Cuarta Parte: La batalla definitiva de Sailor V.

Cleocite lanzó una poderosa esfera de energía a Sailor V. Nuestra heroína no pudo hacer nada más que intentar proteger a Katherine; se volteó y la empujó al suelo en el momento en que la bola estaba a punto de impactarle.

"¡NO!" gritó Katherine ya tirada en el suelo.

De pronto, el ataque se desvió hacia unos barriles del almacén, los cuales estallaron y empezaron a arder. El fuego empezó a extenderse rápidamente, Mina trató de protegerse del calor con sus brazos. "Por lo menos Katherine está a salvo" pensaba Mina mientras veía una sombra fuera de la barrera del fuego.

Cleocite lanzó otro ataque, esta vez dio con los barriles que se encontraban en frente. Al instante los barriles empezaron a arder y sucesivas explosiones se dieron lugar. Mina vio con terror como rápidamente quedaba atrapada en un círculo de fuego, que ardía fuertemente a su alrededor.

"¿Pensabas que iba a acabar contigo tan rápido?" preguntó maliciosamente Cleocite "¡Pues te equivocas! Lo menos que puedo hacer contigo es darte una muerte muy dura, ¡quiero que sufras Sailor V! ¡En verdad quiero que pidas misericordia! Llené los barriles con gasolina, porque sabía que ibas a venir. Así que decidí darte una calurosa bienvenida." empezó a reírse.

Mina no sabía qué hacer, el círculo de fuego se estaba cerrando poco a poco y ella podía sentir cómo es que le faltaba el aire, el humo la estaba asfixiando. "Si sigo así, voy a morir" se dijo desesperadamente.

"Ya... no puedo... res..pirar"

Sailor V cayó sentada al suelo, se apoyaba débilmente con sus brazos en el piso ya caliente, mientras sentía que el calor la estaba sofocando. Mina se dio cuenta que lentamente estaba perdiendo la conciencia, iba cayendo en un profundo y delicado sueño. "¡Pero has algo, Mina! ¿Acaso no te das cuenta de que estás muriendo?" parte de su mente consciente le decía. A lo lejos, Sailor V podía escuchar la risa diabólica de Cleocite, y los gritos de Katherine. Quisiera poder hacer algo por ti, Katherine... pero ya no puedo. Corre, huye y sé feliz...

"¡No! ¡Mina, no te rindas!" gritaba Katherine desesperadamente.

"Ya es tarde, por más que grites, ella no reaccionará. Pronto no será más que polvo y cenizas. En cuanto a ti... no creo que sea cortés dejar a la pobre de Sailor V, partir sola"

Cleocite atacó a Katherine con una bola de energía maligna.

Mina, no te rindas... escuchaba lejanamente decir a su amiga Katherine. ¿Pero qué más puedo hacer? Cleocite ya ganó, y no puedo hacer nada para evitarlo. "Sí puedes" dijo una voz en el interior de Mina "Debes de creer en tí misma, sólo así podrás". Mina abrió los ojos, se encontraba flotando en un lugar oscuro, no se podía divisar absolutamente nada. ¿En donde estoy? se preguntó. "Debes de decidir pues de este lugar ya no hay retorno, ¿regresarás? o ¿es que acaso ya te rendiste?" dijo una voz que hacía eco en el vacio del espacio. "¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhh!" se escuchó el grito de Katherine.

Katherine recibió el impacto de la energía y debilmente podía mantenerse de pie. Gotitas de sangre caían al piso. Cleocite ya había lanzado otro ataque, pero esta vez Katherine saltó y lo evadió, y evadió y evadió...

Mina quería ayudar a su amiga, quería regresar con Armand, a sentir su calor, su presencia, a estar a su lado. El simple recuerdo de él, hizo que Mina sintiera su fragancia. ¡Debo de regresar... por Katherine... y por él! Sailor V poco a poco pudo sentir nuevamente su cuerpo, el calor de las llamas, y uno que otro grito de su organismo por la situación en la que estaba. Dolorosamente, Mina abrió los ojos para encontrarse con que Cleocite se encontraba atacando a su mejor amiga. La decisión de ayudar a su amiga, le devolvió las fuerzas, y esforzándose pudo ponerse de pie. "¿Pero ahora qué hago?" El fuego no había avanzado mucho hacia el interior, para suerte de Mina, sino por el contrario, avanzaba cada vez más hacia el exterior, de modo que el círculo se hacía más grueso cada vez. En una esquina, Katherine se hallaba tratando de esquivar todos los ataques de Cleocite. Al parecer ninguno se había dado cuenta de que se había puesto de pie.

"¡Rayo creciente de Venus... fulmina!"

Sailor V lanzó su ataque a los barriles que se encontraban todavía intactos cerca de la salida, en donde justamente se hallaban Cleocite y Katherine.

"No puedo seguir así" se dijo Katherine. Ella trataba de encontrar alguna oportunidad para escapar, pero Cleocite no le daba ninguna y el hecho de que se encontrara flotando a pocos centímetros del piso, no le aseguraba nada, si ella corría, de seguro que él la alcanzaría en un instante. De repente los barriles que se encontraban a la espalda de Cleocite, explotaron, arrojándolos a los dos al piso. Katherine no lo dudó ni por un segundo y se levantó para seguir corriendo antes de que ocurrieran las explosiones encadenadas y pronto todo el lugar estalle.

Mina podía ver cómo es que Katherine ya huía, y que Cleocite parecía inconsciente. Es hora de salir de aquí, se dijo.