Apuntad Alto!

La construcción de la irrealidad

Buho Terco

 

“Descubrir e inventar un nuevo objeto de odio para el público

aún constituye el medio más seguro de convertirse en uno

de los reyes del periodismo”

 

G. Tarde: “El público y la multitud”

 

            Como uno entre otros, habitualmente recorro los Blogs que se encuentran en el espacio WEB y que hacen referencia a la Asociación Scouts de Argentina. En ellos es muy común encontrar una clara división entre “ellos / nosotros” y los Bloggeros como una especie de Héroes emergentes del “pueblo scout” oprimido por la “clase” dirigente. 

            Para que un héroe exista debe existir una víctima, porque ¿sino a quien se salva? La víctima es condición del héroe, en nuestro caso las víctimas serían básicamente dos: los grupos scouts oprimidos por la conducción Nacional, o la asociación en peligro por las acciones de la NCO. Dentro de lo común del discurso de los valores del héroe es el que su tarea es trabajar por “el bien de la asociación”, como él es quien “salvará lo bueno”, tiene la creencia o certeza (delirante) de que posee una moralidad intachable, nadie puede discutirla, él es el Ideal; por eso puede publicar todo lo que se le ocurra, sin importar las consecuencias respecto a las personas a las que hace referencia, o a la institución a la que pertenece y según dice, pretende “salvar”.  

Todo se justifica por “un bien superior…” Por un lado, falsas denuncias, el supuesto de que la asociación no deja lugar a las minorías provocando la antinomia minorías débiles vrs mayorías opresoras, supuestas violaciones a la Ley scout, incumplimiento por parte de las autoridades, instalación de la sensación de que al “pueblo scout” es robado por las autoridades, nombrar sin ningún tipo de prurito a personas cuestionando desde su vida personal hasta su buen nombre, injurias, calumnias. Por el otro, xenofobia, homofobia, falsas denuncias, injurias y calumnias. Todo lo anterior entendiendo los Blogs como un lugar de expresión anónimo, más allá de que de algunos personas se hagan cargo con su nombre y apellido de lo que opinan. 

            ¿Por qué este tipo de agravio a las personas y a las autoridades nacionales?. Para entenderlo tenemos que adentrarnos un poco en los modos de agrupamientos humanos; tomaremos como base dos: 

1)      El grupo/partido/ organización que se conforma en relación a un Líder que ocupa el lugar del Ideal y que para los liderados reuniría todas las perfecciones, lo que implica la idealización de dicha figura y la creación de un poderoso vínculo de amor. El líder no es uno más de ellos sino es la excepción. Es incuestionable, no criticable, y despótico por naturaleza ya que se crea una relación amo/esclavo entre el líder y sus liderados, relación consentida por los liderados. 

2)      El grupo/partido/ organización que se conforma no en forma exclusiva por amor al un líder en particular, sino por compartir un rasgo, una identificación (por ejemplo determinados valores o códigos). En este caso el vínculo con el líder se establece desde dos lugares: Pasa a ser central que el líder sea parte de la comunidad y que comparta el rasgo, la identificación con el resto de los miembros de la misma; con posterioridad las cualidades o carismas del líder generar amor por él. Este tipo de liderazgo no puede ser despótico porque el líder participa de la misma sustancia que el resto de la comunidad, de allí el liderazgo democrático. 

Cuando en una Organización como la nuestra (o en cualquier otra asociación) se ataca los valores de las personas en concreto o de las autoridades nacionales apelando a distintos recursos, lo que se busca es poner en jaque la identificación de dichas personas con los valores de la comunidad o agrupamiento al que se pertenece, para de esta forma apuntar a convertirlo en un “ajeno” a la misma.  

Ernesto Laclau nos  dice que “la construcción del enemigo es también un proceso de construcción política”, concepto sumamente interesante que merece ser explicado para que se entienda la forma de operación respecto de la manipulación de la información con el objeto de crear una Identidad Discursiva que supere las demandas democráticas de los distintos actores, para de esta manera por medio de la misma construir un grupo de poder que permita ser utilizado por los intereses de un sector particular. 

¿Cómo se construye el enemigo?. En primer lugar es necesario conformar un grupo minoritario y que el mismo se ubique en oposición con “los otros” en relación a los fines y valores de la Institución. El grupo minoritario se cree “el pueblo scout”, y aquellos que no comparten su ideología son el “anti pueblo Scout”. De esta manera se crea el antagonismo base para el conflicto. 

            El “pueblo scout” no sólo se ubica como aquel que es el poseedor de los “verdaderos valores”, sino que además se plantea como una especie de “comunidad idealizada” en la que todo sucede o se solucionaría de acuerdo a la idealización que se realiza de la institución y los problemas que suceden, por lo tanto si existe una diferencia entre una Organización Ideal (a lo que se aspira) y la organización real (lo que se puede realizar apuntando al ideal); plantear una Organización Idealizada es crear un abismo infranqueable, porque la misma sólo es posible en la fantasía, es como pensar que el paraíso es posible en la tierra. 

            Como existe una diferencia entre la Organización Ideal y la real, siempre existirán demandas, que en tanto las mismas son aisladas se consideran “demandas democráticas”, ya que obedecen a situaciones puntuales de no funcionamiento institucional, y que lógicamente deben ser atendidas una por una. Lo que busca cualquier grupo político, es tomar esas demandas democráticas, ponerlas bajo la lupa de la Comunidad Idealizada, y tratar de convertir esas demandas en equivalentes, en algo mucho más amplio, en algo que obedezca básicamente a la lógica previamente establecida, el antagonismo de “pueblo scout” Vrs. “anti - pueblo scout”. 

            Esta lógica antagónica a su vez hace necesario separar “pueblo scout” de “poder”; por lo que el “pueblo scout” serían los oprimidos por parte del “anti pueblo scout que está en el poder”. Nada de lo que hagan los que “están en el poder” puede ser a favor del “pueblo scout”, esto puede ser tan delirante como los comentarios de un Blog que luego de la realización del “Movideas” dijo que eso se hizo sin que “el poder” lo apoyara; tan delirante como insistir y motorizar que se reduzca personal y al primer atisbo de hacerlo decir que la asociación avasalla a los trabajadores y sus derechos. Todo viene bien para sumar gente “al pueblo scout”, incluso no presentarse a elecciones.

            Sumar gente y erigirse como sus “representantes” implica articular las demandas democráticas y convertirlas en una especie de demanda popular; por ello importa poco si los que demandan pertenecen o no a la asociación, ellos son usados dentro de esta lógica a los efectos de intentar formar una Identidad Discursiva ilusoriamente totalizadora; es muy interesante ver en algunos Blogs el cómo algunos “históricos” enemigos de otros “históricos”  comienzan a establecer alianzas discursivas en contra del “enemigo” que se construye entre todos, lo lamentable es ver que no se dan cuenta que es sólo una ilusión momentánea. 

            Podría decirse mucho de esto, por lo pronto, para poder gobernar a una organización la misma tiene que tener existencia, si no existe no hay “víctimas”, y sin estas no existen “los héroes”, se quedan sin la imagen hermosa y valerosa que tienen de sí mismos, esto es irrenunciable para ellos. Paradójicamente el verdadero acto heroico sería mirarse al espejo, y reconocerse en su propia mentira. 

 

Bibliografía:

  • Elena de la Aldea – Ignacio Lewkovics “La subjetividad heroica – un obstáculo en las prácticas comunitarias-“
  • Ernesto Laclau “La razón populista”
  • Sigmund Freud “Psicología de las masas y análisis del yo”

     

        

 

Volver