Curiosas costumbres y...etc.

Estimados lectores,
estoy preparando una serie titulada: "Curiosas costumbres y comportamientos de criaturas decadentes llamadas peruanos promedio", la cual entregaré -en la medida de lo posible- en forma mensual. En esta serie trataré de comentar muchas de esas curiosas costumbres -valga la redundancia- que caracterizan a los peruanos del tercer milenio. En esta ocasión les envió la primera entrega de este paquete de ensayos, crónicas, artículos o cómo mierda los quieran llamar. Espero que lo disfruten.

Curiosas costumbres y comportamientos de criaturas decadentes llamadas peruanos promedio. Parte I.

Hace algún tiempo leí un artículo de Beto Ortiz titulado "Perdiste cholito". En este artículo, Beto, en forma muy divertida, daba su punto de vista sobre el terrible deporte nacional y tradición ancestral peruana, que consiste en PERDER. Decía: "...perder, qué duda cabe, es lo que mejor nos sale...". Muy a pesar de mis diferencias con él, no me queda más remedio que darle la razón y complementar lo que acertadamente nos dijo, añadiendo que, en lo que a perder se refiere, nadie nos gana (por lo menos en algo ganamos).

No quiero citar a todos nuestros grandes héroes de una guerra que perdimos...perdón, que CASI ganamos, o a nuestros grandes futbolistas que CASI le ganan a Brasil en el mundial del 70, o a nuestras voleybolistas que CASI le ganan a Rusia en Seúl 88, o a Romerito cuando CASI le gana a Boom-boom Mancini...voy a citar otros ejemplos de la detestable cualidad que tienen los peruanos de achicarse, o lo que es peor, de no hacer nada, cuando el éxito a gran escala está al alcance de la mano:

Ejemplo 1: El Cóndor Pasa, tema musical peruano, reconocido internacionalmente, está registrado como propiedad de Simon & Garfunkel.
Ejemplo 2: El pisco peruano, es reconocido a nivel mundial como chileno.
Ejemplo 3: Muchos piensan que la papa tiene origen belga (leer "los doce trabajos de Ásterix")
Ejemplo 4: El perro peruano, aquel perro calato, pelado y horrible...(¡qué coincidencia!)...pero a pesar de todo PERUANO, se conoce como "perro CHINO"
Ejemplo 5: La "chicha", género musical peruano por excelencia ha sido rebautizada como "tecno-cumbia" (Huelga decir que la "cumbia" es de origen colombiano). Para colmo, a nivel latinoamericano, se considera a los argentinos como los creadores de esa corriente musical.

Efectivamente, perder es lo que los peruanos mejor sabemos hacer y eso hace que cada uno busque la mínima oportunidad para sentirse ganador...pero en chiquito, porque los grandes éxitos nos atarantan. Tenemos una interpretación errónea de lo que significa "ganar". Como bien decía Luchín en el programa de Javier Protzel...el peruano se conforma con "ganarse alguito"...¿se acuerdan del Banco Agrario no? ¡Bueh!

Citaré como ejemplo complementario algo que me pasó recientemente.

Me estacioné frente a una casa en Miraflores. No había letrero de "no estacionar" (o sea, esa gran "E" con una diagonal); tampoco estaba frente a una cochera, ni estaba pintada la vereda de amarillo (también eso significa "no estacionar"), no estaba en una esquina, no era una zona de alto tránsito, no estaba frente a un grifo de agua, había otro auto al costado mío...en fin...me estacioné sin ningún remordimiento, además, LA CALLE ES DE TODOS. ¡Bueh! Terminé lo que tuve que hacer y como siempre, me fijé si estaban las cuatro ruedas. En efecto, estaban las cuatro, pero debido a la oscuridad, no me fijé si tenían su típica forma circular...arranqué el motor, avancé unos metros y ¡oh sorpresa!...¿es que acaso habían rociado piedritas en la pista?...NOOOO...¿es que se habían tirado el asfalto y estaba manejando sobre una superficie de tierra?...NOOOO...¿qué mierda pasó aquí entonces?...lo que había pasado es que algún hijo de puta - seguramente el mal vecino que vivía en la casa frente a la cual me estacioné- le había metido un corte a la llanta delantera izquierda de mi auto. Mi primera reacción fue samputear al malnacido que había sido capaz de realizar semejante acto de barbarie...pero tomé las cosas calmadamente y lejos de dejar que mi ira se encienda, me puse a filosofar - como suelo hacer a diario- sobre las "curiosas costumbres y comportamientos de criaturas decadentes llamadas peruanos promedio". Relacioné mis ideas y llegué a la conclusión de que todo este asunto había sido ocasionado por aquella imperiosa y absurda necesidad de ganar que tienen los peruanos promedio (pero como ya dije, de ganar poquito, en chiquito). Aquel vecino jijunagramputa probablemente sintió que yo le había ganado el pequeño espacio de calle que cree de su propiedad (claro, todo "ganador" tiene derecho a su espacio en la calle, si no, pregúntenle a los ambulantes)...o sea, se sintió perdedor una vez más. La presencia de un conjunto de fierros con cuatro ruedas en un espacio de calle que ES DE TODOS, seguramente fue interpretado por este insignificante individuo representante del típico peruano perdedor (nadie ha dicho "cholo" por si acaso) como una señal no verbal de invasión a su espacio privado, al pedazo de calle que ES DE TODOS, pero que sin embargo "le pertenece". Me imagino la sensación de satisfacción que debió haber sentido nuestro perverso vecino al introducir la navaja en el frágil caucho y sentir el zumbido del aire escapando de la pobre víctima de su ávido deseo de ganar (o sea mi llanta). En ese momento debe haber dicho: "perdiste cholito..., te cagué, te gané". Punzada de navaja y "pppffffff..." llanta al piso. Su ego probablemente subió como la espuma...por unos breves minutos este infame y anónimo personaje de la sociedad peruana pudo desahogar sus frustraciones y reivindicar su derecho de propiedad sobre un espacio que, le pese a quien le pese, es de todos (o al menos debería serlo).

¡Bueh! ¿qué más les puedo decir? No me quedó más remedio que echar mano de mis herramientas, cambiar la llanta y buscar a un "llantero" para que cure las heridas de mi pobre combatiente caída en un fugaz enfrentamiento con una criatura decadente llamada peruano promedio. Desde esta humilde tribuna, reconocemos hidalgamente nuestra derrota. Izamos nuestra banderita blanca, paz por favor, ya perdimos. Mañana enviaremos una medalla y un diploma a nuestro gallardo vencedor, a nuestro desconocido personaje desinflador de llantas, digno ejemplo para generaciones futuras de una raza de criaturas decadentes llamadas peruanos promedio.

Hasta la próxima columna,
MaYmAn


La Columna de MaYmAn - © MaYmAn - Edición: Kio