"El tiempo me hizo comprender

que tarde o temprano

volvemos al mismo lugar,

una y otra vez,

en la realidad o en la fantasia."

Céfiro de mi Juventud

Capitulo 3

Mas tarde, las chicas estaban reunidas en una sala. Estaban sentadas en un cómodo sillón las tres juntas, aun temerosas de lo desconocido y aguardando las respuestas que les prometieron. Frente a ellas esta Hikaru, quien trata de darles seguridad y confianza, mientras que en una esquina de la habitación están Clef, Fuu y Umi, observándolas con detención y preocupación. Prácticamente la escena era la misma que la del día anterior...


Fuu: ¿Tu que crees?

Clef: Tengo una teoría bastante obvia...

Umi: Guerreras Mágicas ¿Verdad?

Clef: Los genios las convocaron, solo ellos pueden hacerlo. Así que deduzco que fueron convocadas para luchar en las guerras de Autozam. Estoy seguro que el portal entre ambas dimensiones se abrió solo para ellas, pero ustedes pudieron pasar a través de el al haber sido Guerreras antes. Drayden las rescato pero no noto que otras chicas cayeron después de ustedes.

Umi: ¿Qué sucederá entonces?

Clef: Me temo que ellas y ustedes no podrán regresar a su hogar hasta que cumplan su misión.

Fuu: La historia se repite. ~ Menciono con un dolor en su pecho...

Umi: Será mejor que hables con ellas, y que les digas que tu eres el hechicero que están buscando.


Camino hacia las tres niñas y Hikaru se puso de pie para darle lugar a Clef mientras ella se acercaba sus amigas. Clef tomo asiento y con seriedad las miro...


Clef: Las voces que oyeron son de tres espíritus, son los genios de este planeta que se llama Cefiro. Ellos les dijeron que busquen a un hechicero, pues bien... Yo soy la persona que buscaban. Mi nombre es Clef, Madoushi Clef.

Sumiko: ¿Nos devolverás a nuestro hogar? ~ Pregunto con grandes ilusiones.

Clef: Verán... No es tan simple. ~ Respondió nervioso.

Isamu: Primero quiero que me digan que demonios hacemos en este planeta extraño.

Clef: Ustedes fueron convocadas por los genios guardianes de Cefiro para convertirse en Guerreras Mágicas.

Midori: ¿Guerreras Mágicas?

Isamu: ¿Qué es esto? ¿¿Un cuento??

Sumiko: ¿Y para que nos trajeron?

Clef: Luego de convertirse en Guerreras Mágicas, ustedes deberán cumplir una misión. Si la cumplen regresaran a casa.

Isamu: Suena como una extorsióm.

Clef: Me temo que para regresar a su hogar, deberán cumplir esa misión.

Isamu: ¿Qué idiota creería ese cuento de "Guerreras Mágicas"? Eso de cumplir una misión para regresar a nuestro hogar suena como una película. ~ Dijo en tono de burla.

Midori: Es cierto. Parece una tontería.

Umi: Ejem, ejem, ejem. Niñas, no sean tan groseras. Verán...

Hikaru: Nosotras fuimos las primeras Guerreras Mágicas.

Sumiko: ¡¿De veras?! ¿¿Y como es?? ~ Grito emocionada mientras corrió hacia ellas.

Fuu: ¿¿Cómo es que??

Sumiko: ¿Cómo es ser una Guerrera Mágica? ¿Es como en las películas? ¿¿Con espadas y poderes mágicos, y armaduras relucientes con grandes capas y muchas aventuras y animales fantásticos y... ?

Umi: Que ingenua. ~ Interrumpió.

Hikaru: Pues, no es como piensas... No es tan agradable como parece.

Fuu: Oigan, no se supone que debemos asustarlas.

Clef: Pero tampoco hay que mentirles. ~ Comento con tristeza, al recordar amargamente la mentira que hizo que las Guerreras Mágicas acabaran con Zagato sin saber la razón del secuestro de Esmeralda...

Clef: La situación que trae a las niñas es totalmente diferente, de todos modos... Cuéntenles, cuéntenles la verdad sobre las Guerreras Mágicas.


