Capítulo 1: Affirmation

El avión aterrizó con suavidad sobre lo que era el aeropuerto internacional de Japón. El viaje había sido realmente corto, a pesar de los nervios que dominan mi ser. ¿Acaso era el viejo Li Shaoran que por primera vez llego a Japón? Mi vida en estos años, había cambiado...demasiado diría yo...hasta mi forma de ver la vida...mi forma de actuar...de ser.
-Y todo por ella - dije en apenas una exhalación.
Baje del avión con lentitud, parte de mí no quería apresurar las cosas, era mejor no ir como un joven alocado hacia su lado. Por Dios, era Li, no podía cambiar de la noche a la mañana...pero...
-Li!!
Argh. Demasiado tarde. Me volví y una joven de cabellos morados venía hacia mi saludandome. Suspire de alivio, no era Sakura...era Tomoyo...aunque al final, creo que hubiera resultado lo mismo.
-Li, bienvenido a Japón nuevamente.
-Gracias Daidoji - musite en tono neutro y cortés - como has estado?
-Bien, Meiling me llamo para decirme cuando venías
-Meiling - solte un largo suspiro - creí que me dejaría en paz con ello.
-Vamos Li, todos queremos que le digas "eso" a Sakura.
Me sonroje levemente. Tomoyo sonrio..
-Veo que no has cambiado en estos 10 años.
Solte una leve mueca. ¿Que diablos había querido decir con eso?
-A proposito - musite - no esta aquí Sakura?
Ella parecio notar algo de ansiedad en mi palabra, ya que volvio a sonreír, pero se limito a negar.
-No, Sakura fue a visitar a nuestro abuelo en la casa de campo afueras de la ciudad.
-Ah, ya veo, y así no logro enterarse - dije aliviado - eso es bueno.
-Pero volverá en unos 3 días.
Agh. Eso era malo.
-Y alguien más sabe de mi visita?
-Tenías que volver mocoso.
Esa voz. Podría reconocer esa aspera y seca voz en donde fuera. Me voltee...no había cambiado en lo absoluto, salvo que yo era un poco más bajo que él.
-Ah, Touya, hubieras esperado en el coche - sonrio Tomoyo - disculpalo, pero es que el recibio la llamada de Meiling también.
-Vaya mocoso, así que has regresado.
-Kinomoto, no tengo ganas de pelear contigo - le conteste en tono gelido - ahora estamos del mismo ancho, ya no soy un mocoso.
-Habrás crecido, pero sigues siendo igual de insolente.
-Quieres probarlo? - me remangue ligeramente la camisa, pero Tomoyo se interpuso.
-Dejen de pelear, parece que no han madurado desde que pelearon por ese conejo en el puesto de lanzar aros.
-Esta bien - baje los puños - no discutire.
Touya me dirigio una mirada fría.
-Vamos, se hace tarde, no creo que Sakura quiera verte.
-Chicos, mejor carguen las maletas - exclamo Tomoyo interviniendo un comentario fuerte de mi parte por lo que dijo. Asentí mascullando algo entre dientes. Algo me decía que esta visita no iba a ser tan sencilla...

