UNA DISCUSIÓN DE SEGUIMIENTO A


LA ENTREVISTA QUE EL DR. DESMOND FORD
 
CONCEDIÓ A ADVENTIST TODAY

REFLEXIONES SOBRE EL ADVENTISMO

Parte 4
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Tal como se había planeado, ahora publicaremos cierto número de preguntas de seguimiento que han sido o bien presentadas formalmente o discutidas en el foro de AToday. Por razones de claridad  y espacio, hemos consolidado y editado muchas de las preguntas para incluir tantas participaciones  y cubrir tantos puntos de vista como sea posible.

Temas de Seguimiento

21.  El Juicio Investigador en el Antiguo Testamento
22.  El principio de día por año
23.  La profecía de los 2300 días
24.  Una doctrina actualizada para reemplazar el Juicio Investigador
25.  El juicio
26.  El vacío en el juicio mediador
27.  Definición de lo que es bueno
28.  El estilo de enseñanza del Dr. Ford
29.  Dogmatismo doctrinal
30.  El debate sobre el juicio
31.  Estudio bíblico
32.  El acuerdo luterano-católico sobre la justificación por la fe
33.  La reforma adventista

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AToday:  Dr. Ford, deseo agradecerle nuevamente que haya permitido al Foro de Adventist Today discutir francamente sus puntos de vista relativos a la teología Adventista y  la historia de la Iglesia. Debe usted saber que la gran mayoría de los comentarios que recibimos sobre su entrevista fueron muy favorables y positivos. Para muchos, la entrevista "Reflexiones Sobre el Adventismo" pareció aclarar el debate de Glacier View y reforzar el hecho de que este conflicto teológico e histórico permanece mayormente sin resolver en la actualidad.

AToday: PREGUNTA #21.  Durante la discusión abierta y franca en el Foro de AToday, ha sido evidente para muchos, después de leer su entrevista y escudriñar las Escrituras, que el Nuevo Testamento NO apoya la posición tradicional Adventista sobre el Juicio Investigador. Sin embargo, algunos han tomado la posición de que, a despecho de esta obvia carencia de apoyo en el Nuevo Testamento, la doctrina del Juicio Investigador puede todavía apoyarse en el Antiguo Testamento POR SÍ SOLO. Afirman que esta singular doctrina no necesita ningún apoyo en el Nuevo Testamento para que sea válida todavía. Arguyen que esta "verdad especial" ha sido revelada (abierta) a la Iglesia de Dios en los últimos días. Así que, dicen ellos, esto explicaría por qué a los apóstoles nunca se les informó de la fecha de 1844 y por qué no hay ninguna referencia clara a esta doctrina en el Nuevo Testamento. Para seguir el argumento, suponiendo que 1844 se pueda demostrar con el Antiguo Testamento, ¿tendría esta lógica alguna validez teológica? ¿Cuán importante es el Nuevo Testamento para establecer profecías y doctrinas para nosotros en la actualidad?

Dr. Ford: ¡SI EL JUICIO INVESTIGADOR PUDIESE APOYARSE EN EL ANTIGUO TESTAMENTO POR SÍ SOLO, SERÍA MILAGROSO, PERO NO LO SUFICIENTE!  Nosotros no somos judíos literales, sino el Israel espiritual, y el Nuevo Testamento siempre tiene el voto en cuestiones de doctrina. Hebreos 1:1 contrasta la revelación  por medio de Jesús con las anteriores e inferiores revelaciones por medio de los profetas. Judas 3 habla de "la fe que ha sido dada una vez a los santos", que es una referencia al evangelio del Nuevo Testamento, que vino de Cristo y los apóstoles. Cuando Jesús afirmaba repetidamente: "Pero yo os digo", no estaba contradiciendo al Antiguo Testamento, sino trascendiendo la manera en que sus contemporáneos lo interpretaban. La Biblia nos amonesta siete veces que: "En boca de dos o tres testigos conste toda palabra". Ningún texto solitario en ninguno de los dos Testamentos es suficiente para hacer válida una doctrina, y el Antiguo Testamento sin el Nuevo no es una guía cristiana. En el Monte de la Transfiguración, Moisés y Elías desaparecieron y los discípulos "no vieron a nadie, sino a Jesús solamente". La palabra es para nosotros. Moisés y Elías - la ley y los profetas - sólo tienen sentido si son interpretados por medio de Cristo y del testimonio que Él ha dado por medio de los apóstoles.

Si 1844 no puede apoyarse en el Nuevo Testamento, entonces no puede considerarse una doctrina cristiana válida. ¡No puede, así que no lo es!

AToday: PREGUNTA #22.  Dr. Ford, ¿por qué dice usted que el principio de día por año no es válido? ¿Y la profecía de las setenta semanas? ¿No predijo correctamente la venida del Mesías? ¿No es el principio de día por año una parte importante de las profecías bíblicas?

Dr. Ford:  Entre todos los exégetas, excepto los Testigos de Jehová y los ASD, la teoría de día por año murió hace más de un siglo (véase el libro de Kai Arasola El Fin del Historicismo). Los textos de Números y Ezequiel no tienen nada que ver con símbolos apocalípticos. Uno apunta atrás, a días literales, y predice cuarenta años literales por venir, que corresponden a los días de vagar a causa de incredulidad. El otro texto describe al profeta haciendo ciertas cosas en el futuro en días literales que corresponden a años literales del pasado. Aquí no hay paralelo con los números simbólicos apocalípticos. Además, ninguna de las fechas usadas es históricamente correcta. Los ostrogodos no fueron exterminados para el año 538 d. C., ni la persecución de la Edad Media duró hasta 1798. En griego, la herida "mortal" mencionada en Apocalipsis 13:3 significa "herida de muerte". Esto no encaja con el encarcelamiento temporal del Papa, pero sí se ajusta a la descripción  del capítulo precedente, en que el diablo recibió legalmente su herida mortal en la cruz.