Entonces, con amargo sabor en sus bocas contaron sus historias, contaron sus aventuras, sus encuentros con quienes hoy son sus amigos... También les contaron las penas por las que pasaron, incluyendo todo lo que sucedió con Presea y su hermana. A las niñas pareció asustarles aun mas el mundo en el que estaban... Y por supuesto, el gran dolor que les causo conocer la historia de Zagato y Esmeralda, la mas pura y triste historia de amor que hayan conocido antes... Clef se mantenía alejado, no tenia el valor suficiente para recordar esa epoca. También les contaron sobre su segunda visita y todo por lo que tuvieron que pasar para lograr que otros planetas no invadiesen Cefiro... Y luego... la gran y mítica batalla contra Debonair que fue derrotada por el poder del Pilar que había escogido a Hikaru para portarlo.
Les contaron, que alguna vez hace mucho tiempo, ellas fueron niñas normales, hasta que conocieron a Céfiro, y solo por eso se volvieron especiales, porque cargaban con los recuerdos imborrables de ese planeta... y de toda su gente.


Hikaru: ¿Aun quieren ser Guerreras Mágicas?


Las niñas bajaron sus cabezas, ser Guerrera Mágica no parecía ser un privilegio de los mas fuertes y poderosos...


Sumiko: Creo que ya no...

Isamu: ¿Y como se supone que regresaremos a casa?

Midori: Convirtiéndonos en Guerreras Mágicas. Parece que no tenemos otra opción... ~ Dijo con resignación.

Umi: Clef. ¿Y como se convertirán en Guerreras Mágicas?

Clef: Les serán entregados sus poderes mágicos y sus armaduras.

Hikaru: Pero nosotras tuvimos que pasar por muchas cosas, ¿Ellas tendrán que hacer lo mismo?

Clef: Las batallas anteriores fueron diferentes. Así que podrían recibir algún entrenamiento breve y luego recibir las espadas de Presea, lo siento, quise decir Sierra.

Fuu: Tuvimos suerte de tener habilidades en el Kendo, en el Esgrima y en Arquería.

Hikaru: ¿Ustedes saben usar algún tipo de armas?

Midori: ¿Armas?

Sumiko: ¿Te refieres a pistolas y metrallas?

Umi: No. Armas del tipo tradicionales. Espadas, lanzas y todo ese tipo de cosas.

Isamu: Pues no.

Fuu: ¡Ya se! ¿En que club están en sus colegios?

Isamu: Yo estoy en el de Volley Ball.

Sumiko: Yo estoy en el club de artes manuales.

Midori: Y yo en el de música.

Fuu: Creo que será mas difícil de lo que pensamos. ~ Comento mientras llevaba su mano a su frente.

Hikaru: Sugiero que no tomemos ninguna decisión por el momento.

Clef: Será lo mejor.

Umi: Tal vez podríamos tener una reunión para decidir que hacer. Me parece que es una situación que merece ser analizada plenamente.


Las tres niñas bajaron sus miradas al oír que sus destinos estaban en manos de otras personas... y que para regresar a su hogar deberían luchar en una batalla de un planeta que ni siquiera conocían.

Por la tarde, fue convocada una reunión en un gran salón. Estaban los reyes, Lantis, Ascot, Ráfaga, Clef, Sierra, Caldina y por supuesto Hikaru, Umi y Fuu. Sierra estaba presente pero Ascot no debía saber que no era Presea, todos ya lo sabían, excepto él.


Clef: Es injusto que tengan que luchar en una batalla que no les pertenece, pero la única forma para que todas regresen a su mundo es cumpliendo su misión.

Ascot: Entonces serán llevadas a Eternidad para que consigan su Eskudo.

Presea: Pero...

Clef: Sierra no puede crear armas... ~ Penso preocupado.

Umi: No será necesario... Nosotras entregaremos nuestras espadas. ~ Dijo para reparar la situación.

Ferio: ¿Pero eso puede hacerse?

Presea: Sí, además seria lo mas conveniente... que las Guerreras originales les cedan sus espadas para que se adapten a sus nuevas dueñas.

Hikaru: Tengo una inquietud respecto a los genios... ¿Acaso las niñas deberán despertarlos como lo hicimos nosotras?

Ascot: Tal vez solo deben convocarlos.

Ráfaga: Yo me encargare de darles un entrenamiento básico.

Ferio: Seria una buena idea que las primeras guerreras Mágicas ayudasen a las nuevas en sus entrenamientos. ¿Quiénes mejores que ellas para guiarlas?