Mientras platicaba con Tomoyo sobre lo último que había pasado, mis temores iniciales habían amainado, al menos, podría controlarme mejor si Sakura apareciera de repente.
-Así que ahora estudia en la universidad?
-Sí, lenguas y filosofía, además, da clases en la preparatoria Tomoeaba.
-Vaya, se ha vuelto como su padre - musite recordando cuando el Señor Kinomoto dio una clase de arqueología en la primaria.
-Cierto, aunque bueno, Maki no queria que diera clases.
-M-Maki? - tartamudee mientras miraba al autor del comentario. Pude ver por el espejo retrovisor, como Touya sonreía. El muy lo había hecho con esa intención. Tomoyo le dirigio una mirada seria, pero la expresión de Touya no amainaba en un apice.
-Así que... - alcanze a musitar - tiene un novio?
-No, para nada Li!! - Tomoyo movio las manos freneticamente, tratando de disculparse - solo que...bueno...es un chico con el que ha estado saliendo últimamente.
-Me lo imaginaba, tal vez, no fue algo bueno venir - musite en voz baja. Tarde en dirigir estas palabras. Por un momento me maldije por pensar así. Era obvio que Sakura no iba a pasarle por la cabeza el hecho de esperarme, o tal vez, el gesto del osito no lo había comprendido y lo había tomado solo como amistad.
-Pero que tonto me he vuelto - me dije a mí mismo.
-Sakura siempre te menciona
-Eh? - levante la vista hacia Tomoyo.
-Sí, siempre habla de tí, tal vez por eso no ha llegado nada en serio con Maki.
-Quieres decir que..
-Sí mocoso - murmuro Touya mientras se movía en la vía rápida - Sakura siempre se la pasa comparando al pobre de Maki contigo.
Un leve sonrojo vino a mi cara.
-E-Eso es cierto? - tartamudee. Tomoyo asintio con una sonrisa.
-Han pasado años, pero ella espera siempre ansiosa tus cartas desde Hong Kong.
-Es cierto eso?
-Para mi desgracia, es cierto mocoso - Touya se detuvo en un cruce de semáforos - y debo admitir que mi hermana siente algo por tí.
Me sentí esperanzado al escuchar esas palabras. Era hora de actuar y rápido.

-Gracias por traerme - musite afueras de mi vieja casa en Tomoeda. Touya no dijo nada y encendio de nuevo el motor. Tomoyo me sonrio y me lanzo una nota.
-Es el número del celular de Sakura. Lo necesitarás.
-Erh...gracias...
Tomoyo me sonrio y el coche arranco. Me volví hacia la puerta. Esta vez, venía solo, sin Weing que me apoyara, pero creo que aprendí lo suficiente, para mantenerme yo solo, sin necesidad de nadie más...

Luego de revisar la casa, checar los servicios, me dí a la tarea de ir a comprar víveres. No era momento de enfrentar cara a cara a Kinomoto, si lo hacía, terminaría echandolo todo a perder...
-Vaya - me dije mientras cerraba la puerta - desde cuando me volví tan inseguro. Por Dios, solo es una chica...pero..que chica...
Al decir estas palabras, sentí como mis mejillas se calentaban. Tal vez ahora cursaba la universidad, tal vez era más alto, pero...seguía siendo igual de tímido.
-No - masculle mientras salía - tengo que ser fuerte. Sakura no querría a un chico tan tímido como yo...si tan solo, pudiera ser como Yukito hace unos años...

Luego de agarrar valor, me dirigí a un supermercado que me imaginaba, aun estaba funcionando. Por suerte, mis rezos fueron escuchadas. No quería ir afuera de la zona de mi casa, por no encontrarme a Sakura, no ahora, hasta que agarrara el valor suficiente y no pareciera señal de alto al verla.
Mientras compraba, note como varias chicas me miraban, y otras emitían una sonrisa al verme. Es extraño, pero luego del "noviazgo" con Meiling, no estuve con ninguna chica más, a veces, solo por compromiso de mi familia o por una cena formal de la escuela, pero entre mi tímidez y mis hermanas, no tuve una novia realmente...sonara extraño, pero ni siquiera, he dado mi primer beso. Lo más cercano que fue a ello, fue el que casí me dio Sakura en la obra de teatro.
-Mi primer beso - me toque los labios mientras salía del Super y solte una leve sonrisa - de seguro nadie con 20 años encima estaría igual que yo, no señor.

