Knowledge
&
Love
Por: Ariadna
Cuarta parte:
¿Un poco de fútbol?
La estaba evitando.
Él la estaba evitando.
Hasta hace varios días todo iba bien, pero…
~ Flash back ~
-no necesito más tu ayuda para estudiar Sora, gracias.
-um, ok… ¿quieres salir a tomar unos helados entonces?
-no, no puedo, tengo cosas que hacer.
-¿y qué tal mañana?
-estaré ocupado toda la semana.
-¿y des…?
-ESTARÉ OCUPADO.
~ fin del Flash Back ~
¿Por qué se volvió tan distante de repente? No sólo con ella, sino con todos… bueno, siempre fue distante con todos, pero ella pensaba que había logrado la diferencia, que él se sentía en confianza con ella…
Se desilusionó al descubrir que no era así.
"Debo hablar con él" se dijo. Pero sabía que a Izzy no le gustaba hablar de sus problemas, iba a ser difícil convencerlo…
Sora encontró a Izzy caminando hacía las afueras de la escuela apenas tocaron el timbre de salida.
-¡hey, Izzy!
El susodicho se giró y la saludó, no dejaba de ser educado a pesar de su estado de ánimo.
-hola Sora.
-hola, oye Izz, hay algo de lo que quiero hablar contigo.
-dime.
-¿está todo bien?
-claro, ¿qué te hace pensar otra cosa?
-pues… es que ya no hablamos en los recreos, ni salimos juntos y ni siquiera devuelves mis llamadas telefónicas.
Sora pudo notar la tristeza en los ojos de su amigo, a pesar de que este sonreía.
-no es nada, es sólo que he tenido mucho trabajo últimamente.
-pero si dijiste que ya no necesitabas mi ayuda con los estudios…
-pero eso no quita que tenga trabajo, es sólo que me di cuenta de que te estoy quitando demasiado tiempo libre.
-Pero a mi no me importa, por favor déjame seguir ayudándote. – le pidió ella.
El chico evitó su mirada.
-preferiría estudiar solo por ahora. – insistió él.
-¿por qué? ¿Te molesta que te ayude? – Sora por un momento pensó que tal vez Izzy había descubierto que le gustaba, y esa era la razón de su distancia.
-no, no es eso, solo que… quiero estar solo por un tiempo, ¿ok?
Sora frunció el ceño.
-¡pero si siempre estás solo! O más bien, ¡lo estabas! ¿Por qué quieres estar solo de nuevo?
Izzy parecía estar desesperándose con la insistencia de la chica.
-¡porque me enteré de que…! – se detuvo al darse cuenta de que lo estaba diciendo en voz alta, y bajó la vista.
-Izz… ¿seguro de que no quieres hablar?
-no… es demasiado tonto…
Sora no pudo evitar una sonrisa al recordar la conversación que había tenido con él hace ya tiempo atrás, cuando era ella la del problema…
-¿quieres jugar un poco de fútbol?
Izzy levantó la vista en forma rápida ante la extraña pregunta que le había hecho Sora.
-¿…Fútbol?
La chica sonrió alegremente como si supiera de lo que estaba hablando.
-si, hoy no hay práctica por lo que tenemos toda la cancha libre, ¿qué te parece?
-¿por qué…?
-desgastar energía siempre ayuda a relajarse. Si no quieres hablar está bien, pero no dejaré que te quedes solo.
Dicho esto, Sora lo tomó por el brazo hasta la cancha abandonada y ahí mientras dejaba sus pertenecías de lado buscó una pelota para usar.
-¡aquí hay una, a jugar entonces!
Izzy se dio cuenta de que no podía negarse, y que tal vez algo de eso lo relajaría realmente… además de que no le gustaba la idea de llegar temprano a su casa.
Jugaron hasta el cansancio. Sora era una excelente jugadora, pero al menos Izzy resistía gracias al arduo entrenamiento escapando de digimons virus que aprendió en el Digimundo.
Se detuvieron un momento para tomar algo de agua. Izzy parecía sentirse mucho mejor.
-¿no hay problema con que regreses tarde a tu casa? – le preguntó él.
-nah, no hay nadie en casa hoy. Mi mamá y Tanori fueron de compras y Minako tenía una cita con Tai.
-¿cómo? ¿Tai?
-ajá, ella lo invitó.
-¿y no estas molesta?
-me da igual… – respondió ella algo sonrojada.
-ah… - Izzy se quedó en silencio por un rato. - tú y Minako se llevan bien, ¿no? Tener una hermana no es tan malo, ¿verdad?
Sora se extrañó con la pregunta.