Deiana: ¿Están de acuerdo con eso?

Umi: Suena bastante lógico.

Fuu: Estoy de acuerdo.

Hikaru: Supongo que esta bien.

Ferio: Bien, entonces la conclusión es muy clara. Las niñas se convertirán en Guerreras Mágicas y lucharan en las batallas de Autozam.

Lantis: Pero... ¿Las niñas están de acuerdo?

Hikaru: Lo estarán. No tienen otra alternativa y con seguridad quieren regresar a su hogar. Harán lo que les digan con tal de volver a la tierra.


Ella se puso de pie y se marcho, esas palabras tenían cierta ironía... Algo muy extraño de Hikaru.


Lantis: ¿Que te sucede? ~ Pregunto preocupado cuando ella estaba por salir.

Hikaru: Disculpen, no me siento bien.


Cerro las puerta tras ella y todo quedo en silencio.


Umi: Bueno, parece que esta todo dicho.

Fuu: Mañana será un largo día.

Umi: Nosotras nos retiramos.

Deiana: ¿Cenaran con nosotros?

Fuu: Sí, con seguridad.


Con rapidez se marcharon y buscaron a Hikaru que no estaba lejos de allí, sabia que ellas irían tras ella.


Fuu: ¿Estas bien?

Hikaru: Sí, tal vez un poco aturdida.

Umi: Ahora esta confirmado, ya no somos Guerreras Mágicas.

Fuu: Es cierto. Siempre pensamos que habíamos dejado de serlo pero ahora nos lo confirmaron de una forma muy peculiar.

Hikaru: ¿Creen que sea correcto que las niñas se conviertan en guerreras?

Umi: Correcto o incorrecto... No tienen alternativa y nosotras tampoco.

Fuu: Pero... ¿Qué es lo que les enseñaremos?

Hikaru: No lo he pensado.

Umi: "Como ser una Guerrera Mágica y sobrevivir a ello" o "Como ser una Guerrera Mágica y no morir en el intento." Suena divertido y sin embargo no lo es...


Llego rápidamente la noche, y todos se reunieron para cenar, incluyendo a las niñas recién llegadas. Cuando vieron nuevamente a tantas personas se sintieron intimidadas, pero sus nuevas amigas y llamémoslas "Guías" les brindaban una cálida sensación de seguridad... Ellas se sentaron muy cerca de sus guías pero seguían mirando con desconfianza a los demás. Por otro lado, los jóvenes estaban muy interesados en conocer a las chicas, pues era otro gran suceso conocer a las nuevas Guerreras Mágicas. Ya habían sido presentados todos, aun así no recordaban los nombres de todos, eran demasiados.


Kherd: ¿Y como es el Mundo Místico?

Sumiko: ¿Mundo Místico?

Hikaru: Quiso decir la Tierra.

Sumiko: Ah... Bueno... en la Tierra no hay montañas que flotan, por ejemplo.

Abrecht: ¿Y todos se visten como ustedes?

Isamu: Claro que no. ¿Acaso crees que la gente vive en Colegios Secundarios?

Midori: Fuu... ¿Ya tuvieron la reunión que mencionaron hoy? ~ Pregunto en voz baja a quien se encontraba a su lado.

Fuu: Ah... pues... Sí, ya nos reunimos.

Midori: ¿Y de que hablaron?


Todos dejaron de comer y guardaron silencio. Debían decirle de algún modo lo que habían decidido, pero como decirles que definitivamente deberían luchar para regresar a su hogar?...


Deiana: Tal vez podríamos hablar de ese tema en otro momento... ~ Comento en un fallido intento de esquivar el tema.

Isamu: Se nota que no son ustedes los involucrados. ~ Dijo con gran enfado.

Hikaru: Lo que se decidió fue que ustedes tendrán que convertirse en Guerreras Mágicas. Recibirán un breve entrenamiento, obtendrán poderes mágicos y espadas.

Sumiko: ¿Y luego que? ~ Pregunto con temor.

Fuu: Me temo que irán a Autozam a defenderlo.

Isamu: Entonces... ¿Esa es la única forma de regresar a casa?

Hikaru: Sí.

Midori: Podemos morir en esa batalla. ¿Verdad?

Clef: Eso no sucederá. ~ Dijo con gran decisión.