Esa noche, mientras preparaba mi cena, tenía encendida la radio. Varias canciones de lo que los nipones, llamaban "animee", se escuchaba, entre ellas, una muy pegajosa, "Yuzurenai Negai".
-Doma, Anai, midaroi...ichu, enai... - canturreaba mientras cortaba los vegetales para prepararme un ramen chino. Entonces sono el timbre de la casa. Rapidamente deje el cuchillo y camine despacio hacia la puerta.
-Hola Li, estas solo?
-Tomoyo, buenas noches, que haces aquí? - pregunte sorprendido.
-Bueno, es que quería hablar contigo, sobre como harás para ver a Sakura.
-Cierto, gracias - dije tocandome la nuca - pasa, quieres cenar algo?
-Claro, será todo un placer.
Tomoyo se había ofrecido a ayudarme a preparar la comida, y así aprovechabamos para platicar.
-Así que regresa pasado mañana?
-Sí, no te preocupes por estar escondiendote estos días de ella.
-Vaya, adivinaste lo que paso hace rato - sonreí a medias. Por suerte, con Tomoyo ya no me sonrojaba (al menos en privado) hablar de Sakura. Ella había sido la primera en darse cuenta de mis sentimientos hacia Sakura, y en todo ese tiempo, me había apoyado para decirlo. Lastimosamente, aun no ocurría ese momento, pero aun así, Tomoyo no perdía la fe. Se había convertido en una hermosa joven delgada, de cabello purpura largo y ciertamente atractiva, pero...no me interesaba. Mi mente solo estaba en...
-Te sonrojaste Li - me sonrio Tomoyo. Yo solo baje la cabeza, emitiendo una cara de verguenza y pena.
-Veo que esa reacción que despierta en tí, jamás se quitará. Que lindo.
-No lo soy - dije dejando de picar - si lo fuera, sería más valiente y Sakura y yo...yo...
Sin querer, aprete el puño, exprimiendo parte de la lechuga que había cortado. Tomoyo se acerco y me miro seriamente.
-Deja de sentirte así, Sakura no le gustaría verte en ese estado.
-Tienes razón, pero...¿Que voy a hacer? Si la veo, yo..yo... - mi mente se quedo en blanco, solo sentía un nudo en la garganta.
-Si fallaste hace años, es hora de rectificar el rumbo Shaolan.
-Tienes razón, pero como?
-Eso lo discutiremos ahora mismo - me guiño el ojo...no tenía mucha confianza, pero...diablos. Había que intentarlo.

Mientras cenabamos, una duda surgio en mi cabeza...
-Tomoyo, ya tienes novio?
Ella solo me sonrio y entonces, saco de su bolso que tenía a lado de la mesa, una foto y me la mostro.
-¿Quien es?
-Mi futuro prometido.
-¡TU PROMETIDO! - casí grite mientras veía la foto. Ella siguio con esa sonrisa que le caracterizaba.
-Sí, llevo dos años saliendo con él y decidimos formalizar nuestro compromiso. Su nombre es Kamui. Lo conocí cuando entre a la universidad.
-Vaya - me quede viendo la foto. Era un chico de cabello negro y mirada seria.
-No parece ser tu tipo
-Es muy serio, como Touya, pero muy atento y amable.
-Hmmm, okas - deje la foto.
-Aunque mi compromiso sería doble, si alguien se hubiera animado desde antes.
-Tomoyo! - exclame sonrojado. Ella se rió.
-Vamos Li, bromeaba, ahora chico, no me falles.
-Pides mucho - suspire apesadumbrado.

Terminamos la cena y Tomoyo me explico que podría hacer el día que viniera Sakura, entre ello, ir a su casa, invitarla a salir y tal vez, dar el paso final, pero viendo la chica como reaccionaba a ello, decidio solamente que fuera a verla y que ella estaría presente, para que estuviera más relajado y tranquilo.
-Gracias por lo que haces por mí - dije cuando me despedía de Tomoyo.
-No Li, gracias a tí. Sakura merece ser feliz, se que a tu lado, lo lograra.
-Y ese chico?
-Maki? Ah, él - Tomoyo sonrio - es un buen muchacho, pero a veces, no trata apropiadamente a Sakura.
-¿Que quieres decir?
-Toma decisiones sin que ella quiera o desee, y es muy orgulloso, tal vez por eso, le cae bien a Touya. Te recomiendo que no te le acerques.
-Ya veo, si Touya le agrada, me parecera antipatico, comprendo.
-¿Celoso?
-No voy a negarlo. Me enfurezco de solo pensar que él esta con ella, dandole...grrr!
-Eres un buen chico
-Porque?
-Tus celos no van contra Sakura, sino que contra Maki.
-Claro, Sakura no tiene nada que ver. Ella, es muy - sentí como me coloreaba - especial, hermosa...cualquier chico se fijaría en ella y es algo que no tiene la culpa.
Tomoyo sonrio y me dio un beso en la mejilla.
-Ánimo Li, todo saldrá bien.
-Eso espero...buenas noches
-Buenas noches - la puerta se cerro y me recargue en ella.
-Sakura - me dije mientras suspiraba...

