RESULTADOS DE GUATEMALA



La red de monitoreo del aire se inició en la Ciudad de Guatemala en 1994 con seis puestos de medición para NO2, PTS y Pb, monitoreados por la Escuela de Química de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacia de la Universidad de San Carlos. La medición de ozono se incorporó a finales de ese mismo año, y la de CO y PM10 se incorporaron en 1996. Los métodos empleados han sido los mismos que en el resto de la red, y los resultados se muestran a continuación.

MEDICION DE NO2

Como puede observarse, el NO2 es un problema en Guatemala, pues en el centro urbano el promedio anual siempre sobrepasa el valor guía de OMS, y en las zonas residenciales se acerca bastante. La explicación se puede encontrar en el hecho de que, a pesar de que el uso de convertidores catalíticos es obligatorio desde 1993, la flota vehicular de la Ciudad de Guatemala es considerablemente mayor que la de San José. Por otra parte, el sistema obligatorio I/M apenas estuvo en vigencia durante 1998 y luego fue abolido como ya se explicó en el capítulo anterior; de tal forma que es evidente la necesidad de volver a implementarlo para lograr la disminución de este parámetro.

MEDICION DE PTS








Puede observarse que en el centro urbano de la ciudad el problema de partículas suspendidas en bastante grave pues los promedios anuales de todos estos años sobrepasan en más de cuatro veces el valor guía, que para este caso es el de EPA de Estados Unidos. En las zonas residenciales también existe el problema, pero no llega a proporciones tan graves como en el centro urbano.
Es interesante por otra parte ver que los promedios anuales tanto para centro urbano como para zona residencial quedan prácticamente estable durante los años estudiados. La diferencia grande entre las dos categorías podría ser un resultado de la altura de la Ciudad de Guatemala, que influye de manera negativa la combustión sobre todo de los vehículos diesel, fuente más importante de partículas en el aire urbano. De este punto de vista, no es una sorpresa que la contaminación por partículas en Guatemala durante todos estos años ha sido de las más altas en Centro América.

MEDICION DE Pb

Guatemala fue el primer país de Centro América que prohibió por completo el uso del plomo en la gasolina desde 1993. Definitivamente este hecho ha influido en forma decisiva para que los niveles de plomo en el aire se mantengan bajos, ya que al carecer la ciudad de industria pesada de minería y fundiciones, las únicas fuentes restantes son las fábricas de baterías, ciertos tipos de soldaduras, y algunos productos que contienen el metal, y que a todas luces no constituyen un problema desde el punto de vista global para toda la ciudad. Esta última consideración es aplicable a todas las ciudades centroamericanas. Los resultados del monitoreo para la Ciudad de Guatemala se observan a continuación, aclarándose que al igual que en San José, en 1998 y 1999 no se presentan datos por no haberse realizado un monitoreo continuo. Hay que recordar el ya mencionado análisis de varios metales pesados (plomo entre otros) en los filtros de PM10 que se llevará a cabo en el primer semestre del año 2000.




MEDICION DE OZONO.



Es notorio en la gráfica el hecho de los niveles de ozono en los años 1997 y 1998 se encuentran abajo del valor guía, a diferencia de los otros años en los cuales este límite se alcanza o se sobrepasa. La explicación a este resultado puede encontrarse en los fenómenos climáticos poco usuales de esos años, que particularmente influyen en la formación de contaminantes secundarios como el ozono.

MEDICION DE CO








En cuanto a los niveles de CO, no hay mucho que decir, pues a todas luces se observa que tanto en el centro urbano como en la zona residencial se encuentran los promedios anuales muy por debajo del valor guía. A pesar del constante crecimiento de la flota vehicular, se nota una leve disminución del promedio anual en centro urbano, hecho que podría ser resultado del aumento de carros con catalizador (carros nuevos o carros usados importados desde los Estados Unidos).

MEDICION DE PM10

El PM10 presenta una tendencia a disminuir prácticamente desde que se inició su monitoreo, sin embargo, sigue permaneciendo arriba del valor guía y por consiguiente sigue siendo un problema, que es más acentuado en las zonas del centro urbano. Por otra parte, es necesario continuar el monitoreo para verificar si en el futuro la tendencia continua, o si fueron situaciones particulares las que provocaron niveles tan altos en los años 96 y 97.