Un viejo barquero recibió en su barca
a un eminente teólogo.
Y, mientras lo trasladaba a la otra
orilla, el engreido pasajero preguntó
al humilde barquero.
Haz estudiado la biblia?
No señor,
Entonces respondio el teólogo despreciativamente.
Has perdido la mitad de tu vida.
Y el sencillo barquero,muy afligido
guardó silencio.
En esto entró un fuerte temporal que
arrojó el bote contra los acantilados.
El barquero entonces le grito al teólogo
Sabe nadar?
! No ! Contestó el viajero, alarmado
En ese caso.- eminente doctor.- toda su vida
esta perdida...