Al día siguiente, salí a practicar futbol en una cancha que aun estaba cerca de la casa. En Hong-Kong, cuando terminaba mis ejercicios con Weing o mis estudios, me gustaba practicar futbol, desde que tengo memoria. Fue un regalo que me dio mi padre, antes de que muriera.
-Sí, así debe ser... - entonces levante el esférico y comence a equilibrarlo con habilidad, para finalmente, ponerlo en posición y sacar un disparo que se incustro entre las redes de la portería. Solte un último suspiro de cansacio y camine hacia la banca, donde tenía un termo con agua y una toalla. Me seque el sudor mientras miraba con detenimiento el campo.
-Me pregunto porque siempre tengo que apenarme cuando la veo - sonreí para mis adentros - es tan fácil decirle, que me gusta...es tan sencillo.
Entonces me levante y mire hacia todos lados, para cercionarme si no había nadie. Dirigi mi mirada hacia el cielo.
-Me gustas Sakura Kinomoto!!! - grite a los cuatro vientos. Aquel grito parecio liberar parte de la presión que tenía en mi ser...aunque ella no lo había escuchado, solo el viento mismo, era ya un comienzo, ya que había aceptado mis sentimientos por ella.
-Al final de todo, valió la pena - tome el termo y mi toalla y me dirigí hacia la casa. Aun tenía que ver que regalarle a Sakura y no quería improvisar de último minuto. No creo que fuera tan díficil regalarle algo a una chica después de todo, al fin, se que le puede gustar un osito de peluche, una cadena o un dije, sí, eso servirá.

-Maldita sea!! - masculle afueras de una tienda de peluches. Creo que había subestimado esto. En 2 horas en el centro comercial, no había comprado absolutamente nada. Solo me había pasado viendo los estantes de las tiendas, pero tan pronto algo me interesaba, me asomaba en el interior, y estaba repleto de chicas. Lo admito, me daba pena comprar algo, ya que la gente se me quedaría mirando, y pensando que sería para mi novia.
-Mi novia! - exclame para mis adentros sacudiendo mi cabeza. Esa palabra se mezclaba con la imagen de Sakura.
-Necesito un trago - dije casí mareado.
-No será un boleto de regreso?
Me volví hacia él.
-Eriol?
-Hola Shaolan - me dedico esta estupida sonrisa de siempre. Yo solo me acerque y lo agarre de la camisa.
-No me dediques esa sonrisa, serás mi antepasado Eriol, pero eres insoportable.
Eriol dejo de sonreír y mostro un gesto serio, pocas veces visto en él.
-Eres mi descendiente, deberías tener más respeto.
-Te tendre respeto, pero si me borrarás lo que viví hace unos años.
Eriol volvio a sonreír.
-Te ayudaré a comprarle algo a Sakura.
Fruncí el cejo y lo solte.
-Veo que adivinaste a que vine.
-Sé que tienes mucho trabajo en Hong-Kong, tanto estudiando, como administrando el negocio familiar, pero el amor lo es todo.
-Je - me cruce de brazos - adivinaste. Bien, a donde? Joyeria, Peluches o globos?
Eriol nego con la cabeza y señalo un establecimiento humilde, donde vendían recuerdos.
-Allí? - pregunte desconcertado.
-Sí, el mejor regalo para alguien que quieres, es algo sencillo, significativo. El peluche no estaría mal luego, pero ahora, compra algo que le encante.
Me quede pensando. Entonces recorde la afición de Sakura por las "alitas" que siempre portaba en su ropa.
-Lo encontraste? - Eriol noto mi semblante. Asentí sonriente...

