Así como aquel personaje luchador de la obra de García Márquez, nuestro capitán pasó también a la historia por haber criado gallos de pelea. A lo largo de la Libertadores, el capitán apostó a lo suyo, apostó a la garra y a la brabura, a la casta y a la fe de unos gallos que nunca se amilanaron al momento de pelear. Pero en la gallera, el gallo que vacila, el gallo que titubea, termina siendo victimado.
Ya no hay nadie en la gallera. EL Idolo se encuentra en una etapa de transición. A los problemas económicos y estructurales de Barcelona, se han sumado los resultados adversos de los últimos partidos. Las deficiencias que fueron pasadas por alto gracias al coraje y entrega del Vicecampeón de América, se hacen cada vez más evidentes. Tal fue el caso durante el partido contra Alianza Lima en Perú, por la Copa Merconorte.
La lentitud y falta de concentración se han convertido en el denominador común de una defensa amarilla que pide sangre nueva. Los dos goles que le dieron la victoria al equipo aliancista, corroboran lo dicho anteriormente. Y es que la estratégia defensiva de Mario Saralegui brindó muchos espacios vacios a los jugadores peruanos, al haber hecho jugar a Capurro y Noriega muy adelantados en relación a los tres últimos hombres. La lentitud se hizo más notoria. Los errores de Raúl Noriega, el uno de marcaje y tiempo, el segundo por desconcentración, son claros ejemplos de que los goles que le marcan a Barcelona son regalos al mejor estilo de Polo Baquerizo.
En el fútbol moderno, donde los "número 10" se han convertido en una raza en extinción, se hace cada vez más necesaria la inclusión de los denominados "volantes mixtos"; aquellos que son prolijos en la labor de marca, pero a la vez se dan medios para crear fútbol ofensivo. Carabalí y Rosero son expertos en lo primero; hablar de lo segundo, sería hacer leña del árbol caido. Al Pepo Morales no se le puede pedir más. El hombre corta, marca, genera fútbol. A la larga cae en baches futbolísticos, producto de su desgaste físico y por la falta de un acompañante. En síntesis, el juego de creación fue solo una teoría.
En el segundo tiempo aparecieron algunas jugadas importantes en el medio sector, generadas no por los medicampistas sino por delanteros como el recién ingresado Nico Ascencio y un Alfaro Moreno que de a poco se está volviendo a convertir en el caudillo ofensivo del Idolo del Ecuador. El Pipa De Avila hizo gala de ese corazón que no le cabe en su corta anatomía. Aunque no gravitó durante los 90 minutos, en dos oportunidades estuvo a punto de anotar. En una ocasión, el vertical le dijo que no. Como resultado, las críticas le siguen lloviendo al Pitufo. No obstante, la prensa y la hinchada se estan olvidando de un detalle, el Paisa no es centrodelantero........punterito no más es!
Pero no todo es desencanto en esta etapa post-Libertadores. La venida de un técnico que le de un nuevo estilo de juego al equipo, y las expectativas puestas en el Diablo Etcheverry hacen pensar en un halagüeño regreso a la gallera.
Xavier Paulson se va de Barcelona, el Idolo se encuentra en transición, el Capitán ya no tiene quien le escriba!