En esta segunda instancia del Curso de Formación y Capacitación en Montaña se abordarán temas que hacen a la prevención y la seguridad en la montaña en invierno, realizando prácticas con técnicas y materiales específicos de seguridad para transitar en la montaña invernal, completando en forma integral los contenidos y las expectativas de lo visto en el Curso de Formación Integral I (Estival ).

El cursante asimilará los conceptos que se propongan en forma teórica - práctica, a través de un programa de experiencias suplementado por la teoría.

Por lo general el fundamento está formado por habilidades y actitudes que el cursante ha desarrollado en anteriores situaciones. Además debe tener habilidades y conocimientos técnicos de escalada y montañismo.

El esfuerzo individual para asimilar, combinar, y aplicar criterios con eficacia es diferente entre los individuos.

Entonces se llega a la conclusión de que ese potencial debe comenzar a ser desarrollado, durante la parte formativa para ser aplicados después de la adaptación por parte del cursante.

El carácter y la lógica son una parte de la variedad de rasgos de personalidad que debe combinar adecuadamente quien tenga experiencia en la Montaña. No existe una combinación optima y única, pero muchos tienen entre otros aspectos una cantidad suficiente de integridad, decisión, objetividad y adaptabilidad. Muchas veces se tendrá que aceptar la responsabilidad básica, y la certeza de que en la Montaña se deberán manejar situaciones diferentes, y habrá que estar preparado para eso.

La experiencia aunque pese, no es la cualidad más importante. Los miembros de un grupo suelen buscar a quien inspira confianza. Puede que esa persona no sea un escalador con experiencia, pero si alguien que haya sabido acumular sentido común y buen criterio.

Los lineamientos del Curso de Invierno seguirían una base conceptual de trabajo y criterios establecidos en una primera instancia, remarcando la importancia de prevenir y anticiparse como herramientas básicas de la seguridad.

Se trabajará sobre la capacidad de pensar en adelante, anticipando los inconvenientes que puedan surgir, planificando soluciones, en forma segura, sencilla y efectiva.

No existen respuestas sistemáticas para cada situación y no hay forma de librar al responsable del compromiso que esto acarrea. En la práctica el cursante deberá utilizar su sentido común para evaluar factores que lo obliguen a tomar decisiones, y a continuación deberá tomar una decisión firme y segura.