Luego de escoger el regalo, Eriol y yo nos despedimos. Aun me caía mal, pero al menos había ganado parte de mi confianza al echarme ánimos con Sakura. De todas formas, siempre lo había hecho...de maneras muy distintas. Él era obvio que no quería nada con ella, pero de admitir que era mucho más carismático con las mujeres, y eso era algo que me faltaba. Tal vez algo que mi madre paso por alto con Weing, fue mi trato con las chicas. A diferencia de Eriol, no tenía la menor idea de como tratar y hablar con alguien del sexo opuesto. Lo único que había tenido, fue cuando rescate el petirrojo de Meiling y cuando salve a Sakura de ese ascensor...y claro, el peluche.
-Disculpa - escuche una voz mientras meditaba sobre mí enmedio del centro comercial. Levante la vista de la banca donde estaba y una joven de cabello azul corto me sonrio.
-Hola, podrías decirme donde habrá un teléfono cerca, es que...
-Eres extranjera?
-Sí - me miro fijamente - tú también.
-Bueno - me levante y comence a caminar - se donde hay uno, si quieres te llevo.
-Gracias, eres muy amable - me sonrio. Inclíne ligeramente la cabeza y la conduje al aparato.
-¿Cual es tu nombre? - me pregunto.
-Li Shaolan, de Hong Kong. ¿El tuyo?
-Alexandra Putin.
-¿Eres rusa?
-Sí, de San Petersburgo. Que haces tan lejos?
-Bueno - entonces ella noto mi bolsa con el regalo para Sakura - ah, una novia - me miro de forma pícara.
-Erh, aun no es mi novia - musite en tono bajo.
-De todas formas, es japonesa?
-Sí, así es... - dije bastante apenado. Ella me sonrió y entonces comenzo a caminar.
-Vamos, de seguro estas buscando lugares donde comer bien, te invito, para que lo conozcas
-Pero...
-Vamos, te gustará.
Solo me encogí de hombros y la seguí. Que podía perder.

-Así que has vivido antes en esta ciudad?
-Sí, Tomoeda es tranquilo, y es una ciudad pequeña, comparada con las urbes de este país, aunque Hong-Kong esta muy sobrepoblado - musite mientras bebíamos té en una especie de restaurante al aire libre - pero este lugar, no lo conocía.
-Se nota que casí no sales.
-Erh, no, hace 3 años que no vengo a Japón y todo ha cambiado. Viví varios meses hace 10 años.
-Vaya, entonces sí conoces en parte el lugar.
-Un poco - baje la mirada. La chica me sonrió y eso hizo que me apenara. Era realmente hermosa y tenía una belleza muy diferente a la de Sakura, era más ruda, más exótica, contrario a la delicabeza y dulzura que emanaba Sak...argh...no puedo creer que este pensando en esto. Me estoy volviendo un depravado....oh Dios!
-Ocurre algo Li?
-No, solo que meditaba un poco - dije tragando saliva. Ella solo se encogió de hombros y entonces, coloco un par de billetes en la mesa.
-Relajate, tengo que irme.
-Tan pronto?
-Mi novio viene a buscarme
-Tienes novio?
-Sí - me sonrió pícaramente - desilucionado?
-No, se me hacía extraño que no lo mencionarás.
-Bueno, es que... - me miró y sonrió - luego te platicare, nos vemos "lindo".
No cabe duda de que ese comentario me dejo bastante aturdido. Mientras se retiraba, mire la bolsa con el regalo.
-Tengo que irme... - me dije levantandome.
-Shaolan?
Esa voz. Esa...delicada voz.
-Acaso es ... - me volví lentamente. Mis oídos me estaban engañando, pero...
-S-Sakura? - repetí como zombie. Sí. Era ella. Ojos y cabello castaño, un físico delicado. Su presencia simple emanaba dulzura...argh!! si me vieran mis hermanas, me dirían que me he vuelto un cursí romántico.
Entonces se acerco y me miro, ella también parecía sorprendida. Era el momento de tomar la iniciativa.
-Saludos Sakura, buenas tardes - dije en tono apenas audible, pero entonces, una bofetada surco el aire golpeando mi mejilla izquierda.
-Eres un fresco Li Shaolan!! - me dijo furiosa. Yo me quede desconcertado y solo la ví partir, con un palmo de narices.
-P-Pero..que hice????!! - repetí sorprendido...