La edición revisada del Comentario Bíblico Adventista dice, en Daniel 9:24-27, que no hay envuelto ningún principio de día por año - el texto está hablando de una semana de setenta años, es decir, 490 años. No hay ningún día por año aquí - la palabra traducida como "semanas" significa "sietes", y el contexto es en términos de los setenta años de la cautividad babilónica. Si recuerdo correctamente, el libro ASD Discusiones Doctrinales dice esto también. Todos los números en la apocalíptica son símbolos - por ejemplo, tres y medio es un siete interrumpido, y apunta a agitación y trastornos, y los 42 meses es una alusión a Mateo 1 y las 42 generaciones que alcanzan hasta la venida de Cristo.

AToday: PREGUNTA #23.  En la Parte 1 de su entrevista, usted llamó la atención al punto siguiente. Aunque Daniel 8:14 habla de 2300 días, la palabra hebrea para "días" es realmente la expresión ambigua "tardes y mañanas", que la mayoría aplica a los holocaustos. Así,  muchos exégetas están afirmando que,en vez de 2300 días, sólo se trata de 1150 días. Por favor, explique este razonamiento. ¿No se compone un día (o un día de sacrificio) de un sacrificio en la mañana y un sacrificio en la tarde? Si es así, ¿qué diferencia hay entre decir "2300 días" y decir "2300 tardes y mañanas"? Si la expresión "tarde-mañana" debe aplicarse para que incluya tanto el sacrificio de la mañana como el sacrificio de la tarde, entonces eso todavía equivale a un día. ¿No se ajusta este lenguaje al relato de Génesis también? Por lo tanto, no hay ninguna diferencia entre decir "2300 días" y decir "2300 tardes y mañanas", puesto que ambas expresiones consisten de un día. ¿Puede usted explicar esto?

Dr. Ford:  Yo simpatizo con los que hacen preguntas relativas a la interpretación de los 2300 días. Yo mismo traté de defender eso durante algunos años, pero finalmente me rendí ante el peso de la evidencia.

La frase en hebreo es única, y no es la misma que la de los versículos relativos a las tardes y las mañanas en Génesis. El versículo 26 de Daniel 8 es crucial. En él, el artículo aparece delante tanto de la tarde como de la mañana, lo que significa que deben considerarse por separado, y no ponerse juntos, como si fuesen una sola cosa. Esto concuerda con el contexto, que habla de quitar los sacrificios de la tarde y la mañana. Observe, por favor, que el contexto es claro en su referencia a que un poder maléfico (el cuerno pequeño, el Anticristo) profana el templo durante este período. Por supuesto, esto no encaja con la posición tradicional Adventista. Ni la Roma pagana ni la papal pueden enlazarse con el año 457 a. C. La referencia es principalmente (aunque no solamente) a la obra de Antíoco Epífanes, como lo declaran I y II Macabeos. Véase también Juan 10:22, que, como se señala en los márgenes de algunas Biblias, se refiere a la celebración de Hanukkah - la purificación por parte de los macabeos de la profanación en el templo causada por el anticristo del Antiguo Testamento.

Siegfried Horn señaló esto hace mucho tiempo a los dirigentes de la Conferencia General cuando la Southern Publishing Association había suspendido la impresión de mi primer libro Daniel. Horn dijo que haríamos el ridículo si no veíamos que el cuerno pequeño de Daniel 8 señalaba inicialmente a Antíoco. La gran mayoría de los eruditos (incluyendo los eruditos Adventistas) ahoran adoptan esta posición, y la Biblia de las Buenas Nuevas traduce Daniel 8:14 como sigue: "Continuará durante 1150 días, durante los cuales los sacrificios de la tarde y la mañana no se ofrecerán. Luego, el templo será restaurado".

Hay que decir también que, en hebreo, "tarde" y "mañana" se refieren a puntos en el tiempo, no a períodos como la noche y el día.

AToday: PREGUNTA #24. El Adventismo del Séptimo Día es bien conocido por su detallada descripción de cómo tendrán lugar los sucesos finales. Como usted sabe, hay gráficos y libros que afirman que describen cada detalle de los acontecimientos finales tanto en el cielo como en la tierra, incluyendo la fecha de 1844 como el principio del "juicio pre-advenimiento", también llamado Juicio Investigador. Teniendo presente esto, algunos miembros de AToday han sugerido esta excelente pregunta: Si la doctrina del Juicio Investigador ya no es válida, cuál es la versión correcta del "proceso de juicio"? Sabemos que debe haber algún tipo de "juicio pre-advenimiento" (usted hasta señaló en las Escrituras cuándo termina el juicio pre-advenimiento), pero ¿cuándo comienza si no es en 1844? ¿Y cuánto dura?

Además, la Escritura dice que todos debemos comparecer ante el trono del juicio de Cristo. ¿Es ésta una referencia al "juicio pre-advenimiento" o a la Segunda Venida? ¿Y la parábola de la fiesta de bodas en Mateo 22? ¿Es ella una referencia al Juicio Investigador, como algunos aseguran? También sabemos que hay muchos lugares en las Escrituras que hablan de un juicio futuro, y que las Escrituras también dicen que, si una persona cree en el evangelio, no vendrá a condenación. Sin embargo, en otro lugar (1 Pedro 4:17), dice que "el juicio debe comenzar con nosotros". ¿Y qué de las porciones de las Escrituras que hablan de que "los libros se abrieron" y el juicio? ¿Podría explicar, por favor, la enseñanza de Nuevo Testamento sobre este tema para que podamos actualizar, clara y bíblicamente, aquellos antiguos gráficos Adventistas del siglo diecinueve?

