Título: Ecuación
Capitulo 6
Autor: Neoclark
Clasificación: A
Categoría: Comedia
Aclaración: TATU es propiedad de
Interscope(?), no pretendo dañar a Yulia ni a Lena y esta historia es ficción.
6. Alguien, solo
(Chispa)
(soundtrack = 30 minutes)
Yulia, Sasha y Nastya salieron de aquel lugar, las horas pasaron y la concurrencia del domingo en las calles había vuelto a normalizarse, un transeúnte vio un bulto en la calle, de inmediato las demás personas rodearon aquel bulto, el que lo encontró llamó una ambulancia que se levó a una persona moribunda, era un vecino del sector, pero, quien le había hecho todo esto ese día?
La ambulancia llevó al herido, que tenía una bala en la cabeza y dos en el tórax, le atendieron de urgencias, y su pronóstico –si había alguien interesado en su salud- era reservado.
Cuando el colega se estabilizó –puesto que pudieron salvarle la vida- empezó a balbucear dos nombres, nombres que nadie oyó, porque despertó como dos o tres días después.
C: Yu…lia…Le…na…por...qué?
Momento! no podía hablar mucho, pero podía pensar!, así que vamos a tomarnos la libertad de escribir sus pensamientos para no tener tantos puntos suspensivos, producto de tanta lenayuliadera en sus palabras (lenayuliadera = palabra del diccionario neoclarkístico de la lengua castellana, que denota repetición continua de los nombres «Lena» y «Yulia»):
Porqué? Esa era la pregunta que había de responderse ahora, Lena buscaba a Yulia y viceversa, pero a la vez no quieren encontrarse, acaso pelearon?, acaso alguna de ellas traicionó a la otra? No!, recuerda que Yulia iba acompañada por dos agentes del bureau de Rusia, organización para la que Yulia y Lena trabajaron hace ya mucho tiempo; entonces, no pudo deberse a una simple traición sentimental: además, de ser así, las dos serían lo más discretas posible, puesto que es bastante incómodo que, en ruedas de prensa, en la calle, incluso en casa les pregunten “y tu novia?”, así que de ser este el caso, debían manejarlo con la mejor discreción.
Entonces, porqué iba acompañada por ellas dos?, según Yulia, porque la ayuda nunca sobraría en el caso del secuestro de Lena, pero Yulia…¡Yulia!, conoces su comportamiento, ella no pediría ayuda, sino que buscaría a Lena por su propia cuenta para no meter en problemas a nadie más, eso querría decir que, los sujetos que estaban con Lena, eran blanco de algo mucho más grande, algo contra lo que Yulia sola no podría luchar…Pero Lena no estaba secuestrada, de hecho, parecía compartir el mismo pensamiento de ellos, en otras palabras, parecía amiga de ellos. Ahora, Yulia justificó ese comportamiento –en base a lo del comunicado de la Entente Nórdica dado por Lena- que esas personas podían lavar el cerebro de sus adeptos, bueno…casos se han visto, los más conocidos tiene que ver con ideologías y filosofías humanas; pero ¡ojo!, cuando un pensamiento es inducido de esa forma en una persona, lo primero que dicha persona hace, es tratar de convencer de su nueva forma de pensar a las personas que ama…y Lena y Yulia sentían amor una por la otra, así que Lena –en caso de que tuviese lavado el cerebro- debería buscar a Yulia y no huir de ella, como al parecer hacía.
Ahora pues, qué deseaban tanto Yulia como Lena de este personaje, de este químico puro?, aparte de trabajar como mula por un salario digno de un profesional, él no tenía que ser buscado por nadie, ni mucho menos por ellas; sí, eran amigos, muy amigos, pero los tres siguieron sus vidas, ellas con la suya, como grupo, como pareja y algo más, él, con su vida de profesional, de suerte que halló un trabajo decente en SOLCAN y un par de salidas con sus mejores bacteriólogas, pero de ahí, a ser una pieza clave para las ahora separadas tatu, no tenía ni idea del porqué. Para salir de esta cuestión sólo tenía la versión de Yulia y su comunicado de Lena, que para redondear la idea era “usaremos científicos para generar terror” y “Lena corre peligro”, aunque pensándolo bien, esto lo dijo también la misma Lena refiriéndose a Yulia y, sin olvidar quiénes eran ella y su amada pelinegra.