-es… distinto. Aún no nos conocemos mucho pero todo va bien, es una buena chica. ¿Por qué la pregunta?
-no, por nada…
Y ahí fue cuando a Sora se imaginó lo que pasaba.
-¿tu mamá está pensando en tener otro hijo? – le preguntó a su amigo entusiasmada, casi como una afirmación.
-eh, no… es que… - Izzy ya no sabía como zafarse de la situación. – ella ya está embarazada. – aclaró al fin.
-¡que bien, Izzy! ¡Tendrás un hermanito, te felicito!
Al chico no pareció gustarle el comentario.
-no hay nada que felicitar, ni siquiera es mi hermano…
-¿qué?
-¡lo que oyes! ¡Ese bebe no es ni nunca será mi hermano!
Izzy se puso de pie y fue por sus cosas para irse, pero Sora lo detuvo.
-¿qué quieres decir con eso?
-nada más que la verdad, Sora. Yo no pertenezco a esa familia.
-bueno, tal vez te sientas un poco incomodo y dicen que los hermanos mayores se sienten desatendidos cuando nace un bebe, pero…
-no sabes de lo que hablas. Yo soy adoptado.
-… - Sora tomó un hondo respiro antes de poder hablar.
Ahí estaba, el misterio de Izzy, la razón de su distancia, lo había descubierto, él le había contado…
-¿sabes de eso hace mucho?
El chico se sentó en el suelo, iba a ser una conversación muy larga…
Al cabo de un rato, Izzy tuvo que reconocer que contarle de eso a alguien lo hizo sentir mejor, a pesar de las circunstancias.
-entonces, en otras palabras, tienes miedo que tu adopción sólo fuese para reemplazar al primer hijo de los Izumi que murió, y que como ahora tendrán uno por su propia cuenta temes que ya no seas necesario.
Izzy no asintió pero tampoco se negó.
Sora se quedó en silencio por un momento, buscando las palabras adecuadas para animar a su amigo.
-como diría Tai: "para ser tan inteligente eres muy tonto a veces". Izzy, esas personas son tus padres, tal vez no por sangre, pero jamás te harán menos, yo misma he visto cuanto te quieren, yo escuché también una de esas conversaciones acerca de decirte o no sobre su embarazo, y era porque les preocupaba que tu reacción fuera así, ¿tú crees que si no les importaras se habrían preocupado?
-SÉ que se preocupan por mí. – protestó él. – es sólo que me molesta enterarme de todo escuchando tras las paredes, ¡ellos no confían en mi!
-¿y por qué no se los dices? ¡Tienes que hacerlo, Izzy! ¡Tienes que hacerles entender que no puede ser que no sean honestos contigo, que no importa lo que te tengan que decir tú los seguirás queriendo!
Sora había tomado a Izzy por los hombros y lo tenía realmente cerca, pero evitó hacer una tontería y lo miró a los ojos.
-me molesta que seas la portadora del Amor. – murmuró el chico algo sonrojado.
-¿por qué?
-porque puedes ver a través de mí…
-me gusta lo que estoy viendo. – declaró ella. Y luego de un silencio, agregó: - ¿te apetece una carrera hasta donde dejamos tirada la pelota para irnos tranquilos?
-ok…
Los chicos comenzaron a correr uno detrás del otro. Sora iba adelante.
-¡eres muy lento, Izumi!
-¡eso lo veremos!
Izzy corrió lo más rápido que sus pies pudieron para dar alcance a la chica. Cuando estaban sólo a nos pasos de distancia Sora se giró para ver cuanta ventaja le llevaba al pelirrojo e inevitablemente chocaron, cayendo Izzy sobre ella.
-ouch…
-ay…
Ambos respiraban agitados debido a la carrera, Izzy se separó un poco de Sora pero aún estaba encima de ella. No parecían moverse, sólo se miraban a los ojos de manera intensa. El escenario era perfecto, las sensaciones rondaban por todo el lugar reflejando los sentimientos que tenían Izzy y Sora en ese momento…
Y se besaron.
No un beso largo, pero si tierno y con una pequeña corriente eléctrica provocada por el contacto.
Pero Izzy rompió aquel contacto.
-yo… lo siento, no debí…
-no, Izzy, yo, este…
El chico se puso de pie rápidamente, fue por sus cosas y luego salió corriendo antes de escuchar a Sora.
-¡por favor, Izzy, espera!
Fin de la cuarta parte.
Notas:
I’m happy like a puppy ^___^
Me faltan dos capítulos y termino… me gustó esta escena J aunque no creo que una misma deba decir eso… :P
De todas maneras, espero sus comentarios ^^