Isamu: Tengo miedo Umi... No se si quiero ser una Guerrera Mágica...

Umi: No te preocupes. Nadie dejara que les suceda nada malo. ¿Verdad?


Todos asintieron apenados por tener que tomar tales decisiones sobre las niñas, pero eso no pareció devolverles la confianza.


Sumiko: ¿Podemos... Podemos retirarnos? ~ Pregunto con inseguridad, y sus anfitriones asintieron. Así, las tres niñas se marcharon.


Horas mas tarde, Hikaru busco a Lantis por todos lados hasta encontrarlo, estaba en una sala junto a Ráfaga y Ferio. Ella entro a la sala y solo con verla Lantis entendió... Así que ambos se marcharon a otra sala, el mismo lugar donde se reencontraron cuando llegaron esta vez.


Hikaru: Lamento sacarte de tus asuntos Lantis. Pero creí que...

Lantis: Que nos debemos una conversación.

Hikaru: Sí, así es. A decir verdad me siento algo incomoda con esta situación.

Lantis: No eres la única.

Hikaru: Los años han pasado Lantis... Me temo que ya no sé como considerarte.

Lantis: Aquella despedida...

Hikaru: Aquellas palabras... ¿Eran ciertas?

Lantis: Sí, lo fueron.

Hikaru: Siempre recordé ese breve instante en que descendíamos con lentitud...

Lantis: Sabes algo... Ese momento se convirtió en leyenda... Todos en Cefiro recuerdan el momento en que las Guerreras Mágicas descendieron de los cielos y luego se marcharon...

Hikaru: Vaya... Hasta en leyenda nos convertimos.

Lantis: Te espere pero nunca regresaste...

Hikaru: Hubiese querido regresar...

Lantis: Unos años después de que se marcharon, convencimos a los genios de traerlas de regreso.

Hikaru: ¿Convencieron a los genios? Parece una ridiculez.

Lantis: Los genios son como personas, tienen almas como nosotros y son los únicos que poseen poder sobre otras dimensiones... Así que aceptaron... Madoushi Clef uso su magia combinada con la de los genios...

Hikaru: ¿Y que sucedió entonces?

Lantis: Nada... El portal se abrió y las esperamos, pero ustedes nunca llegaron. Pensamos que tal vez los genios no pudieron traerlas al no tener ellos una razón para hacerlo...

Hikaru: Entonces...

Lantis: Entonces decidimos seguir con nuestras vidas.

Hikaru: Nosotras hicimos lo mismo...

Lantis: Realmente te amaba Hikaru...

Hikaru: Y yo a ti Lantis... Pero el tiempo y la distancia estuvieron en nuestra contra.

Lantis: ¿Eres feliz en tu mundo?

Hikaru: Sí, mucho. ¿Y tu?

Lantis: También. Hikaru...

Hikaru: ¿Si?

Lantis: Discúlpame por lo de anoche. No tuve valor para hablarte.

Hikaru: No te preocupes, creo que yo tampoco hubiese podido hablar.


Luego de esas palabras se sintieron aliviados, como si ya no tuvieran que cargar con la culpa del olvido, ahora estarían en paz, sin embargo... otra culpa invadía a Lantis, y también a Hikaru.


Lantis: ¿Qué harán con las niñas?

Hikaru: Supongo que lo único que podemos hacer es aconsejarlas... nuestra experiencia nos enseño cosas valiosas sobre la vida... y en cierto modo aprendimos a valorar lo que nos rodea... pero no me agrada mucho que otras niñas pasen por lo que nosotras pasamos.

Lantis: Nadie quería eso.

Hikaru: Lo sé. Pero no podemos hacer nada.

Umi estaba en su cuarto, observando un fotografía sobre su cama cuando de pronto sintió unos golpes en su puerta.


Umi: Adelante.


La puerta se abrió un poco y Isamu se asomo con timidez.


Isamu: ¿Puedo hablar contigo?

Umi: Claro, entra.


La niña entro y se sentó sobre la cama a un lado de Umi.

Umi: ¿Qué te sucede?

Isamu: Nada... es solo que... Me siento mal.

Umi: ¿Te duele algo? ¿¿Estas bien?? ~ Indago preocupada.

Isamu: Estoy bien. No quise decir eso. Vera, no se como explicarlo...

Umi: Di lo que quieras, estamos en confianza.