Era lo único que tenía, no podía saber nada más –la conversación no la oyó porque estaba a punto de morir, pero de todos modos no hubiera entendido nada- y estaba agotado de tanto pensar, así que, hasta no encontrarse de nuevo a Lena o a Yulia –corriendo el riesgo que de ésta vez sí lo quebraran- no podría saber a qué se debía todo aquello.
Qué pasó después de esa noche en Estocolmo?, porqué Yulia y Lena habían cambiado tanto?, que pasó con ese dueto de hacía pocos días que había jurado no separarse jamás?, sea lo que sea que pasase, no sólo les afectaba a ellas, tendría consecuencias más grandes, consecuencias de un problema que debía ser, primero hallado, segundo estudiado y, por último resuelto, todo ello iluminado por el bagaje de la razón, que con tanta insistencia le fue infundida en sus años de universidad, cual era el problema?
Las noticias no se hicieron esperar (según las oía en medio de su semiinconsciencia), en las noticias nacionales, todo seguía igual, excepto por un par de amenazas a docentes de universidad por parte de extorsionistas, -pero eso no viene al caso- en las internacionales, en Moscú, Tokio, Londres y Washington, se encontraron sendas cargas de explosivos que, al parecer iban a ser detonados en simultánea el día de Acción de Gracias, afortunadamente fueron desactivados por los cuerpo anti-explosivos de tales países, y las investigaciones se iniciaron a cargo de las casas de inteligencia de los mismos, siendo así, Yulia y sus amigas, estarían ocupadas en tales cosas, siempre que no…
Dos amigos suyos le acompañaban aquella tarde, eran el doctor León y Natalya, ya hacía días que estaba despierto.
León: Se nos iba metiendo en problemas el señor, no?
C: En dos, para ser exactos…
Natalya: Tranquilo, lo más importante es que descanse, recupérese y, luego lo visitaremos y ahí sí, tratamos de averiguar lo que pasó.
Le: Pero, no sabe quién fue?, o quiénes, a juzgar por como lo dejaron.
C: Hmmmmm….me creería si le dijera que sólo fue una persona?
Le: Pero lo cogió borracho y tras del hecho le pasó una tractomula encima!
El colega rió con mucho esfuerzo, el mismo que tuvo que hacer Natalya para no reírse, en ese momento una enfermera de cabello rojo los interrumpió.
Enfermera: Es la hora de la inyección del paciente, lo lamento, pero deben salir, mañana lo verán de nuevo en el horario de visitas, no se preocupen.
León y Natalya, le desearon una pronta recuperación, se despidieron y salieron de la habitación, cuando el colega abrió los ojos…se dio cuenta que la enfermera era Lena.
C: Qué…haces aquí?
L: (susurrando) Shhhh!, ahora sí, vinimos por ti!
C: Pero…y Yulia?
L: Si Yulia vuelve, te matará esta vez, créeme que corriste con suerte…aquí corres peligro, pero con nosotros estarás a salvo…tranquilo, confía en mí…
Con la inyección, el pulso del colega bajó, se disparó una alarma y los médicos lo dieron por muerto, lo llevaron a la morgue; cuando la puerta se cerró, dos personas lo envolvieron en una sábana y se lo llevaron a otro lugar, allí otra inyección volvió a reanimarlo. Estaba sentado en una silla de ruedas, con Lena y Sara a su lado.
C: Qué sucede…? Dónde estoy?
L: Sabes? Siempre quise jugar al psicólogo con un científico como tú, sé lo que has pensado y no estás tan lejos de encontrar la verdad.
C: No puedes saber lo que pienso…es imposible…
L: Por ejemplo…qué nos pasó después del concierto en Estocolmo, no es así?
C: Cómo…lo sabes?
S: Entonces se lo vas a decir aquí?
L. Sí, merece saberlo, debo contárselo, no cometeremos el mismo error que con Yulia!
S: Estoy de acuerdo…quieres oírla?
C: Por favor…qué sucedió?, fue tan terrible acaso?