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"LICENCIADA" STELLA CALLONI
(Tomado del envío Nº 298 de Jorge Zaratiegui)

 

   El CV de Stellita no tiene desperdicio. En la página de la ARA la presentan como Licenciada pero no tiene acreditado ningún título. Me hace acordar al Dr. Chapatín: "Dígame Licenciado"... Otros medios (Página 12) la llaman periodista y aún poeta y escritora pero su principal actividad ha sido el terrorismo. Calloni comenzó militando en la pesada del peronismo platense en sus tiempos de estudiante de medicina, fue muy cercana a la madre del asesino serial más conocido como Che Guevara. Esto le permitió codearse con encumbrados representantes guerrilleros de Guatemala, Paraguay, Bolivia y Méjico en los años de plomo. Justamente por encontrarse adoctrinando en este último país, se salvó de ir presa cuando fue el Golpe del 24 de marzo ¡Qué justo!!, ¿no? Y se quedó como exiliada, logrando asegurar de este modo su futuro con una jugosa indemnización. Pero desde  el exilio no podía controlar sus ansias de sangre así que comenzó a trabajar para el Frente Sandinista de Liberación, ya desde Nicaragua. El Mono venezolano y el Dictador cubano le han dedicado loas en sus discursos por su actividad tan teñida de sangre. El periodismo cubano la ha premiado en este sentido. Ahora está viejita y no le dan las articulaciones más que para inventar teorías conspirativas contra el Tuerto Presidente, reivindicar que la inseguridad es un invento de desestabilizadores, defender a terroristas etarras para evitar su extradición (José Lariz Iriondo) y a viejos compañeros de lucha acusados  de asesorar al Tuerto (a Verbistsky no me lo toquen, ¿eh??) y  hablar ante un grupo de Oficiales de la Armada para ver si los convence a sumarse al gran proyecto latinoamericano que los fracasados de antaño como ella no pudieron conseguir. Se te hizo tarde, Stellita, ¡ya deberías jubilarte!! Te tiembla demasiado el pulso como para seguir detonando bombas... Ahora sos una intelectual amiga de tus antiguos enemigos. ¡Qué bajo! ¡Tener que hablarles a los uniformados de botones dorados e impecables corbatas que ni saben de dónde saliste debe ser vomitiiiiiivoooo! ¡Todo sea por la causa!. 
Puaj, qué asquete...

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