CAPITULO 2 (DE
NUEVO EN CEFIRO)
Lucy:
No puedo creerlo. ¡REGRESAMOS!
Anaís:
Es cierto, al fin estamos de vuelta
Marina no decía nada, tenía una extraña mezcla de
sentimientos.
Al llegar al castillo solamente Guru Clef las
esperaba. Marina no podía creerlo, por
fin estaba frente a frente con la persona que había amado en silencio los
últimos 4 años de su vida. Había
cambiado mucho. Ya no tenía la apariencia de un pequeño niño, ahora era un
apuesto joven que aparentaba unos veinticuatro o veinticinco años; pero sus
ojos eran los mismos. Azules y
profundos.
Lucy y Anaís se acercaron para saludarlo. Estaban felices de verlo. Guru Clef también se veía contento, y de
pronto se dirigió a Marina.
Guru Clef:
¿Qué pasa Marina? ¿porqué no te
acercas?
Sin poder evitarlo Marina corrió hacia Guru Clef y lo
abrazo. El se puso muy nervioso.
Evidentemente no estaba acostumbrado a las muestras de afecto.
Guru Clef: ¡Marina!
Marina:
Lo siento, es que hace tanto tiempo que no te veía. Casi no te reconozco con ese nuevo
aspecto. Te queda muy bien.
Gur Clef:
(Sonrojándose) Gracias, algún día
tenía que crecer. A mi también me da gusto verlas (y sonrió) y ustedes también
lucen muy bien.. Síganme, tenemos mucho
de que hablar (y se dirigió al salón del trono)
Marina se sintió un poco desilusionada por la forma tan
indiferente con que Guru Clef la había tratado, es decir, la trataba igual que
a Lucy y Anaís.
Durante el camino al salón del trono, Lucy y Anaís
platicaban animadamente con Guru Clef, preguntando por sus “amigos”, pero
Marina no ponía mucha atención:
Marina: (en su pensamiento) Después de todo, para el solamente soy una
“Guerrera Mágica”. No sabe lo que siento
por él.
Al llegar Guru Clef les ofreció asiento y de pronto se
puso serio.
Guru Clef:
¿Tienen idea de porqué regresaron
a Céfiro?
Lucy:
En realidad no. Pensamos que
nuestros deseos de regresar a Céfiro al fin se habían cumplido.
Anaís:
Acaso ¿no es así?
Guru Clef:
No estoy seguro. He tenido un
sueño que me preocupa mucho.
Lucy:
¿Cómo es eso? Explícanos por
favor.
Guru Clef:
Es muy extraño, es un sueño donde están ........
Marina:
Muertos...... No tienen heridas o
señales de haber sido atacados, simplemente están muertos.
Todos voltearon a ver a Marina.
Guru Clef: ¿Cómo sabes eso?
Marina:
Porque lo he visto muchas veces.
Guru Clef:
Explícate por favor
Marina:
Lo he visto en sueños Guru Clef, Paris, Latis y tu en el piso, con los
ojos cerrados, como si estuvieran dormidos, pero están muertos (y empezó a
llorar de una manera descontrolada, su cuerpo temblaba y su mirada se perdía y
de pronto se desmayó.
Guru Clef corrió a su lado y la levanto en brazos.
Guru Clef:
Será mejor que la lleve a una habitación.
Anaís:
¿Va a estar bien?
Guru Clef:
Eso espero. mmmm Es muy
extraño. ¿Cómo pudo soñar lo mismo que
yo?
Lucy: Nos acababa de decir que había tenido
pesadillas donde todos estaban muertos y que sentía que tenía que regresar a
Céfiro. Después de eso... volvimos.
Guru Clef:
Bien será mejor que descanse, y ustedes también. Les indicaré cuáles son sus habitaciones.
Anaís:
Si no te molesta, quisiéramos quedarnos junto a Marina un rato.
Guru Clef:
Claro que si, no hay problema.
Marina tuvo un poco de fiebre. Durante el sueño se agitaba, murmuraba algunas
palabras que sus amigas no podían comprender y después caía en un profundo
sueño.
Esa tarde todos habían regresado al castillo. Estaban sorprendidos de que las Guerreras
Mágicas estuvieran ahí.
Aunque estaban muy preocupados por Marina, Paris y Latis
no podían evitar sentirse felices de volver a ver a Anaís y Lucy, y Caldina se
ofreció a cuidar a Marina para que las chicas pudieran tener un descanso y
“recuperar” un poco del tiempo perdido, y aunque sus amigas se sintieron
egoístas, aceptaron tomar un descanso y salieron de la habitación con sus
respectivas parejas. Entonces llegó
Ascot.
Ascot:
Caldina ¿puedo pasar? Quisiera ver a Marina.
Se acercó a la cama, se arrodilló al lado de Marina y
tomó su mano.
Ascot: Es más hermosa ahora que es una mujer
¿no es cierto?
Caldina:
Querido Ascot, no te hagas ilusiones.
Ha pasado mucho tiempo y no sabemos si su vida ha cambiado allá en su
mundo.
Ascot:
Es cierto. Pero ¿sabes?, al pasar el tiempo pensé que la había
olvidado. Ahora que vuelvo a verla me
doy cuenta de que no es así.
Beso la mano de Marina y después de un rato se
retiro. En ese momento y por delirio de
la fiebre Marina dijo un nombre.
Marina:
Guru Clef.....
Caldina:
Pobre Ascot, Marina sigue enamorada de Guru Clef.
* * *