El silencio es el verdadero lenguaje de las almas
. MaeterlinkLa soledad no significa estar solo. C. Fabroni
El hombre moderno vive tan agitado y distraído que percibe los acontecimientos diarios sin tomar consciencia de ellos.
Se puede estar solo y no sentir la soledad. J.Paglialunga
Ahogado por el egoísmo, el corazón humano queda impedido de oír el constante llamado del amor.
El destino del hombre es la soledad. B.Brech
Después del silencio, lo que expresa mejor lo inexplicable es la música. Huxley
La soledad es como el silencio que si se comunica se apaga. A.Yupanqui
La cosa más hermosa del mundo es un hermoso silencio. Rougemont
Tu esfuerzo no fue en vano, hoy lo ves florecer luego del encuentro con el silencio. G.Escobar
La soledad es el hogar de Dios, que habita en el silencio y en la belleza de la naturaleza. A.de Mello
Nada fortifica tanto las almas como el silencio; que es como una oración íntima en que ofrecemos a Dios nuestras tristezas. J.Benavente
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En estos momentos de festejos de Navidad y de Fin de Año, en los que la gente se
reúne para comer, para brindar, para hacer alboroto, para encender peligrosos fuegos
de artificio, sería bueno recordar al silencio y a la soledad.
La soledad es muy necesaria. Es preciso hacerse tiempo para estar solo. Estar solo no
es lo mismo que estar solitario. Cuando alguien está solo, no está simplemente lejos de los demás, sino consigo mismo: es "todo uno" con su esencia, retorna la totalidad que es él mismo. En esos momentos, lo que ocupa nuestra conciencia no es la ausencia de la gente de la que nos hemos apartado temporariamente, sino la plenitud de nosotros mismos. Y en esa "todo-unidad" podemos escuchar nuestras voces interiores, pedir orientación a nuestros guías y recobrar nuestros sueños.
Los antiguos conocían el valor del viaje solitario, la callada vigilia junto al fuego, la búsqueda de una visión. En nuestra época en cambio, la tecnología nos ha privado de silencio y de soledad. Cada vez nos cuesta más encontrar un sitio realmente tranquilo. Hasta en los desiertos o en las montañas nos sacude el rugido de los aviones sobre nuestras cabezas o el estruendo de la radio de algún automóvil que pasa a la distancia. Es difícil estar completamente solo en un planeta en el que conviven más de 5 mil millones de habitantes.
En la vida de la mayoría de nosotros hay poco silencio.
Estamos tan habituados a la falta de silencio, que cuando en alguna oportunidad logramos alcanzarlo, habrá quien pueda llegar a sentirse molesto por la incomodidad que le produce el silencio, al sacarlo de todas las distracciones, enfocar su atención hacia adentro y obligarlo a estar consigo mismo.