Dr. Ford:  Los gráficos Adventistas sobre los acontecimientos finales dejan mucho que desear. Por ejemplo, interpretar la bestia de dos cuernos de Apocalipsis 13 simplemente como los Estados Unidos no soporta una prueba exegética. Como señalé en Crisis! hace veinte años, el peso abrumador de la evidencia exegética dice que, en contraste con la primera bestia de Apocalipsis 13 (que representa un gobierno totalitario al cabo del tiempo - y en cierto sentido en todos los tiempos, incluyendo el siglo primero), la segunda bestia apunta a la religión apóstata que refuerza a un gobierno malvado para sus propios fines, como en Apocalipsis 17, donde la mujer vestida de púrpura cabalga sobre la bestia. Juan está aludiendo a las advertencias de su Señor contra los que vendrían como lobos vestidos de ovejas, es decir, los falsos profetas. Tres veces en Apocalipsis esta segunda bestia es llamada "el falso profeta". Me alegró ver que, hace como un año, la Review publicó un artículo de Jon Paulien que decía esto. Así que es necesario que actuialicemos la escatología Adventista en varias áreas.

Los gráficos Adventistas tampoco han reconocido que la prueba final sobre el evangelio envuelve más que la observancia del sábado, aunque estoy seguro de que incluyen esto último. Todas las señales externas de la fe cristiana serán prohibidas un día - el bautismo, la Cena del Señor, la observancia del sábado. Apocalipsis está diciendo que, en los últimos días, habrá una falsa trinidad (el dragón, la bestia, y el falso profeta). Esta falsa trinidad se compone de un falso Cristo (la bestia que se describe primero en Apocalipsis 13), un falso Espíritu Santo que hace caer un falso fuego pentecostal (la segunda bestia), un falso evangelio y una falsa ley (de aquí las alusiones a la mano y a la frente, que reflejan los tres pasajes del Antiguo Testamento, en que se les dijo a los israelitas que escribiesen la ley en sus manos y en sus frentes). La marca de la bestia tiene como naturaleza esencial que refleja el carácter de Satanás, mientras que el sello de Dios señala lo opuesto - refleja el carácter de Cristo. Esto se deja claro en Apocalipsis 14:1 y otros pasajes, en los que el "nombre", como siempre en las Escrituras, representa el carácter. Compárese con Éxodo 34.6, 7. Los que rechacen el mensaje del último evangelio se convertirán en asesinos y mentirosos, como su padre espiritual, el diablo (véase Juan 8:44). Los santos llevarán la marca de la cruz en sus vidas como Jesús su Señor (véase Ezequiel 9, en que la palabra hebrea para marca es tau, y significa una cruz). (Ellen White también menciona esto, cuando dice en un lugar que "la mente inteligente del ángel que registra ha visto la marca de la cruz en las frentes de los hijos adoptivos y las hijas adoptivas del Señor" - cito aproximadamente de memoria) . Tanto la marca de la bestia como el sello de Dios tendrán sus propias formas externas, que indican desobediencia u obediencia a la ley de Dios.

Por supuesto, la enseñanza menos soportable en los gráficos cronológicos es la de 1844. La Biblia no da ninguna fecha profética para el surgimiento de la Reforma ni para el gran reavivamiento de Wesley, pero ellos eran claramente de origen divino. De modo similar, al Adventismo, aunque suscitado por Dios, no se le ha asignado fecha profética. Las fechas proféticas después del fin de las setenta semanas de Daniel 9 no existen, y Cristo prohibió buscarlas (Hechos 1:7) - siendo la razón que el fin podría haber llegado en cualquier momento en que la iglesia hubiese llevado el evangelio al mundo entero (Mateo 24:14; 2 Pedro 3:12). Esto no quiere decir que Dios se está mordiendo las uñas preguntándose con ansiedad cuándo cumplirá la iglesia su tarea. Conocidas por Dios son todas sus obras desde la fundación del mundo. No debemos perder de vista ninguna de las dos verdades - la soberanía de Dios y la responsabilidad del hombre. Dios está mostrando al universo la completa falta de poder del mejor de los seres humanos, a menos que esté plenamente poseído por el evangelio de la gracia. La fecha de 1844 no es profética.

La mayoría de los pasajes de las Escrituras que describen el juicio son parabólicos. En cada ocasión en que se encuentran el tiempo y la eternidad, como al principio y al fin de las Escrituras, hay que usar parábolas o simbolismo. La realidad trasciende nuestros sentidos y nuestra comprensión. Así que el juicio puede representarse como una escena de bodas, como hacer cuentas con los siervos, como reunir las ovejas y los cabritos, como separar los peces capturados por la red del evangelio, como quemar la cizaña, como una cosecha, como una sesión de tribunal, como contemplar un panorama de destrucción desde la Santa Ciudad, etc. La última parábola de Mateo 25 da una visión telescópica que empalma la realidad del juicio de la Segunda Venida con la de la tercera. Esto ha sido reconocido hace mucho tiempo por los eruditos (véase la obra Teología Sistemática, de Buswell, por ejemplo).

En cuanto a la parábola de Mateo 22, es una de las varias parábolas sobre el juicio, y es un gran error tomar un detalle de cualquier parábola y construir una doctrina basada en él. No deberíamos hacer eso con la parábola del rico y Lázaro, ni hacer que los ASD abogasen por la práctica de que los hombres usasen anillos como resultado de haber leído la parábola del hijo pródigo, en que éste recibe un anillo de su padre. Mateo 22 nos señala a la misma fiesta que Apocalipsis 19 - la cena de bodas del Cordero. Está preguntando a todos los que desean estar allí si confían en los trapos de su justicia o en las vestiduras proporcionadas (o imputadas) por el rey. Viendo que tiene este detalle en un marco de juicio, sospecho que, aunque Mateo 22 advierte contra los trapos sucios de nuestra propia justicia, también puede ser un recordatorio de que la justicia imputada siempre produce el fruto del Espíritu Santo impartido. ¡Lo único que no está diciendo es nada acerca de 1844! Ni el Nuevo Testamento ni el Antiguo Testamento saben nada acerca de 1844.

