto de atraparme.
Umi: Lo temía. No sé lo que sucede, cada vez son más fuertes... y lo peor es que intentaran entrar a toda costa...
Beryl: No lo permitiré.
Umi: Ni yo. Puedes retirarte... y...Vigila a Madoushi Clef.
Beryl: Sí. ¿Es el que porta el báculo, verdad?
Umi: Sí.
Beryl: Lo haré. Madre... Ese joven... es muy atractivo... ¿No lo crees así?
Umi: Así es. Beryl...
Beryl: ¿Sí?
Umi: Deja de llamarme madre.
Beryl: Lo intentare.
Umi: Dices eso hace mucho tiempo.
Beryl: Esta bien, Umi.
Umi: Así esta mejor. Yo no soy tu madre, y tu sabes bien que naciste de mi sangre, mas no de mi vientre.
Beryl: Lo sé. Pero para mí eres como mi madre...

La joven desapareció.
En ese templo nadie tenia la noción del tiempo, ya que no había siquiera una simple ventana ni nada que se le pareciera, aunque en el fondo del océano la luz es escasa. Cada uno descanso en su cuarto, porque a pesar de estar preocupados estaban agotados. Automáticamente se despertaron todos casi a la misma hora, seguramente porque era la mañana. Clef y los demás se encontraron en el corredor y se dirigieron hacia el salón en donde habían estado la vez anterior. En ella estaba la mesa, la cual estaba cubierta por ricos manjares. Umi estaba sentada esperándolos. Cuando se sentaron, el silencio gobernó durante un tiempo.

Presea: ¿Hasta cuando estaremos en este templo?
Umi: No lo sé.
Ferio: ¿¿No lo sabes?? No vamos a quedarnos toda la vida en este templo.
Umi: Seria demasiado... No se preocupen... yo... tratare de solucionar las cosas cuanto antes.
Clef: ¿Cosas como que?
Umi: Esos temblores que ocurrieron ayer cuando...
Irae: ¿Cuándo qué?...

El misterioso joven apareció con su mirada clavada en la de Umi.

Umi: Irae yo...
Irae: Ya veo... bueno Umi... creo que tenemos que hablar...
Umi: ¿Ahora?
Irae: Sí.
Umi: Disculpen, enseguida regreso.

Irae tomo a Umi del brazo y se dirigieron hacia uno de los corredores.
Clef observo a Lantis y este se puso de pie y los siguió muy sigilosamente para espiarlos.

Umi: ¿Y ahora que sucede?
Irae: Tu lo sabes. No puedes decir nada.
Umi: Pero solo iba a contarles sobre lo que sucedió ayer.
Irae: Claro, y seguramente le contarías sobre nuestro enemigo.
Umi: Tienen todo el derecho a saberlo. Cefiro y la Tierra están en peligro y ellos no lo saben.
Irae: Si se enteran, trataran de hacer algo al respecto. Ambos sabemos que un desequilibrio de magia podría causar un desastre, no solo en Cefiro sino en la Tierra, tu mundo.
Umi: Yo se los diré. Si algo sucede cargare con la culpa.

Irae la tomo de los brazos y la agito un poco.

Umi: Suéltame Irae.
Irae: Lo siento. Pero que te quede claro que si abres la boca, mis sentimientos serán sordos y mudos a la hora de castigarte.
Umi: ¿Cuál podría ser el castigo?... Tal vez lo escoja antes que seguir mintiendo.
Irae: Tu muerte... No; mejor dicho... la muerte de tus amigos será suficiente.
Umi: ¡¿Serias capaz de hacer algo tan ruin como eso?!
Irae: Eso y mucho más. Antes que mis principios esta mi única misión, la misión por la que deje todo.
Umi: Irae... Ya no quiero seguir en esta situación... ya estoy cansada...
Irae: Lo se, pero no hay otra opción.

Luego de que Irae marchara, Lantis regreso a la mesa y hablo telepáticamente con Clef.

Lantis (T): Me temo que Cefiro como el Mundo Místico corren serio peligro.
Clef (T): Lo temía... Y aun así Umi ha callado...
Lantis (T): No por su voluntad.
Clef (T): ¿Que dices?
Lantis (T): Irae la amenazo con que si hablaba, todos nosotros moriremos.
Clef (T): Ese sujeto es un desgraciado.
Lantis (T): Pero lo más extraño es que, él puede tocarla sin sufrir daño alguno, y su cuerpo tampoco cambia de estado. Él dijo que no quiere que nos entrometamos ya que podríamos causar un desequilibrio entre la Tierra y Cefiro.
Clef (T): Debemos hacer algo cuanto antes.
Lantis (T): Si pero, aun no sabemos cuando podamos regresar a la superficie.
Clef (T): Mi magia no funciona aquí... Es extraño y muy sospechoso... Mientras tanto, mantengámonos alerta...


"
Nunca mires de cerca aquello que necesites ver demasiado bien..."