-Ay Li, que inocente eres!! - escuchaba la risa de Tomoyo por el teléfono portátil. Yo puse cara de ¬_¬.
-Pero porque??
-Simple, Sakura te debió ver con esa chica y creyo que eran novios o tenías una cita.
-Pero, no fue así. Simplemente tomamos el té y conversamos un rato.
-Li, deberías saber que las chicas son muy susceptibles ante esto. No puedes estar invitando a cualquier chica bella aunque sea a tomar el té.
-Pues me parece algo posesivo eso.
-No, son celos.
-Celos? ¿Acaso crees que Sakura se puso...? - me quede callado, parecía estar viendo la cara de Tomoyo sonriendome.
-Bingo amigo
El desconcierto dio paso a una sensación de felicidad y orgullo que jamás había experimentado. Si estaba celosa, tenía una oportunidad. Un chance de...
-Li?? estas allí?
-Eh, sí - musite despertando de mi sueño "guajiro" - aquí estoy.
-Feliz cierto?
-Mucho...pero...Sakura aun esta enojada conmigo. Inicíe con el pie izquierdo.
-Calma chico, primero no te dejes llevar. Yo hablare con ella y entenderá.
-Eso espero...
-Aunque...
-Aunque que??
-Maki tal vez la llevo a cenar hoy.
Grrr. Ese nombre. Tenía ganas de romper en dos al tal Maki.
-Li, primero calmate. Hablare con ella cuando pueda y mañana ve a su casa, ok?
-Esta bien - suspire - espero todo salga bien. Parece que solo he metido la pata estos últimos días...

Mientras estaba acostado, mire el techo con detenimiento y luego la ventaja de mi habitación. El cielo estaba estrellado, pero algunas nubes circulaban. No había luna, y todo parecía más oscuro. La Luna.
Lo de Yukishiro solo había sido por la atracción que el ejercía por su poder, nada más...todo lo contrario con Sakura. No se que fue lo que me atrajo de ella primero, si su forma de ser o como su alegría. Jamás podre describirlo, porque describir el amor, es como describir que es el viento, lo puedes sentir, tocar, más sin embargo, no sabes como es. Miren, yo Li Shaolan hablando como poeta, la influencia de Meiling en Hong-Kong me hizo daño, en verdad.
-Ringg!!
-Eh! - un sonido familiar se escucho. Rapidamente, me volví a mi comoda, y saque un celular de color rojo, pero cuando conteste, ya habían colgado. Entonces lo mire. Sí, era el mismo celular que Sakura me había dado hace unos años, y era para avisarme sobre una carta Clow. Pero, siendo sinceros, no solo lo usamos para eso. Hubo ocasiones, en que nos pasabamos platicando, 15 minutos, hasta una hora. No se porque lo hacíamos, pero algo me impulsaba a escucharla. Yo no decía gran cosa, salvo un "sí", "no", "ah, ya veo", ella era la que hablaba, pero así era nuestra forma de comunicarnos, con eso bastaba.
Seguí observando el celular. Tal vez había sido Tomoyo o...
-No!! - negue - no pude ser ella, estaba furiosa y no me hablaría en mucho tiempo
Pero la esperanza, allí estaba. Inquieto, me volví a acostar y me dormí, aun con el recuerdo de Sakura en mi cabeza...