En cuanto a 1 Pedro 4:17, esto es parte de los esfuerzos de Pedro para estimular a los creyentes a soportar la persecución. Desde el principio hasta el fin de esta carta, los ojos del apóstol están puestos en las ardientes pruebas que comenzaban a sobrecoger a la iglesia. Este versículo en particular recuerda a sus lectores que, cuando Dios permite que las calamidades sobrecojan a las naciones, Él por lo general comienza con los suyos (véase Isaías 10:12; Jeremías 25:29; Ezequiel 9:6; y especialmente Lucas 23:31). Este es uno de siete estímulos específicos que se encuentran en los versículos 12-19. Pero, ciertamente, nada en este versículo ni en su contexto tiene nada que ver con la posición Adventista tradicional sobre el Juicio Investigador.

En relación con el juicio de Apocalipsis 14:7, esto no es una referencia a 1844 ni a que los santos estén siendo juzgados en el cielo, sino a la Segunda Venida, como lo entendieron correctamente William Miller y el movimiento Adventista. Observe que los mismos términos ocurren en Apocalipsis 18:10: "En una hora ha venido tu juicio", pero que la referencia es claramente a Babilonia. Por supuesto, el juicio de Apocalipsis 14:7 es el mismo juicio. El versículo siguiente deja ver claro que los impíos (Babilonia) son su blanco. En literatura apocalíptica, se promete regularmente el juicio para los perseguidores del verdadero pueblo de Dios, y es por eso por lo que se refiere al juicio como "las buenas nuevas".

El juicio pre-advenimiento puede encontrarse en Apocalipsis 22:11, 12. Esto es necesario porque, al regreso de Cristo, los justos muertos deben ser resucitados. La Biblia no dice que, en el Segundo Advenimiento, todas las personas serán resucitadas de la muerte para enfrentarse al juicio. En lugar de eso, afirma claramente que la resurrección de los muertos es el fruto del juicio precedente. Si ha de haber dos resurrecciones - una de los santos y otra de los impíos - la decisión sobre quién está en cada categoría debe hacerse antes de que ocurra cualquiera de las dos. Las Escrituras dicen que el Señor conoce a los suyos. El Buen Pastor conoce a sus ovejas, pero, al despojarse de sus vestiduras sacerdotales y ataviarse como rey, nuestro gran Intercesor concederá finalmente la justificación escatológica a todos los vivos o a los que alguna vez vivieron y confiaron solamente en los méritos de Él, y cuyas vidas, aunque lejos de ser perfectas, reflejan la confianza y la calidad de vida que inevitablemente resulta de ello.

Así que el juicio final, por lo que concierne a los creyentes, comienza con el anuncio formal de Apocalipsis 22:11, 12, y se consuma con la resurrección de los justos muertos para que se unan a los santos trasladados. Así que cada una de las descripciones bíblicas del juicio final lo enlaza con el fin del mundo. (Debo añadir que la posición amilenial de Apocalipsis 20 ahora es anticuada entre la mayoría de los exégetas, y la realidad de dos resurrecciones de los muertos separadas por un intervalo de tiempo es reconocida casi universalmente. En el momento en que pensé escribir sobre este tema, el difunto profesor y doctor F. F. Bruce me aseguró que sería una tarea innecesaria, pues la batalla había sido librada y ganada).

El destino de los santos es anunciado en la corte celestial por nuestro gran Sumo Sacerdote, al preparase para iniciar su descenso a la tierra. Sólo se necesita un momento, no ciento cincuenta años, pero el juicio es necesario, porque las Escrituras no enseñan que "una vez salvo, siempre salvo", sino más bien "el que persevera hasta el fin, éste será salvo". La verdad y el error están muy cerca entre sí. La Biblia no enseña una religión de yo-yo, constantemente dentro y fuera de la salvación. Por el contrario, mirar a Jesús, aunque sea regularmente de rodillas desde el lodo del fracaso, significa que somos aceptados por Él. Somos "completos en Él", "aceptos en el amado". La justificación es por fe solamente en todo momento, no sólo al principio del peregrinaje cristiano. Así, pues, somos justificados por fe solamente aún en el último momento del examen escudriñador del Omnisapiente. Pero esa condición santa está acompañada por la evidencia de un carácter transformado, aunque todavía imperfecto. Jesús continúa siendo nuestro sustituto en el último gran día, no solamente en la cruz o cuando comenzamos a caminar como cristianos. Esta atribución o imputación de mérito es un acto sacerdotal, y se lleva a cabo al fin mismo del ministerio sacerdotal de Cristo. Para los cristianos fieles, el juicio es ahora una fiesta (véase Mateo 22:8-12).

Así como el destino de los creyentes es decidido antes de las recompensas a la venida de Cristo, así también será con el destino de los impíos. Apocalipsis 20:10-15 es declarativo y ejecutivo, pero se basa en la decisión previa de Apocalipsis 22:11, 12, que les dejó en sus tumbas a la Segunda Venida para esperar su rebelión y su castigo finales. La razón de que hasta los impíos muertos deban resucitar es que Cristo, por medio de su muerte expiatoria y su vida meritoria, compró la inmortalidad para todos. La segunda resurrección es evidencia de que, a causa de la cruz, todos los impíos tienen derecho a la vida que fue comprada para ellos para el Salvador. Pero su rechazo del don queda demostrado por su ataque asesino contra los santos en la Santa Ciudad.

Cualquier discusión completa del Juicio debe señalar que, así como los sucesos venideros proyectaron su sombra antes, así también sucederá con el juicio final. Según Juan 12:31, el Calvario también fue un Día de Juicio cuando Cristo se hizo maldición por nosotros y llevó la pena del pecado de la raza humana. Los acontecimientos de aquellas horas trágicas reflejan de muchas maneras las realidades del juicio final. Así, vemos a Cristo en lo alto y exaltado, separando a los salvos de los perdidos, como lo reflejan los dos ladrones y las multitudes delante de él. (Jerusalén estaba llena de aproximadamente tres millones de personas en el tiempo de la Pascua. Es un error representar la cruz rodeada por unos pocos creyentes compasivos. La verdad es que debe haber habido miles presentes y contemplando el singular y terrible espectáculo). Mateo 27:52, con su registro de resurrección y la entrada de los resucitados en la Santa Ciudad, también prefigura el fin del tiempo. Hay un sentido en que el Nuevo Testamento coloca el tiempo del fin y la resurrección de los muertos desde la cruz misma (véase Hebreos 9:26, etc.).