Isamu: Bueno... es sobre Sumiko y Midori.

Umi: ¿Sobre tus amigas? ¿Qué sucede con ella?

Isamu: Eso es. "Amigas" No se si llamarlas amigas. A penas las conozco, y no puedo confiar en ellas aunque lo intente... Me siento mal por eso.

Umi: Déjame decirte algo... Confía en ellas, es lo único que tienes en este planeta.

Isamu: También te tengo a ti.

Umi: Cuando Hikaru, Fuu y yo llegamos a Cefiro me sucedió lo mismo... No sabia confiar en ellas, pero después... cuando empezamos a tener aventuras y estar en constante peligro me di cuenta que si no confiaba en ellas estaría sola en el mundo. Y desde que nos conocimos, nos hemos convertido en las mejores amigas, inseparables... En esa época dependíamos las unas de las otras...

Isamu: ¿Fue muy difícil para ti convertirte en Guerrera Mágica?

Umi: Sí... En un principio solo pensaba en mi y en regresar a casa, pero luego... me di cuenta de que este mundo era muy valioso... Supongo que eso fue lo que me ayudo.

Isamu: ¿No extrañas tu casa ahora?

Umi: ¿Qué si la extraño? Claro que sí... Extraño a mi esposo y a mi hija... Tu me la recuerdas mucho.

Isamu: ¿Y ellos saben sobre Cefiro?

Umi: Claro que no. ¿Qué objeto tendría? Después de todo... Nadie creería que tres chicas viajaron a otro mundo para salvarlo. Pero cuantas preguntas que me estas haciendo.

Isamu: Es cierto, mejor me voy a dormir.

Umi: Será lo mejor. Mañana seguiremos hablando de lo que quieras.

Isamu: Gracias.


La chica se marcho pero luego vio que un joven iba en dirección contraria, ella no quería encontrarse con nadie, pues todos parecían mirarla a ella y a sus compañeras como extrañas que eran, como cargas... Aunque no era cierto lo que pensaba.


Drayden: Hola. ~ Dijo el joven.

Isamu: Hola... ¿Cual era tu nombre? Es que no lo recuerdo.

Drayden: Mi nombre es Drayden.

Isamu: Ahhh... Oye y... ¿Qué haces en este castillo?

Drayden: ¿Te refieres a que función?

Isamu: Sí.

Drayden: Pues mi padre es Madoushi y es consejero de los reyes, así que solo soy aprendiz. Tal vez llegue a convertirme en Madoushi como él.

Isamu: ¿Y que es un Madoushi?

Drayden: Un hechicero. Un hechicero que se encarga de enseñar magia a sus discípulos.

Isamu: Vaya... que gente extraña habita este lugar... Solo falta que aparezca un conejo corriendo con un reloj en mano.


Mokona se acerco a la jovencita y le salto en sus brazos, lo que la asusto bastante.


Isamu: Ay no... ¿Se supone que tu eres el conejo?

Drayden: Su nombre es Mokona.

Isamu: ¿Y donde esta Alicia?

Drayden: ¿Quién?

Isamu: Solo bromeaba.

 

Adelanto del próximo capitulo:

Endora: En esa época se había corrido el rumor de que se había... Bueno, que se había enamorado de una de las Guerreras Mágicas. ~ Concluyo nerviosa.

Hikaru: ¿Te molesta hablar de ello? ~ Pregunto comprensivamente.

Endora: No me molesta... En cierta forma me avergüenza. Porque siento que tu eres la guerrera mágica y yo una mujer común... y que Lantis debería pertenecerte solo a ti porque te tomo muy poco tiempo entrar en su corazón y mucho tiempo en salir.

Hikaru: No pense que dirías eso. Haces que sea yo quien sienta vergüenza, por regresar a este mundo después de tantos años y hacerte dudar. Pero no deberías preocuparte de nada, solo soy Hikaru... y estoy complacida de que seas tu quien esta con Lantis, eso te hace muy especial... mucho mas que ser una Guerrera Mágica.

Endora: ¿Nunca te lo perdonaste verdad? Nunca te perdonaste lo que sucedió con su hermano...

Hikaru: No. Aun no lo hago.

Endora: Bueno... Creo que ya te quite mucho tiempo... ~ Dijo poniéndose de pie.

Hikaru: Espera.

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Por:

Eternal Umi.