-Li, no te quiero...
-Porque?!! Porque no?!!
-No me interesas, jamás me interesaste
-Y el osito? Y lo que..?
-Todo fue porque estaba confundida por lo de Yukito, no te quiero...no te amo.
-Sakura!!! No me hagás esto, yo te amo con toda mi alma!
-Pues tienes a Meiling, no?
-Ella es mi amiga, no me importa más que eso!
-Lo siento Li, pero no puedo hacer nada...
-No..Sakura...no me hagas esto..NOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!

Me levante sobresaltado y sudando a mares. Mire con detenimiento la habitación...sí, aun estaba en mi cuarto.
-Fue una pesadilla - deje caer la cabeza entre mis manos mientras respiraba fuertemente. Esto me estaba matando, y no sabía que diablos era. Maldición!
Me levante y le dí varias vueltas a la cama. No lograba tener sueño de nuevo...
-Que me esta pasando? - dije entre dientes mientras me dejaba caer sobre la cama. Sin notarlo, comence a sollozar en voz baja y me encogí en posición fetal, mientras recordaba esa pesadilla...
-Li, no te quiero...
Esa frase me dolía como 100 punzadas en el cuerpo. Las lágrimas seguían corriendo por mis mejillas...
-Sakura - dije casí agarrando una almohada, pensando que era ella. Eso relativamente me tranquilizo y me permitio volver a dormir...

-Li, buenos días - Tomoyo vino temprano a la casa, para llevarme a casa de Sakura.
-Saludos - dije en tono seco mientras abría la puerta.
-Se nota que no dormiste.
-No, tuve una horrible pesadilla, que casí me mata ayer - musite mientras me lavaba con algo de pereza los dientes.
-Hmmm, tranquilo Li, no va a pasar nada malo.
-Eso lo dices tu Tomoyo, pero cuando me vea, que crees que piense?
-Pues primero, te ignorara, por lo que paso en el centro comercial
-Vaya esperanza - musite terminando de lavarme los dientes.
-Sí, pero de allí iniciarás y hablarás con ella.
-Ok, mientras...
-Lo siento, pero no puedo estar cuando pase eso.
-Porque?!! - casí grite desconcertado.
-Debes hacerlo por tí mismo y además, yo estare muy distraído entreteniendo a Maki.
-Maki? Ese tipo también ira?
-El chico es persistente, va cada día a ver a Sakura y darle flores.
-Hmmrff - murmure entre dientes - y yo vengo cada año y solo a saludarla, vaya cosas.
-Li, trata de ser más positivo, verás que todo saldrá bien.
-Pero Daidoji...
-Vamos, no te me apachurres, ahora debes luchar por el amor de Sakura como si fuera la última oportunidad de tenerlo.
-Y si me rechaza?
-Al menos, estarás más tranquilo.
-Sí, con el corazón hecho pedazos y la moral hasta los suelos.
-Se nota que realmente Sakura te importa.
-Demasiado, por ella - me coloque mi chaqueta bajo la camisa china roja que tenía - daría lo que fuera porque... - me sonroje. No pude continuar. Tomoyo me sonrio y me dio una palmadita en el hombro.
-Li, se nos hace tarde.
-Lo sé - suspire y seguí a Daidoji por la puerta...

Fin del capítulo

Notas del autor.
Luego de varios intentos, y ver el final de Sakura, pude realizar este fic. Como ven, esta historia se ubica 10 años después y muestran a todos ya mayores, pero sin cambiar lo realmente sustancial que es el final del manga (que ya muchos fans de Sakura sabrán de seguro). Igual que varios fics que inicie con este, se suponía era una one-shot, pero me deje llevar y este fanfic sera de 3 capítulos máximo!
Agradezco la colaboración de mi hermana, Priscilla, por permítirme ver los episodios y dar su crítica a este fic, así especialmente, a la quien es mi propia Sakura (Liz ^_^), que ha marcado la pauta romántica en estos primeros fics gracias!!!
Sin más que decir, nos vemos en el siguiente episodio...