Hemos dejado para último el punto más importante de esta discusión. La Biblia también afirma claramente que, al proclamarse el evangelio, los que lo oyen son juzgados en ese punto por medio de su respuesta (véase Juan 3:17, 18, 36). Creer al registro de Juan 3:16 concede la justificación - el veredicto anticipado del juicio final. Esta justificación es nuestra en el momento en que creemos. En ese punto de la fe, que es el don de Dios para todos los que no se resisten al evangelio, se concede la vida eterna (véase Juan 5:24). Este versículo a menudo ha sido malentendido, como si enseñase que no hay juicio para el creyente. Esta interpretación es contraria a 2 Corintios 5:10, Romanos 14:10, y muchos otros pasajes. El término griego que se encuentra en Juan 5:24 significa juicio en el sentido de condenación. El creyente SERÁ JUZGADO para ver si él o ella ha permanecido en la fe, pero el alma que confía NUNCA PODRÁ SER CONDENADA en el último gran día ni en ningún momento anterior a aquél en que escogió a Cristo. Nunca tenemos que  estar ansiosos con respecto a lo que Dios piensa de nosotros, sino sólo con respecto a lo que Él piense de Cristo, nuestro sustituto. En todo momento de la fe, el creyente es considerado cien por ciento justo por amor a Cristo. Si consideramos la realidad más íntima de la cruz, esta verdad se hace evidente. ¿Por qué Cristo, el Santo y Perfecto, está siendo tratado en el Calvario como si fuese impío? Para que yo, que SOY impío, pudiese ser tratado como santo. ¿Por qué Cristo, el inocente, fue tratado como culpable? Para que yo, el culpable, pudiese ser tratado como inocente. Romanos 4:8 pronuncia una bendición para todos los creyentes, porque a ellos NUNCA se les inculpa de pecado a pesar de sus fracasos e imperfecciones. ¡Buenas nuevas de veras! Ese es el evangelio que un día sacudirá el mumdo y lo preparará para el Juicio Final.

Hay que subrayar otro punto. No basta que el gran Juez sea justo; debe ser evidente para todas sus criaturas que lo es. De aquí las repetidas afirmaciones de la Escritura en sus últimos capítulos diciendo que finalmente todos reconocerán que los caminos de Dios son verdaderos y completamente justos. La referencia a libros en el juicio es una manera simbólica de expresar la verdad de que las razones de las decisiones de Dios serán claras para todos en el universo entero - los ángeles, los principados y las potestades, y los seres humanos.

AToday: PREGUNTA #25.  Dr. Ford, algunos tienen grandes dificultades con el concepto de que el Juicio Investigador, o más correctamente, el "juicio pre-advenimiento", sea tan fácil como usted lo pinta. ¿Qué les dice usted a los que TODAVÍA sostienen que la vida del cristiano será "investigada" en cada detalle, utilizando para ello los libros de registro en el cielo? Citan pasajes como Daniel 7:9, 10: 2: "el Juez se sentó, y los libros se abrieron"; y Mateo 12:36,37: "mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio". "Porque por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado". También preguntan acerca de Romanos 14:10-12; 2 Corintios 5:10; y Hechos 17:31. Algunos señalan que Apocalipsis 3:5 y 20:12 también mencionan libros de registro, que contienen la evidencia para el juicio, junto con Malaquías, Éxodo, Isaías, y otros textos que se refieren a un juicio legal. ¿Puede usted explicar estos pasajes?

Dr. Ford: Una razón fundamental de que se entienda mal el Juicio es la idea de que Dios tiene que funcionar de una manera restringida lineal, como lo hacen los jueces mortales finitos. Como Omnisapiente, Infinito, Omnipresente, y Omnipotente, Dios no necesita registros de información, ni tampoco tiempo prolongado para tomar decisiones en relación con el destino eterno de los seres humanos. Cada vez que el tiempo y la eternidad se intersectan tanto al comienzo como en el fin del mundo, la Escritura recurre a figuras de lenguaje, incluyendo metáforas y parábolas. Así, el Juicio puede ser representado como un tribunal, una cosecha o una vendimia, o hasta como una cena de bodas. Hasta se emplea el trabajo de un pastor al separar las ovejas de los cabritos, y la figura de un pescador que desecha de su red los peces que no quiere.

2 Timoteo 2:19 afirma que el Señor ya sabe quiénes son suyos. Juan 10:3 dice que, como el buen pastor, Él conoce el nombre de cada una de sus ovejas. Según Salmos 33:9, a la simple orden de Dios, toda la creación se desplegó delante de Él. El caso es idéntico a todos los hechos concernientes a cada vida que alguna vez existió.

Daniel 7:9, 10 usa imágenes apocalípticas para representar la memoria de Dios, pero todavía debe observarse cuidadosamente que es la hueste del Anticristo, no los santos, el centro de la atención aquí. El contexto indica claramente al Anticristo como el centro, y afirma que el juez "se sentará y le quitará su dominio" (véase Daniel 7:26, que sigue inmediatamente al relato de las obras impías del cuerno pequeño). Los santos son automáticamente vindicados al ser condenados sus opresores. La apocalíptica siempre tiene como su centro la vindicación de los fieles por medio de la condenación de sus enemigos. Así, Apocalipsis 18:10 explica Apocalipsis 14:6. Ambos versículos tratan del juicio contra la impía Babilonia, no contra los creyentes en el evangelio.

Hechos 17:30, 31; Romanos 2:15, 16; Eclesiastés 12:13, 14, etc., se explican con los principios presentados más arriba. 2 Timoteo 4:1 dice que el juicio se lleva a cabo mediante la aparición y el reino de Cristo. Pero el acontecimiento del juicio se presenta por medio de parábolas y metáforas. Así, tenemos las analogías de un tribunal humano, la cosecha, la vendimia, una cena de bodas, un pastor que separa las ovejas de los cabritos en la manada, un pescador que devuelve al mar los pescados que no quiere, etc. En Apocalipsis 20:6 se nos dice que sólo los bienaventurados y santos se levantarán en la primera resurrección. Por lo tanto, todos los destinos habrán sido decididos antes de que se abran las tumbas (véase Apocalipsis 22:11, 12). En Apocalipsis 20:12, no tenemos una amenaza de que los santos deban ser enjuiciados una segunda vez. Ese versículo sólo dice que todos los que hayan aceptado a Cristo son inmunes a este juicio, que sigue al milenio, pero que todos los demás se perderán. Todos los textos sobre el juicio deben interpretarse en armonía con Juan 5:24 y Romanos 4:8. Los muchos defectos de los santos que tienen fe no pueden producir condenación, ni se les imputan, ni se les toman en cuenta, ni se registran a sus nombres. Así lo dice la Escritura, clara y enfáticamente. Bendito sea el Señor por esa maravillosa y gozosa verdad.

1 Juan 1:9 no está diciendo que la salvación depende de una buena memoria. Sólo está diciendo que, al escuchar el evangelio y al sernos ofrecido Cristo, debemos responder a los ruegos del Espíritu reconociendo nuestra culpa, confesando nuestros pecados. No significa repetir una lista de los más antiguos recuerdos que encontramos hurgando en nuestra memoria. Muchas veces, no recordamos muchos de nuestros pecados, por cuanto pecado es la más ligera desviación en pensamiento, palabra, u obra de lo que nuestro padre Adán pudo haber hecho. Pecado es más lo que SOMOS que lo que hemos HECHO. En pasajes como Apocalipsis 3:5, Cristo nos recuerda que la fe es como el respirar. Debe ser continua. Si yo, deliberada o descuidadamente, dejo de tener en cuenta al Salvador y le dejo fuera de mi vida, le niego a Él, y Él me negará a mí. Sin embargo, un millón de defectos no pueden producir ni la más mínima jota ni la más mínima tilde de condenación si, con las rodillas ensangrentadas y el rostro cubierto de lágrimas, todavía miro a la cruz y a mi Sustituto, que murió allí colgado por mí. Por tanto, regocijaos en Romanos 8:1, y no seáis movidos de allí ni por el legalismo ni por el perfeccionismo. "Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús".

AToday: PREGUNTA #26.  Dr. Ford, a pesar de sus muchas razones para reemplazar la doctrina del Juicio Investigador con un punto de vista del siglo veintiuno más bíblico y más racional, algunos todavía no están plenamente convencidos. Esto es porque creen que la Biblia apoya una enseñanza "perfeccionista" que requiere que los cristianos vivan sin pecado antes de la Segunda Venida. Más específicamente, les preocupa el período, en los gráficos Adventistas, que sigue al fin del tiempo de gracia, en que Jesús abandona el Lugar Santísimo y viaja a la tierra para la Segunda Venida. Se piensa que, durante este "vacío de intercesión", los "cristianos de los últimos días" tienen que mantener una vida sin pecado. ¿Qué les diría usted a los que sostienen esta posición tradicional? ¿Hay algún "estado de obediencia" especial que deben alcanzar los cristianos que vivan al fin del tiempo? ¿Cuál es su respuesta para los que temen pecar DESPUÉS de que haya concluído la obra de intercesión de Cristo en el cielo? ¿Se perderán? Y si no, ¿por qué no?

Dr. Ford: La mayoría de los Adventistas no comprenden la enseñanza bíblica sobre la glorificación. Romanos 8:23 dice que gemimos (el gemido de Romanos 7:14-25) hasta la redención de nuestros cuerpos. Es sólo cuando veamos al Cristo que regresa que seremos como Él es - sin pecado. Mientras estemos en este cuerpo mortal, jamás podremos ser como el intachable Adán antes de la caída, ni como el intachable Cristo en los días de su carne. Véase 1 Juan 3:2, 3; Santiago 3:2; Romanos 3:23 (nótese el tiempo presente continuo de "destituidos"), 1 Juan 1:8; Mateo 6:12; y 1 Corintios 15:51-56. El pecado jamás es registrado, contado, ni imputado a los que están en Cristo (Romanos 5:8). Esto no estimula el antinomianismo, sino que quebranta nuestros corazones.

Después del decreto de Apocalipsis 22:11, 12, al estar Jesús a punto de venir, los creyentes ya no están en tiempo de gracia. Su caso está cerrado - han sido justificados escatológicamente, cuya consumación fue legítimamente suya desde el primer momento en que confiaron en el Salvador. El hecho de que han sido preparados para enfrentarse a la muerte misma antes que ser desleales a Cristo se demuestra en la crisis final descrita en los versículos finales de Apocalipsis 13. Ahora están tan establecidos en la verdad del evangelio que la tentación ha perdido su poder. El pecado voluntario y premeditado ya no es una opción para ellos. Recuérdese que el tiempo de angustia final será una experiencia de "invernadero", en que tanto los santos como los impíos madurarán rápidamente. En las últimas, culminantes, y caóticas horas, pecar será como danzar al borde de un precipicio. Los santos serán protegidos por el Espíritu que mora en el interior, que Jesús prometió que permanecería con ellos para siempre. (Ese Espíritu sólo es retirado de los impíos, nunca de los creyentes).

Aunque los creyentes de Apocalipsis 14:4, 5 - los trasladados - siguen al Cordero de todo corazón mientras esperan su venida, continúan en cuerpos pecaminosos hasta el momento de la glorificación (1 Tesalonicenses 4:17). Pero, a causa de su aceptación por fe de los méritos de Cristo que les han sido imputados, son considerados "sin mancha" en las últimas horas de su historia terrenal como durante todo su peregrinaje en la tierra. Ellen White enseña todas estas cosas. Por ejemplo, en el capítulo sobre El Tiempo de Angustia, ella declara muy enfáticamente que hasta los santos son imperfectos en la fe aunque sean absolutamente leales. En varios lugares, la Sra. White enseñó que tenemos que combatir el pecado hasta la muerte o la traslación - las tentaciones de adentro y las de afuera. Ella declara enérgicamente que ninguno de los apóstoles aseguró jamás ser sin pecado. Nosotros no vamos a trascenderlos en santidad. La Biblia no dice nada de una "super" generación que trasciende a todas las demás en santidad. Esa antigua tradición no tiene ningún fundamento en absoluto.

AToday: PREGUNTA #27.  En cierto punto de su entrevista, usted afirma que "... no tenemos que ser buenos para ser salvos, sino que tenemos que ser salvos para ser buenos". Por favor, explique el uso de las palabras claves aquí, pues supongo que muchos de los lectores pensarían que usted está diciendo que los no cristianos pueden llevar vidas morales y éticas.

Dr. Ford:  En el sentido bíblico, ser bueno es ser fiel a los deberes hacia Dios y hacia el hombre, ser poseído de amor tanto por el Creador como por el prójimo. Los incrédulos pueden ser éticos hacia sus prójimos, pero no pueden ser buenos en el sentido bíblico si ignoran sus deberes hacia el Dador y Conservador de sus vidas. No es verdaderamente buena ninguna vida que ignore la suprema realidad del universo - el amoroso y generoso Padre celestial.

AToday: PREGUNTA #28. Dr. Ford, ¿es verdad que, cuando usted estuvo en PUC [Pacific Union College], a menudo no estaba disponible para los estudiantes?

Dr. Ford:  Yo había apartado una hora todos los días para aconsejar a todos los que deseasen verme - era la hora antes del comienzo de clases. Hora tras hora, andaba constantemente a la carrera a causa de mi intensa carga de clases y otras responsabilidades. Casi todas las semanas, estaba fuera dos o tres días asistiendo a reuniones evangélicas, y cuando no estaba fuera, enseñaba en un teatro de conferencias lleno durante la Escuela Sabática. Jamás rechacé la solicitud de ningún estudiante para una entrevista, aunque sí conversé con algunos de ellos mientras iba de un aula a otra. Entonces como ahora, personas de varios países se comunicaban y se comunican conmigo constantemente para hacerme solicitudes. Lamentablemente, estoy limitado en cuanto a lo que puedo hacer, a pesar de mis noches muy cortas.

AToday: PREGUNTA #29.  Se puede averiguar mucho acerca de la posición de un creyente sobre doctrina cristiana según dónde se encuentre en la escala literalismo - simbolismo. Usted no es literalista (como se ve en su rechazo de Génesis 1 y 2 como un relato literal), y tampoco es simbolista (como se ve en su aparente rechazo de un ecumenismo que ve a los Adventistas y a otros cristianos teológicamente aceptables, en que los primeros subrayan la creación y los últimos la resurrección por medio de sus respectivos días santos). ¿Estaría usted de acuerdo en que usted se encuentra cerca de la mitad de esta escala, por aproximada e imprecisa que ésta sea? Además, ¿qué límites - si los hay - sugeriría usted que se pusieran a la aceptación por parte de los Adventistas de miembros que están en los extremos de esta escala?

Dr. Ford:  Yo no rechazaría a nadie que confíe plenamente en los méritos de Cristo, sin importar si guarda el domingo o el sábado, si ha sido bautizado por aspersión o por inmersión, si es carnívoro o vegetariano. Sí, con gusto entraría en amigable discusión hasta de esos temas, en la creencia de que se debe buscar siempre la verdad mayor. No somos gnósticos que creen en la salvación por medio del conocimiento. Un autor, al que conocemos bien, afirmó que quitarle la cruz al cristiano sería como borrar el sol del cielo. Nuestro sistema solar tiene más de un millar de asteroides, pero nosotros nunca los vemos, porque los rayos del sol absorben nuestra visión. De manera similar, todas las doctrinas deben subordinarse a la expiación y a la justificación por fe solamente.

Mi opinión es que una denominación debería tener solamente unos pocos pilares de fe y que la gente debería estar enteramente comprometida con estos pilares y entrar en un pacto en relación con ellos. Además, los miembros deberían ser responsables de la mayoría de las decisiones del cuerpo de la iglesia. Pero, simultáneamente, todos los demás deberían ser bienvenidos sin prejuicios y aceptados como hermanos y hermanas en Cristo, sin importar si han hecho o no un pacto para vivir y proclamar lo que los grupos centrales consideran como los principales pilares del cristianismo. Una de las paradojas de la vida cristiana es rehusarse tenazmente a renunciar a lo que nos parece claro en la Escritura, y al mismo tiempo abrazar a los que ven las cosas de modo diferente.

Dudo de que yo esté en la mitad de la escala o en la mitad del camino. Este último es siempre el lugar más peligroso donde estar, y sólo se justifica si lo exige un principio.

AToday: PREGUNTA #30. Dr. Ford, como usted sabe, se necesitaron siglos para que se establecieran bien la mayoría de los estudios sistemáticos del cristianismo, y sólo después de pasar por controversias tremendas. La eclesiología (el estudio de la iglesia) no quedó bien establecida sino en el siglo cuarto D. C. La soteriología (el estudio de la salvación) no se estableció bien sino en el siglo dieciséis. La escatología (el estudio de los sucesos de los últimos días) no comenzó sino en el siglo diecinueve. Hasta la fecha, no hay tal cosa como la crisisología, un estudio sistemático de cómo juzga Dios al mundo. ¿Es posible que Dios haya ordenado toda esta controversia acerca de cómo entendemos el juicio, para que todos vengamos a un mejor entendimiento de esta doctrina? Considerando cuán perspicaces cree usted que fueron los primeros Adventistas en otras áreas, ¿no cree usted que es un poquito prematuro ser demasiado dogmático acerca de la doctrina del juicio en la actualidad? 

Dr. Ford:  Sí, creo que la mano de Dios está en todas y sobre todas las controversias teológicas, porque es por medio de los debates que el conocimiento individual es aumentado, corregido, y diseminado. Pero, cuando la Escritura parece clara, debemos ser igualmente positivos, y muchas cosas acerca del juicio SON claras. NO comenzó en 1844. En la Escritura, ESTÁ siempre asociado con la Segunda Venida de Cristo. Además, en ese Juicio, Cristo será todavía el sustituto de todos los que pongan su fe enteramente en Él. Por lo tanto, el Juicio también es buenas nuevas, y Cristo hasta puede ponerlo en un marco festivo, como en Mateo 22.

AToday: PREGUNTA #31. En un esfuerzo por definir o defender doctrinas válidas, parece que mucha gente hoy día está confundida en cuanto a cómo estudiar la Biblia. Los Reformadores tenían reglas específicas para el estudio de la Biblia, como las tenía William Miller. Hasta James White y los primeros ASD enseñaban que "la Biblia es nuestro mapa - nuestra guía. Es nuestra única regla de fe y práctica, a la cual nos adherimos estrechamente". ¿Puede usted explicar las reglas para entender las Escrituras y establecer doctrinas en el siglo veintiuno?

Dr. Ford:  Los exégetas de las Escrituras ahora consideran a la hermenéutica como una ciencia, y hay consenso casi universal en cuanto a cómo practicarla. La Escritura debe ser interpretada de acuerdo con el léxico, la gramática, el contexto, la historia, y según la analogía de la enseñanza de la Biblia entera. El Nuevo Testamento interpreta al Antiguo, las Epístolas ayudan en la interpretación de los evangelios, los pasajes didácticos explican los simbólicos o metafóricos, y los pasajes de aplicación universal tienen el voto por encima de los que tienen importancia apenas local. Los pasajes sistemáticos (como Romanos) interpretan los pasajes incidentales (como una línea de Santiago que dice que las obras justifican, pero que en realidad está hablando de justificación delante de los hombres, no delante de Dios). Sobre todo, el Espíritu Santo es la guía para el corazón verdaderamente rendido.

Los comentarios tienen valor para dilucidar el marco histórico y las costumbres prevalecientes, y para llamar nuestra atención a la evidencia de la Palabra misma que hayamos podido pasar por alto. Es un error usar los escritos de Ellen White como de naturaleza principalmente exegética, que no lo son. Más bien, esos escritos actúan frecuentemente como lo hace la ley de Dios al señalar el pecado y los defectos para llevarnos al Salvador. En otras ocasiones, la Sra. White nos señala hermosamente hacia la expiación efectuada en el Calvario - la gran fuente abierta para limpiar todo pecado y toda impureza. Hasta la obra reciente de Herbert Douglas, La Mensajera del Señor, niega que Ellen White sea exégeta y nos advierte que no debemos esperar infalibilidad y un comentario definitivo de esa fuente. En realidad, Ellen White ha afirmado muchas veces que la Biblia y la Biblia solamente debe usarse para establecer doctrinas.

AToday: PREGUNTA #32.  ¿Tiene algún comentario sobre el reciente acuerdo historico entre los luteranos y los católicos acerca de la doctrina de la justificación por la fe?

Dr. Ford: Quizás el punto principal que tengo que establecer acerca del reciente acuerdo entre católicos y protestantes sobre la justificacion es que las discusiones todavía no han terminado. Los católicos romanos ven claramente que el Nuevo Testamento enseña la salvación por gracia solamente, y que las palabras equivalentes a justificación tanto en hebreo como en griego significan declarar justo, no hacer justo. Su incomodidad reside en el hecho de que, por siglos, han enseñado que sólo por medio del uso de los sacramentos de una manera "medicinal" es el alma perfeccionada y luego aceptada por Dios. Hasta ahora, la discusión no ha avanzado hasta este punto fundamental, pero lo hará. Podemos regocijarnos del progreso que se ha alcanzado hasta ahora.

AToday: PREGUNTA #33. Dr. Ford, en su entrevista, usted declaró que el Adventismo se enfrenta a una reforma inevitable y muy necesaria en el siglo veintiuno. Dejó claro que esta reforma tiene que ocuparse tanto del actual y antibíblico sistema jerárquico como de varias doctrinas fundamentales de la denominación. No hay duda de que esta reforma incluiría actualizar la enseñanza tradicional del Juicio Investigador, exaltar el evangelio, promocionar un gozoso culto sabático, revitalizar el una vez famoso mensaje sobre la salud,  y actualizar la escatología del Mensaje del Tercer Ángel, para mencionar sólo unos pocos ítems. Mi pregunta es ésta: Si un movimiento creíble, organizado, orientado a la reforma, fuera a materializarse, ¿le ofrecería su apoyo y participaría en esa reforma evangélica?

Dr. Ford: Con mucho gusto haría todo lo que pudiese para ayudar al evangelio tanto dentro del Adventismo como fuera de él. Pero toda reforma tendría que hacerse con un espíritu evangélico. No es suficiente amar la teoría del evangelio. Cualquier intento de llevar a cabo un cambio necesitaría que, con oración, se evitase el espíritu de aquél que es llamado "el acusador de los hermanos". El pecado abierto y una flagrante contradicción de la Escritura debe rechazarse valientemente, pero deben evitarse las insinuaciones relativas a los motivos. Aunque no tememos a nadie, excepto a Dios, hasta donde sea posible, debemos dejar que la verdad haga el trabajo de cortar. Debemos actuar como médicos, no como carniceros.


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